Hongjoong no se encontraba con ánimos de salir de su casa, ni siquiera de su cuarto. Su intuición nunca le había fallado, y ver que a pesar de haber puesto su confianza ciega en Seonghwa, éste le había fallado, le hacía sentir muy dolido, e incluso manipulable.

¿En algún momento llegó a sentir verdaderamente algo por él? ¿O todo este tiempo fue sólo eso, un reto, una manera de distraerse? Le gustaría poder mentirse a sí mismo, alegando que estaba enfadado con el pelinegro, pero realmente ese enfado no era más que tristeza escondida. Parecía que no aprendía, a pesar de ya haber tenido experiencias similares, tanto en parejas como en amistades.

Sin embargo, no iba a permitirse volver a estar así, o al menos demostrarlo. Debía parecer más fuerte, así quizás la gente dejaría de jugar con él. Así que tras un par de días sin salir de la cama y comiendo comida basura, se obligó a sí mismo a arreglarse y salir. Decidió que era el momento de un pequeño cambio.

Acababa de salir de la peluquería. Su ya largo cabello rojo había pasado a un mullet teñido de azul oscuro, decir que se sentía bien era poco. Además, hacia un día soleado, por lo que dio un paseo, sin rumbo fijo, simplemente dejándose llevar por sus pasos mientras no pensaba en nada, descansando por un rato de sus pensamientos.

A Seonghwa le gustaba mucho su pelo rojizo.

Que se joda.

Pensó en ir a darle una sorpresa a Jongho, en llevarle su comida preferida a casa y pasar juntos la tarde. Así que se encaminó al restaurante preferido del menor, pidió su menú de siempre y se encaminó hacia su hogar.

Cuando estaba a punto de llegar, vio la silueta de su amigo saliendo por la puerta, ¿acompañado de alguien? Hongjoong no pudo reconocer de quién se trataba, pero se sintió algo avergonzado. Ambos chicos se fueron calle abajo, sonriendo juntos, sin siquiera percatarse de su presencia.

El ahora peliazul volvió a su casa. Realmente Jongho no tenía nada de culpa, por el contrario, él era quien debería haber avisado o preguntado si estaba ocupado, pero no podía evitar sentirse algo solo. Siempre habían sido Jongho y él, el uno para el otro. Aunque desde que conoció a Hwa, quizás le dedicaba menos atención al menor, y éste había hecho otros amigos por su cuenta.

¿Así había hecho sentir a su mejor amigo este último tiempo? Ahora se sentía muy mala persona, a pesar de que sabía que él no le guardaba ningún rencor.

Su cabeza estaba toda hecha un lío.

[???] P.O.V.

Se ve más callado y serio de lo usual. Tampoco es que me importe mucho lo que le pase. Solo espero que continúe haciendo su trabajo, no puede cagarla justo ahora. En fin, ya sabe las consecuencias si no hace lo que es debido.

Se despertó sobre las ocho de la tarde, con el ruido de su móvil vibrando seguidamente, se había dormido viendo una película en el sofá. Estiró el brazo para alcanzarlo y lo desbloqueó, alcanzando a ver el nombre de "hwa💗" en notificaciones de mensajes. No los leyó, no tenía nada de ganas de saber de él ahora mismo, aunque se dirigió a la aplicación de contactos y le cambió el nombre, quitando su estúpido apodo y corazón. Era una tontería, pero realmente le hizo sentir algo mejor.

Se dispuso a preparar algo ligero para cenar, le había entrado hambre, cuando su teléfono sonó de nuevo. Irritado, pensado que era de nuevo aquel imbécil, fue a cogerlo para bloquearle, pero su enfado se disipó al ver que era Jongho quien le había escrito.

- Han encontrado a San

- ¿QUÉ?
- ¿y está bien? ¿qué ke había ocurrido?

Pese a sus vivencias pasadas con aquel chico, quería saber qué había ocurrido, no por la persona en cuestión, sino por su propia curiosidad.

- No se sabe nada aún, por lo visto, pero ha salido en las noticias
- Se ve como traumatizado, aunque no herido, no da datos de nada y no quiere hablar del tema, la policía va a interrogarlo a ver si consiguen sonsacar algo relacionado con lo que está pasando últimamente

- Madre mía.
-All menos lo han encontrado, ya están más cerca de saber algo

- O no, todo depende de San

Un escalofrío le recorrió la espalda. Le aliviaba en parte el hecho de que hubiesen encontrado al desaparecido, sin embargo a la vez le aterraba su comportamiento. Buscó la noticia y halló un muy breve artículo que no le proporcionó más información de la que le había contado su mejor amigo. San había sido siempre una persona callada, pero la fotografía que le habían hecho, mientras era escoltado por policías por la calle, mostraba a un San diferente, tal como había dicho Jongho.

Hacia tiempo que no pensaba en él, en qué habría sido de su vida. Choi San fue una de sus amistades más cercanas por mucho tiempo, pero ésta se volvió tremendamente tóxica. Gracias a Jongho pudo salir de ahí, y no podía estarle más agradecido.

Sentía que nunca iba a poder devolverle a Jongho todo aquello que había hecho, y hace por él.

O3O12O22

holas JAJS

no sé qué decir, ni siquiera si alguien leerá esto (entendible)

he estado en un bloqueo ENORME, y pensaba que nunca iba a acabar ninguna historia, pero hace poco, me han vuelto las ganas de escribir (ya era hora), he estado leyendo borradores, cosas escritas por ahí, comentarios que recibía y recordé lo mucho que amo esto, aunque actualice una vez al siglo es algo que disfruto muchísimo, y me sabe muy mal haber "abandonado" esto así. Pero pienso acabar esta historia, tarde lo que tarde

estoy en un año escolar complicado, y ha sido otra de las razones por las que literalmente no he escrito, de todas formas intentaré no tardar mucho el próximo capítulo, tengo muchas ganas de avanzar con esta historia, a pesar de que creo que la estoy desarrollando muy lentamente, tengo ganas de que se ponga MÁS interesante

perdón, en serio, y muchísimas, muchísimas gracias por todo :( <3