No importaba dónde estaba este lugar, o si este lugar se encontraba realmente en alguna otra dimensión.

Lo que importaba ahora era que esos peligrosos gigantes vestidos de blanco estaban buscando el Cromer que teníamos en nuestras manos y, que no podríamos volver a casa si llegáramos a perderlo.

Tenía que protegerlo, al Cromer y a los miembros al mismo tiempo, pero era una cuestión de suerte.

En ese momento, un pedazo de cristal roto bajo mi pie llamó mi atención. Yunho me entregó el Cromer y entonces comencé a provocar a los gigantes con el objeto.

ㅡ ¡Les daré el Cromer si lo quieren! ㅡ Dije en voz alta para que me escucharan y después arrojé por la ventana lo que tenía en una de mis manos. Los miembros que me miraban desde atrás, estaban realmente desconcertados.

Mientras el objeto brillante caía por los aires, los gigantes de blanco corrieron a toda velocidad tras él. En ese momento grité:

ㅡ ¡Corred! ㅡ