Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

PRECIOS POR PAGAR.

CONTINUAMOS.

Había acabado con todos, creo, mi cuerpo estaba como que ardiendo, mis manos me dolían tanto, era como si me hubiese quemado las manos, abrí mis ojos sin imaginar que despertaría dentro de una habitación oscura, estaba recostado sobre una cama, era lo que faltaba, me habian tomado ya como un prisionero.

Me levanté de la cama con todas las fuerzas que me quedaran, mierda, me había pasado con ese fuerte golpe contra los soldados que intentaron lastimarnos, me dirige hacia la puerta la cual estaba media abierta, quien demonios encierra a una persona y no deja la puerta cerrada, solo que esto no sea un secuestro, más bien un rescate.

Mi olfato me había herizado la piel, vaya, quien diría que podía detectar olores, incluso de los exteriores, mi mano parecía haber sido atentida, tenía un suero en mi muñeca, estaba conectado a un aparato colocado al lado de la cama, bueno, mejor no me quedaba aquí, lo más seguro era que estaban nuevamente experimentando conmigo, aunque siendo sincero, esto no parecía como un sitio de pruebas.

Miré a mis alrededores y estaba dentro de una habitación común, libros, muebles, fotos de saber quién diablos, una computadora y con la ventana abierta con la vista hacia las afuera, ¿Por cuánto tiempo me quedé dormido...? Estaba en la ciudad.

No puede ser que me haya dormido por mucho tiempo, mierda, mis amigos deben de estar afuera buscándome, impaciente me acerque a la vente listo para salir del lugar, no sin antes quitarme el suero y arrinconar la máquina contra la puerta, no me daba nada de confianza.

- Mierda... - maldije intentando salir por la ventana, antes de salir la puerta fue tocada con ligeros golpes -

Me dí la vuelta en cuanto la puerta empezó a ser azotada, joder, creo que iba a tener que pelear otra vez.

- ¡Sea quien sea, se va morir si no me dejas en paz maldita basura...! - arrojé la máquina fuera de la puerta - ¡Ven aquí maldi-... ¡¿Martha...?!.

Esto ya no tenía nada de sentido, ante mis ojos tenía a la chica que anteriormente me había ayudado, Martha con una ligera sonrisa me abrazó mientras agradecía sin parar, rápidamente me aparte de ella sorprendió pero por otro lado feliz por volver a verla nuevamente.

- ¡¿Eres tu?! - dije viéndola de pies a cabeza - Mierda, ya nisiquiera me acordaba de ti.

- ¡Crei que te perdiamos! ¡¿En dónde está Douma...?! - me dijo ella desesperada sacudiéndome fuertemente - ¡¿Por qué no está contigo?!

- L-lo siento, no se dónde esta, yo les dije que se fueran mientras yo me enfrente contra... Contra tu gente - exclamé con enojó - ¡Tu maldita raza me está cansando!.

Aunque ella no tuviera nada que ver con mi problema, me sentía enojado con su raza por intentar lastimarme, ella ladeó su cabeza desconsertada, no le dije nada más, salí de la habitación sin decirle otra palabra más, tenía que salir a buscarlos antes de que los demás fueran a lastimarlos, Velvela aún no puede defenderse y me costaba confiar en que todos ellos la mantendrán fuera del peligro.

Bajé por el largo camino de escaleras, detrás mío escuchaba como Martha llamaba mi atención, pero no le presté atención y seguí bajando hasta llegar a otra parte del sitio, estaba en medio de una pequeña sala, miré a un costado topandome con otra presencia conocida.

- ¡¿Angela?! ¡¿Que rayos haces tu aquí?! - exclamé con asombro, siendo recibido con un fuerte abrazo por parte de ella - ¡Ya me hacías falta cabeza de chorlito!

- ¡Ja! Sabía que te volvería a ver ¡Mírate nada más! Sigues igual de tonto que antes - fueron sus palabras para después darme un fuerte golpe en el rostro - ¡¿En dónde está mi hermano?!.

- ¿Cuál es tu maldi-

- ¡Dije! ¡¿En dónde está mi hermano?!.

Hoy todos parecen que se pusieron de acuerdo para preguntarme a mi sobre el chico de pelaje blanco, haciéndola a un lado molesto me dirige a la salida de la casa, no debo de perder el tiempo hablando con amistades viejas... Y ahora que recuerdo, yo nisiquiera se dónde están mis amigos.

Nuevamente volví a escuchar la voz de Martha con un tono alterada, al estar pensando en como ubicar a mis amigos, ella me cerró la puerta con fuerza empujándome hacia otro lado evitando que yo saliera, me miró a los ojos mientras me hablaba y me hacía la misma pregunta, "¿Dónde está Douma?".

Quise mejor no responder a su pregunta ya que nisiquiera yo sabía en dónde estaba el y los demás, me senté en uno de los asientos de la sala con mi rostro cubierto con mis manos, estaba tan jodido ahora mismo, nisiquiera podía pensar con tantos problemas que tenía ahora, me estaban cazando sin ningúna razón o solamente me quieren muerto.

Traté de ignorar a las chicas que me hablaban está vez con calma, ambas se sentaron a mi lado, está vez me estaban entendiendo un poco, trataron de calmarme con pequeñas palabras de aliento, "todo va estar bien" es fácil decirlo cuando no te están cazando, negué con decepción, no quería palabras de aliento, apoyo, solo quiero que me ayuden a encontrar a mis amigos.

- Tranquilo, sabemos todo lo que a paso y también queremos disculparnos por nuestra insistencia, es solo que nos preocupamos mucho por ustedes - dice Martha con voz dulce, brindándome un fuerte abrazo seguido de eso, Angela también se unió al abrazo procediendo ácariciar mis manos -

- Lo siento... No quiero que nada le pase a mi hermano... Es el único familiar que conozco que me da protección... - voltea a verme - Perdón.

Suspiré con enojó pero no quería demostrarlo, solo asentí entendiendo sus preocupaciones, yo también estaría así por una persona, o amigo, Furry.

- Tranquilas, no pasa nada... -Dije como último recurso de tranquilizacion - ellos seguramente están bien... Pero.

Me levanté de dónde estaba sentada volteando a verlas a ambas confundido.

- ¿Cómo terminé yo aquí...?

- Yo puedo responderte eso... - se escuchó detrás mío una voz masculina, con tan solo escuchar el tono de su voz, mi sangre empezó arder como nunca, me di la vuelta topandome con el lobo de pelaje blanco, tamaño promedio y una puta sonrisa odiosa -

Se trataba de, Nicolás. El lobo se acercó lentamente hacia mi, procediendo a extenderme la pata, el extrañamente me habló con voz suave y como si las palabras las arrastrara con un feo tono que iba cambiando, parecía estar asustado o nervioso al verme de frente, tanto así que alzó sus patas como si quisiera detenerme.

Yo por mi parte, con un gran enojo por dentro, me acerqué a el y lo que hice, incluso a mí me dejó frío, lo había arrinconado contra la pared de la sala, con una sola mano lo había levantado desde su cuello y dejarlo colgando en la pared, el lobo grito mi nombre asustado, sus patas temblaron ante mi agarre, solo que el no hizo nada por quitarme de encima, es más, nisiquiera movió su cuerpo para forcejear, solo se quedó con las patas aferradas a mi mano.

Las chicas se alarmaron ante la escena que intentaron despegarme de el, pero yo era ya una persona con fuerza sobre natural que ninguno de las dos pudo apartarme de el, nisiquiera usando toda su fuerza, ellas no me movieron para nada.

Lo miré está vez con una mirada seria, apretándo mi otra mano como que si quisiera darle un fuerte golpe en el rostro y dejarlo tirado, apreté mis dientes del enojo que tenía, quería matarlo en ese mismo instante, dejarle en claro que su raza ya no significaba nada para mí, que yo era el que dominaba entre ambos y que nadie debía de cometer el error de meterse conmigo.

El lobo está vez ya un poco más calmado me miró o trato mejor dicho de mirarme a los ojos, para nuevamente hablarme está vez con un tono apagado, la cosa fue que lo que me iba a decir no sería tanto su única salida hacia la muerte aunque no sabía que clase de palabras me diría el lobo asfixiado.

- ¡Es-escuchame, por favor! ¡S-se que estás e-enojado, p-pero puedo e-explicartelo to-todo! - expresó con voz quebrada intentando ablandar el agarre de mi mano contra su cuello - ¡N-no f-fuimos nosotros...!

- ¡No me mientas bastardo! ¡Reconocí los trajes de su puto equipo y ahora no confío en ustedes! - lo dije entre lágrimas arrojándolo contra el sofá - ¡Ustedes quieren matarme!

- ¡N-no, espera, hay más! - Parecía que no iba a detener su explicación, el lobo suspiró forzadamente, nuevamente levanto sus patas tratando de tranquilizarme - Primero c-c-calmate...

- ¡Habla ya, antes de que termines como a las demás furros!.

Las chicas se me acercaron para hacerme retroceder ya que yo me estaba acercándo cada vez más a él, ellas me miraron como si ellas tambien quisieran que yo lo escuchara, que maldita molestia.

- Gracias chicas... - alzó la mirada a la mía con una expresión sería - mira, se que estás enojado por todo lo que te a pasado y no solo a ti, también a los demás, se que ellos escaparon por qué yo estoy comunicados con ellos.

¿Comunicados?.

- ¡¿De que rayos hablas?!.

- ¡Es Douma, Douma debió contarte que el es mi primo! ¡Estás exaltado y te entiendo, pero tienes que creerme! ¡Tus amigos están en peligro! - expreso alterado el lobo -

- ¡Claro que lo están! ¡Por tu estúpida especie, me equivoqué con ustedes, son una mierda!.

- ¡Tienes todo el derecho, el derecho de enojarte con nosotros! ¡Pero necesito que me escuches, no te queda mucho tiempo! - se acercó a mi sin el miedo que tenía antes, está vez el lobo me habló con una voz sería y enojada - ¡Si quieres salvar a tus amigos, escúchame de primero a mi, luego puedes matarme!.

- ¡Bien! - aparté a las chicas de mi lado - ¡Se claro!. - tomé asiento sobre el sofá molesto -

- ¡Gracias! - alzó su voz mientras se daba la vuelta y tomaba de un mueble un par de hojas - ¡Hice muchas investigaciones mientras los chicos te buscaban, ya sabes, Sebastián, Laura, Victor y Luis.

- Ajá - dije en seco con los brazos cruzados -.

- Necesito saber si tú, no has experimentado síntomas raros, algo como impulsos sin control.

¿Impulsos sin control? ¿De que demonios me estaba hablando?.

- ¿Impulsos? ¡No! Claro que no, n-

Ahora que lo decía, si, si había sentido impulsos, fueron impulsos de deseo, la noche cuando Velvela y yo tuvimos relaciones, no solamente ese lugar, también sería en el momento en el que me había enfrentado contra los soldados, lo miré desconsertado pero respondí con solo mover mi cabeza.

- ¡Bien, eso era lo que me preocupaba! - el se me acercó con rapidez, con sus patas me hizo señas de que me levantará, solo por acabar con la dudas de el fue que yo me levanté del sofá - date la vuelta, necesito comprobar algo.

- ¿A qué mierda quieres llegar? - me di media vuelta, topandome con las chicas que miraban desconsertadas la escena - ¿Que mierdas vas hacer?

- Bajate la ropa.

¡¿Que?! ¡¿Que le pasaba a este imbécil?! Me estaba pidiendo que me bajara los pantalones, no gracias, eh visto demasiadas películas y se que estás mierdas no terminan nada bien, es más, desde aquí empezabas con traumas.

- ¡¿Pero que putas estás diciendo?! - gritó dándome la vuelta y verlo directo a los ojos molestó - ¡¿Que mierda te pasa?!.

- ¡Solo hazme caso! No queda mucho tiempo, al menos bajate un poco los pantalones, no es necesario que te desnudes, necesito comprobar algo así que bajate la ropa, por favor confía en mí.

- ¡No!.

- ¡Solo hazlo! Prometo no hacer nada raro pero solo hazlo, tu vida corre peligro y yo soy la única esperanza de salvarte, date la vuelta y bajate los pantalones, esto es serio.

Pero que maldita petición más rara era la que estaba escuchando y más de quién me lo pedía, estaba tan avergonzado por sus palabras que nisiquiera me animé a ver a las chicas, sin verlas a la cara les dije que se dieran la vuelta, si me iba a bajar la puta ropa solo sería ante la mirada de Nicolás, mierda, sonaba tan raro hasta como pensarlo. Ellas se dieron la vuelta, ambas taparon su rostro con sus patas, aún no entendía que tenía que ver esto con su explicación sobre que mi vida corría peligro.

Me voltee rápidamente con los ojos cerrados, esperando que este idiota lograra ver lo que buscaba, desabroche la ropa que tenía puesta, obvio la de abajo, solo falta que este idiota sienta una atracción por mi y me viole, yo lo mato de primero.

Me bajé lentamente la ropa pero tampoco me la iba a quitar completamente, solo tube que bajarla hasta la mitad de mis malditos glúteos, seguía teniendo los ojos cerrados esperando que el lobo me diera el aviso que ya había acabado, pero, en ese mismo instante empecé a sentir algo entre mis glúteos, estaba sintiendo algo suave, peludo y ligero, algo que empezaba desde la punta línea.

- Oh Mierda, ya es tarde...

La voz alejada del lobo me hizo abrir los ojos rápidamente, repetí sus palabras desconsertado, seguía estando con la ropa baja por lo que al voltear a ver a Nicolás me tope con la vista de lo que me estorbaba atrás, arqueó la espalda al ver la extraña vista ante mis ojos, me había dado cuenta que no había sido algún juego sucio de Nicolás, Nicolás estaba alejado mientras tomaba un lápiz y un papel apuntando en esas hojas.

Seguí con la mirada paralizada pero a la vez con un gran sonrojo en mis mejillas, tenía una maldita cosa larga, negra y peluda proveniente de mi trasero, rápidamente compuse mi postura y al verlo nuevamente me di cuenta que no se trataba de cualquier cosa fea, era una cola, tenía una cola en mi maldito trasero.

Esto si que sería lo más extraño que mi cuerpo a experimentado, giré mi vista hacia Nicolás quien rápidamente se me acerco y me miró a los ojos diciendo que yo tratara la manera de calmarme, me tape los ojos gritando su maldito nombre, ¿Que me estaba pasando? ¿Por qué tengo una cola? ¿Desde cuándo la tengo? Jamás sentí nada que me estorbara en mi parte trasera.

- ¡NICOLÁS! ¡¿Que mierda es esto?! ¡¿Que mierda me está pasando?! - le grite con desesperación sacudiendo al lobo con preocupación - ¡¿Por qué demonios tengo una cola?!

- ¡Tranquilo! ¡No puedo explicarte si me sacudes como loco! - se apartó de mi rápidamente tomándome de la camisa y tirandome sobre el sofá - necesito que te calmes y me escuches.

- ¡¿Cómo me voy a calmar?! ¡Tengo una maldita cola! - estaba tan desesperado por saber que era lo que me pasaba, quería sacudirlo con fuerzas y que soltará todas las respuestas que sabía pero no podía por la fuerte tensión que sentía por mi cuerpo - ¡Habla rápido!

- ¡Ehhh, si! ¡Creo saber que te pasa pero necesito que me des tiempo, aún no estoy seguro a qué se deba pero si se las consecuencias que puedes sufrir! Hice muchas investigaciones, pruebas, intenté no creer lo que miraban mis ojos pero creo que era verdad.

- ¡Habla pedazo de mierda!.

- ¡Te estás convirtiendo en uno de nosotros! ¡No estoy tan seguro de los resultados pero creo saber a qué se deba! Son tus habilidades, tus habilidades por alguna extraña razón están haciendo que tu cuerpo empiece a rechazar toda la clase de tu sangre, ¿me entiendes?.

- ¡No entiendo ni una mierda!.

- ¡Entiende! ¡Mientras más abuses de tus habilidades, tanto fuerza como tú velocidad! ¡Te obligarán a tener cambios físicos! ¡Tu sangre está pansando ser a una diferente!.

- ¡No te entiendo idiota! ¡No soy un cerebro como tú!.

- ¡No lo entenderías! ¡Tu sangre que si no estoy mal! ¡Eras de una sangre diferente a la nuestra! Recibí los resultados hace un par de horas y me vine directo hasta acá rápidamente, tu sangre está combinada con la nuestra, tienes sangre caliente recorriendo en tu cuerpo y si no estoy mal, eso no va en los humanos, la sangre caliente está como por ejemplo en nosotros los lobos.

- ¡¿Estás diciendo que tengo sangre animal en mi cuerpo?! ¡¿Por qué?!.

- Esa ese es el detalle, la sustancia fue creada para crear cambios en tu cuerpo, pero algo no me cuadra y es que nosotros en ningún momento te inyectamos sangre de Velvela, perdón que te lo diga así, pero tienes la misma sangre que Velvela, ambos están conectados.

- ¡¿Que?!.

- ¡Soy de sangre caliente al igual que tú, creí que te habíamos experimentado con una sola sangre! ¡Pero tienes sangre de Velvela, eso es lo que no me explico! ¡Nosotros nunca usamos la sangre de Velvela en nuestra sustancia! ¡Fui yo la sangre de prueba, esto claramente te iba a pasar pero mis datos rebelaron que tienes sangre de Velvela!

- ¡¿Me estás jodiendo?!.

- ¡Creeme! Nosotros cuando queremos identificar la sangre usamos la muestra de sangre, tenemos mucha maquinaria que se encarga de eso, soy de sangre caliente M-38, esos datos son simplemente únicos - dice volteando a ver a las chicas, en especial a Martha -tu eres de igual forma de sangre caliente F-346.

- ¡Si eso es así!, ¡¿entonces cuales son los datos de la sangre de Velvela?! - nuevamente empecé a sacudir su cuerpo - ¡Habla!.

- ¡Si ya voy! ¡Velvela es M-001! ¡Al haber sido una loba sin evolución, eso es lo que debía de salir de su sangre, los evolucionados van de escala del 1 hasta el final! Velvela, ella no es compatible a nuestra sangre, osea, si lo es pero al mismo tiempo no, tal vez allá evolucionado pero su sangre sigue siendo la misma, la nuestra está clasificada, la de ella no.

Esto no tenía sentido, o al menos para mí, yo no sé nada de esto.

- ¡Eso quiere decir que mi sangre se clasifica como M-001!

- ¡Exacto! Estás entendiendo, tu sangre no debería ser igualada con las demás, más que solo con la mía, deberías tener la misma sangre que la mía, pero si nosotros no te inyectamos dos tipos de sangre entonces quiere decir que tienes sangre de animal sin evolución al ser un 001.

- ¿A qué quieres llegar con todo esto...? - pregunte ya más calmado pero intentaba no alarmarme -.

- Si tines sangre de animal sin evolución, eso nos deja claro que tienes sangre de ella dentro de ti, están unidos y eso te afecta menos, ya que su avance es lento, mientras no llegue a dejarte sin la tuya, está todo bien, por suerte pude extraer algo de sangre tuya cuando recién llegaste aquí, puedo remediar todo.

- ¡Esto debe tener su lado malo! ¡Por favor di que no!.

- Lo siento pero es verdad, debes de dejar que aplicar tus habilidades, la sustancia que tienes es como un diferente líquido, tienes sangre distinta a la anterior, estás evolucionando a un lobo, antes de que te inyectaramos la sustancia, yo extraje sangre tuya, la cual es nuestra salvación, pero mientras más fuerzas uses, más rápido te convertiras, esa es la única solución

- No puedo hacer eso, sin mis habilidades me quedo expuesto ante tu especie, estaré vulnerable.

- Es lo que debes hacer si no quieres terminar como un lobo, hay mucho que debo de explicarte pero necesito que me escuches, este es otro tema, un nuevo problema.

Este puto día parecía estar lleno de ellos, seguro es algo peor que convertirme a un puto lobo.

- Verás, mis contactos me han informado que hay un grupo, digamos que un clan, si sabes a qué me refiero pues bien, ese clan te está casando, la explosión en la mansión fue un atraco, se hicieron pasar por nosotros usando nuestros trajes, hace tiempo recibimos el informe de un ataque en una base, objetos robados y entre eso trajes de rango alto, y los que te atacaron fueron el mismo clan.

- ¿Me estás diciendo que hay un grupo de animales que me quieren muerto? ¡¿Pero por qué?!.

- ¡No lo sé! Aún no terminan de darme más pistas, lo único que se es que hay uno entre nosotros, en el grupo en dónde estoy.

- ¿Un impostor...?

- ¡Exactamente! Esa es la razón por la cual yo hice está investigación solo, no puedo confiar en nadie, todos son sospechosos, Luis, Laura, Victor, Sebastián y más personal del sector.

- Mierda... Parece ser que mi vida está acabando.

- Tranquilo, puedo ayudarte, buscar al impostor y sobre todo, puedo curarte, con la muestra de tu sangre puedo crear otra sustancia, sería más bien como la cura, debo de acabar con la sustancia que te proporciona tus habilidades, si no lo hago pronto te convertiras en un lobo y ya no podré hacer nada, a menos que...

Creo que esto tenía ahora más sentido, Nicolás y yo volteamos a ver hacia la salida, creímos escuchar el sonido de la manija de la puerta rechinando, al convertirme en un lobo entonces esto daba a entender por qué tenía un buen olfato y un buen oído. El volteó a verme colocándome sus patas sobre mis hombros, las chicas se apartaron de la puerta colocanse detrás mío, la situación cada vez se iba poniendo cada vez más peligrosa.









¿ESTAS LISTO?.









ঌ𝑃𝑅𝑂́𝑋𝐼𝑀𝐴𝑀𝐸𝑁𝑇𝐸 ࿐

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro