El aire en Brisbane está cargado de una ligera brisa primaveral, y la vida en la ciudad continúa con su ritmo vibrante.

Pero dentro de la cafetería Moonlight Sun, el ambiente es más denso de lo habitual. Jake está detrás del mostrador, preparando un cappuccino para uno de los clientes habituales, pero su mente está lejos de la espuma de la leche y los granos de café. Sunghoon, sentado en una de las mesas, lo observa en silencio mientras revisaba unos correos desde su laptop.

Habían tenido una conversación significativa la noche anterior, pero ahora el peso de la decisión comenzaba a instalarse en sus corazones. Había tanto en juego, tanto que considerar, y aunque ambos estaban dispuestos a intentarlo, la realidad comenzaba a empujar contra las paredes de su burbuja de sueños.

Danielle entra al área del personal con una sonrisa tímida, tomando un descanso del bullicio de la mañana. Sabe que algo está sucediendo entre Jake y Sunghoon; las tensiones son casi palpables desde la última conversación sobre el futuro de la cafetería.

—Jake, ¿puedo hablar contigo un momento? —Pregunta, apoyándose en la barra.

Jake asiente, dejando la taza de café a un lado para prestarle toda su atención.

—Claro, Dani, ¿todo bien?

Ella asiente, pero su mirada refleja la preocupación que no ha sabido expresar antes. Sunghoon, quien escucha a la distancia, cierra su laptop y se acerca, intuyendo que la conversación es importante.

—Sabes que Félix, Maki y yo te apoyamos en cualquier decisión que tomes, ¿verdad? —Comienza Danielle, su tono suave—. Pero no puedo mentirte... nos asusta mucho la posibilidad de que te mudes a Seúl. Moonlight Sun es tuyo, y aunque confiamos en ti, la idea de que estés lejos y que nos quedemos solos manejando todo... es intimidante.

Jake baja la mirada, frotándose la nuca mientras procesa sus palabras.

—Entiendo lo que dices, Dani, y no quiero que sientan esa presión. Sé que es mucho pedir, especialmente porque esta cafetería es tan importante para todos nosotros —Responde Jake, su voz cargada de empatía—. Pero... también tengo que pensar en mi vida con Sunghoon. No quiero perder lo que hemos construido juntos.

Sunghoon interviene, queriendo ser honesto con los empleados que son una familia para Jake.

—Lo último que queremos es que sientan que los estamos abandonando. Jake y yo estamos buscando una solución que funcione para todos —Dice Sunghoon, su tono firme pero comprensivo—. Hemos hablado sobre dividir nuestro tiempo entre Brisbane y Seúl. Ustedes seguirían a cargo de Moonlight Sun, pero no estarían solos. Nos aseguraremos de que todo funcione bien, y que siempre tengan nuestro apoyo, incluso si no estamos físicamente aquí todo el tiempo.

Danielle escucha atentamente, notando la sinceridad en las palabras de ambos. Sus ojos se suavizan un poco, pero la preocupación sigue presente.

—Aprecio que lo estén pensando así, de verdad. Solo quiero que sepan que, si deciden seguir con ese plan, estaríamos dispuestos a hacer lo que sea necesario para que funcione. Pero... —Hace una pausa, mordiéndose el labio, como si no quisiera agregar más peso a la conversación—. No puedo evitar pensar en lo que pasará a largo plazo. ¿Qué sucederá si algún día decides que ya no puedes seguir yendo y viniendo entre dos ciudades?

💘

Jake toma un momento para responder, entendiendo completamente las dudas de Danielle. No tiene todas las respuestas, pero hay algo que sí sabe con certeza.

—No puedo predecir el futuro, pero puedo prometerte algo, Dani. Pase lo que pase, Moonlight Sun seguirá siendo mi prioridad, y encontraré una manera de que todos se sientan seguros y valorados. Esto no es solo un trabajo para ustedes, lo sé... es su hogar también.

Sunghoon asiente, apoyando a Jake con una mano sobre su hombro.

—Y lo apoyaremos en cada paso del camino. Este es un equipo, y no importa lo que decidamos, encontraremos una manera de hacerlo juntos.

Danielle asiente con una leve sonrisa, sintiéndose aliviada de escuchar que no están solos en esto.

—Gracias por decir eso, chicos. Eso nos da más tranquilidad... supongo que es algo que tendremos que manejar día a día.

Jake asiente con una sonrisa más relajada, agradecido por la comprensión de Danielle, pero sobretodo por el apoyo incondicional de Sunghoon.

—Así es. Lo tomaremos un día a la vez, pero juntos. Eso es lo que importa.

Sunghoon y Jake intercambian una mirada, sabiendo que la conversación no termina aquí, pero al menos han dado un paso en la dirección correcta.

Las decisiones sobre su futuro juntos y la cafetería no serán fáciles, pero están listos para enfrentarlas, sabiendo que tienen el apoyo de su equipo y, lo más importante, el uno al otro.

Danielle regresa al área de trabajo, más tranquila, mientras Jake y Sunghoon se quedan en la mesa, pensando en lo que vendrá.

El futuro todavía es incierto, pero sienten una chispa de esperanza. Juntos podrán hacer que todo funcione, sin importar los obstáculos que se presenten.

—¿Listo para enfrentar el mundo, Hoonie? —Pregunta Jake, sonriendo con complicidad.

—Siempre, si estás conmigo —Responde Sunghoon, apretando su mano.

El futuro sigue siendo un enigma, pero con amor y trabajo en equipo, están seguros de que encontrarán el camino adecuado.

Amo mucho a esta parejita💘😭