alexitimia ━ ━ vol ii
034. death

Mia se despertó a la mañana siguiente en la cama de Klaus con un dolor punzante en su cabeza.

Al sentarse, sus ojos miraron con aburrimiento su habitación antes de recordar a Klaus.

La castaña saltó de la cama, empujando el dolor de cabeza al fondo de su mente mientras buscaba su teléfono.

Al encontrar el número que buscaba,
Mia pico la llamada, colocando el
teléfono en su oído frenéticamente,

—¿Hola? Señorita Mia, ¿Qué está pasando?—la persona pregunta desde el otro extremo de la llamada.

—Señor Elijah,—Mia contestó aliviada de que él respondiera,—Tiene que volver, los idiotas tienen a Klaus—habló en forma preocupada por primera vez en mucho tiempo.

—¿Qué? Mia, ¿idiotas?—Elijah
habló en voz baja, tratando de
calmarla para que pudiera entender lo que decía.

—Ellos tienes a mi Klaus—susurró en voz baja.

El original suspiró en el otro extremo mientras escuchaba la angustia en el tono de la castaña.

—¿Dónde está Rebekah?—le preguntó
con urgencia, sabiendo que la chica estaría bien con ella haya que Elijah pudiera llegar—¿O Magnus?

—No tengo idea.

—Llama a Rebekah y quédate con ella hasta que llegue allí. Lo traeremos de vuelta, Mia. No importa lo que cueste, te lo prometo—le dijo Elijah antes de colgar el teléfono.

Mia suspiro mientras se ponía de pie y marcaba el número de Rebekah, al no tener respuesta, marcó el número de su hermana esperando que contestara ella.

Haría lo que fuese por que Klaus estuviera con ella de nuevo. Y tal vez ellos dejarían Mystic Falls para siempre.

❍❍❍

—¡Stefan!—escucharon el grito enojado de Elena, proveniente de su hogar.

Mia y Elijah se dieron una mirada antes de abrir la puerta.

Elena era retenida por Magnus, y Stefan estaba con la mirada baja.

—Elijah—el joven Salvatore saludó,
temblando visiblemente.

—Hola de nuevo—Elijah sonrió
mientras él y Mia entraban por la
puerta principal mientras Stefan, se ponía más tenso—Hermano—saludó a Magnus quien le sonrió con tristeza.

Mia y Elijah se sentaron en la mesa
del comedor de los Gilbert, Elena se
sentó frente a ellos mientras Stefan
y Magnus se hicieron a un lado.

—Todo lo que necesitamos es quitarle esa estaca a Alaric. Una vez que haya. sido desarmado, y las armas en mi poder, mi familia se dispersará hasta los confines de la tierra y Alaric no nos seguirá—el original explicó su plan anterior.

—¿Y tú simplemente, ¿correrás?—
cuestionó el joven Salvatore, sacando una silla para sentarse al lado de Elena.

—Lo hemos hecho antes—Elijah se encogió de hombros,—Klaus y Rebekah pasaron la mayor parte de mil años evadiendo a mi padre. ¿Qué es otro medio siglo mientras que tu y tu hermano desaparecen del mapa?—el original habló causando que Stefan a sintiera antes de dirigir su atención a Mia y Elena.

—¿Y ustedes van con ellos?—Le preguntó, con expresión triste mientras sus ojos lo miraban friamente asintiendo con la cabeza en respuesta.

—No estaré en el mismo lugar que ustedes—contestó Mia. Elena asintió estando de acuerdo con su hermana.

Stefan hizo un gesto de dolor ante su respuesta. Sabian que tenía razón, que merecía una vida lejos de ellos. Lejos del dolor que le habían causado.

—Finalmente lo hemos detenido, Elijah. Después de todo lo que nos ha hecho, no puedo dejar que lo traigas de vuelta,—Stefan habló desesperadamente, sus ojos suplicando al Mikaelson.

Elena quiso golpear al vampiro pero Magnus la detuvo una vez más.

—Te doy mi palabra, Stefan. No reviviré a Klaus hasta qué tu y tu hermano estén seguros. Tal vez eso le enseñe finalmente algunos modales—respondió Elijah, mintiendo.

—¡No! ¿Hola? ¿Esa conmoción cerebral le causó daño cerebral? ¡Sus hermanos lunáticos nos matarán a la primera oportunidad que tengan!—Damon de repente gritó por el altavoz del teléfono que estaba sobre la mesa.

—Ustedes no sufrirán ningún daño—interrumpió Elijah.—¿Tenemos un trato—preguntó, su paciencia comenzaba a agotarse.

—¡No! ¡No, no, no, no! ¿Mencioné que no?—Damon habló una vez más causando que Mia se agarrara a un lado de la mesa del comedor en señal de molestia.

—¿Por qué quieres el cuerpo de Klaus?—Stefan preguntó mientras miraba a Elijah, causando que Elena lo miraba con incredulidad.

—Es mi hermano. Permanecemos juntos Elijah—respondió con calma causando que el a sintiera.

—Tenemos un trato—suspiro causando que Mia y Elijah sonrieron brillantemente.

Jeremy volvió a casa unos minutos después, contándoles lo que Alaric le había dicho, haciendo que el
grupo frunciera el ceño.

Sin embargo, después de revisar su plan y de planear algunos detalles adicionales, Jeremy llamó a Alaric mientras el resto del grupo lo observaba con anticipación.

Alaric estaba todavía sentado en la
barra del Mystic Grill, revolviendo su bourbon en su vaso cuando recibió
una llamada de Jeremy.

—¿Si?—el joven Gilbert no perdió tiempo en responder.

—Sé donde está el cuerpode Klaus—reveló causando que Alaric sonriera, inclinándose hacia adelante en su silla.

—Bien. Dime—exigió haciendo suspirar a Jeremy.

—Damon está en camino para enterrarlo en el bosque de la Ruta 12. Te enviaré un mensaje con los detalles—respondió el joven adolescente.

—Gracias, Jeremy. Estás haciendo lo correcto por tus hermana—le dijo Alaric, causando que Jeremy a sintiera.

—Lo sé—declaró, mirando a Elena y Mia antes de colgar.—Se lo creyó—dijo el joven Gilbert mientras miraba hacia Stefan, Magnus, Elena, Elijah y Mia que lo miraban con ansiedad y aburrimiento.

❍❍❍

Mia abrió sus ojos desconcertada al ver que estaba en una camioneta. Lo último que recordaba era que ella y Elena estaban por salir a la mansión Mikaelson para esperar el cuerpo de Klaus y luego sintió un golpe dejándola inconsciente.

Volteo a ver a su alrededor y veo a Elena al volante completamente seria.

—Que pasa?—se acomodo bien en el asiento—. ¿A donde vamos?

—A un lugar seguro—murmura sin voltear a verla.

—¿Que pasa? ¿Por que vamos a un lugar seguro?

Elena se queda callada mientras sigue conduciendo.

—Lena—la llama al ver como sus ojos se cristalizan.

—Alaric mato a Klaus—suelta de golpe—.Damon y Rebekah no pudieron hacer nada por evitarlo, lo siento tanto Mia.

—No, no, no—cierra sus ojos con fuerza.

Era imposible.

Su Klaus no podría estar muerto. Debía ser una broma.

Elena solloza, pero siguió manejando.

—Lo siento, Mia. Pero tengo que llevarte a un lugar seguro—volvió a repetir.—Nuestra vida no tendría que ser así—solloza Elena—.Nada esta bien..

Mia volteó a verla y tomó su mano con fuerza.

—Mia, Lo siento. Yo no..—se calla y suelta de su mano de golpe cuando una silueta aparece en medio de la carretera.

Elena la esquiva para no golpearla con la camioneta, pero pierde el control del coche y entonces Mia se da cuenta de donde se encuentran.

Salieron del puente e impactaron con el agua.

—¡Mia!—escucha el grito asustado de Elena a lo lejos.

Mia sintió un fuerte dolor en su cabeza y entonces todo se volvió negro.

❍❍❍

El tiempo vuela.

Es una frase que al principio Mia no le prestaba atención. Era una simple frase que sus padres repetían.

Ella solo se podía imaginar un reloj con alas.

Pero ella era Mia Gilbert y por más que quisiera no dejó de pensar en eso.

Hace casi 3 años sus padres junto a Elena y ella, habían caído del puente en su accidente. Y aquí estába ella de nuevo.

Anteriormente había estado en coma por dos semanas enteras. Y ahora parecía ir por el mismo camino.

Elena estaba sentada afuera de la sala del hospital, la chica había muerto con sangre en su sistema. Lo que implicaba que estuviera en transición.

Pero el momento en el que se dio cuenta que su hermana estaba en el hospital sin despertar; no dudo ni un segundo en completar la transición, así convirtiéndose en vampiro.

Magnus la estuvo acompañando todo el tiempo igual de preocupado por su cuñada.

Los dos habían avisado a sus familias el estado de Mia, por lo que esperaban su llegada.

—Es mi culpa,—se lamentó Elena.—¿Como pude ser tan estúpida para no darme cuenta?—sollozo mirando en un punto fijo.

Magnus la abrazó de inmediato sosteniendo su rostro.

—Cariño, esto no es tu culpa—negó de inmediato—Tu no tenías idea de nada, en este caso sería del vampiro que te obligó—acarició su rostro.

Elena iba a decir algo más pero se escucharon unos pasos apresurados.
Jenna y Jeremy venían con urgencia hasta llegar con Elena.

—¡Elena!—la abrazó su tía revisándola para saber si se encontraba bien.—¿Qué fue lo que pasó?—cuestionó.

—Y-yo—quiso hablar pero no salieron palabras de su boca. Justo en ese momento aparecieron Rebekah y Elijah igual de preocupados que todos.

—¿Dónde está ella?

—Está en terapia intensiva—respondió Elena preocupando a todos en la sala.

—¡Elena!—una vez más miraron detrás de ellos.

Caroline, Stefan y Damon se acercaban de prisas.

—¿Que fue lo que pasó?

—¿Ella está bien?

—¿Donde está?

Hablaron al mismo tiempo.

—¡Callense!—gritó la doble—¡No quiero escuchar a nadie!—sollozo para ser consolada por Magnus.

Unos momentos después, que para todos eran infinitos, un doctor apareció.

—Familiares de ¿Mia Gilbert?—llamó la atención de todos.

Enseguida las nueve personas estaban de pie y junto al doctor quien retrocido sorprendido.

—Soy su madre—habló Jenna acercándose.

—En ese caso, yo soy su padre—Elijah se acercó por igual.

—Claro, la joven Gilbert presentó síntomas de dificultad respiratoria—comenzó a explicar—Pudimos controlarlo. Su piel estaba pálida y fría debido al agua. Pero de ahí en más no hay nada de que preocuparse.

—¿Eso quiere decir que ella estará bien?—cuestionó Damon con urgencia.

—Ella ahora está siendo llevada a piso, pero cuando despierte podrán estar con ella.—le sonrió antes de irse.

Elena soltó un suspiró de alivio y sonrió, Mia estaría bien y es lo único que importaba.

❍❍❍

La luz era cegadora a los ojos de Mia, acostumbrarse a ella fue complicado por unos momentos.

Le dolía el cuerpo enteró, su respiración era suave y sus ojos escabeaban el lugar.

Estaba en lo que reconoció como el hospital. Vio que no había nadie más en la habitación por lo que decidió dormir una vez más.

Cuando estaba por caer en un sueño, escuchó el ruido de alguien abriendo la puerta.

No le tomo importancia y siguió con los ojos cerrados.

Sintió como acariciaban su mejilla con suavidad. Abrió sus ojos con calma para encontrarse con él rostro de Tyler.

—¿Tyler?

—¿Como estás?—se notaba la preocupación en su tono de voz.

—Adolorida—confesó.—Y tengo hambre—miro a su amigo quien se río.

—Siempre tienes hambre, petit papillon—murmuró con diversión.

Mia lo miró unos momentos más antes de abrir sus ojos.

—¿Gaston?—susurró.

—Siempre vuelvo a ti Bella, siempre—murmuró con una sonrisa.

Mia sonrió mientras lo veía.

Klaus estaba vivo y ella también. No había nada ni nadie que pudiera separarlos.

Ni siquiera la muerte podría hacerlo y eso ya lo habían comprobado.

Después de todo. Klaus siempre volvería a Mia sin importar que. Ella era su lugar seguir y no estaba dispuesto a perderla. Y si tenía que morir por ella y revivir cuantas veces fuera, lo haría. Solo por ella.

Siempre sería ella.

Siempre sería Mia.

Su pequeña Mariposa.