;Jungkook

Cuando entramos a la casa de los sustos pude ver el miedo en los ojos de Arim, por  esa razón decidí tomar su mano. Yoongi se nos adelantó y fue el primero en cruzar la puerta, parecía más emocionado que en la montaña, talvez él no tenía miedo a esto, pero la pobre Arim temblaba de miedo al lado mío.

Avanzamos poco a poco por los pasillos de la casa, había cosas terroríficas, no tanto para mí, pero sí para Arim, de vez en cuando le daba un vistazo y agarraba fuerte su mano.

En un momento, ella gritó fuertemente y se pegó a mi, su rostro estaba pintado de miedo, estaba tan cerca de mi rostro que podía sentir su pesada respiración golpeando mi boca, inconscientemente alternaba mi mirada entre sus labios y sus ojos, porque eran hipnotizantes, sus labios eran grandes, no de manera exagerada, pero si eran muy notables, sus ojos por otro lado eran pequeños y bonitos, se cerraban cada vez que sonreía, lo había notado desde la primera vez que me regaló una sonrisa.

Talvez, de haberla conocido antes pude haber caído rendido a sus pies, porque era hermosa, y a pesar de los pocos días que llevábamos siendo amigos, ella tenía una fuerza increíble para mostrar amor, la persona que llegue a ser amada por ella habrá obtenido la victoria y encontrado una luz.

Mi mente reaccionó y me alejé de ella rápidamente, porque no quería espantarla más de lo que ya estaba.

— Es mejor que sigamos — le dije alejándome de ella que me veía con curiosidad.

Caminamos aún más adelante, esperando a que ella no soltara mi mano, porque de hacerlo podía perderla de vista.

Caminamos un poco más, y ella gritó incluso más fuerte cuando lo que parecía ser un zombi se abalanzó sobre ella. Me reí. Porque era chistoso ver como ella estaba atemorizada por algo que ni siquiera era real.

El zombi se alejó y ella quedó temblando, juro que pude ver unas cuantas lágrimas bajando por sus mejillas y me sentí mal por reírme.

— Ya, no pasa nada — le dije y la pegue a mi pecho, para abrazarla y caminar con ella de esa manera para que no viera más cosas que la asustaran — vamos a caminar, no te voy a soltar.

Caminé con ella abrazada a mi, aún podía sentir como su cuerpo temblaba de miedo, pero yo no dejé de abrazarla. Luego de unos minutos más, salimos de la casa, pude sentir como Arim respiro con tranquilidad cuando vio que ya estábamos fuera.

— Es horrible ahí dentro — me dijo aún lloriqueando.

— Yo te cuidé, merezco un premio — le dije secando las lágrimas que aún tenía en sus ojos.

— Un golpe es lo que obtendrás, te burlabas de mi mientras me escuchabas gritar — sonreí sin mostrar mis dientes.

— Es que si te veías chistosa — ella me dio una mirada de furia y yo levanté mis manos — ya, lo siento.

— Tonto. ¿Donde estará Yoongi?

— Aquí — dijo, estaba arrecostado en un árbol tomando una soda — he estado aquí desde que salieron, pero no quería interrumpir.

— Tú — le dijo Arim apuntando a Yoongi con su dedo — me dejaste sola.

— No estabas sola — le dijimos Yoongi y yo al mismo tiempo.

— Sí, estabas con él. Es más grande, y más fuerte, puede protegerte más, yo estoy todo chiquito y flacuchento — le dijo Yoongi excusándose mediante su ausencia.

Arim me quedo viendo con sus pequeños ojos brillantes, aún enojada.

— Como sea — dijo dando la vuelta — tengo hambre, vamos por hotdogs.

Yoongi y yo la seguimos hasta los carritos que vendíamos lo comida.

— Oye, Jeon — Yoongi se pegó a mi y me susurró en el oído — ella parece una chica difícil pero si le das comida es buena niña.

Se alejó de mi y me dejó pensando en lo que me había dicho. Los segui hasta que llegue donde ellos estaban pidiendo su comida, Arim pedía una soda y Yoongi una simple banderilla. Yo por otro lado solo pedí una soda, no tenía hambre porque había comido antes de salir de casa.

— ¿No vas a comer Jeon? — Arim me preguntó al tiempo que le daba un mordisco a su hotdog.

— No, he comido antes de venir aquí — ella dio otro mordisco, tenía la boca llena de comida y la comisura de sus labios estaba manchada con un poco de mostaza — tie es mostaza, ahí — le dije señalando su labio, ella me miró confundida — no importa, te la limpiare — le dije pasando mi dedo pulgar por la comisura de sus labios, arrastrándolo lentamente para poder quitar todo resto de mostaza.

Sus ojos me veían fijamente, mientras sostenía su hotdog y Yoongi que estaba del otro lado, sonreía complacido.

— Listo — le dije cuando todo estaba limpio, ella salió de su trance y asintió con la cabeza.

— Gr...gracias — le sonreí cálidamente, ella por otro lado dio un sorbo a su lata de soda, suspirando cuando lo hizo.

— Jeon, yo también tengo mostaza en mi labio, ¿también quieres limpiarlo? — Arim, que tenía líquido en su boca, lo soltó, cayendo todo sobre mi, porque ella no podía contener la risa frente a lo que Yoongi había dicho. Me quedé un momento en silencio y después yo también me reía, por último, Yoongi se nos unió, quien nos dio una sonrisa gatuna.

Tratamos de divertirnos tanto como pudiésemos, los chicos me hacían sentir bien sin ningún esfuerzo, Arim con su ingenuidad, me mostraba lo más grande del sentimiento de paz, porque todo ella era así, y a pesar de estar pasando por un momento duro, ella alegraba a los que estaban a su lado. También, no podía negar que la compañía de Yoongi era placentera, siempre estaba a gusto si el estaba cerca.

Antes de conocerlos a ellos, todo se cerraba en una sola persona, Soojin, ella era mi amiga, mi novia y todo lo que pensaba que necesitaba, todos los días, ella era la única que me acompañaba, y ese fue un problema, porque luego de nuestra ruptura, en realidad pude haberme quedado solo, pero por suerte conocí a Arim y Yoongi, ahora por fin podía decir que tenía amigos.

Aún no podía negar que extrañaba a Soojin, anoche estuve muy tentado a llamarla, pero la cordura y el dolor me recordó que ella me había traicionado, jugo conmigo y con algo con lo que no debió, así que me guardé mis ganas de llamar a su numero y mejor descanse. Era difícil dejar de querer a las personas de la noche a la mañana, sobre todo cuando esas personas eran tu todo, así que incluso si lo intentaba, olvidar de manera rápido a Soojin sería difícil, pero si anhelaba ser feliz, tenía que salir de ese estado y moverme, porque aún me esperaban mejores personas en el camino.

☁️

Era lunes otra vez, tenía mucha pereza pero tenía que asistir a la escuela. Anoche luego de dejar a los chicos en sus respectivas casas, me quedé despierto hasta tarde, porque tenía que pensar en algunas cosas, la universidad por ejemplo. Todo ya estaba cerca, mi papá esperaba que siguiera sus pasos e irme por el lado de las leyes, pero mi corazón me pedía otra cosa, yo quería ser médico, quería ayudar, pero sabía que no sería de agrado para papá o para mamá, pero eran mis sueños, era mi decisión.

Bajé a la cocina cuando ya estaba bañado y listo para la escuela, esperando que mamá haya preparado mi desayuno.

— Buenos días mamá — le di un beso en su cabeza y coloqué mi mochila sobre la encimera de la cocina.

— Buenos días cielo. El desayuno ya está listo. — puso un plato sobre la mesa y yo tomé mi lugar.

— ¿Mis hermanas? — le pregunte al tiempo que llevaba un panecillo a mi boca.

— Aún dormidas, Suni no quiere admitirlo, pero ella está saliendo con alguien — me reí, por que ella siempre se preocupaba de sobre manera.

— Mamá, Suni ya tiene veintidós, ya incluso debería de haberse ido de casa — le dije en forma de broma.

— Oye, ella es tu hermana y aún es mi niña — me señaló con el cucharón de madera que sostenía en sus manos.

— Es un adulto, sabe lo que hace. Además, no se de que te preocupas, ella es lista, mejor preocúpate por el chico, el pobre la debe de pasar mal con ella a su lado — mamá aún me miraba escéptica por lo que le dije.

En realidad lo decía de broma, yo adoraba a Suni, pero mama exageraba, ella ya era un adulto responsable de sus cosas, ya sabía que hacía y que no, así que no había de que preocuparse.

— Hijo — mamá se acercó a mi con su cara de preocupación — ¿tu como estás? No me digas que bien, porque se que no es así.

— Estoy bien mamá, no te voy a negar que aún duele, pero no hay ningún mal que por bien no venga — le dije mientras trataba de acabar mi desayuno — sí, la quería mucho, sí aún lo hago, pero la decepción que siento es más grande, ella era todo para mi y me cambió, y debo de admitir que hay momentos en los que quiero llamarle y arreglar las cosas, pero me detengo porque jugó con algo que era importante para mi, se burló de ello y eso no puedo permitirlo.

— Aún así, Jungkook, no quiero que te derrumbes por ello, era solo tu primera novia, seguro hay alguien mejor por venir.

— No creo que vuelva a enamorarme, mamá — me puse de pie, luego de terminar mi desayuno y me dispuse a ir a cepillar mis dientes.

Cuando subía las escaleras vi a Somi, mi otra hermana, ella venía con su cara de sueño aún con su pijama.

— Buenos días, Somi — la saludé una vez que nos encontramos en el mismo escalón.

— Contigo quería hablar — me dijo muy enojada — ¿se puede saber porqué terminaste con, Soojin? — suspiré pesadamente. Mi hermana y Soojin eran amigas, por alguna razón Somi la adoraba — ¿qué le hiciste?

— Somi, no es tu problema — le dije advirtiéndole que no se metiese donde no la habían llamado.

— Soojin me llamo llorando, diciéndome que tu terminaste con ella porque ahora estás con una tal "Arim" — quise ignorarla y pasar de largo — Incluso si estás con alguien más, Soojin siempre será la preferida en casa.

— Te voy a advertir una cosa Somi. Te quiero mucho, pero no te voy a permitir que te metas en mi vida, te recuerdo que eres menor que yo. Tu no conoces a Soojin y de lo que es capaz — vi que tenía deseos de protestar pero evite a que lo hiciera — y si yo decido estar con alguien más, es mi problema, pero te aseguro que cualquier mujer sobre la fas de la tierra es mejor que Soojin.

— ¿Es por esa Arim, cierto? — me preguntó cruzando sus brazos.

— No te importa. Y si aceptas un consejo, aléjate de Soojin, ella ya no es bienvenida en casa, es manipuladora, mentirosa y no le importar pasar sobre la vida de un bebé para obtener lo que quiere — le dije pasando de su lado.

— Tu nueva novia tampoco será bienvenida en casa, te lo advierto — me grito enojada.

— No juegues conmigo, Somi — le advertí — yo voy a traer a casa a quien quiera — ya estaba en el ultimo escalón y me volteé para decirle la última frase — pregúntale a Soojin como esta luego del aborto, y también dile que ella y Dakho hacen una linda pareja.

Frustrado y enojado fui hasta mi habitación para cepillar mis dientes y tomar mi teléfono que estaba cargando. Revise y tenia unos mensajes en el celular.

Arim: Gracias por darme tu chamarra anoche.
Te la devolveré hoy.

Recordé que anoche, en la feria, le presté mi chamarra porque ella moría de frío. Segui revisando y tenia otros chats, pero había uno que especialmente no quería abrir.

Soojin: ¿podemos hablar hoy en la escuela?
Quiero decirte algo.

No tenía nada que hablar con ella, así que ignore su mensaje y decidí responderle a Arim.

;No es necesario que la devuelvas.
Puedes quedartela.

No espere respuesta por su parte, porque sabía que ella respondía los mensajes horas después de haberlos recibido.

Me cepille los dientes y baje a la sala para tomar mis cosas y salir de casa.

Estaba un poco frustrado por la manera en la que Soojin quería poner a Somi en mi contra, sabía cuánto aprecio Somi tenia por ella y lo estaba usando para joderme a mi, no me gustaba para nada esa actitud, esperaba que Somi dejara de hablar con ella si no eso seria un problema. Sabia que con Suni no sería lo mismo, de hecho a Suni casi nunca le agradó Soojin, al igual que papá, siempre que la traía a casa la saludaban con neutralidad y eso era todo lo que había, un saludo cordial.

Por parte de mamá, ella siempre era simpática con todos y no se molestaba hacer expresiones malas hacia nadie, pero Somi, desde que la vio, se apegó a ella, en ese momento eso me hacía feliz porque yo quería que Soojin fuese aceptada en mi familia, pero ahora, de verdad pienso que invertí tiempo en alguien que no lo merecía.

☁️

Llegue a la escuela sin mucho ánimos, llegue unos minutos tarde y la clase ya estaba comenzada, por suerte el profesor me dejó pasar sin ningún problema. Vi a Arim sentada a un lado de Yoongi, este estaba dormido, concentrada en sus clases, tanto que ni siquiera se dio cuenta de mi presencia en el salón.

Por otro lado, Jaehyung y su novia, me miraban con recelo y odio, pero me importaba tan poco, que ellos dos podían pasar a besar mi trasero desnudo.

Trate de concentrarme en la clase, pero hice contacto visual con Arim, quien me sonrió de manera linda, mostrando sus lindos dientes y haciendo que sus ojos se cerraran en el proceso. Jamás se lo admitiría, pero ella de verdad era linda, la manera en la que sonreía y la manera en la que sus ojos colo avellana brillaban era cautivante, su voz, también era un regalo, porque no era chillona como el de todas las otras niñas, era suave y te calmaba. Pero más allá de lo físico, que ella era bonita, lo que más llamaba la atención era su personalidad, era brillante y feliz, no te cansaba el escucharla hablar todo el día, ese siempre sería un privilegio.

Le sonreí de vuelta y ella se concentró otra vez en su trabajo, porque era de esas niñas a las que les gustaba estudiar.

Unas horas más tarde, terminamos nuestro primer bloque de clases, lo que indicaba que teníamos un espacio libre de diez minutos. Aproveché para ir a los baños y ocuparme de mis cosas.

Mientras caminaba, una mano se apoderó de mi brazo y me jalo hasta la esquina del otro pasillo.

— Tenemos que hablar — Soojin estaba de pie enfrente de mi — ahora.

— Yo no tengo nada que decir, Soojin, nada  — le dije tratando de pasar, pero ella me lo impidió.

— Vale, hablaré yo — puse mis ojos en blanco y espere a que ella dijera lo que tenía que decir para que yo pudiese pasar — necesitamos estar juntos.

No pude evitarlo y me reí fuertemente.

— No bromeo, Jungkook. Se que me quieres, y lo que paso fue un contratiempo, pero podemos superarlo, yo te amo — era tan buena fingiendo, que casi le creí.

— ¿También consumes drogas?

— No, hablo de que aún podemos estar juntos Jungkook, te extraño, y si regresas conmigo te prometo que no volverá a pasar lo mismo.

— Obvio, no te volverás a embarazar de otro hombre, solo tendrás sexo con él, pero esta vez sí usarás protección. No me interesa volver contigo.

— Aborte al bebé para que pudiésemos empezar de nuevo.

— No me eches la culpa de tus decisiones, yo jamás te dije que abortaras al bebé, fue tu culpa, tenías que tomar la decisión, pero fue más que eso, fue la estupidez, me jodiste, Soojin, de verdad lo hiciste — le dije muy enojado.

— De verdad, Jungkook, aún podemos arreglar las...

— No, ya todo fue dicho, ya todo fue hecho. Mientes sobre una cosa, mientes sobre todo — le dije mientras trataba de calmar mi sangre que hervía dentro de mis venas.

— ¿Ya no me quieres? — ella parecía querer llorar, pero no volvería con ella solo por eso.

— Siempre te amé con la fuerza de un huracán, aunque para ti yo solo fui una simple tormenta.

Pase por su lado tratando de ignorar la manera en la que me llamaba, porque no merecía la pena recordar que en realidad yo pude haber dado todo por ella.

☁️

Regrese al aula irritado aún, el profesor todavía no había llegado, y cuando entre MinYoung tenia contra la pared a Arim.

— ¿Qué haces? — le pregunte enojado, porque parecía estar lastimando su mano, así que la cogi de la mano y la empujé del otro lado.

— ¡Tu no te metas! — me grito histérica — tu noviecita me quemó el cabello, ahora tengo que utilizar una peluca — voltee a ver a Arim, y ella asintió.

— Te lo mereces, MinYoung. Decías ser su amiga y te alejaste de ella porque no tiene una familia, y no solo eso, también la humillaste frente a la escuela al publicar su situación en Twitter, y todo lo hiciste por quedarte con un chico — ella me miraba con las mejillas rojas de furia — te mereces eso y más. Por que la carga emocional con la que ha tenido que caminar estos días Arim, no se compara con lo que ella te hizo.

— Le diré a Jaehyung que te parta la cara — me amenazo pero yo me reí.

— ¿Tu novio? Ja, dile que lo estaré esperando, el sabe donde vivo.

— ¿Que tal si lo arreglamos ahora, Jeon? — la voz de Jaehyung resonó en mi espalda y me di la vuelta, aún con una sonrisa en mi cara.

— Como tu quieras — lo enfrente soltando a su novia de la mano.

Cuando lo hice, escuché como una palmada resonó en el lugar, volví a ver a mi espalda, y era Arim sobando su mejilla, pero no me dio tiempo de reaccionar cuando vi que ella, por su propia cuenta le regresaba el golpe a MinYoung, y no lo hacía con una simple cachetada, lo hacía con un puño.

Estrello su puño tan fuerte en la cara de MinYoung que hizo sangrar su nariz. Antes de que pudiese hacer algo, Jaehyung se aventó contra mi y me empujó contra la pared, tratando de golpearme pero se lo impedía.

— Ay no, ¿de verdad? — la voz cansada de Yoongi se asomó por la puerta — ¿eres tan marica que tomas a las personas por la espalda?

— No es asunto tuyo, Min. Tu perra a golpeado a mi novia — Yoongi estalló en furia y se acercó a Jaehyung.

— ¿Como le has dicho? — le preguntó enojado.

— Ya oíste.

Ahora era Yoongi quien metía su puño en la cara de Jaehyung, golpeandome a mi en el proceso, me hice a un lado para dejar que Yoongi se acercara a Jaehyung.

— Puedes decir de mi toda la mierda que se te ofrezca, pero deja a Arim a un lado, porque la próxima vez obtendrás más que un golpe en el pómulo.

Yoongi lo soltó y se fue a sentar. Yo por otro lado traté de ayudar a Arim, que parecía asustada porque a MinYoung le sangraba la nariz.

Tomé a MinYoung y la aparté de donde estaba, empujándola a un lado para poder abrazar a Arim, ella rugió con furia mientras trataba de limpiarse la sangre con su mano.

— Esto no se quedará así, huérfana — MinYoung salió del salón. Y Jaehyung salió tras ella.

— Jungkook...

— No pasa nada — le dije mientras la envolvía en un abrazo — esa derecha tuya es peligrosa, jamás intentaré ser malo contigo.

Ella sonrió. Tuvimos que separarnos porque el profesor entró al salón.

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Holi, estaré actualizando día de por medio. Estoy en la universidad y ya estoy en el casi último mes de semestre y dado a que mi carrera es un tanto pesadita no me queda mucho tiempo.

En otras noticias, Jk y Arim ya empezaron a ser cercanos *guiño, guiño*

Yo ahorita: