Steve acariciaba suavemente el brazo de su esposo mientras Tony, con su dedo, dibujaba cosas sin sentido en el pecho del Capitán.

El silencio había tomado posesión del ambiente luego de haber hecho el amor incontables veces, ambos, incluso Steve, quedaron agotados. No era un momento incomodo más bien, se sentía agradable, solo sus respiraciones tranquilas y el bombeó de sus latidos casi como uno solo hacían una sincronía perfecta de que todo estaba y estaría bien.

Steve bajo su vista hacía el rostro concentrado de Tony. Entre sus dedos tomo la barbilla del genio quien le dedico una sonrisa cansada.

—Amor—el Capitán le beso la frente.

—Mhm—murmuro el castaño llevando su vista hasta las orbes azules de Steve.

—Me gustaría tener otro hijo—soltó sonriente—. Quiero verte con ese vientre abultado, que el bebe escuche mi voz y de esas pataditas, quiero estar cuando nazca y estar ahí en cada momento que—su voz se apagó poco a poco— por idiota, me perdí con nuestro hijo.

(◦◦◦)

Loki lo miro desafiante, examinando con disgusto el agarre de las manos de ambos hombres frente a él.

Thor se había mantenido al margen de la situación justo como Fenrir. No tenía mucho que opinar al respecto, es decir, si Matt a ese punto no lo había alejado era por algo. Conocía perfectamente las habilidades de su hijo, lo conocía a él y Matt siempre seguía sus instintos.

El ahora Rey de las Mentiras no quería aceptar que ese hombre amaba a su hijo y, muy a pesar del daño que había causado en Matt, los dos eran correspondidos, no había esta vez engaño alguno en las palabras del mayor.

Suspiro derrotado aunque satisfecho de la valentía de Frank por enfrentarlo luego de su último encuentro.

Matt sentía el corazón de Loki, nervioso, abrumado, asustado de que él se le fuera de las manos.

Nadie podía engañar a Loki y mucho menos un midgardiano como Castle. Justo como su primogénito mayor, percibió en el mercenario sinceridad pura.

Dio una mueca de disgusto pero a la vez admiró la valentía de Frank para enfrentarlo y postrarse frente a él solo por Matt.

La sonrisa corta en el rostro del pelirrojo y el como sostenía fuertemente el agarre de la mano con aquel hombre hizo que cediera, que dejara a un lado por ese momento el rencor hacía el mercenario por dañar a su hijo.

Después de todo Thor tenía razón, si ellos habían encontrado otra oportunidad luego de dañarse tantas veces, tal vez Matt también lo haría.

Y, de igual manera, su primogénito parecía haber decidido. Si lo apoyaba o no, sabía que Matt estaría con él.

Le tendió la mano a Punisher mientras que este, un poco dudoso, la aceptó.

—Solo una oportunidad más señor Castle—sentenció—. Una—recalcó con firmeza.

—No voy a desperdiciarla su majestad—aseguró sin quitar su vista—. Voy a demostrarle a su hijo y a ustedes cuanto es que lo amo.

Miró a Matt quien aún sonreía, feliz.

Loki se permitió sonreír, un poco, casi como si fuera una mueca.

Thor se acercó hacía él abrazándolo por detrás mientras depositaba un tierno beso en su mejilla tratando de relajarlo.

—Confió en usted señor Castle—esta vez hablo el Rey del Trueno extendiendo su mano y apretando con fuerza el agarre.

—Gracias su majestad—le sonrió y abrazo por la cintura a Matt besando su mejilla, él se dejo consentir por el mercenario.

Loki se giro, encontrándose con un cohibido Harry ante tal escena familiar y un Fenrir abrazándolo posesivamente por los hombros y sus labios repartiendo suaves besos en el cuello del hombre.

—¡Fenrir Thorson!—utilizó su magia para separarlos ya que parecía que tenían alguna especie de iman entre ambos—. ¿Podrías explicarnos como tú, el futuro Rey de Asgard hace estas desagradables escenas?

—Bueno y-yo.

Loki estaba de brazos cruzados con su ceja alzada mirando fijamente a la pareja, Thor solo mantenía una sonrisa llena de burla, aveces su esposo era demasiado exagerado pero amaba esa preocupación y protección que le daba a sus pequeños.

—Tienes 18 Fenrir, tienes que empezar a comportarte de forma madura—trato de sonar lo más rudo posible, Harry se mantenía tímido detrás de su pareja—. Estas siendo como tu padre a tu edad, inmaduro y que, sin ofender niño—volteo hacia el castaño, suavizando un poco la mirada tratando de darle un poco de tranquilidad—, se acuesta con cualquiera que se cruza en su camino.

—¡Oye!

Thor borro esa sonrisa burlona y frunció el ceño soltando de la cintura a su esposo. Sabía que Loki había odiado esa etapa pero no sabía que lo consideraba un inmaduro.

—Perdón cariño, es la verdad—se encogió de hombros dandole una mirada inocente—. Fenrir, no puedes seguir yendo por la vida teniendo sexo con cualquiera, jugando con los sentimientos de cuanta mujer u hombre se ponga frente a ti. Me preocupas cariño—el pelinegro se acercó a su hijo y acarició su rostro.

Para Loki parecía imposible que Fenrir encontrara el amor porque, lo conocía y sabía que le gustaba la libertad de poder andar con uno y otro sin ataduras ni compromisos.

El príncipe de ojos azules cerro los ojos ante el tacto de su padre y atrajo a Harry tomándolo de la cadera.

—Lo sé padre y creo que como el tío Quill he encontrado a mi Scott—sonrió con un brillo en los ojos que Loki jamás había visto. Estaba enamorado—. Harry es mi novio, se lo he pedido hace unos días atrás, realmente me gusta y lo quiero, lo quiero mucho.

Harry sonrió con sus mejillas sonrojadas luego de haber quedado expuesto ante los Reyes pero amó que Fenrir no lo soltará y le diera, en ese momento, la seguridad que necesitaba.

Loki estaba sorprendido ante la actitud de su hijo menor, porque, él jamás habría presentado a alguien, Fenrir no se miraba como alguien que buscará una pareja para sentar cabeza.

A veces, por las noches, solía hablar con Thor de que tal vez y podían ser abuelos de un par de niños por los nueve mundos, Fenrir era demasiado impredecible en cuestiones amorosas y esta vez, su pequeño niño los había sorprendido.

Thor se mantenía igual de sorprendido que su consorte pero, veía en su hijo la felicidad brotar por sus ojos, casi como él cuando había confesado ante todos los sentimientos por Loki.

—Yo—seguía impresionado pero feliz—, pensé que jamás llegaría este momento cariño. Me... Alegra mucho que hayas encontrado el amor en él.

Thor sonrió, sus ojos picaban y quería llorar. El volverse viejo lo estaba llevando a ser muy sentimental y no tenía problema alguno con demostrar sus sentimientos tampoco.

—Esos son mis hijos—susurró.

—¡Dios Thor!—rodó Loki sus preciosos ojos verdes— ¿Estas llorando?

—No, no—negó—. Bueno si.

Loki río y lo atrajo a sus brazos atrapando sus labios en un tierno y dulce beso que todos presenciaron y Matt sintió el amor tan puro y real de sus padres.

Los hijos de los Reyes de Asgard desearon ser tan felices como sus padres.

(◦◦◦)

Tony rió nervioso acariciando la apenas creciente barba del Capitán.

—Es imposible—respondió mordiendo su labio.

Steve enarcó una ceja, confundido. No entendía las palabras de Tony.

—¿Imposible?—sonrió tranquilo acariciando las hebras castañas de su esposo— Tuviste a nuestro hijo, que es... simplemente precioso y perfecto, jamás me alcanzará la vida para agradecerte por tenerlo cariño—Tony sabía a que rumbo iba la conversación pero no dijo nada, simplemente calló sonriendo por las palabras del Capitán y robándo un corto beso en los labios del rubio—. Te conozco mejor que todos amor y se que para Tony Stark la palabra "imposible" no existe. Siempre haces y tienes lo que quieres; Peter es la prueba.

El castaño soltó una risa corta, irónica que ocultaba un poco lo que había vivido y no había hablado con nadie más que los involucrados que habían ayudado en sus cuidados y en los de Peter.

—Me encantaría realmente tener otro hijo contigo pero no puedo—Steve frunció el ceño esperando su explicación y así lo hizo—. El vientre que Bruce me implantó era solo para un embarazo y aunque todo salió perfecto, yo quise conservarlo, quería probarle que podía vivir con eso en mi cuerpo pero... Luego de tener a Peter, probablemente cuando tenía tres meses me enfermé a tal punto de morir—sus ojos se cristalizaron recordando aquel estado crítico el cual vivió, donde no podía estar cerca de su bebe y este sufría de igual manera su separación. Ese estado en el cual una vez más la vida amenazo con separarlo de su hijo—. Peter lloraba todo el tiempo reclamando por mi pero ¿como explicarle a un niño de 3 meses que su padre estaba muriendo? No podía siquiera sostenerlo, estaba débil, muy débil. Creí que dejaría a mi pobre niño solo y lo que más temía era que no me recordara Steve—sus ojos avellana estaban nublados en lágrimas al igual que los de Steve. Ahora que relataba ese suceso en su vida, era una ironía de la vida que después Thanos lo arrebatará de su hijo—. Mi cuerpo estaba rechazando el vientre y no quedo otra opción que retirarlo de mi cuerpo, permanentemente, Bruce y la Doctora Cho fueron muy estrictos en que jamas podría volver a usar uno.

—Cariño yo—Steve se quedó sin palabras, sus ojos estaban vidriosos, ¡Dios! Jamás pensó que Tony hubiera pasado por todo eso.

Se sentía un idiota por reprocharle a Tony y pedirle a la vez otro bebe cuando ni siquiera sabia lo que había pasado con él y cuan doloroso había sido todo lo que el castaño había hecho solo por darle algo que deseaba.

—Shh—puso el dedo entre los labios del Capitan—, no digas nada. Peter ni siquiera sabe de esto. Solo Bruce, la Doctora Cho y Natasha.

—Amor...

—Perdóname Steve. Perdóname por quitarte la posibilidad de ver crecer a nuestro hijo y perdóname por volverte a quitar la oportunidad de tener otro hijo—bajó su cabeza escondiendo su rostro en el pecho desnudo del Capitán.

—Tony, eres el hombre más fuerte que conozco, él más valiente—tomo el rostro del genio entre sus manos—. Has sufrido tanto. Sí, tal vez me perdí el haber visto crecer a Pet pero tuviste tus razones, yo, te dañé y también fue mi culpa pero... tú no debes disculparte por algo que yo hice y por algo que no estaba en tus manos. Has hecho mucho por nosotros cariño, incluso si eso te hace daño tratas de demostrar lo contrario. No te merecemos Tony Stark.

Steve lo estrecho fuertemente entre sus brazos y beso su coronilla repetidas veces. Tony sollozó porque realmente esa situación había dolido mucho.

No sabía exactamente cuando tiempo había pasado en el que, ambos, habían llorado pero, Steve se había quedado dormido y el apenas despertaba.

Sentía su cuerpo adolorido y sus ojos hinchados. Pudo ver por la ventana que el cielo aún estaba obscuro, el reloj marcaba las cuatro de la madrugada.

Sus ojos se posaron en el rostro del Capitán quien dormía plácidamente, su respiración pacífica y sus cabellos revueltos, parecía un ángel.

Esos últimos días sus emociones habían sido una locura.

Cerró muchos capítulos dejando ir rencores y odio que estorbaban en su vida dando paso a que se abrieran nuevas oportunidades pero un tema, la raíz de todo ese asunto seguía sin tocarla.

Y era momento de acabar con ello de una vez por todas.

Tomo su bóxer y se lo coloco, saliendo despacio de la cama para que su marido no sintiera su ausencia.

Con el celular en mano salió de la habitación para dirigirse al balcón.

—Friday, ¿mi hijo llegó a dormir?—preguntó a la I.A antes de hacer la tan esperada llamada.

—No, señor. La ubicación de Karen me manda al departamento del Señor Wilson.

Tony apretó el celular, tendría que hablar sobre los permisos con Peter más adelante, no podía estar durmiendo con Wade cuando el quisiera.

Olvidando ese tema y centrándose en el que no dejaba de darle alborotó en su cabeza, busco el numero del hombre que le ayudaría.

Ahí era de madrugada pero probablemente en Wakanda debían de estar cerca del mediodía.

Tres timbres fueron suficientes para escuchar la gruesa voz detrás de la línea.

—Hola, soy Tony. Necesito hablar con él—rascó su nuca, nervioso.

—Estaremos ahí por la noche—afirmó el hombre.

Era hora de que Tony Stark enfrentara a sus demonios y cerrará definitivamente aquel capítulo tan doloroso que significó la Guerra Civil.

Era tiempo de que Tony Stark enfrentara a Bucky Barnes.

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Perdón para las que esperaban a Morgan bb pero no la tenia contemplada para esta historia 🥺.

🚨SPAM🚨

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Xoxo,
L🥀.