𝟔. 𝑭𝒖𝒆𝒓𝒕𝒆, 𝒑𝒐𝒓 𝒆𝒍𝒍𝒂
Esa lluviosa tarde de otoño, Sunghoon y los 00 liners - como ellos habían decidieron apodarse se encontraban bebiendo café en la casa de JeNo mientras esperaban a TaeYong, YoonOh y a Hee, que finalmnente habían podido visitar el otro lado de Seúl después haber retrasado ya algunas veces su visita, junto a Jake y a Ni-Ki, que se habían ofrecido a ir a recogerlos a la parada.
El mayor de los cuatro se encontraba
muy enfrascado en su estudio, dado
que tenía tutorías particulares al día
siguiente temprano y que tomaba notas cuidadosamente, puesto que ya se encontraba en el periodo de exámenes del primer semestre antes de las vacaciones y que afectaba más que nada a los de tercer año.
Por su parte, el señor Lee se encontraba sentado en la sala viendo televisión, mientras que su esposa charlaba sobre cocina tranquilamente con JaeMin.
— Sunghoon-hyung — llamó la atención uno de sus dongsaengs, haciendo que levantara la vista de su libro — tengo una duda.
— ¿Cuál?
— Usted... ¿ha salido con una chica?
— ¿A que se debe esa pregunta? — sonrió el mayor, colocando un separador de gudetama en el libro para después cerrarlo.
— He visto qué hay algunas chicas a las que les gusta, pero siempre las rechaza. Así que me pregunto por qué.
— Bueno... Si, ya he tenido parejas — confirmó — Más o menos he salido con unas seis o siete personas.
— Omo, hyung... — exclamó JeNo, causando una risa por parte del mayor — ¿Y ahora tiene novia?
— Mmm... No. No estoy saliendo con ninguna chica. De hecho, no salgo con ninguna desde hace un año.
— ¿Por qué? — cuestionó Félix.
— Realmente me he encontrado muy ocupado con la preparación para aplicar los examenes finales, para entrar a una de las SKY y con mis tutorías de fin de semana.
— Ah, hyung, yo sé que lo harás bien — le restó importancia el menor.
— Si, supongo que lo haré bien, pero muchas personas más también lo harán.
En ese momento, se oyó el ruido de la
puerta al ser abierta y unos mojados
muchachos entraron a la casa. Al parecer las primeras lluvias del mes los habían tomado sorpresivamente. La señora Lee se acercó rápidamente y les tendió algunas toallas para que se secasen mientras que, al contrario, su esposo parecía bastante divertido con la situación.
— Esperen, déjenme buscarles ropa seca les dijo, y después, dirigiéndose a los tres menores, dijo: Ustedes tres, acompáñame a buscarla.
Los chicos obedecieron inmediatamente. Sunghoon se levantó y se acercó a Jake mientras se burlaba de el, pero procediendo a ayudarlo a secar su cabello.
— ¡Hyungs! — les mandó un abrazo a distancia a los tres y de paso a Ni-Ki, que estaba abrazado con Heeseung — Los extrañé.
— Muy chistosito, Park — lo miró mal TaeYong mientras Heeseung se debatía entre reír o llorar — ¿Realmente tenían que tocarnos estas épocas?
— Ay, este mocoso — el señor Lee le pegó con un periódico a su hijo — ¿Que te he dicho de ser tan melodramático?
— ¡Yah, papá! Deberías estar feliz porque tu hijo primogénito vino a verte!
Entonces el señor Lee le respondió algo y siguieron debatiendo. En eso, Sunghoon le dijo en voz baja a Jake:
— Tengo una camisa y unos pants en mi mochila, ¿quieres que te los preste?
— Si quieres — contestó tímidamente el otro.
— Muy bien, vamos al baño. Ahí te los doy.
Se dirigieron juntos hacia el segundo piso y una vez junto a la puerta del baño, Sunghoon abrió su mochila, procediendo a entregar las prendas al menor. Compartieron miradas. Jake miro hacia los lados.
Después de que todos estuvieran secos, pasaron algunas horas comiendo pizza sin preocupación y viendo un programa musical en la televisión. Los señores Lee entonces se fueron a dormir a las diez.
— JaeMin, JeNo, Félix, a dormir — dijo la mujer.
— ¡Noooo! — hicieron pucheros.
— A dormir pequeños polluelos — entonces. ChaeWon se dirigió a Ni-Ki — y tu, Ri-ki, no te pases de las doce.
Los menores la siguieron con los hombros caídos. Su esposo, MinSung, se dirigió a ellos.
— Buenas noches niños.
El programa musical estaba a punto de terminar y los muchachos se encontraban expectantes al ganador. Los números estaban subiendo y bajando y entonces, el ganador se vio.
— ¡NOOOOO! — gritaron dramáticamente Jake y TaeYong, que ya no estaban mucho en sus cabales, al ver el resultado.
TaeYong se tiró al suelo y fingió quedarse inconsciente, mientras que Jake simulaba tener una herida en el pecho.
Inesperadamente, EXO no había conseguido el primer lugar con Lucky One esa semana.
— ¡Demandaré esta empresa! — exclamó el australiano.
— Australiano tenías que ser — resopló Sunghoon.
— ¡Ethan Lee! ¡Mira esto! — casi gritó TaeYong.
Graciosamente, Heeseung se encontraba apretadamente dormido junto a Ri-ki en el sillon.
Un pequeño tiempo después, tras TaeYong y Jake recuperarse de semejante golpe en el orgullo fanboy, procedieron a dar por terminada la "pijamada" y los restantes se fueron a acomodar. A excepción de Sunghoon, que tuvo que irse tras recibir una llamada de DongYoung, donde le decía que debía volver a casa a ver a su hermana, que se había quedado sola.
Sunghoon llegó a su casa aproximadamente a la una de la mañana, encontrando el primer piso totalmente oscuro, a diferencia de otros días. Pensó que quizá su hermana se había olvidado dejar las luces encendidas, por lo que fue a la sala a revisar, sorprendiéndose al encontrarla a ahí.
HyoYeon no solía ver la TV a menos que realmente estuviera aburrida, y cuando lo hacía, normalmente hacia otras cosas al mismo tiempo. Nunca se sentaba a comer helado a oscuras. Sunghoon se quedó bastante pasmado en el umbral y observó detenidamente a la rubia.
Algo estaba mal.
Su cabello no estaba peinado como de
costumbre, no traía puesto traje ni maquillaje y sus ojos se veían algo hinchados y había dejado que Gaeul se subiera al sillón.
— ¿Noona? — la llamó, sintiéndose de pronto como un niño pequeño. Gaeul bajó de el sillón y brincó automáticamente a sus piernas.
Cuando está notó por fin su presencia, limpió rápidamente sus mejillas y fingió un sonrisa, pero no se veía creíble.
— ¿Q-Qué pasa?
Su voz salió entrecortada, tartamuda y vacilante. Se sentó junto a ella y tomó su mano.
— HyoYeon-noona, ¿estás bien?
— No estoy segura, Sunggie.
De pronto, su hermana comenzó a soltar grandes lágrimas de los ojos y espasmos sacudieron su pecho. El menor ahora la abrazó por los hombros y la acunó en su pecho. Verla así lo hacia querer llorar y preguntarse por que alguien quería
lastimarla. Ella se merecía todo el mundo.
Pero ahora, era su turno de ser fuerte por ella y ayudarla, cómo esta lo había sido una noche fría de invierno tras enterarse de que sus padres habían dejado este mundo.
Vengo a colapsar con ustedes porque Ahhhhhhh mis papis actualizaron juntos, Jakehoon los amo😭😭💌
Keyhoon_
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