—— RETALIATION ——

Willa y Derek entraron en el interior de una de las naves, sintiendo la gran cantidad de veneno, haciendo que ambos se tambalearan, para que instantes después Victoria atacará a Derek, clavándole un cuchillo y él respondiera mordiendola, obligándola a escapar. Entre los dos Hale, sacaron a los McCall, observando que el estado de ambos podía ser, posiblemente, crítico.

—Estas sangrando.— Puntualizó Willa mientras subían en el Jeep a los dos McCall.

—No es nada, Will.— Le tranquilizó Derek, omitiendo lo que la había hecho a Victoria, ya que aquello había sido la firma de muerte de toda su manada.

La Beta se quedó en silencio, justamente cuando Stiles salía de la zona industrial para dirigirse hacia la veterinaria, a la que por suerte no tardaron en llegar. Una vez en ella, Derek y Willa metieron a los mellizos, pensando, únicamente, que el herido en gravedad por el acónito era Scott y no Serena, como era realmente.

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Edward observó como su padre curaba la herida de Victoria, haciendo que el joven cazador comprendiera lo que iba a suceder en cuanto llegará la luna llena, haciendo que una parte de él se estremeciera al saber que sería huérfano. ¿Por qué él debía de perder a su madre?

—Hay que hacer que pague.— Le recordó Gerard a su nieto, el cual mantenía una expresión de seriedad.

—¿Cómo? Ninguno sabemos dónde Derek y Willa se esconden. ¿Crees que él se mostrará por sus Betas? Puede hacer más. Debe de existir alguien, aparte de Willa, que le importe tanto como para hacerlo salir de su escondite.— Comentó Chris con frustración haciendo que Edward recordara de que existía una persona mucho más importante para Derek que su hermana.

—Tu sabes quién es, ¿verdad, Ed?— El aludido alzó la cabeza y miró a su madre.

—Sí.— Admitió el adolescente con pesadez.

—Dinos, ¿quién es el afortunado?— Quiso saber Gerard mientras su expresión se iluminaba a causa de la maldad.

—Serena McCall, la mestiza.— Respondió haciendo que la expresión de todos se sorprendiera.

—Dudo que siga con vida.— Respondió Chris sabiendo lo que su mujer había hecho.

—Esperemos que nuestra pequeña lagartija sea más fuerte de lo que nos ha hecho creer a todos. Sería una lastima perder una baza tan buena como está.— Admitió Gerard haciendo que su nieto frunciera el ceño al no comprender de las intenciones de su abuelo, ya que, aunque a veces Edward se hacía el tonto, no lo era. Él sabía que Allison y Scott salían juntos, y al igual que sabía eso sabía que su madre había intentado matar a Scott y a Serena, y lo mismo sucedía con Gerard, el adolescente sabía que él veterano cazador ocultaba algo, la pregunta era ¿el qué?

—Cometemos el mismo error.— Dijo Edward haciendo que todos le mirasen. —Creéis que atacando a la criatura más poderosa o la segunda, ganamos ventaja sobre ellos, pero siempre que Serena se ha visto en peligro o a estado al borde de la muerte, ha conseguido salir ilesa y hacerse más fuerte. Si queréis que alguien como ella deje de ser el problema, no hay que matarla, sino buscar aquello que más anhela. Y no es ser humana, sino tener respuestas. Dándola respuestas, no solo la alejará de todos sino que sacareis a todos de su madriguera. Serena es como el perro guardián de Derek, quitándole lo que él quiere y necesita para mantenerse seguro, comenzará a cometer errores. ¿Por qué entonces creéis que se esconde? Claramente, por qué no quiere que nadie sepa dos cosas, la primera que sale con la mestiza; y la segunda que es su "alma gemela", sino ¿por qué se preocuparía por ella?— Gerard y Chris miraron sorprendidos al adolescente, sabiendo que él tenía razón. Por supuesto los objetivos de ambos cazadores eran diferentes, pero aunque Edward debía de comportarse de una forma ética, una parte de él se negaba a hacerlo, ya que le frustraba y enfurecía que Derek tuviera lo que una vez fue de él.

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Mientras sus padres seguían debatiendo lo que sucedería en los próximos días, Edward entró en la habitación de su hermana, encontrando a Allison sentada sobre su cama.

—¿Ocurre algo?— Preguntó la joven cazadora confundida.

—Necesito que me hagas un favor.— La pidió haciendo que Allison frunciera el ceño. —Se de tu relación con Scott, y no diré nada a cambio que me cuentes algo que te haya dicho Scott de Serena, algo que sea muy importante. Si lo haces ni mamá ni papá sabrán que sigues con el pulgoso de McCall, sino me ayudas despídete de tu Romeo.— Dijo el chico haciendo que su hermana le mirase con odio mientras suspiraba cediendo.

—Scott me dijo que Serena es adoptaba, ella no lo sabe aún. Esta esperando a que sus padres se lo digan, pero Scott teme que cuando lo sepa todo cambie. Conoce a Serena y sabe que cuando lo sepa, descubrir la verdad será lo más importante para ella. Ignorara todo.— Explicó haciendo que una expresión de maldad se dibujara en el rostro del cazador, porque ya tenían la información que necesitaban para quitarle a Derek a su perro guardián, y no solo a él, sino a todos.

—¿Tienes la información?— Preguntó Gerard mirando la expresión de su nieto.

—Sí. Y te aseguro que el Kanima dejará de ser un problema para ellos. Sin el perro guardián o con este enfadado con aquellos que la han mentido y engañado, será mucho más fácil que ellos cometan errores.— Explicó haciendo que su abuelo le mirase confundido al no comprender que estaba pensando su nieto, pero sí sabía que sus planes estaban transcurriendo tal y como quería.

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Derek y Willa observaron como Deaton curaba a Scott, el cual estaba inconsciente sobre una camilla, mientras que Serena estaba en el despacho del veterinario, dormida sobre la silla de él.

—Gracias.— Murmuró Derek observando como Deaton curaba a Scott, minutos antes de que escuchará como un cristal se rompía, haciendo que los hermanos y el veterinario se acercarán al despecho observando la ventana rota y una gran cantidad de sangre y escamas en el suelo.

—¿La atacaron?— Preguntó Deaton mirando a los dos Hale.

—No lo sabemos.— Comentó Willa mientras Scott se movía incómodo para después despertar.

—¿Scott, Victoria la inyectó algo a Serena?— Preguntó el veterinario con curiosidad.

—Una mezcla de varios venenos, ¿por qué?— Preguntó Scott confundido.

—Necesitamos el collar y un milagro.— Respondió Willa haciendo que el Beta comprendiera lo que la mujer lobo quería decir.

—¿Y como lo hacemos? Serena, literalmente, es más fuerte que cualquiera de nosotros. Si está sin control... No dudará en matar, sea quien sea.— Puntualizó Scott preocupado, no solo por su hermana, sino por lo que ella pudiera hacer y las consecuencias que sus actos pudieran traer consigo.

—Willa y tu os encargareis del collar, sigues afectado por el acónito. Yo intentaré encontrarla y retenerla hasta que aparezcais. Estoy seguro de que entre los tres será más fácil de detener.— Afirmó Derek creyendo que aquella vez sería igual se fácil que las anteriores veces.

Mientras los tres se organizaban, Serena corría por el bosque a una velocidad superior que a la de cualquier hombre lobo, su agilidad había crecido, sus sentidos se habían desarrollado aun más y su apetito había llegado a su límite, haciendo que la mestiza estuviera sometida bajo su propio influjo, y la demostración estaba en la media docena de cazadores que había encontrado en una especie de casa base, los cuales se habían vuelto su aperitivo, porque Serena tenía una cosa clara, ella acababa de empezar.

Antes de que la sobrenatural terminará por matar a su décima tercer víctima, Derek la alejó del cuerpo llevándose, por parte de Serena un siseo, haciendo que el hombre lobo abriera los ojos sorprendido al observar su transformación, ya que no era igual que las otras veces. Aunque era cierto que había visto a Serena transformada, jamás con los dientes y las uñas tan alargadas, menos aún con las escamas de un azul tan pálido como aquella noche, y mejor ni mencionar su mirada, en la cual no había ningún signo de humanidad o de razón. Pero si de cosas que daban miedo hablábamos, aquello se lo llevaba la sangre que escurría por su ropa, su cara y sus manos, haciendo que la expresión de furia, hambre y maldad adquiriera sus calificativos más terroríficos, haciendo que el Alfa fuera consciente de que aquella vez, si conseguían detenerla, sería un milagro.

—Vamos.— Dijo Willa poniéndose al lado de su hermano, haciendo que este la mirase confundido al no ver a Scott, pero sin pensar mucho en ello, los dos Hale intentaron detener a la mestiza. Hecho que, claramente, no salió bien. Ya que Serena esquivaba sus ataques, no solo con facilidad y velocidad, sino también con una gran agilidad, haciendo que los dos hombres lobo comenzarán a enfadarse, pero por el mero hecho de que ella se estaba burlando de ellos. Justamente cuando la morena se disponía a atacarlos, usando su conexión con las serpientes, Scott apareció detrás de ella y la inyectó Katamina, aunque aquello no la detendría, sí la tranquilizaría el tiempo suficiente como para llevarla a la clínica de Deaton y poder descubrir una forma de cómo hacer que regresara a la normalidad o, por lo menos, para evitar que dejara de hacer matanzas.

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—¡Sujetarla!— Les ordenó Deaton a los tres hombres lobo, lo cuales usaban todas sus fuerzas para detener a Serena, la cuál estaba comenzando a recuperar toda su fuerza.

—Eso intentamos.— Alegó Willa, pero aquello parecía ser una misión imposible, ya que, incluso Serena superaba la fuerza de Derek.

—Pues conseguirlo o no podré sedarla.— Insistió el veterinario al mismo tiempo que Serena comenzaba a hablar en otra lengua, haciendo que los cuatro se mirasen al no comprender que estaba pasando con ella, pero aquel momento fue el necesario para que Deaton consiguiera suministrarla un calmante más fuerte, haciendo que la adolescente cayera como un peso muerto sobre su hermano, haciendo que Scott respirase aliviado al ver que su hermana estaba bien, o por lo menos de forma relativa.

—¿Qué es lo que la ha pasado para que actúe así?— Preguntó Scott esperando que alguien pudiera responderle.

—No lo se, pero he visto como las serpientes actúan bajo su control, y actuaban igual.— Explicó Deaton mientras Scott dejaba a Serena apoyada sobre el suelo.

—Y si...— Los tres hombres miraron a Willa confundidos. —Desde que ha empezado el tema del Kanima, Serena siempre ha tenido descontroles y se ha sentido atraída a ciertos puntos del bosque, sobretodo aquellos donde había agua. El amo no puede ser por el detalle de que no sabe nadar y el Kanima menos. Pero y si quien la hace sentir esa sensación es alguien parecido a ella, pero más poderoso.— Comentó Willa haciendo que tanto Scott como Derek entendieran lo que quería decir.

—Su padre.— Afirmó Scott haciendo que los Hale le mirasen confundidos. —La madre de Serena murió de sobredosis, y de ser una criatura sobrenatural dudo que eso hubiera sido posible. Así que tal vez quién la está... llamando es su padre. Como nosotros cuando aullamos, tal vez necesita de una manada o de ayuda.— Explicó Scott haciendo que Deaton supiera que Serena no sabía de ello.

—Intuyo que Serena desconoce de esa información. Ocultarsela puede agravar la situación, de la misma forma que Jackson es un peligro cuando está bajo el control del amo, lo es Serena. La cual puede hacer una matanza. Lo que está noche hemos visto, es la presentación de su furia y su fuerza, y estoy seguro de que vosotros habéis sido conscientes de lo que puede hacer con las serpientes. Imaginaros a una Serena enfadada, descontrolada y controlando no solo a lagartos y serpientes, sino a un Kanima.— Comentó Deaton haciendo que los tres sobrenaturales se mirasen con cierto horror ante lo que podía pasar, pues ninguno quería ser consciente de los daños que la mestiza podía llegar a provocar.

★★★

En un principio no iba a actualizar hoy, pero teniendo en cuenta lo que sucede, creo que el capítulo de hoy pega mucho con lo que sucede. Además, de que estoy deseando llegar a cierto capítulo. YA QUEDA MENOS.

El caso, es un capítulo muy importante. Primero, por la escena de los Argent, evidentemente Edward no busca que hagan daño a Serena, por eso lo dice; sino que busca alejarla de Derek por los problemas que este va a terminar teniendo. Por eso desvela su unión y todo.

Ahora bien, con respecto a Serena, adoro escribir escenas de ella fuera de control (y habrá algunas en cursed blood que madre mía, en mi cuenta de Tumbler podéis encontrar uno de los gifs que aparecerán y que están relacionado con esto)

El caso, el tema de que Serena sea adoptada es algo que en poco tiempo se sabrá, y por ello debéis de tener paciencia, pero también significará que queda menos para una de mis escenas Derena favoritas.

En el capítulo anterior me preguntó una lectura que venenos afectan a Serena, como a todos los sobrenaturales el cerval y también el acónito, no hay que olvidar que ella es una mujer serpiente. Pero sí es cierto que hay algún que otro veneno o elemento que la afecta, pero todo ello lo iréis viendo en Cursed Blood, pero recordar que Serena al ser medio humana es más vulnerable que los de su especie.

¿Qué os ha parecido el capítulo?

Os leo ❤