Advertencias: Mención a la muerte, contenido explícito. Gogol es bien insano.

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—Eres lo más hermoso de toda la tierra— dejó un beso en tu frente.

—Tengo miedo...por favor— gotas salían de tus orbes mientras suplicabas por tu vida.

—Serás una mujer libre— sonrió mesiendo su cuerpo levemente de una lado a otro—. Solo yo puedo librarte de esto.

Tus pataleós eran inútiles, ese hombre era mucho más alto que tú, claramente te superaba en fuera. Su relación comenzó con tu entrada a la decadencia, pero era distinto a aceptar morir a sus manos.

—Esto está bien, lo hago por nuestra amor — sonrió tranquilizandote un poco—. Esto me resulta divertido.

—Lo primero fué mentira— sollozaste antes de sentir aquel metal atravesar tu pecho, un ardor momentáneo quemó tu corazón que no mucho tiempo después dejó de latir.

—Tenía que hacerlo— lágrimas comenzar a brotar por ambos ojos del albino, quitó la máscara que antes uso para cubrir su arrepentimiento—. Te amo, perdóname...no podía dejarte aquí.

El payaso conocía bien ese amargo sentimiento, pero su pesar no habría sido tanto como el de condenarte a vivir en un lugar plagada de pecado.

Gogol saca lo peor, y lo más hot de mi :))