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« ¡TODO ES TU CULPA! »
24 DICIEMBRE 1976
Al pisar la mansión Parkinson sabia que había llegado a su ruina. Los gritos eran común en aquella mansión, esta vez con mayor volumen y con más golpes que lo normal.
Ahora que Peter se enteró de donde pasaba las vacaciones y dias festivos, le prohibió salir de la casa hasta el dia del baile de navidad, que siempre suele hacerse para los sangras puras de alta sociedad.
Lo que no sabia Peter que ese dia era parte del plan de Hasley, Héctor y él.
Lucas deseaba el dia que su padre este muerto. Asi podria vivir su vida como él quisiera.
— ¡Lucas! —La puerta de la habitación fue abierta por la madre de Lucas. — ¿Estas listo?
— ¿Porque no vino Kepi a avisarme? — Pregunto Lucas sin levantar la vista de su traje que terminaba de abotonar. — Nunca me habias preguntado eso en tu vida.
Escucho a Alessia suspirar y luego solto un insulto en búlgaro.
— Te dije que Peter lo iba a descubrir y aún asi no me hiciste caso. — Hablo Alessia entrando a la habitación — ¿Sabes lo enojado que está?
— ¿De verdad? — Pregunto Lucas fingiendo sorpresa. — Sus insultos y los mil crucios que me lanzaba ahora tienen sentido.
La mayor de los Parkinson rodo los ojos y miro detenidamente a su hijo, lo unico que de verdad le agradaba eran los pequeños rulos de su hijo, su ojos marrones. Solo esas dos cosas habia sacado de Derek, su único y verdadero amor.
— Se acabó el plazo.
Lucas dejo de observar por la ventana para mirar a su madre preocupado, no podia acabar el trato, aún quedaba un año más. Lo que significaba que habría una fiesta de compromiso lo más antes, de que su boda sería cuando él terminará Hogwarts, pues sabria que a nadie le importaría la opinión de ambos.
— Las Macmillan van a llegar pronto, Esther no sabe que te juntas con esas... — Alessia toco su labio con la punta de su dedo. — ya sabes. Ni pienses que podras escapar, yo ya no te ayudaré, Derek.
Con eso Alessia salio de la habitación,
Lucas sonrio falsamente para agarrar un bate, salió de la habitación y llamo a Kepi.
— ¿El amo Lucas llamo a Kepi?
Lucas siguió caminando hacia las escaleras y con Kepi detras de él, tratando de seguirle el pasó.
— Junta 10 jarrones de Alessia, si son los más costoso mejor, los cuadros familiares de la sala de estar y llevalos al patio — Demandó el Parkinson.
— Pero las señoritas Macmillan vienen en caminó — Hablo el elfo.
— Eso que le preocupe a los señores Parkinson. — Dijo dirigiendose a la salida hacia el patio. — ¡Ahora kepi! — Demando el Parkinson furioso.
— Kepi le traerá lo que pidio. — Chillo el elfo para desaparecer.
Al llegar al patio vio todas las cosas que le pidió a su elfo, alzo el bate de madera y empezó a golpear cada una de las cosas, era su forma de desquitar su ira sin golpear a alguien.
Destrozaba cada cosa que recordaba a sus padres, hasta el último que quedará polvorisado. Luego mandaba a Kepi que lo vuelva los pedazos rotos a la normalidad, lo hacia desde los nueve años y ya habia perdido la cuenta de cuantas veces habia hecho eso.
Después de unos viente minutos haciendo eso, se aliso el traje, peino su cabello con sus manos. Se adentró y escuchó las voces de su madre y las Macmillan, que ya llevaban sus elegantes vestidos. Lucas no entendía como Mackenzie podia respirar con ese corset tan apretado.
— ¡Al fin llegas jovencito! — Exclamó la señora Macmillan — Nos hacemos tarde y...
Mackenzie se levantó y se acercó a su “prometido”, el Parkinson podía notar que la chica estaba molesta.
— Iré a habkar con Lucas un momento. — Dijo Mackenzie jalando del saco de Lucas.
Peter que iba pasando por el lado de los menores, alzó una ceja al ver como la castaña jalaba a su hijo hacia la biblioteca.
— ¿No se suponia que íbamos a la fiesta? — Pregunto Peter a las dos mujeres que se encontraba en la sala.
— Seguro quieren hablar. — Opinó Esther.
— O se vendrán los próximos herederos — Murmuró Alessia con una sonrisa divertida, la Macmillan abrio los ojos de la impresión ante la ocurrencia de la Parkinson y Peter apretó la mandíbula furioso ante las palabras de su esposa. — ¿Les apetece un poco de vino? Walburga me mando un vino directo de Grecia, deben probarlo. ¡Kepi, tráenos tres copas de vino!
Al llegar a la biblioteca Lucas se soltó del agarré de la castaña y lo miro con una ceja en alto.
— Arruinas mi traje de...
Lucas no termino su oracion ya que recibió un fuerte golpe en su mejilla, Mackenzie le habia tirado una cachetada y luego empezó a golpear su pecho.
El golpe que la habia dado la Macmillan le dejo medio confundido, y más cuando le empezó a golpear en el pecho mientras murmuraba cosas.
El Slytherin le agarro de las muñecas con fuerza para que parará.
— ¡Suéltame! — Se quejo la chica.
— ¿Qué te pasa loca? — Grito furioso el Parkinson.
— ¡Todo es tu maldita culpa, imbécil! ¡Podias ser más discreto! Te odio y...
Lucas solto las muñecas de la Slytherin con fuerzas provocando que ella quedara sentada en el sillón de la biblioteca.
— No me vuelvas a insultar, Macmillan.
— ¡Hicimos un trato!
Lucas rodo los ojos, caminando lejos de la castaña.
— ¿Un trato? — Hablo irónico. — El trato que tu rompiste al hablar. ¿Tan dolida estabas porque James Potter te dejo?
Era un simple trato, ninguno de los dos hablaría de quienes eran “sus amantes” en Hogwarts, ni con quienes se juntaban.
La unica que podia hablar era Mackenzie, y al hacerlo, aceleró todo lo que tendría que pasar dentro de unos años.
Mackenzie se levantó dispuesta a pegarle pero él detuvo su mano en el aire.
— ¿Piensas pegarme? Aquí la única culpable eres tú. — Lucas sonrio cínicamente — Si querías que este a tu lado, no te hubieras desecho de eso.
Mackenzie abrio la boca. Al parecer su pequeño secreto de la Slytherin no era tan secreto como ella pensaba, Hasley se había conseguido como novio al chico más chismoso de todo Hogwarts.
Lucas soltó la mano al ver como los ojos de Mackenzie se volvían cristalinos, nunca la habia visto llorar. Ellos siempre peleaban por cualquier cosa, no era una sorpresa que ellos se pegaran incluso, pero el verla llorar era otra cosa.
Alessia entro con una copa de vino en la mano y miro cansada a los dos herederos Parkinson y Macmillan, con la frente arrugada.
Mackenzie se limpio rápidamente la lágrima que amenazaba por caer.
— Tenemos que irnos, asi que dejen sus gritos para después de la fiesta — Demando la Parkinson — Quiero irme de una vez, no soporto a Peter y a la pretenciosa de tu madre — Dijo mirando a la Macmillan.
Al llegar a la mansión Black, Lucas buscaba con la mirada a dos personas en especifico.
Héctor y Lilith Krum.
La fiesta y la fachada se seguir con su familia, era parte del plan de Hasley.
Ese dia planeaban matar a Peter y Alessia Parkinson, meterlos en una de las habitaciones de los Black y culpar a uno de los sangre puras que se encontraba en aquella mansión. ¿Y lo mejor? Nadie podrían culparlos, Héctor nunca conocio a los Parkinson exceptuando por el hijo, Lilith Krum no existía en aquella fiesta y Lucas, era su hijo, no podria hacer eso a su propia familia.
Lucas y Mackenzie venían enganchados de los brazos al igual que los Parkinson de atrás y Esther al lado de su hija.
— ¿Quién es ella? — Pregunto Esther al lado de su hija. — Es tan plaida y pelirroja — Hablo criticando la apariencia de la chica — Mirala, es muy delgada, parace que no come nada.
El Parkinson dirigió su vista a la chica que tanto critica la Macmilllan, la chica era demasiado palida, casi tanto como Regulus, sus ojos eran un azul grisáceos y llevaba un vestido niu con corset, su cabello era como fuego, un rojo intenso. A su lado estaba Héctor junto con su novia, Keyli Stuart.
Lucas sonrió arrogante al reconocerla, era Lilith Krum o mejor dicho, Hasley Evans.
Esa era la primera parte del plan, engañar a Walburga Black, fingir que Sirius por fin hallo a alguien indicada, una sangre pura ya fuera de Slytherin o Ravenclaw.
Solo era una mentira blanca.
Hasley volteo a ellos y rodo los ojos al ver a Mackenzie al lado de él, Lucas se toco el lóbulo de su oreja dando enteder que sus padres estaban aqui, con él.
— ¿Ella no estudió contigo en Durmstrang, hijo? — Pregunto Alessia. — Se parece mucho a la tal chica Evans.
— Por favor, Alessia. — Interrumpió Peter — Ninguna sangre sucia se puede hacer pasar por uno de nosotros, son estúpidos. — Lucas arrugó su frente molesto.
— Pues dicen que es la prometida de Sirius, pense que ya habia sido tachado como traidor. — Opinó Esther.
— Y lo es, madre. — Dijo Mackenzie.
Lucas prefirió no hablar, sentía que ellos hablaban incoherencias.
— ¡Sabía que todo lo que dijiste era un farsa! — se oyó el grito de Walburga Black.
Los Parkinson y las Macmillan dejaron de hablar para buscar entre la multitud de donde provino el grito de Walburga.
Lucas noto como Regulus bajaba la mirada, Walburga señalaba a Regulus y Sirius que estaba delante de su hermano.
El slytherin trago fuerte y se acercó un poco a los Black.
— ¡No dejaré que se una a esa porquería de asesinos! — Dijo Sirius con la varita en alto.
— ¡Creíste que nos creeriamos el cuento de qué tu te unirás a nosotros! ¿Así piensas ser esposo de alguien como Lilith? Esa niña no te merece.
Lucas quiso reír en ese instante, a veces los “sangres puras” eran tan ingenuos para Lucas.
— Créeme hay veces que pienso que no la merezco. — Dijo Sirius sin bajar su varita. — No permitiré que Reggie pase por ese infierno.
— ¿Crees asustarnos, hijo? — dijo Orión Black. — Hay varios de nosotros aquí que no dudarían en matarte.
Sirius trago fuerte, volteo a ver a su hermano que asintio en respuesta. Era mejor desaparecer y no pelear. Lucas vio como el mayor de los hermanos Black buscaba con la mirada a su novia, pero ella ya habia desaparecido.
Justo cuando Orión intento tirar un crucio en dirección de Sirius, una flecha salió en su dirección dándole junto en la mano.
Orión solto un grito de dolor agarrándose la mano llena de sangre. Todos voltearon a ver a una pelirroja con un pantalón negro, una camisa negra con tiras y una casaca de cuero.
Lucas sonrió orgulloso.
— La seguridad en este lugar es muy malo. — Hasley bajo su arco. — Creí que no dejan entrar sangres sucias.
Lucas se soltó del agarre de Mackenzie y camino lejos de ellos para encontrarse con Héctor.
Hasley había dejado de ser Lilith Krum cuando Walburga le grito a Sirius. Por un minuto dejaría su plan y protegería a Sirius y Regulus.
— Hasley..— murmuro Sirius.
— ¿Quién eres tu? — dijo Walburga Black, alzó su varita en dirección a la Evans.
— Creo que no me presenté adecuadamente, Hasley Evans o debo decir próximamente Black. — Alzo los hombros. — Como quiera.
Héctor apretó los puños.
— Esa chica pasa mucho tiempo con Black. — Dijo Lucas con tono divertido.
— Es su novio, es tierno. — Dijo Keyli.
Lucas rodo los ojos y Héctor pidio a Lucas que llevase a Keyli devuelta a casa.
Entre la multitud, Peter Parkinson abrió muchos los ojos, había invetigado a Hasley Evans y en todos los registros estaban restringidos o suspendidos, era como si nadie supieran quién era realmente ella, solo sabía que era un punto débil de su hijo. Él miro a su esposa, ella asintio y en un segundo desaparecieron de la casa Black.
— Como osas venir a mi casa hacer un escándalo, lastimar a mi esposo y decir que puedes ser una Black. ¡Ya verás sangre sucia! — Walburga estaba lista para lanzarle una maldición imperdonable.
Héctor lanzó un hechizo en la dirección de la señora Black, solo para asustarla.
— Será mejor que no se meta con ella, Señora. Solo le advierto. — Dijo Héctor.
Rosier, Macmillan, Malfoy y otros más sacaron sus varitas en dirección de Evans, los hermanos Black y Héctor.
Lucas volvió aparecer cerca de las escaleras, habia dejado a Keyli en la casa de los Evans y pidio a la pelinegra que llevase a las Evans de la casa fuera de esta por seguridad, si algo llegaba a pasar.
— ¡Siempre haciendo tu entrada Lila! — se quejo Lucas llegando a su lado. — Él se fue.
Hasley alzo su arco en dirección a la lámpara colgando. — Ya lo sé. Pero no iba a dejar que maltraran a Sirius por mi culpa.
— Está nueva Hasley enamorada no me agrada. — se quejo.
Hasley soltó una risita para soltar la flecha, aquella flecha en su punta tenía un polvo que haría que aquellos sangre puras se atacarán entre si, que pensaran que están peleando con ella, una sangre sucia estaba jugando con la memoria de aquellos sangre puras.
Lucas y Hasley corrieron hasta Sirius y Regulus.
— ¿Porque todos luchan entre si? — Dijo Regulus esquivando a su prima Bellatrix que peleaba con Lucius Malfoy.
— Es gracias a Hasley. — dijo Lucas.
— ¿No estás arruinado tu plan? — hablo Sirius caminado de la mano con Hasley.
— Siempre hay uno de respaldo y creeme este no va a fallar, pero primero tenemos que salir de aquí.
Walburga se acercó a ellos y se notaba muy molesta. — ¡Estúpido traidor! ¡Avada Ked...
La palabras de Walburga quedaron cortas, Hasley fue más rápida lanzado un hechizo en dirección a la mujer.
— ¡Crucios máxima! — una fuerte luz verde salió en dirección a la madre de los Black.
Está solto un grito muy fuerte, callendo al suéter agarraba del cuello, sentía que le faltaba el aire, parecían que le tiraban latigazos, sentía que su espalda tenía heridas abiertas y les daban ahí. Walburga no sabía cómo describir aquel crucios pero sin dudo era más doloroso que los comunes.
Hasley agarro la mano de Sirius, este seguía en shock, nunca había visto a su madre tirada en el suelo gritando y retorciendo de dolor.
Regulus estaba igual que Sirius, por lo que Lucas agarro de la mano del Slytherin jalandolo.
— ¡Nos vemos en el departamento! — Grito Hasley para luego desaparecer con Sirius.
— ¿A donde vamos? — Pregunto Regulus.
— A ponerte a salvo, amigo.
Lucas y Mackenzie se agarran de la mano por unos microsegundos
Givi y yo: ¡UN APLAUSO PARA ESTA PAREJA ENAMORADA!
¿A que te refieres Lucas con deshacer de eso?
Lucas se enteró del secreto de Mackenzie, porque James le dijo a Sirius y Sirius le dijo a su hermosa novia, Hasley y ella le dijo a su mejor amigo, Dereksito. ¿Vuelan rapido los chismes no?
¿Alessia que me tratas de decir? ¿Qie Lucas no es hijo de Peter o qué?
Esther de criticona hacia mi bebe Lilith (Hasley)
¿Ya pero notaron que porfin Lucas admitió que Regulus es su amigo? ¡VIVAN LOS NOVIOS!
Solo digo que ya estemos preparados, que en poco ya nos quedamos sin Lucas Parkinson. 😘
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