Leo lleva meses hablando sobre la nueva película que ha estado grabando, y se le ve bastante ilusionado por la premier de la peli.

Se fue de viaje con el resto del elenco hace dos semanas, y ya se le echa de menos. Hace falta esa chispa de sensatez y bromeo en el grupo.

Rachel, Diane y Kate me han acompañado a comprar y al final hemos terminado pasando una tarde de chicas.

Estamos esperando en la cola de una tienda cuando me percaté de que alguien conocido se me acercaba.

Antes incluso de que llegase, ya sabía quién era.

- ¿Qué quieres ahora, Blair?

Ella me miró con una cara que jamás le había visto. Parecía... arrepentida.

- Solo quería pedirte disculpas. Después de la última vez, me di cuenta de que nunca me hiciste nada para que yo te tratase así. Supongo que sentía envidia.

Vaya, eso sí que no me lo esperaba.

- Eres muy afortunada, Amber. Y, aunque no podamos ser amigas, al menos me gustaría disculparme. No te merecías nada de lo que te hice.

- Vaya, Blair. No me lo esperaba. Pero me alegra que te hayas dado cuenta.

- Lo pasaste mal por mi culpa. No me lo perdonaré jamás.

- Si te sirve de consuelo - le dije - te perdono. Empecemos de nuevo.

- Muchas gracias, Amber. De verdad, no se como pude no darme cuenta de lo buena persona que eres. - se quedó callada antes de continuar - Bueno, debo irme. Adiós.

- Adiós

Blair se dio la vuelta y se fue, visiblemente más contenta.

- ¿Qué acaba de pasar? - preguntó Diane

- Sigo procesándolo. - respondí.

Pensándolo con más tranquilidad, me di cuenta de que, en el fondo, esperaba con ansia ese día.
Y si Blair demostraba que estaba dispuesta a cambiar, quizá si pudiera nacer una amistad entre nosotras. Con el tiempo.