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~VEINTE'🍑

Dos semanas después, una semana para el celo de Harry.

Viernes.

- Mierda - maldijo Louis moviendo todo de lugar, estaba comenzando a ponerse de mal humor.

- ¿Louis?, ¿Qué haces? - preguntó Niall mirando a su hermano aventando todo de un lado a otro.

- Estoy buscando mi cuaderno de Química, no lo he encontrado por ningún maldito lado. - dijo frustrado.

Niall rió.

- Hermano. Tu cuaderno está justo aquí - dijo el rubio tomando el cuaderno que estaba sobre la mesa. 

Louis se sonrojó de vergüenza y tomó el cuaderno de las manos de su hermano.

¿Cómo era posible que no hubiera visto su cuaderno? 

- Perdón, tengo la mente en otro lado - susurró.

- Tranquilo. No hay problema. ¿Y por qué estás tan distraído? 

Louis suspiró y miró a su hermano.

- Por nada. Tengo dos exámenes y ya es tarde para llegar a la escuela.

- Dile a Harry que te lleve - dijo Niall encogiéndose de hombros.

- No - negó - Él está durmiendo, no tiene la primera clase, lo dejaré descansar.

- ¡HARRY! - gritó Niall.

- Niall, ¿Qué haces? - preguntó Louis tratando de callar a su hermano.

- ¡HARRY! - volvió a gritar.

- Dios. Cállate Niall - dijo el omega.

- ¡¿Qué carajos te pasa rubia?! - gritó Harry bajando las escaleras, el alfa solo vestía unos pantalones negros y Louis se sonrojó aún más y trató de no mirar el torso desnudo del rizado.

- Lleva a mi hermanito a la escuela. Vamos, deja de estar de flojo. ¡Y vístete! - ordenó aventándole un cojín del sofá al alfa.

Harry gruñó y le aventó el cojín de regreso al rubio.

Louis tomó su mochila y las llaves. 

- Ve a dormir alfa. No es necesario, puedo irme solo - dijo Louis caminando hacia la puerta.

Harry caminó rápido hacia el omega y lo tomó del brazo para que no se fuera.

- No. Espera. Voy a llevarte.

- No Harry, no tienes la primera clase, ¿Qué harás en la universidad a estas horas?

- Puedo esperarte fuera de tu salón - dijo encogiéndose de hombros - Espera, no tardó mucho - dijo corriendo hacia su habitación.

"¿Esperarme afuera de mi salón?", pensó divertido, "Es una tontería. No lo hará",  rió.

Louis realmente se sorprendió cuando vio bajar a Harry, estaba seguro que no había pasado ni un minuto desde que subió.

"¿Los alfas son así de rápidos?", se preguntó. 

- Listo. Vamos - dijo tomando la mano del omega y salieron de la casa.


[...]




A Louis nunca iba gustarle irse en moto, se sentía mareado, pero haría cualquier cosa por el alfa, además, de que había llegado con tiempo de sobra para que empezara su primera clase.

- ¿Te sientes bien? - preguntó Harry abrazando al omega.

- Si, solo un poco mareado, pero estoy bien - sonrió.

- Te ves adorable con ese gorrito - dijo el alfa mirando detenidamente el rostro del omega.

Louis sonrió y le dio un beso al alfa, sintió las manos de Harry apretar su cintura en el momento en el que se juntaron sus labios.

- Harry - susurró al separarse, el alfa estaba sonriendo con los ojos aún cerrados por el beso - ¿Puedo preguntarte algo? - cuestionó mirando al alfa.

- Si - asintió el alfa moviendo su rostro hacia el cuello del más bajo.

- ¿Tú me amas? - preguntó nervioso.

- ¿Qué? - preguntó aturdido Harry respirando el aroma de su omega.

- ¿Qué si tú me amas?. Siempre me dices que tu alfa me ame, pero quisiera saber si tú me amas, más allá de mi omega. 

Harry se separó de su cuello y miró a Louis, el castaño estaba nervioso, lo sentía, el omega tenía su labio inferior atrapado entre sus dientes.

El alfa tomó el rostro del omega y lo miró a los ojos.

- Por supuesto que si Louis, te amo a ti y a tu omega, los amo a ambos. Lo digo como Harry no como mi alfa - contestó antes de volver a besarlo.

Louis sonrió, se colocó de puntillas y rodeó el cuello del alfa con sus brazos y se besaron una y otra vez.

El omega soltó un gemido cuando sintió a Harry morder su labio y el alfa gruñó en respuesta. 

- Harry - gimió entre besos y colocó sus manos en el pecho el alfa, el rizado bajo sus besos a la mandíbula del castaño hasta llegar su cuello - Alfa, estamos en escuela, tienes que detenerte - susurró, aunque en realidad no quería que el alfa se detuviera, pero cualquiera podía verlos.

Harry gruñó separándose del omega.

Louis estaba sonrojado y su cuello estaba rojo al igual que su rostro, y acomodó su gorro que se había movido un poco.

- ¿Te puedo pedir algo? - preguntó Harry quitándose su chamarra de mezclilla.

- Si - asintió el castaño acomodando su flequillo.

- ¿Puedes ponerte esto? - dijo dándole la chamarra al omega.

Louis sonrió y aceptó la prenda.

- ¿Para qué? - preguntó poniéndose la chamarra, la prenda tenía el aroma de Harry, eso hacía sentir feliz a su omega y lo hacía sentirse seguro a él.

Harry se puso nervioso.

- Mi... mi alfa me pidió que lo hiciera - dijo un poco apenado rascando su nuca.

El timbre del colegio sonó, la primera clase estaba por comenzar.

- Debo irme - dijo Louis - Perdón por molestarte, no quería hacerlo, deberías de estar descansando - se disculpó.

Harry negó con la cabeza.

- No te preocupes, omega. Yo haría cualquier cosa por ti. 

- Gracias - susurró besando la mejilla del alfa.

- Tú solo di una palabra e iré a cualquier lugar a ciegas por ti. - respondió Harry sonriendo.

- Adiós, alfa - dijo dándole un pequeño beso en los labios y corrió a su salón.

Harry mentiría si dijera que no se quedó embobado por el beso del omega.

Él realmente estaba enamorado de Louis Tomlinson.






[...]






Louis odiaba la clase de psicología, le aburría en todos los sentidos, no había clase que no se arrepintiera de haber metido esa materia, el sonido del timbre al finalizar la clase siempre lo aliviaba.

- No olviden la tarea para la próxima clase - dijo la profesora limpiando el pizarrón y todos los alumnos comenzaron a salir del salón.

Louis pudo respirar aliviado una vez que estaba afuera del salón, volvía a sentirse libre y vivo, el aroma a chocolate y menta le llamó la atención, ¿Y cómo no?, si era el aroma de su alfa.

El omega buscó al alfa con la mirada y lo encontró recargado en la pared junto a su salón.

Harry si lo había esperado como dijo.

Louis corrió hacia al alfa y lo abrazó.

- ¿Qué haces aquí? - preguntó.

- Te dije que iba a esperarte - contestó Harry escondiendo de inmediato su rostro en el cuello del omega, Louis frunció el ceño, últimamente parecía que Harry solo quería pasar todo el tiempo en su cuello, lo cual era extraño y no entendía el por que lo hacia, pero no podía negarse a nada que le diera el alfa.

- Tu aroma - susurró Harry dejando un beso en su cuello - Es más fuerte, siento tu aroma más fuerte, dulce, más atrayente y adictivo. No puedo dejar de olerlo - dijo como si hubiera leído la mente del omega.

Louis sonrió y acaricio los rizados del alfa.

- Puedes hacerlo cuando quieras - dijo Louis moviendo su cabeza para darle mas acceso a su cuello.

Harry gruñó por eso.




[...]



Una semana después.

Jueves.

Era Jueves, ya casi se cumplía una semana desde que Harry se comportaba extraño, pero ese día en especial Louis sabía que algo andaba mal con el alfa. 

El rizado literalmente estaba pegado a su cuello, como si quisiera grabarse su aroma para siempre.

Louis terminaba apestando a alfa todos los días, olía tanto a Harry que incluso llegó a pensar que ya no tenía su olor natural y que a partir de ahora solo olería a chocolate y menta como Harry, pero sabía que su idea era errónea porqué el alfa se la pasaba aspirando su aroma desde su cuello.

- ¿No te duele el cuello de tanto tenerlo en esa posición? - preguntó Jade bebiendo de su malteada. 

- No - contestó Louis.

La verdad es que sí se sentía un poco incómodo, pero parecía que el alfa no pensaba moverse en mucho tiempo.

Era la hora del almuerzo y la mayoría no podía ni mirar a Louis, porque claro, todos sabían lo que estaba pasando.

Todos menos Louis.

- Dios. A mi me duele con solo verte - rió la chica y movió su mano para tocar Louis pero en ese momento Harry gruño.

- Harry - susurró Louis en forma de regaño. 

- Que no te toque - gruñó de nuevo contra su piel.

- Es una omega - dijo Louis riendo.

- No importa. No te toca. No quiero que nadie te toque - gruñó antes de volver a besar el cuello del omega y a seguir marcándolo con su olor.

"Alfas", pensó divertido rodando los ojos 

- ¡Louis, gracias a dios te encuentro! - dijo Perrie agitaba sentándose junto a Jade en la mesa, la alfa estaba roja, era obvio que había corrido.

Louis frunció el ceño.

- ¿Qué? - preguntó.

- Esa chica Jesy me esta acosando. Literalmente - susurró - Solo busca cualquier excusa para tocarme y no me gusta. Mira, yo tengo mi mano sobre la mesa como tú y ella hace esto... - dijo y tratando de alcanzar la mano del omega.

- ¡No lo toques! - gruñeron Jade y Harry al mismo tiempo.

Louis rió.

Perrie miro confundida a ambos.

- ¿Qué rayos les pasa? - preguntó riendo, aunque seguía confundida. 

Jade se sentía extraña, sentía a su omega triste y celosa, pero no sabia el porqué se sentía así y mucho menos entendía porqué tenía el sentimiento de querer golpear a Jesy; trató de ignorar a su omega pero le era imposible.

Su omega quería estar más cerca de Perrie.

Pero no lo hizo.

"No. Va ha creer que la estoy acosando igual", pensó alejando de su mente la idea de sentarse más cerca de la alfa, aunque su pecho dolia y su omega sufría, ella no se movió.






[...]







El día en la escuela había pasado extremadamente rápido para Louis, de estar en la cafetería comiendo su almuerzo paso a estar caminando hacía fuera de la escuela rumbo a su casa. 

- ¿Quieres qué me lleve tu moto? - escuchó la voz de su hermano.

- Si - contestó Harry.

Louis caminó hacia ellos y vio como Harry le entregaba las llaves de su moto a Niall, el frunció el ceño, le era muy extraño eso, el rizado amaba mucho su moto como para dejársela a su hermano.

- No me siento muy bien para manejar - dijo el alfa.

- Tranquilo. Me la llevo. Me iré con Shawn - dijo guiñando un ojo.

Harry rió nervioso.

- Claro. 

- Nos vemos Harold - se despidió el rubio. 

- ¿Le dejaras tu moto a Niall? - preguntó Louis llegando al lado del alfa.

Harry asintió. 

- Escuche que no te sientes bien. ¿Te pasa algo? - preguntó Louis preocupado.

- No, no es nada - mintió el alfa nervioso, el sabia perfectamente lo que le pasaba, pero no quería decirle a su omega que su celo estaba cerca.

- ¿Seguro?

- Si. Vamos a casa omega - respondió abrazando al mas bajo por los hombros. 

Harry rezaba por que se su celo llegara en la noche y así el podía irse algún lugar antes de que Louis despertara, porqué no sabia si podría controlar a su alfa en celo y menos con Louis cerca.




[...]

¡+18!

Viernes.

Era viernes, por fin, Louis estaba feliz, el amaba los viernes, podría decir que eran sus días favoritos, todos los viernes solía llegar del colegio y ver una película o alguna serie, así que ese día no iba a ser al excepción.

El omega decidió que quería ver una película con su alfa, así que tomó una de sus tantas películas y corrió a la habitación de Harry. 

En cuanto Louis entró a la habitación Harry lo sintió e inmediatamente lo miró, el alfa sonrió. 

- ¿Pasa algo omega? - preguntó Harry dejando el libro que estaba leyendo.

- Yo me preguntaba si querías ver una película conmigo. 

Harry sonrió.

- Por supuesto - contestó sin pensarlo, por la mente de Harry no pasaba la idea de que ese día era su celo, al solo le importaba hacer feliz al pequeño.

Louis sonrió complacido y colocó la película en el gran televisor de la habitación. 

Después de poner la película Louis decidió acostarse con Harry en la cama y el alfa no era fue quien para negarse a su petición.

La película transcurrió con normalidad, la pareja se dedicó a mirarla en silenció, ninguno de los dos supo en que momento ambos habían quedado dormidos. 

Louis quedo acostado en la cama con su cabeza y una de sus manos en el pecho del alfa y Harry lo abrazaba por la cintura. 

Ambos estaban durmiendo tranquilamente, sus respiraciones mezclándose al igual que sus aromas, todo estaba tranquilo, hasta que algo hizo despertar a Louis. 

Calor.

Louis comenzó a sentir un calor en su rostro, el omega abrió los ojos, lo primero que vio fue la televisión apagada, pero eso no fue lo que lo hizo sentirse confundido, si no el calor que sentía en su rostro. 

El omega se levantó desorientado y tocó el rostro de Harry. 

El alfa estaba ardiendo.

- Harry - susurró preocupado y comenzó a mover al alfa para despertarlo.

Harry gruñó. 

- Harry... ¿Estás bien? - preguntó Louis.

El alfa abrió los ojos.

"Mierda. No ahora", maldijo Harry levantándose de golpe de la cama quedando sentado.

- Louis... tienes que irte - dijo recargando su cabeza en la cabecera de la cama y cerrando los ojos. 

"Contrólate alfa. Contrólate", rogaba una y otra vez en su mente.

- ¿Por qué? - preguntó confundido Louis.

- Yo... - trató de contestar Harry pero un gruñido profundo que salio de su garganta no le permitió continuar.

El aroma de Harry se hizo más fuerte, Louis se sintió mareado por un momento.

- Mi celo - gruñó Harry - Tienes que irte.

Louis mordió su labio. 

"¿No me quiere con él?", se preguntó.

"Si nos quiere. Ayúdalo", pidió su omega.

- No quieres que yo...

- No es eso omega. Solo que ... - gruñó de nuevo - No quiero que esto sea así. No quiero que nuestra primera vez sea en mi celo. Quiero que sea algo especial para ti.

"Dios, no puede ser tan lindo y esperar que no haga nada por él", pensó Louis debatiéndose entre hacerle caso a Harry o a su omega.

- Tengo que irme antes de que no pueda contener a mi alfa. - dijo Harry reuniendo fuerzas para levantarse.

"Espero no arrepentirme de esto", pensó Louis acercándose al alfa.

"No lo harás", le respondió su omega.

Harry gimió.

- ¿Qué haces? - preguntó aturdido el alfa cuando sintió al omega sentarse a horcajadas sobre él.

Louis colocó sus manos en los hombros del alfa y junto sus labios.

- Voy ayudarte alfa estúpido y nada me hará cambiar de opinión - susurró contra los labios del rizado antes de volver a besarlo.

Harry gruñó y colocó sus manos en las caderas de su omega.

Louis sentía su corazón acelerarse, se sentía nervioso, pero su omega estaba feliz por estar tan cerca del alfa.

Inseguro de sus movimiento Louis comenzó a moverse contra la erección del alfa.

- No, Louis - gimió Harry aún consciente.

Tenía tanto miedo de lastimar a Louis, pero no podía alejarse de él por que su alfa lo necesitaba, su alfa anhelaba tanto estar con Louis, tanto igual que él.

- Puedo ayudarte sin llegar hacer eso, solo déjate llevar alfa, déjame cuidar de ti - susurró.

- No quiero hacerte daño.

- No lo harás alfa. Confió en ti -  dijo Louis aumento la velocidad de sus movimientos - Sé que amas mi cuello, ¿Por qué no lo besas, alfa? Besa mi cuello.

Harry gruñó y acercó su rostro al cuello del omega y comenzó a besarlo.

Louis gimió. 

- Quítate la camisa - pidió alfa - Quiero tocar tu piel, por favor - suplicó.

Louis asintió y se separó un poco del alfa y se quitó la camisa al mismo tiempo que Harry se quitaba la suya.

- Creo que los pantalones también estorban - susurró Louis bajando la bragueta de los pantalones del alfa.

Harry sintió como el omega le quitaba los pantalones, su parte consciente quería detenerlo, pero su alfa no y su alfa siempre ganaba.

- ¿Quieres que me quite mis pantalones, alfa? - preguntó Louis mirándolo a los ojos.

- Mierda. Si - gruñó Harry.

Louis sonrió complacido por la respuesta y se quito su pantalones.

Harry gimió cuando sintió de nuevo al omega encima suyo. 

- Besa mi cuello - pidió Louis de nuevo, moviendo su cabeza para dejar a la vista su cuello.

Harry lo obedeció.

Louis comenzó a moverse de nuevo contra la erección del alfa, tenia que admitir que se sentía bien. Demasiado bien.

El omega se lanzó un poco simulando una embestida y Harry gruñó y dio una pequeña mordida en su hombro sin traspasar su piel.

- Hazlo. Hazlo de nuevo - pidió.

Louis obedeció.

El omega comenzó a moverse simulando embestidas fuertes, Louis sentía su entrada contraerse pidiendo ser llenado y su lubricante natural comenzó a salir.

- Dios - gimió Harry - Yo.... yo creo que podre llegar si sigues así - dijo con dificultad - No pares omega - gruñó haciendo más fuerte su agarre en el cadera del castaño.

Louis comenzó a gemir igual, quería sentir al alfa dentro de él, pero no podía, no podía porqué el alfa quería que su primera vez fuera especial para él y no podía quitarle ese deseo a su alfa.

Louis sentía al alfa besar y morder su cuello y sus clavículas, se sentía fallecer, el agarre del rizado en su cadera dolia pero también lo hacia sentir bien.

- No pares, ya casi - gruñó el alfa comenzando ha ayudar al omega brincar sobre él.

Harry nunca pensó que algo como simular que alguien lo montaba se sintiera tan bien, pero lo hacía, se sentía mejor que cualquier otra cosa.

- Lindo omega - gruñó antes de besar los labios del castaño.

Una idea cruzó por la mente del omega y bruscamente detuvo su movimientos.

Harry gruñó de dolor por no sentir más estimulación .

- ¿Qué pasa? - preguntó confundido y tratando de controlarse.

Louis tragó en seco, había tomado una decisión y no sabia si era lo correcto, pero deseaba hacerlo, lo deseaba tan mal.

- Voy hacer algo que nadie más te ha hecho alfa - susurró en el oído de Harry antes de quitarse por completo de encima del alfa.

- ¿Qué? - preguntó aturdido el alfa.

Harry soltó un fuerte gruñido cuando sintió al omega bajar su ropa interior.

Esto no podía estar pasando, ¿Qué pensaba hacer Louis?, no lo sabia, pero no quería detenerlo.

- Voy a hacerte una mamada, alfa - dijo antes de tomar su pene entre sus manos.

Harry sabía que debía detenerlo pero solo la idea de tener la boca de Louis alrededor de él lo hacia sentir excitado.

Louis pasó su lengua por toda la longitud del alfa hasta llegar la punta, era grande, pero deseaba hacerlo y no iba a detenerse. 

El omega atrapó la cabeza del pene entre sus labios y sintió el alfa gruñir de placer.

- No... no tienes que hacerlo - dijo Harry con dificultad.

Louis lo ignoró y comenzó a bajar, sintió atragantarse, pero relajó su garganta para poder tomar la mayor cantidad del alfa posible. 

Harry gruñó de placer cuando sintió al omega tomarlo por completo en su boca. 

Louis comenzó a mover su cabeza de arriba hacia abajo, una y otra vez, respirando por la nariz, sentía lagrimas escapar de sus ojos.

Al inicio se le hizo algo complicado pero con el tiempo comenzó acostumbrarse al tamaño del alfa y comenzó a moverse con mayor rapidez. 

Louis solo podía escuchar a Harry gruñir y gemir de placer. 

El omega sacó el pene su boca y volvió a pasar su lengua por toda la longitud, esta vez más despacio, sintiendo las venas palpitar, Harry estaba cerca. 

Louis volvió a meter el pene en su boca y ahueco sus mejillas para succionar mejor al alfa.

Harry no lo soporto más y colocó una de sus manos en la cabeza del castaño y comenzó a guiar los movimientos del omega, follando la boca del omega, tratando de no hacerle daño.

- Lo estas haciendo tan bien, omega - gruñó lleno de placer.

Tan solo se podía escuchar la respiración dificultosa de Louis succionando y los gruñidos del alfa.

Harry gruñó y apretó su mano en los cabellos castaño de Louis y aumento la rapideces de los movimientos del omega, se sentía tan cerca del borde.

- Ya casi, ya casi - gruñía.

Louis hizo su mayor esfuerzo para hacer más presión en el pene el alfa.

Un gruñido lleno de placer, casi animal, con el nombre de Louis saliendo de la garganta de Harry al mismo tiempo que llenaba la boca de su omega con su semilla.

Louis se sorprendió, pero hizo su mejor esfuerzo por tragar todo lo que le dio el alfa y se apresuró a sacar el pene de su boca antes de que se formará el nudo del alfa.

Harry estaba agotado, su respiración era irregular y estaba sudando.

- Siento no haberte avisado - se disculpó.

- Estoy bien - dijo Louis con la voz ronca, su garganta y mandíbula dolían, pero había valido la pena por completo.

- No debiste hacerlo - susurró Harry sintiendo muy pocas fuerzas en su ser.

- No te preocupes - dijo Louis gateando hacia él - Me gustó - susurró antes de juntar sus labios con los del alfa.

- Eres el omega más hermoso de este mundo - susurró Harry contra sus labios.

Louis sonrió y volvió a besar una y otra vez al alfa.

Si, todo había valido la pena.

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