acto   numero  uno

capitulo   dos
ii.  chicos    ayuda
nos    perdimos

Ya han pasado unos cuantos días desde que estas amables personas dejaron que me una a ellos, cada uno era diferente y eran demasiado... Impredecibles, y era vergonzoso ser la unica que no conocía la zona.

Desde muy pequeña viví en mi propio mundo, en un lugar alejado de las guerras y batallas, no convivía con mucha gente de mi alrededor. Únicamente con mi hermana y algunos niños, pero nada que sea un compañerismo sincero como lo tienen estas personas...

Era de noche y estabamos acampando, todos ya estaban profundamente dormidos menos yo, simplemente no lograba coinciliar el sueño.

Había dejado pasar por alto mis propios sentimientos, pero ahora que estoy sola, siendo la unica despierta los recuerdos habían vuelto a mi.

Desde mi gente hasta mi hermana ¿Por que tuvieron que irse?

Claro, en realidad ambas cosas habían sido mi culpa.

Fuí descuidada, todo fue culpa de mi curiosidad, ver a mi gente gritar de sufrimiento y desespero, todavía lograba escuchar esos gritos desgarradores... Y no podía hacer nada, si tan solo no hubiera hecho nada de lo que hice.

Si tan solo no hubieses nacido, Aqua. ♡

Ya basta... ¿Por que mi mente le gusta jugarme malas pasadas de esta forma? Es como si alguien mas estuviese en mi cuerpo únicamente para atormentarme y recordar lo inútil que fuí en el pasado, recordarme todos mis errores.

Sin siquiera darme cuenta de mis ojos corrian lágrimas hasta mis mejillas, me senté con cuidado de no hacer ruido alguno. Mi mirada se posó sobre el cielo estrellado encima mio... Es muy bonito.

Suavemente me levante, caminando hacia una pequeña colina, quería contemplar durante unos momentos el cielo, aunque en realidad sabía que no era eso.

Me senté, viendo hacía atrás mis compañeros quienes yacían profundamente dormidos, una pequeña sonrisa se formo en mi rostro al verlos, por un momento, el miedo y dolor que tenía fueron remplazados por una calidez inexplicable.

No recuerdo cuanto tiempo estuve sentada, pero poco a poco me sentía mas anormecida, el sueño se apoderaba de mi poco a poco...

(...)

Lancelot avanzó con pasos silenciosos, acercándose a la colina donde Aqua yacía dormida. Sus mechones azulados se mecían suavemente con la brisa nocturna, y su respiración tranquila indicaba que el cansancio había vencido a sus pensamientos.

El chico de cabellos dorados se quedó observándola por unos segundos. Algo en su expresión dormida le resultaba... frágil. No era común verla así. Durante el día, Aqua intentaba mostrarse fuerte, pero ahora, bajo la luz de la luna, su vulnerabilidad era evidente.

Suspiró y se agachó a su lado.

─── Eres un problema... ───murmuró con un deje de resignación.

Aqua se había quedado dormida a la intemperie, lejos del calor del campamento. No podía dejarla ahí toda la noche.

Con cuidado, deslizó un brazo bajo sus piernas y el otro alrededor de su espalda, levantándola sin esfuerzo. Su peso era ligero, y su respiración se mantuvo pausada mientras se acomodaba contra su pecho.

Lancelot la sostuvo con facilidad, pero por alguna razón, sintió su corazón latir un poco más rápido de lo normal.
Sacudió la cabeza, quitándose esa sensación de encima, y comenzó a caminar de regreso al campamento.

La luz de la fogata, ahora reducida a brasas, iluminó tenuemente a los demás compañeros dormidos. Se acercó con cuidado y depositó a Aqua sobre su manta con suavidad, asegurándose de que estuviera bien arropada.

Antes de alejarse, se quedó mirándola por un instante más.

Aqua murmuró algo en sueños, su ceño frunciéndose levemente, como si la atormentaran pensamientos incluso en su descanso.

Lancelot vaciló.

Sin pensarlo demasiado, llevó una mano a su cabeza y apartó un mechón de su rostro.

───Descansa... ───susurró casi en un suspiro, antes de darse la vuelta y alejarse en silencio.

Sin hacer ruido alguno, volvió a su forma de zorro, sus brillantes ojos carmesí mirandola una ultima vez mas antes de acurrucarse cerca de la muchacha, dispuesto a velar su sueño hasta el amanecer.

(...)

¿Que hora eran? Los rayos del sol daban directamente a mi rostro, mi cara se fruncio ante la luz, ¿Pueden apagar el sol, por favor? Mis ojos se abrieron poco a poco ante la molestia de la luz que seguía dando a mi cara. Me sente, viendo a mi alrededor.

Un momento... ¿Como había llegado aquí? ¿No me había movido en la noche a ver las estrellas? Me frote los ojos, según recuerdo me había levantado ¿O tal vez lo soñe? No, eso era...

Sin embargo mis pensamientos fueron interrumpidos ante el entusiasmo de cierto peliverde, quien comenzaba a levantar a todos con esa sonrisa tan característica en su rostro.

Este se acerco a donde ya estaba yo sentada al ver que ya estaba despierta. ─── ¡Aqua, Aqua! ¡Buenos días! ─── Dijo. ─── ¡Ayudame a levantarlos! ¡No quieren despertar! ⸻ ( ⚈̥̥̥̥̥́⌢⚈̥̥̥̥̥̀)

Reí levemente, Percival sabía muy bien como animar a todos en cualquier momento y sin importar la circunstancia en la que nos encontraramos, sabía sacarme una sonrisa completamente sincera.

Cuando todos se levantaron era momento de seguir, realmente ya no tenía ganas de seguir caminando ¿Cuantos dias seguidos ibamos? No estaba acostumbrada a hacerlo...

El día comenzo con naturalidad, todos hablaban alegremente, compartiendo sus comentarios y espectativas para el día, pero... ¿Acaso soy la unica que siente una vibra pesada a nuestro alrededor?

Tal vez estas loca, Aqua.

Gracias, voz interior.

Suspire, no tenía pruebas de que algo malo pasaría, era simplemente mi sexto sentido hablando, eso o ya estaba loca, quien sabe. Veía como los demás se divertian, verlos me sacaba una sonrisa ¿Como es posible que gente que apenas conozco me haga sentie parte de una familia?

─── ¿Tu que opinas, Aqua? ─── Pregunto la peliceleste volteandose a verme con una sonrisa en la cara, tomandome por completa sorpresa.

Me había perdido en mis propios pensamientos, no había escuchado la pregunta y me daba pena decir que no les había estado prestando atención, por lo que asentí, aun sin saber de que se trataba.

─── ¡Ah! S-Si, me parece bien. ─── Titubee, respondiendo afirmativamente.

Anne sonrió contenta. ─── ¡Entonces ya esta decidido! ─── Dijo, parandose en seco, haciendo que los demas hicieran lo mismo.
─── ¡Encontraremos una aldea y compraremos cosas muy bonitas! ───

¿Eh? ¿Era eso? No iba a mentir que la idea me emocionaba, y mas si es que era ropa nueva... ¡Queroa ver que tal era las ropas de la Britannia actual! Y si es que se puede comprar.. Je, je je... ¡Ya queria ir!

¡Basta Aqua! Te estas emocionando por las puras, además, nada te asegura que encuentren alguna aldea pronto. No solo eso... ¿Y si era tal solo una excusa para dejarme abandonada ahí? También había la posibilidad de eso, me podrían dejar sola, abandonada y triste.

Recibí un pequeño empujoncito en mi pierna, al ver hacía abajo era el zorro, quien me había empujado suavemente para que siguiera caminando y no me quedase quieta como una estatua.

Mis pies ya estaban adoloridos, y no era solo eso, si no que el calor no me dejaba estar tranquila, ahora mismo desearia ir y darme un baño con agua completamente helada. Juro que me estaba derritiendo poco a poco, Enserio, ayuda.

¿Por donde estabamos? ¿Ya no habíamos pasado por aquí? Tal vez era simplemente mi parecer pero... Estaba segura de haber visto ese árbol antes, pero mis compañeros parecían seguir tranquilos, probablemente era una simple paranoia mia.

NO LO ERA.

Habíamos pasado por la misma zona unas cinco veces ya, cada vez la cosa se ponía mas extraña.

Juro que habíamos pasado mas de cinco veces por el mismo lugar, todo esto era muy extraño ¿Era probable que simplemente fueran zonas iguales? Sí, pero para asegurarme agarre una pequeña roca que estaba en el piso, para luego acercarme a un árbol y marcarlo.

Una vez mas habíamos pasado por el mismo lugar, mi vista fue directamente al árbol que había marcado sin que mis compañeros se hubiesen dado cuenta y... ¡Lo sabía! Ojo de loca nunca se equivoca.

Ahí estaba la misma marca.

─── Oigan. ─── Dije, parandome y captando la atencion de mis contrarios, quienes me veían con curiosidad y espectantes. ─── ¿No les da la impresión de que ya hemos pasado por el mismo lugar varias veces? ─── Pregunté, rascando suavemente mi nuca.

─── Así que no era solo mi impresión. ─── Dijo el muchacho de cabellera marrón, mirando a su alrededor. ─── Todo esto se ve muy igual pero... Hay algo mal, hemos pasado por el mismo sitio todas las veces. ───

Asentí, dandole la razon a mi contrario, que curioso, ¿Sere maga? Dejate de bobadas Aqua.

Pero el mal presentimiento no se iba, y sabiendo que probablemente hemos estado dando vueltas en circulos significaba que algo estaba mal.

Y es que sin que lo supiera, el peligro ya estaba mas cerca de lo que imaginaba.

Antes de siquiera darme cuenta un grito resonó en el aire, una figura enorme y cubierta en una armadura se había abierto paso frente a nosotros.

─── ¿Quien eres? ─── Preguntó Percival, quien había cambiado su semblante a uno mucho mas amenazante, mas defensivo.

Sin embargo aquel hombre no respondió, se quedo completamente callado, únicamente escuchandose el sonido de su respiración pesada y siniestra.

En el instante en el que vi a aquel hombre me eche hacia atrás, escondiendome detras de todos. No estaba hecha para pelear, era una cobarde que prefería esconderse y solo echarle porras a sus amigos.

Que cobarde eres, Aqua.

Aquel hombre no contestaba, mis pelos estaban de punta por la mala sensación que me producía todo esto... Algo andaba mal, quise gritar, pero antes de poder hacerlo aquel desconocido alzo su bastón, no para atacar... Si no para...

Cerré fuertemente los ojos, no queria ver que era lo que pasaría a continuación, ni siquiera quería ver si se peleaban o no. Sin siquiera darme cuenta la oscurixad me envolvió y en un solo parpadeo todo mi entorno desapareció.

Lentamente abrí mis ojos, ya no estaba en aquel extraño bosque que parecía repetirse constantemente, ahora estaba en una cueva, una muy fría y humeda de hecho. Todo estaba oscuro, tanto que por un momento sentía que había perdido la capacidad de mirar, eso hasta que vi unas pequeñas plantas azules que brillaban en la parte superior del lugar.

Mire a mi alrededor, estaba completamente confundida ¿Como habia llegado aca? Y un momento... ¿¡Y mis compañeros!?

Volví a mirar a todos lados, esta vez con mas dureza, pero no lograba ver bien a causa de la oscuridad. ─── ¿Hola? ─── Hablé, pero fue únicamente mi voz rebotando contra las paredes. ─── ¿Chicos? ¿Estan aquí? ───

Mi corazón latia con fuerza, estaba sola y tenía miedo, se sentía casí como cuando me encontraron, el sentimiento de soledad se había apoderado de mi. Tenía miedo, no a la oscuridad, si no a estar varada en un lugar que no conocia en lo absoluto, ahora sin ninguno de mis compañeros a mi alrededor.

Pero entonces, cuando entre cerraba mis ojos vi una figura pequeña, se acercaba a mi a paso lento. Era el zorro. El caos en mi mente fue remplazado por paz al ver una cara conocida, no estaba sola.

Suspire aliviada. ─── Sin.. ─── Susurre. ─── Que alivio, estas bien... ─── Dije.

Mi contrario me miro con curiosidad, pero luego su expresión cambio a una un poco mas comprensiva, como si supiese lo que estaba pensando ¿Que tonterías piensas Aqua? ¿Como un zorro iba a saber en que pensabas?

Pero el solo sonrió. ─── Espero que no hayas pensado que te habíamos dejado a tu suerte, tonta. ─── Dijo, poniendose a mi lado.

Le devolví la sonrisa. ─── No podemos quedarnos aquí, además, debemos de buscar a los demás. ─── Dije, aunque era mas para mi misma que para el.

Intente avanzar, pero apenas di un paso el camino que parecía una salida se desvaneció ante mis ojos. Quedé helada, frío, hielo ¿Que acababa de pasar? En el mismo instante al lado nuestro se abrió otro camino, pero... Cuando trate de ir hacía allá la entrada del camino se desvaneció, haciendo que casí me  choque contra la pared de la cueva rocosa.

No hace falta decir que estaba desconcertada, mirando a mi acompañante quien parecía lucir tranquilo —Yo se que en el fondo se estaba cagando de miedo, al igual que yo—  ¿Como podía mantenerse tan tranquilo?

─── Dios... ¿Que esta pasando? ⸻ Hablé para mi misma, no entendía absolutamente nada.

─── Probablemente sea la habilidad mágica de ese Caballero. ─── Dijo mi contrario, mirandome.

─── Eso es malo ¡Debemos de encontrar a los demás! ─── Estaba desesperada, lo ultimo que deseaba era que les pasará algo, ellos fueron amables conmigo, son... Como mi nueva familia, una extraña, pero al fin y al cabo son las unicas personas en las que puedo confiar ahora.

Mi contrario suavizo su mirada, parece que se dio cuenta que esta situacion me estaba estresando y que estaba preocupada, por que su voz era mas tranquila. ─── Tranquilizate, Aqua. Viste como el camino desapareció ¿No? Ahora mismo no podemos desesperarnos, debemos de primero pensar en algo. ─── Dijo.

Tenía razón, ellos eran fuertes, sabían como arreglarselas a solas, pero aun así, no podía evitar preocuparme.

─── P-Pero... ─── Titubee, jugando con mis dedos con algo de nerviosismo, todavía dudaba un poco de las palabras de Sin, aun sabiendo que tenía mejor control de sus emociones que yo.

─── Ellos estarán bien, son... una bola de imbeciles, pero son habiles. ─── Habló, su tono era mucho mas tranquilo del que solía tener habitualmente, se notaba que los apreciaba mucho.

Suspire. ─── Tienes razon... ─── Dije, sentandome a la par de mi contrario.

¿Que es lo que se hace en este tipo de situaciones? Mire una vez mas a aquellas cosas que iluminaban levemente la cueva ¿Que hago?

Las dudas carcomian mi cerebro ¿Siquiera lograriamos salir de este lugar?

Ahora que lo pienso mejor... ¿Que es este lugar realmente? No parecía una cueva normal, y ese caballero... ¿Por que nos llevaría a este lugar? Tenía una pequeña idea de que podría ser pero...

No importa, no debo de basarme en únicamente conjeturas, no tengo ni idea que es lo que esta pasando.

Si tan solo... Pudiese ser mas util...  ¡Ya basta! ¿Acaso piensas rendirte tan fácilmente? ¡Eres Aquamarine, ni pienses que puedes rendirte!

Sentía un hormigueo extraño en el pecho ¿Un infarto? No... Era algo distinto, cerre los ojos, sobandome la sien suavemente, el estres hacía que me doliera demasiado la cabeza, no estaba hecha para estas situaciones.

¿Todavia dudas, Aqua?

¿Esa voz otra vez? Enserio...

Pero cuando abrí nuevamente los ojos había algo extraño, ya no estaba en el mismo lugar que antes junto a Sin, era... Completamente oscuro, al bajar la mirada hacía mis pies había agua, cubriendolos hasta la mitad de mi pantorrilla.

─── ¿Eh? ¿En donde estoy? ─── Dije para mi misma, trataba de entender como es que había llegado de un lugar a otro en cuestión de un parpadeo, sim embargo una voz interrumpió en el lugar, dejandome atonita.

─── ¿Acaso no me recuerdas, Aqua? ─── ¿De donde venía esa voz? Era de una mujer, era melodiosa y... Adictiva... Pero tenía un mal presentimiento sobre todo esto.

Aprete fuertemente los puños, mis ojos trataban de divisar alguna sombra o forma, quien sea, de quien proveniera la voz. Eso hasta que una figura bastante extraña se comenzaba a acercar a mi a paso lento.
Me tense, retrocediendo a la par que la misma caminaba a mi dirección.

─── ¿Quien eres? Responde. ─── Mi voz temblaba, no tenía como defenderme mas que intentar hacerme la fuerte, pero aun así tenia miedo. Estaba nerviosa, no sabía que hacer.

Pero esta solo reía, como si ver mi miedo fuese algo divertido, algo digno de ver.
─── ¿Que pasa? ¿Vas a llorar acaso? ─── Poco a poco la figura de una mujer se hizo presente en mi campo de visión... Se parecia demasiado a mi ¿Que esta pasando.

Quería hablar, pero ni siquiera sabía que contestar, quería huir pero mis piernas no me contestaban. Quería preguntarle quien era, por que me ha traído a este lugar, sin embargo mi contraria se adelanto a mis preguntas, como si supiese que es exactamente lo que quería decirle.

─── Oww, es una pena, parece que no me recuerdas, Aqua. ─── Dijo, con un tono de tristeza fingida, solo para volver a poner esa sonrisa burlona una vez mas, se estaba riendo de mi. ───  Pequeña Aqua ¿Acaso no recuerdas nuestro trato? ─── Poco a poco aquella mujer se acercaba mas a mi, tenía una expresión siniestra.

Esto me estaba perturbando, traté de retroceder, pero al tratar de hacerlo me tropece con mis propios pasos, quedando en cuclillas contra aquella desconocida, quien seguía riendo por mi mediocridad.

─── Oye... A—Alejate... ─── Titubee, trataba de hacerme la fuerte, pero esta mujer... Parecía saber que estaba sufriendo y se reía de eso, se burlaba de mi miedo. ─── No estoy bromeando... Alejate. ─── Dije, tratando de alejarme.

Pero esta sin hacer el minimo caso se acercaba a mo cada vez mas, hasta dejar su cara a tan solo unos centimetros de la mia.

─── ¿Sabes? Incluso de cerca te ves tan... tan... Patética. ─── Su mano fue hacía mi cara, moviendola suavemente para apartar un mechón en mi cara.

Se parecía demasiado a mi... Era como si fuese mi reflejo de hace mas de tres mil años... Cuando mi cabello tocaba era blanco y no completamente celeste como lo tengo ahora. Me revolvió el estómago. Era como verme reflejada en un espejo retorcido, con una sonrisa que nunca había pertenecido a mi rostro. Sus ojos brillaban con una mezcla de diversión y algo más... algo peligroso.

Intenté retroceder, pero mis piernas se sentían pesadas, como si el agua las estuviera sujetando con manos invisibles. Mi respiración era errática, mi pecho subía y bajaba de forma descontrolada.

─── Parece que hicieron un buen trabajo haciendo que te olvides de mi, Aqua. Peero ~ No les servirá de nada ahora, después de todo fue tu culpa que ellos murieran ¿Lo recuerdas? ─── Cada palabra me atravesaba como una aguja en la piel, dolía, por que tenía razón.

─── Yo... No quiero recordarlo... Callate, por favor... ─── Murmuré, no había hecho nada para sacar su mano de mi cara, no sentía fuerzas.

Con un movimiento repentino agarro mi rostro con ambas manos, sus dedos fríos tocaban mi piel con una suavidad inquietante, me obligaba a verla.

─── Escuchame bien. ─── susurró, inclinando el rostro hasta que nuestras narices casi se tocaban ───. Esta "cueva" te está devorando. No hay salida. Tus amigos van a perderse en la desesperación, uno por uno. Pero hay algo que puedes hacer para cambiar eso… ───

Sus dedos se deslizaron lentamente desde mi rostro hasta mi cuello, rozando mi piel con la delicadeza de un depredador probando la resistencia de su presa.

─── Anda... Dejame ayudarte, soy la unica clave que te ayudará a salir de esta situación. Confía en mi. ¿Que otra opción tienes? ───

Un escalofrío recorrio por toda mi espalda, estoy segura que ahora mismo tenía una expresión de incredulidas bien marcada en el rostro.

─── No quiero... ─── Dije. ─── No quiero tu ayuda. ───

Su agarre antes suave comenzó a apretarse al igual que la sonrisa tal burlesca que llevaba vacilo un poco, la estaba estresando poco a poco y no efa bueno, no podía defenderme ¿Quien sabe que podría hacerme?

Me volvió a sonreir, acercando suavemente sus labios a mi oido. ─── Oh, Aqua... ───
Dijo, acariciando mi cabeza como si de una niña pequeña con su muñeca se tratase.
─── ¿Y si te digo que no tienes otra opción? ───

Entonces, todo a mi alrededor comenzó a temblar con fuerza.

El agua bajo mis pies comenzó a agitarse con violencia, como si algo en las profundidades intentara salir. La oscuridad a nuestro alrededor era estremeciente, y una enorme sensación de vértigo golpeo con fuerza mi cabeza.

Cerre los ojos lo mas fuerte que pude. Y cuando los volví a abrir...

Estaba de vuelta en la cueva.

Mi respiración era erratica, mi pecho subiendo y bajando con fuerza, como si acabase de correr durante horas, no solo eso, sudor helado bajaba por mi rostro, y no ayudaba que el ya de por si ambiente helado de la cueva estuviese presente.

Mis manos temblaban con furor, aun si lo intentaba no se mantenian quietas.

¿Quien era ella? ¿Como había logrado traerme de un lugar a otro como si nada?

─── Aqua. ───

No solo eso... ¿Por que era tan parecida a mi?
Tengo ganas de llorar, rodo era demasiado confuso en este momento... ¿Que hago?

─── Aqua... ───

Mi respiración era cada vez mas irregular, sentía que iba a explotar, era demasiado información... Era mucho mas que la que tuve que procesar hace unos días...

¡Mierda— Auch!

El dolor punzante en mi mano me sacó bruscamente de mi estado de pánico. Miré a Sin, quien seguía con los dientes ligeramente hundidos en mi piel antes de soltarme con un bufido molesto.

Mi respiración aún era irregular, y el temblor en mis manos apenas había disminuido. Mi mente seguía atrapada en esa imagen… Esa mujer, su sonrisa burlona, sus ojos reflejando algo que no lograba comprender del todo.

─── Te estoy hablando desde hace un buen rato ─── repitió Sin, su tono impaciente pero con un matiz de preocupación que no pasó desapercibido. ─── Te desvaneciste en tus pensamientos de la nada y no contestabas. ¿Qué pasa? ───

Me mordí el labio con fuerza. No quería preocuparlo… Pero tampoco sabía cómo explicar lo que había sucedido.

─── No… no es nada ─── murmuré, apartando la mirada.

Mentira.

Era mentira y Sin lo sabía. Sus ojos rojos me escrutaron con intensidad, como si pudiera ver a través de mí.

El silencio entre nosotros se volvió pesado, casi sofocante. La cueva a nuestro alrededor seguía tan oscura y fría como antes, pero ahora, sentía que algo me observaba. O quizá solo era mi propia paranoia.

Tragué saliva y me obligué a respirar con calma.

─── Fue solo… un mareo. ─── mentí otra vez, frotándome la sien como si quisiera convencerlo de que no era nada grave. ─── Estoy bien. ───

Sin no respondió de inmediato. Se limitó a entrecerrar los ojos y suspirar con algo parecido a resignación.

─── Hmp… Si tú lo dices ─── dijo finalmente, aunque su tono dejaba claro que no me creía del todo.

Respiré hondo, poniendome de pie con dificultad, debíamos encontrar la manera de salir de aquí.

Vamos Aqua... Soy tu unica opción, solo dilo... Y yo te sacaré de aquí.

No. No iba a ceder. Su voz todavía resonaba en mi cabeza, como un susurro que entrabs por mi oído.

─── Tenemos que encontrar una salida ─── dije, tratando de sonar firme ─── No podemos quedarnos aquí esperando a que nos consuma la cueva. ───

Sin me miró en silencio por unos segundos antes de asentir.

─── De acuerdo. Mantente cerca. ───

No hizo falta que lo dijera dos veces. La idea de perderme sola en este lugar era aterradora.

Ambos comenzamos a caminar, con el eco de nuestros pasos resonando en la húmeda oscuridad de la cueva.

Pero, por más que avanzábamos, tenía la sensación de que algo o alguien nos estaba guiando en la dirección equivocada…

Y lo peor era que no sabía si era la cueva…

O ella.

˹       𓇼        ˺
sab  notes  ★

oifan si bieron ke la relacion d el espitiru y aqua es literalmente la de sukuna e itadori?? O LA D NARUTO Y KURAMA 🥺🥺🥺

ke onda bbs, logre acabarlo a tiempo todafia no akaba el día ‼️‼️‼️‼️ gente me estoy muirenfo me tarde dos horas haciendo el bendito dibujo d aqua ayuda sos manden a los paw patrol

que les parecio :33?? espero qje haya sido de su agrado, quería introducir la trama d aqua lo mas rápido posible pq se desarrollara en todo el primer arco, así ke presentemos a el espitiru del lago ><!!! ke cual es su nombre?? sorpresa para otro cap

funfac: sabian ke en realidad iba a cancelar aquamarine y subir otra historia d lancelot?? no le tenía fe así alaberga,, pero se me prendió la chispa y ahora tengo de que todo desarrollado en mi mente, desperte el tercer ojo 🤓🤓🤓

en fin, cuidense mucho ♡♡♡ nos vemos a la próxima