Peter regreso con un mal día sobre sus hombros. Primero por la pelea con Wade, seguido Flash se había robado su proyecto de ciencias y tercero bajo el mando del hombre araña se le habían escapado un par de ladrones.

Todos lo abuchearon.

¿Por que siempre que hacías algo mal todos lo reclamaban y cuando hacías algo bien parecía a nadie importarle?

Estupida sociedad.

Se encamino hacía la habitación de su padre casi arrastrando sus pies. Tomo aquella foto que tenía junto a su progenitor y la acarició con nostalgia.

—Te extraño tanto papá—suspiró—. Ojalá... ojalá pudieras estar aquí para que me dieras un consejo. No se como ser un héroe. No se aguantar tanta presión.

Un bullicio en la planta de abajo hizo que se sobresaltara. Rápido salió de la habitación dejando el portarretratos en la cama.

Camino con despacio bajando las escaleras que daban al living. Sus ojos se toparon con una figura importante para él.

Su sentido arácnido estaba vuelto loco. Era una sensación muy extraña. De asombro, de emoción.

El Capitán América estaba ahí, después de tanto tiempo que había dejado su puesto como héroe, volvía con aquel traje tan simbólico.

Sus tíos parecían estar sorprendidos pero a la ve muy molestos. El hombre rubio tenía una cara de arrepentimiento pudo notar.

Peter sabia parcialmente lo que había pasado con los vengadores. Solo lo que los medios decían y el internet contaba pero no eran fuentes muy confiables.

Su padre cada que mencionaba al capitán evitaba el tema y sus demás tíos jamas hablaban de la situación. Suponía que seguía siendo difícil para ellos.

—Natasha... Bruce—pronunció el rubio.

—¿Que haces aquí, Steve?—atacó Natasha— ¿Como te atreves si quiera a volver?

—El General Ross me envió.

—Así que vuelves a las misiones después de tanto tiempo—intervino Bruce—. Me parece bien.

—De todas maneras no tenías porque venir aquí. No tienes ninguna conexión con este lugar. Tony no hubiera querido que regresaras y...

Peter quiso seguir escuchando pero el sonido de celular se escucho distrayendo a los presentes.

Mierda. La vista de los tres adultos fue a donde el y el solo pudo sonreír inocentemente. Maldito Wade.

—Ho...hola. Capitán—saludo como si fuera un solado—. Soy Peter, un fan suyo desde pequeño—tartamudeo bajando las escaleras torpemente.

Steve se quedo perplejo viendo al adolescente, había algo en su físico que le hacía recordar a Tony y esa actitud tan parecida a la suya, tan tímido cuando tenía su edad.

¿Sería ese hijo de Bruce y Natasha?

—Mucho gusto joven Peter—Steve y Peter estrecharon su mano con una enorme sonrisa en su rostro.

Steve sintió una conexión rápida con el menor. Una sensación que le resultaba familiar.

Quiso proteger a ese niño al instante. Detonaba pura timidez y ternura.

Natasha y Bruce se mantuvieron en silencio. El ambiente ahí, parecía fluir entre Peter y Steve, pero para ellos dos era tan pesado, ¿valdría la pena interrumpir el momento y soltar la verdad?

¿Tony hubiera querido que Steve se enterara que ambos tenían un hijo? No querían fallarle a la memoria de Tony pero tampoco querían que Peter, quien había sido como un hijo para ellos los terminara odiando más por ocultarle la verdad.

—De verdad es un honor Capitán—dijo Peter mirando con admiración al rubio.

—El honor es mío Peter.

La relación entre Padre e hijo, aunque ellos no supieran que lo eran, fluyo rápidamente, muchas de sus actitudes eran prácticamente iguales.

—¿Estará unos días por aquí? Hay mucho espacio en esta Torre y podría quedarse además que me encantaría...—comenzaba a tornarse tímido de nuevo y Steve no evito sonreír—, que pudiera entrenarme un poco.

—Bueno... si, estaré por un par de asuntos en la ciudad, pero no se si tus padres quieran.

Steve miro a Natasha y a Bruce y no pudo evitar notar lo nerviosos que se sentían, ¿que demonios escondían? Porque de Bruce podría esperarlo ese nerviosismo pero... ¿Natasha? Ella no era así.

—No... ellos no...

—Pet, cariño porque... porque no vas a arriba mientras nosotros atendemos a Steve.

El castaño no tuvo otra opción mas que asentir.

—Espero que podamos volver a vernos Capitán—sonrió Peter.

—Espero lo mismo Peter.

El castaño iba a irse pero antes de dejar la habitación corrió a abrazar a su ídolo porque esa era la razón o era que sentía los famosos ¿"lazos de sangre"?

Steve disfruto ese abrazo con un calor muy peculiar pero a la vez muy diferente. Era como los que Tony le daban pero a la vez era un cariño muy diferente y especial.

No quería que Peter se fuera de su lado.

El pequeño Stark se separo de Steve y salió de la habitación.

El capitán lo siguió con su vista con una sonrisa en su rostro hasta que desapareció por completo. Juraría que era una copia de Tony.

—Ahora si puedes irte.

Natasha casi lo empujo a la salida.

—¿Es tu hijo?—pregunto Steve aun con la duda.

—No es de tu incumbencia.

—Entendido—no reclamó más—. Sobre mi estadía... no tengo donde quedarme, el complejo esta en remodelación por lo que Fury sugirió que ustedes podrían tener un lugar para mi aquí. Son solo unos días.

Natasha rodó sus ojos molesta.—Esta bien. Bruce acompáñalo.

—Sígueme Steve.

El capitán lo siguió hasta la planta de arriba. Se sabía cada rincón de esa Torre, en cada uno, estaba tatuado el recuerdo de Tony, el recuerdo de ellos dos siendo felices.

La puerta de la habitación de Tony, lo incitaba a entrar pero no podía. No estaba listo para enfrentar todo lo que ahí habían vivido.

La puerta de su habitación estaba junto a la habitación del menor.

—¿Es tu hijo?—volvió Steve a preguntar con curiosidad.

Bruce tembló nuevamente.

—No.

—Oh, entiendo, ¿lo adoptaron?

—No, Steve. Ese niño, él es hijo de Tony.

La quijada de Steve fue casi a caer en el suelo. Por supuesto que lo era había tenido mil señales, todo él era idéntico a Stark.

¿Pero cómo? ¿Había estado con una mujer después de él?

No tenía derecho a juzgarlo sin embargo, le dolió. Dolía saber que ese pequeño niño era hijo de Tony con otra persona.

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Ayyyyyy pues ya se reencontraron aveda.

Jajajajaja. Gracias por sus coments bbs.

Voten y comenten.

Xoxo.