"𝐓𝐫𝐢𝐬𝐭𝐞𝐳𝐚 𝐯𝐚𝐠𝐚, 𝐩𝐫𝐨𝐟𝐮𝐧𝐝𝐚, 𝐬𝐨𝐬𝐞𝐠𝐚𝐝𝐚 𝐲 𝐩𝐞𝐫𝐦𝐚𝐧𝐞𝐧𝐭𝐞, 𝐧𝐚𝐜𝐢𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐜𝐚𝐮𝐬𝐚𝐬 𝐟𝐢́𝐬𝐢𝐜𝐚𝐬 𝐨 𝐦𝐨𝐫𝐚𝐥𝐞𝐬, 𝐪𝐮𝐞 𝐡𝐚𝐜𝐞 𝐪𝐮𝐞 𝐪𝐮𝐢𝐞𝐧 𝐥𝐚 𝐩𝐚𝐝𝐞𝐜𝐞 𝐧𝐨 𝐞𝐧𝐜𝐮𝐞𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐠𝐮𝐬𝐭𝐨 𝐧𝐢 𝐝𝐢𝐯𝐞𝐫𝐬𝐢𝐨́𝐧 𝐞𝐧 𝐧𝐚𝐝𝐚"

"¿Dónde demonios se ha metido ese mocoso?" , el hombre que ronda aproximadamente los cuarenta años de edad, piensa molesto lanzando su última botella de Soju al basurero, el verano recién ha iniciado y Donghae cree que es el mejor momento para enseñar al menor de sus hijos, el único oficio que conoce.

—Vamos Park, no tenemos tiempo que perder para zarpar, si logramos pescar la cantidad de peces sable que el dueño de ese restaurante nos solicitó, tendremos una buena paga para el final del día —le dice Lee Hyukjae quien espera por él en la puerta de ingreso de su humilde casa, uno de sus pocos amigos cercanos y que usualmente lo ayuda a conseguir trabajos casuales y más importante aún, lo ayuda a mantenerse sobrio y ocupado.

—Quiero que mi hijo Sunghoon nos acompañe y que así aprenda acerca del sacrificado y duro oficio de su padre.

—Deja que el pobre chico disfrute de sus vacaciones de verano, probablemente se encuentra en compañía de los otros niños del barrio y corriendo desesperado detrás de un balón de fútbol como solíamos hacerlo cuando teníamos su edad.

—Esas son tonterías Lee, mi hijo tiene que aprender a valerse por sí mismo, la mejor manera de hacerlo, es aprendiendo un oficio desde temprana edad, si lo que quiere es sobrevivir en este injusto mundo.

—¿Qué te asegura de que su sueño sea ser pescador como su padre? Sunghoon aún es un niño de siete años y tiene toda una vida por delante para decidir qué hacer con su destino.

—Destino —Donghae repite esa última palabra de manera burlona y con una expresión en el rostro algo dolida al pensar en el rumbo que ha tomado el suyo— .La gente de nuestra clase social, ya tiene escrito su destino desde que llegamos a este mundo en un miserable centro de salud que cuenta sólo con lo "necesario" para la gente como nosotros, su destino es quedarse atrapado en esta isla y el mejor oficio que puede aprender para sobrevivir, es el de la pesca.

—No seas tan amargo Park, dale una oportunidad al chico, déjalo que disfrute un poco más de su niñez, éstos son sus mejores años y los recuerdos que haga, los atesorará por siempre, la vida ya ha sido muy dura con él y con tu hija desde que Irene...

—No hables de esa mujer en mi casa —Donghae lo detiene con una mirada desafiante y cargada de rencor al recordar el rostro de su ex esposa.

—Yo, lo lamento, no volveré a mencionarla, Donghae, es muy peligroso llevar a Sunghoon con nosotros y pretender que podrá resistir en alta mar así porque sí, nos hará perder el tiempo y una buena paga al final del día.

—Supongo que tienes razón en ese aspecto pero, no quiero que mi hijo piense que todo en la vida se trata de juegos y risas.

—Aveces los juegos y las risas son lo único que un niño de su edad necesita.

—¿Alguna vez te dijeron que eres muy bueno para escuchar? También aprendes muy rápido Sunghoonie — el niño de cabellos dorados lo halaga con una dulce sonrisa y Sunghoon puede jurar que Jaeyoon posee la sonrisa más linda que ha visto en toda su vida— .Recuerdo que en mi caso, me costó mucho y pasaron varias semanas hasta que pueda entender lo que se supone debía hacer.

—Gracias Yoonie, pero me es difícil de creerlo, eres muy bueno para el ajedrez y también eres muy paciente para enseñarme a jugarlo; cada vez que mi padre quiere enseñarme algo, siempre me dice esto, "Eres bueno para hacerme perder la paciencia Park Sunghoon" —los cachetes inflados del niño de cabellos plateados y la expresión de "molestia" en su rostro imitando al de su padre, roban una pequeña carcajada a Jaeyoon quien devuelve inmediatamente la mirada al costoso tablero de madera.

—Yoonie ¿Quién te enseñó a jugar ajedrez? ¿Fue tu papá?

—No, él nunca tiene tiempo para esas cosas, mi padre contrató a un profesor privado para que me enseñe durante una vacación de invierno, solía decirme que todos los niños de nuestra clase social deben aprender a jugarlo y que era muy sencillo, mi profesor de ajedrez me habló días enteros acerca de historia y de teoría, cuando continuamos con la parte de la práctica... Supongo que ya había olvidado todo lo que debía hacer.

—Ya veo, quizás ese fue el problema.

—¿Cuál?

—En mi caso, la historia y la teoría me resultan muy aburridas y prefiero saltar directamente a la práctica.

—¿El ajedrez te resulta aburrido Sunghoonie? ¿Preferirías hacer algo más?

—Me gusta mucho sólo porque estoy aprendiendo a jugarlo contigo —avergonzado, Sunghoon se  cubre inmediatamente la boca, no, no se arrepiente de haber expresado esas palabras pues son las más puras y sinceras que ha pronunciado hasta este momento, "¿Qué me sucede?" Se pregunta agachando la mirada y jugando con uno de los botones de su camisa de domingo, es la primera vez en sus siete años de vida que su cerebro no puede controlar lo que su corazón quiere gritar.

Jaeyoon pretende no haber escuchado nada para así evitar incomodar a su nuevo compañero de juegos; sin embargo, la repentina confesión de Sunghoon le ha generado una extraña y nueva sensación en el estómago.

Había escuchado acerca de la sensación que sólo unas cuantas personas te generan y en momentos sumamente específicos, esa sensación conocida como "mariposas en el estómago", era muy común en los cuentos de príncipes y hadas que su tía abuela Naeun suele mencionar.

"¿Quizás eso es lo que siento?" Se pregunta mientras desvía la mirada hacia el amplio ventanal, los rayos de sol ingresan con mayor intensidad conforme la tarde va pasando en lo que parecería ser un perfecto día de verano.

Por supuesto, su padre le ha prohibido leer ese tipo de cuentos ya que, a su parecer, no tienen nada de sentido y sólo sirven para distraerte de la realidad.

Incluso, se lo recordó con un serio semblante al despedirse de él y dejarlo al cuidado de su tía, actualmente se encuentra a miles de kilómetros de distancia en compañía de su madre, ambos  disfrutan de uno de sus tan acostumbrados viajes con amigos y esta vez su continente elegido es Europa.

El pequeño niño de cabellos rubios suspira con melancolía al recordar lo fácil que se le hizo a sus progenitores dejarlo en esta isla bajo el cuidado de una mujer que apenas conoce, es la primera vez que deciden no dejarlo bajo el cuidado de sus niñeras y sirvientes y sin la compañía de Sunghoon su estadía en esta extraña isla sería incluso más aburrida.

Quizás romper la rutina que su padre le ha impuesto para este verano no tenga nada de malo, quizás el serio y formal señor Sim jamás se entere de lo que suceda en este día en particular o de lo que sucederá en los días que vendrán. Sunghoon es su mejor oportunidad y su sola presencia le otorga la excusa que tanto necesitaba para intentarlo, quizás salirse del molde de su perfecta crianza y educación no tiene nada de malo ¿Verdad?

—Quizás podemos jugar en una de las piscinas y disfrutar lo que queda del día afuera ¿Eso te gustaría?

—¡Siiiii! —Sunghoon chilla emocionado levantando ambos brazos a modo de festejo, la idea de Jaeyoon no sólo le agrada, la sola idea le encanta y ya tiene un par de planes para ser realizados junto al más bajito de ambos— .Pero no tengo mi traje de baño.

—No te preocupes por eso, yo traje varios, supongo que el más grande estará bien para ti, eres más alto que yo pero creo que por lo demás no habrá ningún inconveniente.

Con cuidado, acomodan las fichas del tablero de ajedrez en un fino cajón cuyo interior se encuentra forrado en terciopelo, Jaeyoon se asegura meticulosamente de que todas las fichas se encuentren perfectamente ubicadas y en el lugar que les corresponde; al ver su esfuerzo, Sunghoon piensa que hubiera sido más sencillo dejarlas como estaban, después de todo, desea con el alma que esta no sea la última vez que pueda jugar ajedrez con su nuevo amigo.

—Primero tenemos que pedirle permiso a mi tía Naeun.

—¡Está bien! —Sunghoon exclama contento al saber que pronto podrá disfrutar de una de las piscinas de la enorme mansión— ¡Consigamos juntos ese permiso Yoonie!

Entrelaza los dedos con el niño de rubios cabellos y siente que su corazón está a punto de explotar por el sólo delicado roce de sus pieles, ninguno de los dos emite palabra alguna hasta llegar a la habitación de oxígeno terapia, ambos se miran fijamente y asienten al mismo tiempo dándose ánimos antes de enfrentar el momento decisivo.

Los delicados golpes en la puerta distraen la sesión de la dueña de casa y Mina la observa confundida, todos los sirvientes de la gran "Mansión de la Costa" saben perfectamente que no deben interrumpirlas cuando dedican su tiempo a preservar la salud de su jefa.

—Tía Naeun ¿Podemos pasar?

Con un ademán la anciana ordena a Mina que abra la puerta y permita el ingreso del nuevo par de compañeros de juegos.

—¿Qué sucede cariño? ¿Está todo bien entre ustedes? No me digas que ya estás aburrido —el repentino ataque de preguntas confunde a Sunghoon, quien prefiere analizar la sorprendente habitación en la que se encuentran "Parece una sala de hospital", piensa frunciendo la nariz al percibir un similar aroma a medicinas que todo centro de salud posee.

—No querida tía, todo lo contrario... Sunghoon y yo, queremos pedirte permiso para poder jugar en una de las piscinas exteriores.

—¿Es eso verdad Sunghoon?

—Si señora Naeun, Yoonie y yo queremos disfrutar de este caluroso día en una de las piscinas, él me prestará uno de sus trajes de baño y tenemos mucha, pero mucha ilusión de poner obtener su permiso.

—Con que Yoonie y tú ¡Qué adorable nombre elegiste para este pequeño príncipe!

—E-es de cariño.

—¿De cariño? ¿Tan pronto? Bueno, el día es demasiado perfecto para pasarlo encerrado entre cuatro paredes, pueden pedirle al señor Kim que los acompañe, no quiero que "Yoonie" se meta a la piscina sin supervisión adulta.

—Con todo respeto señora Naeun —Mina espera la autorización de su jefa para poder continuar, la anciana asienta y la adolescente observa a su hermano menor que ahora le presta completa atención —Sunghoon es excelente para la natación, ambos lo somos desde que éramos pequeños y esa es una de las ventajas de haber nacido en esta isla, puedo asegurarle de que Jaeyoon estará sano y salvo bajo su cuidado, además, la piscina más cercana a la puerta trasera de la cocina, tiene menor profundidad.

—¿Qué opinas de eso cariño?

—Opino que es una brillante idea querida tía.

—Pues bien, no se diga más, no olviden ponerse protector solar y pidan lo que gusten de la cocina cuando sientan hambre.

—Muchas gracias por darnos permiso tía Naeun.

Jaeyoon se retira con una formal reverencia que es imitada por Sunghoon y ambos vuelven a entrelazar los dedos antes de dirigirse a la habitación del rubio para cambiarse de ropa.

—Mina cariño, quiero que tu hermano nos acompañe por todo el verano, quiero que sea el compañero de juegos de mi sobrino nieto Jaeyoon, Sunghoon recibirá un salario similar al tuyo, además de los beneficios que gozas respecto a ropa y alimentación ¿Crees que tu padre estará de acuerdo? ¿Necesitas que le pida permiso personalmente así como hice contigo?

Mina sabe perfectamente que su padre lanzará un grito al cielo y no permitirá por nada del mundo que Sunghoon pase el verano jugando con otro niño; sin embargo, esta oportunidad es única en la vida y Sunghoon no debería perderla por un hombre al que, según ella, poco o nada le interesa el bienestar de sus hijos.

—Primero hablaré con él señora Naeun, en caso de que nuestra conversación sea negativa, tendré que molestarla y pedirle que hable con mi padre personalmente.

—Muy bien, que así sea cariño, ahora podemos continuar sin temor a ser interrumpidas ¿No te causa ternura e ilusión lo bien que se llevan ese par de angelitos?

—Mucha señora Naeun... Es una lástima de que sea sólo por este verano.

—Yo me aseguraré de que éste, sea el primero de muchos que pasen juntos, tienes mi palabra cariño.

Las palabras de la anciana la tranquilizan y encienden en el corazón de la adolescente de quince años una chispa de esperanza, deberá mantener una seria charla con su hermano menor acerca de la importancia del ahorro y la correcta administración del dinero que genere a partir de hoy—Muchas gracias por confiar en nosotros señora Naeun.

Por fin tuve algo de tiempo libre para poder actualizar esta historia, procuraré hacerlo al menos una vez por semana.  Quise celebrar el día de San Valentín, regalándoles esta actualización 💌

Muchas gracias por darle una oportunidad ❤️🌻🥰