❪𝟱𝟰❫ ; 𝘂𝗻𝗱𝗲𝗿 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗿𝗼𝗹.
❪ARC THREE; DEMONS❫
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CAPÍTULO CINCUENTA Y CUATRO:
BAJO CONTROL
❛con la frente en alto❜
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©Shanxlabyx
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UNA VEZ MÁS SE ENCONTRABA MIRANDO FIJAMENTE LAS FOTOGRAFÍAS EN LA PARED, SU CURIOSIDAD A VECES PODÍA LLEGAR A SER BASTANTE GRANDE y no podía evitarla; justo ahora era la curiosidad de ver a su compañero de carácter fuerte en su etapa de niño pequeño, parecía haber imágenes de él de niño principalmente en la pared. Le había tomado algunos minutos (y adentrarse al baño algunos instantes para refrescarse la cara para relajarse y así evitar que más adelante su quirk se sobresalte y se dispare) relajarse para estar más tranquila de lo que había estado anteriormente; se había tomado la limonada tal como se la dieron, no sintiéndola fría como estuvo antes, aunque ya había sido a causa suya y de que su cuerpo había estado bastante subido de temperatura al derretir los hielos que tenía, justo como alegó Katsuki.
Dejó salir un gran y profundo suspiro cruzando un poco sus brazos casi como si se estuviera abrazando a si misma, aún escuchaba las voces de fondo de sus amigos que seguían conversando amenamente. Ella se había sentado a un lado de ellos un rato mientras bebía su limonada practicamente al clima en cuanto a temperatura, observado como Mina había abierto su mochila y la volteó en la mesa que tenían enfrente del sofa, al estar todos sentados allí, para dejar caer varias bolsas de frituras, así como dulces y otras golosinas, dando a entender que había traído bastante para que todos comieran. Sero había dicho que pareciera que ella había traído todo eso como si de verdad fueran a hacer una fiesta y Katsuki la acusó y amenazó de que esa no haya sido su intención porque los echaría de su casa, aunque realmente era para comer mucho hasta reventar o al menos hasta encontrar a donde ir todos para disfrutar el inicio del verano y que todos pasaron sus examenes.
Entrecerró un poco sus ojos dejando salir un nuevo suspiro profundo a su vez que embosaba una ligera sonrisa de lado en un gesto algo nostálgico; ver una fotografia familiar, eso la hace sentir nostálgica porque la hacía recordar que la suya ya no era como antes. Le causaba tristeza como su familia no parecía una familia, siendo que todo comenzó a fragmentarse desde que ella pudo regresar (ni recuerda bien el como) de Nakano y volver con ellos, para luego venir la intromisión de su abuela. Recordó vagamente cuando comenzó esos tratos venir de ella, sus ojos se entrecerraron un poco casi con cierta tristeza por esos recuerdos, incluso una de sus manos recorrió con sus dedos su antebrazo izquierdo con lentitud ante el escalofrio que sintió allí al recordar como siempre eran los afectados ante los castigos de su abuela hacia ella.
Aunque realmente no era sólo a ella, en realidad. Llegó un momento en donde hizo lo mismo con Kazuto y Takeshi, siendo Gie la menos afectada. Un brillo un poco impotente se instaló con recordar ese detalle, luego bufó agitando su cabeza. Vamos, deja de pensar en eso y sólo disfruta el inicio de tus vacaciones, se decía a si misma en su cabeza; era frustrante para si misma el no poder estar tranquila desde el día en el que Izuku se encontro con Shigaraki Tomura, a veces odiaba como llegaba a ser cuando tenía algún momento así de estresante como el de ese día. No era capaz de estar tranquila los siguientes días, o no podía tranquilizarse de inmediato.
—¡Hatsuuuu-chan! ¡rapido, ven! ¡Planeamos ir al parque de diversiones! —Hatsulin salió de sus pensamientos cuando escuchó la voz de Mina llamarla mientras alargaba la "U" de aquel leve apodo que venía de su nombre completo; giró la cabeza por sobre su cuello para mirarla, observando como estaba agitando una golosina en una de sus manos y un refresco en la otra como si quisiera llamar su atención a una larga distancia aunque estuviera a sólo un par de metros de ella.
—¡Carritos chocones, carritos chocones! —canturreaba con entusiasmo Denki quien flexionaba sus brazos de arriba hacia abajo sucesivamente; Hanta estaba comiendo una bolsa de frituras con una sonrisa mientras Eijirō estaba comiéndose un regalis rojo. Faltaría Katsuki, que aparentemente había ido al baño.
Sus cejas se relajaron un poco al observar las expresiones alegres de sus amigos ante esa idea, aunque en realidad todos han estado animados desde que llegaron a la casa de los Bakugō, luego se sintió un tanto mal por el hecho de no estar igual de animada que ellos. Frunció el ceño ligeramente algo molesta consigo misma de no poder relajarse y disfrutar, no obstante, luego observó con atención las expresiones de sus amigos que la fueron relajando poco a poco, el ver aquel brillo de emoción en ellos. Apretó un poco sus labios sintiendo como sus manos se calentaban ligeramente.
Dejó caer lentamente sus hombros como si un peso cayera y a su vez se deslizara lejos de ellos, su expresión se había suavizado un poco dejando de estar tan afligida y perdida en algun punto como lo estuvo anteriormente; casi parecía haberse relajado o tranquilizado de lo tan inquieta que había estado desde que llegó, apenas siendo ese detalle notado por sus compañeros y amigos; admitían que ha estado más callada de lo normal, considerando como era ella.
—Oi. —escuchó nuevamente la voz de Katsuki que venía a sus espaldas, así que giró levemente su cuerpo hacia aquella dirección para verlo y observarlo bajar por los escalones de su casa suponiendo que el baño estaba en la planta alta. Venía con las manos en los bolsillos de su pantalón, de igual manera se veía un poco más relajado que antes que llegaran—. ¿Que te pasa? definitivamente estás más rara de lo usual.
Parpadeó un par de veces mientras apretaba sus labios un poco mostrando una expresión atenta y expectante, aunque en su interior se sentía algo cohibida y hasta cierto punto confundida de que dijera esas cosas, por mucho que fueran verdad. ❛¿Como es que siempre se da de cuenta que me siento o actúo diferente? es demasiado observador para mi gusto❜ pensó inevitablemente la chica achicando un poco sus ojos al parecer aquello algo curioso de que él se fijara siempre el como se encontraba ella, aunque era el único quien se había dado de cuenta que estaba más "rara de lo usual", tal como él dijo.
—No me pasa nada, Bakugō-kun. —respondió ella a pesar de todo, a pesar que sabía muy bien por si misma que realmente le pasaba algo—. Sólo... estaba esperándote. —Katsuki se detuvo enfrente de ella mientras fruncía sus cejas y luego alzaba una de ellas confundido por esas palabras—. Al parecer los demás quieren ir al parque de diversiones, ¡suena bien para mi! ¡vamos!
Katsuki la observó con su ceño aún fruncido, hundió de igual manera sus cejas hacia abajo al notar y percibir claramente que ella realmente no estaba bien. Hasta ese punto en el que se conocen, logra, de alguna manera, siempre darse de cuenta cuando realmente tiene algo o cuando no está realmente bien, como ella trata de demostrar que está bien. No era tonto como para no darse de cuenta que ella tenía algo.
Chasqueó su lengua con una mueca en sus labios mientras ahora cruzaba sus brazos sobre su pecho y volteaba su rostro hacia un costado empujando su labio inferior hacia afuera en un puchero enojado, incluso hasta cierto punto inconforme por la respuesta de la más baja entre ambos. —Eres muy misteriosa y extraña, al punto de ser molesta ¿sabías? —murmuró con sus ojos entrecerrados pasándola de largo para dirigirse hacia donde se encontraban sus amigos.
Hatsulin lo siguió con la mirada con cierta sorpresa en su rostro, más que nada por el tono particularmente bajo que había usado y sobretodo al sentir lo inconforme que se había escuchado. Con ayuda de aquella rama de su quirk, desarrollado en parte con el quirk de su padre, pudo percibir sus sentimientos, sintiéndolo inquieto e insatisfecho, agregando que estaba la inconformidad. Sus cejas se curvearon ligeramente en confusión por como él se sentía y como se expresó, parpadeó nuevamente para dejar salir un escaso suspiro mientras subía y bajaba sus hombros conforme hacía aquello. A veces su actitud la llegaba a confundir demasiado al punto de empujar hacia cualquier lado cual sea el pensamiento que tuviera en esos momentos, como el hecho de que estaba inquieta y ansiosa ese día por lo que había sucedido no hace mucho cuando la mayoría de sus compañeros habían ido juntos a comprar lo que hacía falta para el campamento.
—¡Hatsu-chan, vamos antes de que Bakugō se arrepienta y nos eche de la casa!
Salió nuevamente de su ensimismación al escuchar el llamado de Mina, fue como si explotara momentáneamente la burbuja que había a su alrededor. Se quedó unos momentos allí y sonrió lo mejor que pudo para no demostrar lo preocupada y aún ansiosa que estaba, aunque de cierta manera se había esfumado aquel sentimiento que tanto le disgustaba al no poder estar tranquila y a gusto con sus compañeros y amigos, y poder disfrutar el inicio del verano antes de todos ir a aquel campamento de entrenamiento de la U.A., de cierta forma le emocionaba cuando llegara esa semana completa donde convivirían todos entre si como si vivieran juntos y a su vez entrenaran todos. Le causaba curiosidad todo eso aunque a su vez estaba inquieta con lo que ha sucedido actualmente.
Quería disfrutar esos días lo más que pueda, se iba a esforzar a hacerlo.
—¡Claro! ¡Vamos! —exclama en un algo forzado tono entusiasmado queriendo transmitir que estaba emocionada y a su vez hacerse sentir de esa manera, quería ir a lo alto fuera de toda aquella inquietud que sentía.
LE ERA INEVITABLE NO PENSAR EN SHŌTO MIENTRAS OBSERVABA EL GRANIZADO que tenía entre sus manos; ver cómo estaba dividido en dos mitades, justo como si fuera una representación de su primo, la llevó a pensar en él. Observaba el lado izquierdo el cual era de un brilloso rojizo mientras que el lado derecho tenía un tranquilo y a su vez intenso color azulado. El orden en el que estaba definitivamente le recordaba a Todoroki Shōto, respecto a su lado de fuego y su lado de hielo. Irónicamente todo era de hielo. Su propia imaginación recreó la cara que Shōto siempre tenía con sus ojos caídos en monotonía y con la mueca seria que poseía todo el tiempo. Ahí tenía con su imaginación el granizado con la cara de Shōto.
«Soba» imaginó la voz de su primo mientras observaba la cara imaginaria de su primo en el cono de granizado. Movió levemente el cono todavía metida en su repentina y rara imaginación que surgió por aquel parentesco de colores con él.
—Shōto-cono... —murmuró para si misma con sus orbes azules fijos en aquel refrigerio refrescante para los días calurosos como ese, sobretodo al ser verano.
—¿Dijiste algo? —cuestionó con curiosidad Eijirō que estaba a un lado de ella. Hatsulin seguía mirando fijamente su refrigerio—. ¿Hay algo raro con tu granizado?
—¡Chicos, vamos a jugar tiro al blanco! ¡quiero ganarme un peluche de Totoro! —llamó su atención Mina quien había corrido emocionada hacia uno de los puestos de la feria del parque de diversiones en dónde había un juego de disparar y tirar un blanco, los premios eran diversos peluches tanto de héroes como de animales; el que le había llamado la atención a la de escleróticas negras fue aquel personaje peculiar y famoso que estaba colgando junto con otros más.
Hatsulin desvió su mirada y su atención del ❛Shōto-cono❜ para mirar a la dirección de su amiga de cabello rosáceo y corto que miraba con fascinación y brillos en sus ojos aquel redondo peluche de Totoro que según ella estaba resplandeciendo a su dirección en señal de que lo ganara. Sus labios se curvearon en una pequeña sonrisa al ver lo tan emocionados que estaban, principalmente la segunda chica presente quien estaba inclinada enfrente del puesto de Tiro al Blanco mirando fijamente a que era a lo que se debía disparar, siendo distintos objetivos. El dueño del puesto estaba sentado en una silla mientras parecía dormir por la forma en la que cabeceaba y una burbuja salía de su nariz, agregando que no se inmutaba por completo por la presencia de ellos.
Se acercaron todos alrededor de Mina y a su vez del puesto de juego, acompañando a su amiga de cabello y piel rosácea y quizás llamando la atención en que podrían ganar cada uno de ellos. Hatsulin, mientras probaba el granizado de dos colores, viajó sus ojos por los muñecos que habían colgados y modelando como premios dependiendo del puntaje, incluso habían pequeños llaveros de distintos heroes; se fijó en un llavero de All Might que era como su versión mini y a su vez menos realista, no viéndose musculoso como realmente era pero teniendo todo lo demás en él como su cabello, su sonrisa y los patrones de su traje; incluso tenía una pequeña capa. Sonrió observándolo y divagando más, inevitablemente su atención volvió a caer en otro llavero siendo en esta ocasión de su tio Enji, en este caso siendo un llavero de su identidad como héroe; Endeavor. Todo era como All Might, su versión mini y detalles de él; tenía la misma mueca de amargado que siempre.
Mientras seguía comiendo de su granizado que casi al instante se deshacía en su boca, sobretodo por el calor que naturalmente emanaba de forma elevada debido a su quirk, observó como Mina trataba de llamar la atención del adormilado dueño del puesto quien seguía cabeceando con sueño; quizás ya llevaba un gran rato ahí esperando y el aburrimiento le ganó. En ocasiones a ella misma le sucedía cuando no hacía absolutamente nada y se quedaba en silencio, de repente sentía sueño el estar de esa manera.
No obstante, el mismo jóven se sobresaltó ante el fuerte y repentino golpe que Katsuki le había atinado a la mesa que los separaba y en donde estaban apoyadas las armas con las que se dispararían a los objetivos. Incluso sus compañeros y amigos se sobresaltaron por aquella acción del cenizo quien se veía irritado y molesto; por parte de él era el hecho de que no era demasiado paciente, y que ese chico esté allí dormitando lo irritó, sobretodo teniéndolos a ellos enfrente de él.
—¡Oi, extra, tienes clientes aquí enfrente! —bramó enojado el chico de cabellos alborotados y puntiagudos mientras que el chico responsable de aquel puesto estaba con una expresión entre adormilada y confundida, estaba desorientado por ser repentinamente despertado.
—¿Eh?... ¿ah? —balbuceó el chico que tenía una gorra roja encima de su cabeza, la cual estaba mal puesta al tener la visera volteada descuidadamente hacia un lado, aparte de que parecía caerse de su cabeza. Se limpió la baba rapidamente sintiéndose avergonzado, luego se acomodó la gorra carraspeando un poco para colocar una mejor postura y sonrisa—. ¡Bienvenidos, jovenes! ¿Han venido a probar su suerte en el "Dispara y Gana"?
—¡Pues claro que si, por algo estamos aquí! —exclamó airado Katsuki volviendo a ganarse una mirada nerviosa del chico que parecía de unos veintiun años, siendo intimidado por un chico de dieciséis años.
La pelirroja observaba con atención a su amigo de mirada rojiza mientras seguía comiéndose el granizado, observaba los gestos exigentes y enojados del más enojón de todos los presentes y como el chico les indicaba nerviosamente las reglas del juego, aunque aún así fue interrumpido por Katsuki quien le arrebató el arma para casi lanzarsela a Ashido quien se veía impaciente y emocionada aunque luego se quejó un poco con el rubio porque casi le pega en la cabeza cuando le lanzó aquella arma de juguete que servía para darle al blanco.
Se la pasó observando con atención como Mina trataba de disparar a los blancos apenas dandole a los bordes, siendo que los tres intentos que tenía para disparar los perdió terminando desanimada y algo molesta consigo misma por no poder darle a ninguno, y más encima perder todos los intentos que tenía. Luego lo intentó Denki alegando que iba a darle a todos los blancos, apenas derribando uno pero sin poder derribar a otro, ganándose una lapicera con limpia pipas; fue luego Sero quien logró darle a dos de los tres blancos pero gastándose dos de los tiros en uno sólo, ganándose un llavero de FatGum; y Eijirō... pues se había ido a comprar una manzana acaramelada y apenas regresaba.
Ahora observaba como los tres estaban algo desanimados.
—¿Que tal les fue? —había dicho Eijirō una vez llegó con ellos con la manzana acaramelada con ya una mordida en ella. Los tres que habían tratado de ganar cualquiera de los premios que habían, tenían un aura desanimada encima de ellos. El pelirrojo estaba confundido aunque aún así tenía una leve sonrisa en sus labios—. Oh, te ganaste un llavero, Sero. ¡Que varonil!
—Si... —murmuró este mismo quien sostenía el llavero de FatGum con una sonrisa algo desanimada, por lo menos era el que menos estaba deprimido, aunque aún así se sentía humillado por si mismo por el hecho de no haber ganado algo más grande y ni derribar los tres blancos.
Fueron interrumpidos por el repentino y rapido sonido de tres disparos haciéndolos mirar fijamente hacia aquella dirección, observaban como Hatsulin sostenía con sólo uno de sus manos la escopeta de imitación y a su vez de juguete mientras apuntaba hacia donde anteriormente estaba levantado el tercer blanco y ahora había sido derribado con facilidad. Ashido, Hanta y Kaminari observaron algo boquiabiertos el como Hatsulin con bastante facilidad les había dado justo en medio a los blancos; ella tenía su mirada entrecerrada y concentrada mientras parecía algo perdida por unos momentos. Luego bajó el "arma" y los volteó a mirar mientras alzaba sus labios en una ligera sonrisa.
—¡Felicidades, derribaste los tres blancos! —aplaudió ligeramente el chico contento por el resultado para luego darle el peluche de Totoro que ella misma había pedido luego de darle sin fallar a los tres blancos con los cuales podía escoger cualquiera de los premios grandes, aunque por su parte tomó el gran y esponjoso peluche de Totoro para ir hacia Mina y extenderselo; ella estaba casi paralizada del asombro.
—Toma, Mina-chan. Para ti. —dice dulcemente la pelirroja mientras le sonreía gentilmente, los ojos de esclerótica negruzca de la de cabellera rosácea estaban brillando en grande.
—¡Aw, Hatsu-chan! ¡Increible! —chilló con emoción la de cabellera rosa mientras tomaba entusiasmada aquel peluche del cual apenas lo vio, lo quiso. Tenía brillitos de felicidad a su alrededor mientras abrazaba al gran peluche de Totoro, rebosando de felicidad aunque luego se quedó quieta con una mirada dudosa en sus ojos—. Pero... ¿estás segura de querer dármelo? Osea, ¡tu lo ganaste!
—Lo gane para ti. Después de todo tu lo querías, sólo quería ayudar. —respondió con sinceridad la pelirroja mientras agitaba una de sus manos para quitarle importancia. Se veía bastante segura a la hora de hablar y expresarse—. Verte feliz es mi verdadera recompensa.
El rostro de Mina se ruborizó sintiéndose conmovida por las palabras de la pelirroja, nuevamente tenía una gran sonrisa en sus labios, sobretodo con escucharla decir eso. —¡Wa, Hatsu-chan! ¡Eres demasiado para mí! —lloriquea algo dramatica por la emoción mientras casi se lanzaba a abrazar a su amiga quien la sostuvo riendo levemente.
—No agradezcas, Mina-chan. Verte feliz, me hace feliz a mi. —musita con dulzura la pelirroja soltándose poco a poco de la de cabellera rosacea que estaba bastante emocionada y feliz con dicho premio.
Una sonrisa serena y un tanto satisfecha apareció en los labios de la pelirroja; se sentía un poco más tranquila al respecto de ver a todos sus amigos felices y animados. Miró un momento a Eijirō quien se veía bastante sonriente observando y admirando al peluche, Kaminari se veía un poco decaído todavía por haberse ganado sólo una lapicera y Sero, pues él parecía bastante a gusto con el ahora resultado al ver a la chica de cabellera rosa animada, ahora resignándose a su humilde aunque lindo llavero. Algo es algo, después de todo. Eso pensó Hatsulin inclinando levemente su cabeza hacia un costado, prosiguió luego a agachar su mirada hacia el granizado ahora casi totalmente comido y hasta cierto punto algo derretido, sobretodo por el calor del comienzo del verano y también por la simple razón de ser hielo al no comerse al instante.
Sus párpados decayeron un poco dejando una mirada entrecerrada y a su vez algo triste, pareciera como si sus ojos se hubieran apagado y el brillo momentáneo que tenía al ver a sus amigos felices se apaciguó. Comenzó a meterse nuevamente en su burbuja ahora sintiendo impotencia, impotencia hacia si misma. Le daba coraje el no poder tranquilizarse ni un momento; sentía un momento de serenidad y su propia inquietud y ansiedad se encargaba de alejar cualquier pensamiento positivo para seguir atormentándola.
❛Odio no poder estar tranquila...❜ se quejó la pelirroja mientras hacía una ligera mueca de disgusto a su vez que sentía de nueva cuenta como sus palmas se calentaban cuando volvió a sentirse inquieta con más intensidad que antes. Elevó sus ojos sin dejar de agachar la cabeza viendo sus amigos distraídos en su felicidad. Apretó el vaso en donde estaba su granizado para forzar levemente una sonrisa cuando Kaminari indicó en ir a los carritos chocones. ❛Quiero disfrutar de verdad, quiero estar feliz y tranquila de verdad... yo quiero...❜
—Eres buena fingiendo a los demás pero a mí no me engañas. —sus hombros se tensaron ligeramente al escuchar la voz de Bakugō quien estaba a un lado suyo con sus manos en los bolsillos, miraba hacia enfrente. Hatsulin elevó su mirada hacia él con confusión y un leve atisbo de nervios muy poco perceptible, sólo tratando de mostrar una expresión hasta desconcertada; por un momento se olvidó que él tambien estaba ahí—. Sé que tienes algo, por mucho que lo niegues.
Hatsulin se quedó en completo silencio mientras apretaba sus labios, ya era por lo menos la tercera vez ese día que señalaba el hecho de que tenía algo. Aunque no era la primera vez, sobretodo tomando en cuenta que él llegaba a ser bastante observador y a su vez analítico, hasta cierto punto la colocaba muy nerviosa ese punto de Katsuki. A ella no le agradaba para nada que las personas se dieran de cuenta que realmente no estaba bien o que tenía "algo", sobretodo cuando es bastante consciente de que realmente si tenía algo. Y con más razón no quería que nadie supiera al respecto; no le gustaba que los demás se preocuparan por ella.
Pero al mismo tiempo... parecía tratar de emerger algún tipo de alivio en su interior cuando alguien sabía al respecto de como se sentía. Era demasiado confuso y chocante; desde hace años algo generó en ella no entrometer a nadie sobre como se sienta, pero a su vez sentía un alivio cuando alguien lo sabía; era como si sintiera tranquilidad de que alguien supiera como se sienta y de alguna forma despejarla. Miró entonces a Katsuki unos momentos mientras entreabría sus labios como si quisiera negar nuevamente su leve acusación y señalización pero nada salió de entre sus labios, como si no tuviera nada que decir, sobretodo porque era verdad.
Desvió la mirada mientras que la leve sonrisa algo forzada que tenía se caía mostrando una línea algo floja en sus labios que a su vez era una clase de mueca, pero que pasaba desapercibida por un gesto sereno. Se veía casi... tranquila, no se veía animada como siempre o con energía; si se conocía lo suficiente y analizaba con cuidado como era su atmósfera se podría saber que no estaba del todo despejada, aunque parecía casi aburrida. Desvió sus ojos hacia el suelo, teniendo en su campo de visión sus pies, agregando de que veía como caminaba con lentitud y casi a la par que el cenizo al quererle seguir el paso a sus amigos los cuales se habían casi adelantado al puesto de aquellos carritos chocones. No cuestionó nada, no negó nada; no dijo nada, simplemente se quedó en silencio.
—Me molesta. —escupió en un leve gruñido haciéndola alzar sus párpados nuevamente, aunque esta vez era en una mirada de cierta sorpresa e intriga de lo que había dicho, rompiendo el silencio que ella había generado cuando no volvió a decir nada. Katsuki bufó levemente mientras observaba a sus amigos tontear enfrente de ellos, en eso, suavizó levemente su mirada aunque luego volvió a endurecerla—. Deja de agachar la cabeza, mantén la frente en alto y controlate. Concéntrate en lo que pasa ahora, pirómana.
Algo se retorció en su estomago, Hatsulin estaba analizando esas palabras con cuidado y en silencio. De alguna manera pareciera como si fuera su manera de decir "tranquilízate y olvida lo que te molesta" o casi lo sintió así. Su respiración se detuvo por unos momentos mientras la retenía en su garganta observándolo casi atónita y algo embelesada, su cuerpo dejó de estar tan tenso, relajando poco a poco sus hombros. Nuevamente sintió sus manos calentarse en señal de su quirk y el efecto de como se sentía impactando en ella, aunque parecía ser un calor menos sofocante.
❛Mantener la frente en alto... «¿Concéntrate en lo que pasa ahora?»❜ se cuestiona en sus pensamientos repitiendo lo que él había dicho, apretó levemente sus labios mientras aún veía su perfil que en ningun momento dejaba de mirar hacia enfrente. Pestañeó levemente dejando salir un leve suspiro siendo aquel aire que había retenido. ❛Lo que pasa... ¿ahora?...❜
Se quedó en silencio varios momentos mientras giraba su rostro para mirar enfrente suyo donde veía a sus amigos haciendo fila, deteniéndose ambos a unos metros de aquel pequeño trio de amigos; Mina se movía entusiasmada en la fila abrazando al peluche Totoro con uno de sus brazos contra el costado de su torso, tomándose del barandal que dividía la fila y balanceándose de un lado a otro; Kaminari aún seguía con una nube de humillación encima de él mientras aún tomaba desganado la lapicera a su vez que el limpiapipas que estaba enrollado alrededor se contorneara levemente; Kirishima estaba detrás de ellos mientras comía con gusto la manzana acaramelada, a veces limpiándose cuando le caía del caramelo encima, y por ultimo Sero estaba riéndose un poco mientras le daba palmaditas al deprimido chico eléctrico. Todos se veían felices, emocionados, joviales; sin importarles nada más que la diversión de ese momento y disfrutar.
Alzó sus cejas levemente al ya caer en cuenta mejor en lo que había tratado de decir, o al menos, eso era lo que ella entendía; que debía despejarse y no centrarse en lo que sea que la estaba atormentando que claramente era algo que pasó en el pasado no lejano, que debía fijarse, despejarse y disfrutar el presente. Aunque él lo había dicho de manera más vaga y resumida, aquel era su significado; que se centrara en el ahora y, de cierta manera, que estuviera bajo control con como se sentía en repercusión a eso. La ansiedad seguía ahí, y estaba segura que no se iría con facilidad, pero que podía controlarla y apaciguarla hasta poder olvidarla o pasar a segundo plano.
—Si... tienes razón. —murmura suavemente la pelirroja mientras entrecerraba sus ojos, parecía verse más calmada y menos tensa que antes. La sonrisa en sus labios parecía más genuina y suave que antes. Katsuki a su lado bufó cerrando sus ojos con cierta soberbia, alzando su mentón.
—Hmmp, siempre tengo la razón. —Hatsulin rie levemente al escuchar su tono orgulloso pero que a su vez la relajaba un poco.
Se quedaron en silencio unos momentos mientras ella admiraba a sus amigos hacer la fila en medio de algunos niños de primaria o de secundaria, se notaba que eran los más grandes allí y a su vez era gracioso, aunque entendible ya que ese juego lo disfrutaba cualquiera. Su sonrisa se extendió un poco más a labios cerrados mientras sus ojos se entrecerraban ante aquel gesto facial, pero sus orbes seguían viéndose igual de grandes y redondos, aunque menos anchos a la hora que sonreía.
Se sentía un poco más tranquila por aquel tipo de consejo de parte de Bakugō Katsuki, habían sido unas palabras breves y que parecían bastante sencillas. No obstante, para Hatsulin fueron un impacto más fuerte de lo que parecía. Respiró profundamente como si exhalara y reteniera toda la ansiedad e inquietud que tenía para luego exhalarla, aunque aún en ella estaba dichos sentimientos que no podían irse tan fácilmente, pero que con esfuerzo podría dejar de atormentarse y a su vez darle más poder a esa ansiedad al darle tanta cabeza al asunto. Pensó en que todo estaba bien, que sus amigos estaban bien, que Midoriya Izuku estaba bien; que todo estaba bien y bajo control como no lo pensó bien antes, al sólo pensar y frustrarse de no poder tranquilizarse. Sonrió nuevamente luego resoplar de manera leve; todo era agradable y estaba bien, iba a disfrutarlo y pensar en el presente.
—Oi. —escuchó la voz del chico nuevamente sacándola de sus pensamientos y a su vez haciendo la mirar hacia él, curiosa; estaba con sus brazos cruzados y aún su ceño fruncido, aunque no se veía particularmente molesto, era más como la usual expresión que casi siempre tenía, parecía hasta sereno. Su tono de voz era grave y algo aspero, pero no tenía aquel atisbo de enojo que la mayoría del tiempo presentaba; definitivamente parecía relajado—. Tu tienes idea de que es «I-ISLAND», ¿no?
Hatsulin pestañea un poco de manera desconcertada ante aquella pregunta tan repentina aunque no fuera de lugar, pero era curiosa al mismo tiempo. Mueve sus ojos en su esclerótica hacia arriba pensando en sus palabras hasta asentir vagamente al recordar que era casi al instante, no era algo que desconociera así que con sólo mencionarlo ya sabía de que se trataba. Luego lo miró y le sonrió con seguridad y a su vez curiosidad de que le preguntase eso.
—Si, lo conozco. Creo que todos lo conocen. —rie un poco mirando el poco granizado ahora hecho agua en aquel cono desechable, se veía un poco interesada en el tema, aparte de que le causaba aún más curiosidad que le preguntara al respecto tan de la nada—. ¿Por qué lo preguntas?
Katsuki se quedó en total silencio mientras uno de sus dedos golpeteó su brazo de arriba a abajo ya que seguía de brazos cruzados, parecía algo pensativo y hasta cierto punto inquieto y dudoso. Volvió a hacer un leve puchero mientras su ceño se frunció con cierto enojo, aunque parecía más bien conflictivo. Hatsulin ladeó un poco su cabeza hacia un costado ante aquel lenguaje corporal; se sentía entre indeciso e inquieto. Era capaz de sentir y percibir como se sentía de cierta forma, aunque no era demasiado diferente a como estaba expresando ligeramente con su lenguaje corporal.
—¿Que harás el fin de semana?
—Uhm... ¿el fin de semana? —repite sorprendida y curiosa la pelirroja. Rascó un poco su mejilla izquierda casi rozando su cicatriz viendo hacia la nada, aunque terminó observando hacia enfrente en dónde veía como sus amigos seguían haciendo fila. Suspiró un poco mientras sonreía algo forzada y casi cohibida—, bueno... en realidad si tengo algo que hacer en medio de esos días. —responde mientras una pequeña sonrisa aparecía en sus labios a comparación de Katsuki, quien hizo una mueca desviando la mirada hacia un costado, casi con molestia—. Iré a I-ISLAND, Bakugō-kun.
—¿Hah? —cuestiona el aludido mientras la volteaba a mirar con cierta confusión ante su respuesta; Hatsulin volvió a sonreír mientras asentía ante aquel gesto confundido del chico que era una clara señal de que le sorprendía, agregando de que él mismo había mencionado el tema desde un principio.
—Yes...—contesta riendo ligeramente al ver la expresión confundida del más alto, ella mira hacia un costado en donde estaba un tacho de basura para poder lanzar el cono de granizado casi vacío allí mientras pasaba sus manos por su blusa como si quisiera limpiarse la humedad de sus manos, aunque estas casi al instante se secaron cuando por el calor corporal de su cuerpo se evaporó la humedad que había—. Tengo que ir en nombre de mi abuela, representarla, ya que tiene un evento de suma importancia en su trabajo justo en esos días y así... —explica brevemente dejando salir un leve suspiro al recordar a la matriarca de la familia; a pesar de que estaba comenzando a tener un poco de autoridad en si misma en contra de su abuela, aún así no podía negarle ese tipo de cosas. No era malo despues de todo. Se quedó en silencio cuando recordó el encuentro con aquel chico en el centro comercial e hizo un leve mohín, pero después suspiró y luego giró su rostro hacia él—. ¿Por qué preguntas precisamente sobre I-ISLAND y que haré el fin de semana?
—Olvídalo. —bramó un poco irritado el cenizo mientras metía las manos en sus bolsillos en un movimiento algo brusco pero certero. Había apretado su mandibula con enojo mientras desviaba la mirada hacia un costado; el hecho de que él quisiera ahora dejar de lado la conversación (a pesar de haber sido quien la inicio), le causaba más intriga y curiosidad.
—¿Irás a I-ISLAND tambien? —cuestiona la pelirroja al atar pequeños cabos sueltos por su pregunta.
—¡No te importa! ¡Ya te dije que lo olvidaras!
—¿Entonces irás a I-ISLAND? ¡Que bueno! —responde mostrándose finalmente, despues de todo el rato en la que estaba presente con sus amigos y con él, emocionada y entusiasmada. El hecho de saber que alguien conocido (aparte de Shoto, quien le había comentado que tambien asistiría) la emocionaba, así no estaría tan aburrida—. ¡Es genial! así no me sentiré tan aburrida, ¡es agradable tener a algún amigo cerca!
—¡Ya deja de decir eso! ¡Ya olvídalo, maldición! —y con un tono molesto comenzó a encaminarse hacia donde estaban sus amigos que ya los llamaban para subirse, ya que eran los ultimos en la fila y no había nadie detrás.
—Espera, me estabas preguntando sobre I-ISLAND y si estaba desocupada; ¿querías que fuera contigo?
—¡Ya quisieras, pirómana! ¡Por supuesto que no!
—¿Si era eso? —y de repente la calló cuando le puso la palma en toda la cara cuando se regresó, casi la cubría por completo aunque si le cubrió los ojos y la boca; fue como un leve golpecito que la dejó desconcertada y cerrando sus ojos con fuerza por la presion que sintió y como parecía alejarla de él ligeramente.
—¡Ugh, estabas mejor callada! ¡Toma esto y cállate de una vez! —chilló de manera aspera y molesta quitando con brusquedad su mano de su cara para darle algo pequeño en sus manos cuando ella las extendió levemente en señal de desconcierto y de querer sobarse la nariz. Aunque cuando sintió algo en sus manos su atención fue hacia allí abriendo uno de sus ojos mientras que Katsuki se giraba e iba a zancadas en donde sus amigos se estaban preparando en los carritos chocones.
Hatsulin poco despues abrió sus dos ojos, pestañeando confundida. Sentía un leve dolor en su nariz ante el tan repentino accionar del chico de ojos rojizos, aunque era un dolor soportable que se iba desvaneciendo con los segundos; a una vista externa su nariz estaba algo roja mientras se la sobaba, luego resopló un poco aunque luego sonrió. De alguna forma se sentía comoda, es como si le hubiera subido el ánimo de cierta manera ya que se sentía menos distraída de lo que se había sentido antes, cuando habían recien llegado. Mientras se sobaba la nariz con una de sus manos, agachó la mirada nuevamente hacia su mano en donde había un peso casi minimo pero a su vez una superficie ligeramente dura.
Alzó levemente las cejas cuando observó el mismo llavero de All Might que había visto en el puesto de Tiro al Blanco, pestañeó nuevamente, olvidándose por completo del leve dolor que aún sentía en su nariz al fijarse en eso. Pestañeó varias veces mientras acunaba con sus dos delicadas aunque ásperas manos aquel llavero, observando los detalles; ¿Bakugō de donde se supone que tomó ese llavero? ¿lo tomó sin que nadie se diera de cuenta del puesto? Hizo un leve mohín; por supuesto que no. Lo más seguro es que lo compró en algun otro puesto o quizás cuando estaba super metida en sus pensamientos, lo ganó... Agitó levemente su cabeza para dejar de darle tantas vueltas al asunto; la verdadera pregunta es... ¿por qué se lo dio? ¿de verdad era para que se "callara"?
Alzó sus ojos hacia enfrente mientras caminaba con lentitud justo en la entrada del juego de los carritos chocones, buscó levemente con la mirada al cenizo que estaba parado a un lado de Kaminari que no quería decidirse de cual carrito tomar, hasta ser arreado y apresurado por las quejas del cenizo. Hatsulin lo observó unos momentos más y volvió a agachar la mirada hacia el llavero tomándolo por la cadena y viendo como se balanceaba al quedar en el aire, colgando. Sonrió levemente observando el llavero de All Might, le parecía un acto muy desprevenido venir de él pero a su vez le gustaba; era como si quisiera despejarla o, quizás, hacerla sentir mejor.
—¡Hatsu-chan! ¡Apresúrate, ya van a encender el magnetismo este raro de los carros! ¡Juguemos todos! ¡Incluso el gruñón de Bakugō quiere jugar! —escuchó el animado llamado de Mina quien estaba en un excentrico carrito de color fucsia que parecía haber llamado su atención, a un lado en el asiento del conductor estaba el peluche de Totoro abrochado en un cinturón.
—¿¡A quien llamas gruñon, alien!? ¡Te voy a aplastar! —respondió con indignación y aquel caracter tan característico el nombrado por Ashido, ahora subiéndose a otro carrito irritado y casi entusiasmado por "aplastarla" y callarla de una vez.
Hatsulin rio un poco por la escena viendo nuevamente unos segundos el llavero casi con aprecio por ese acto aparentemente amistoso de su amigo gruñón, del pequeño grupo de amigos de ellos era el primero en regarle algo así. Aunque pareciera grosero y temperamental, tomando en consideración de que se dio de cuenta como se encontraba ella, era como si se preocupara y quisiera animarla, a su modo bastante camuflado aunque algo evidente, así lo veía ella. Y definitivamente se sentía mejor.
—¡Ahí voy! ¡No tendré piedad con ninguno! —exclamó optando nuevamente aquella actitud animada y enérgica, hasta desafiante en aquel amigable juego de feria. Mientras se encaminaba hacia la sección en donde estaban amontonados distintos carritos chocones, guardo en el bolsillo de su pantalón el llavero, procurando que no hubiera oportunidad en la que se cayera.
Se iba a divertir como es debido, fijándose en el ahora.
Guiños de que se vendrá un cap especial sobre la película de Two Heroes/winks
Pronto se vendrá en forma de OVA/capítulo especial ya que no podría dejar de lado tremendas películas, las amo. Además, es una excusa para vermelas🙊
El OVA de Two Heroes ya está en desarrollo aunque no lo traeré inmediatamente, se vendrán primero ya los caps del anime y pronto dicho OVA.
Además, muy posiblemente sea un Cap largo, conociéndome. Así que la espera valdrá la pena😽
Volviendo a lo actual; ¡Con este capítulo se cierra oficialmente los sucesos de la segunda temporada!
Estaba demasiado ansiosa e impaciente por terminarla, ya que, en lo personal, la tercera temporada con sus arcos son uno de los que más amo, así que me emociona muchísimo escribir al fin.
Pero ojo, aquí se viene de todo así que prepárense 😼.
Estos caps fueron como "la calma antes de la tormenta", aunque Hatsu estaba primero en una tormenta.
Pero recuerden; aparte de que no está centrado en el romance o algo así, no deben confiarse en este libro de momentos bonitos 🙊
→S H A N X L A B Y X←
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