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𝟎𝟏𝟕. 𝐡𝐢́𝐛𝐫𝐢𝐝𝐨𝐬

alexitimia ━ ━ vol ii
017. hybrids

—¿Estás bien? ¿Ray se está poniendo pesado?—Klaus bromeaba mientras él, Stefan y Mia subían las Montañas Smokey, buscando la manada de Ray, 
el Salvatore llevando al hombre lobo muerto sobre su hombro.

—Estoy bien—murmuró el vampiro, asegurando su sujeción al hombre lobo para que no se cayera.

—¿Estás seguro de eso? Sabes, hemos estado caminando durante bastante tiempo. Si necesitas agua o sentarte un poco—el híbrido se alejó, con una divertida sonrisa en su cara. 

—¿Y tu? ¿No está muy pesada Mia para alguien tan viejo como tú? —le pregunta Stefan a Klaus, quien trae en su espalda a Mia. 

—Yo no estoy pesada. —dijo Mia haciendo que Klaus se pusiera nervioso. 

Su cabeza estaba entre su hombro y cuello de él, por lo tanto su aliento erizo su piel. 

—Sí, si pudiéramos saltarnos la charla, sería genial—Stefan habló. 

—Tanta melancolía—Klaus habló 
burlonamente, ignorando lo que 
Stefan había dicho no hace ni 2 
minutos causando que pusiera los 
ojos en blanco,—Tu auto-odio te está sofocando, amigo mio.—Stefan resopló ligeramente,

—Quizás es porque estoy un poco cansado de cazar hombres lobo. Hemos estado en ello todo el verano—replicó exhausto. 

—O por qué Klaus no te agrada. —recalcó Mia haciendo que Stefan se riera y asintiera. 

—Oh eso queda mucho mejor. —estuvo de acuerdo con ella. 

Klaus rodo los ojos con irritación y vio como Stefan se adelantaba. 

—¿Estas cómoda amor?—preguntó con diversión. 

—Sip. —se recostó más sobre su espalda. 

Más adelante, el híbrido notó que Stefan se había detenido.

Camino hacia el, Klaus vio lo que le había llamado la atención, sus ojos se posaron en un grupo de personas sentadas alrededor de una fogata.

—Bien amor es hora de que te bajes.—le hizo saber a Mia y ella se bajó. 

Sabía que estaba a punto de hacer su gran entrada y que con ella en su espalda no daría miedo. 

—Ah, gracias à nuestro amigo Ray parece que hemos encontrado una manada —dijo el original cuando comenzó a caminar hacia el grupo, Mia y Stefan detrás de él.

Cuando se acercaron, los ojos de cada 
uno de ellos se abrieron de par en par, y Stefan se tomó la molestia de tirar el cadáver de Ray al suelo.

—¡Ray! Oh Dios mío!—una chica de cabello rojo corto gritó mientras corría hacia el lobo, cayendo de rodillas a su lado. —¿Quién eres?—la chica siseó con una mirada mientras se observaba a Mia y Stefan. 

Klaus aprovechó la oportunidad para 
dar un paso adelante, alertando de su presencia con una sonrisa en su rostro.

—La cuestión importante es quien soy—dijo con un aire de confianza, los ojos de la chica se dirigieron hacia él,—Por favor, perdonen la intromisión. Mi nombre es Klaus—dijo haciendo que la chica retrocediera con miedo.

—Tú eres el híbrido—tartamudeó, causando que el resto del grupo se 
animara a la aprensión.

—Has oído hablar de mí. Fantástico.

Mia se volvió a Stefan y le susurro. 

—Solo alimentarán su ego. —eso hizo que Stefan riera con disimulo. Klaus quién había escuchado todo les dio una mala mirada. 

❍❍❍

—Es fascinante, en realidad—dijo el 
original mientras miraba a los lobos 
desde su asiento en el tronco, Mia 
y Stefan sentados a su lado.—Un 
hombre lobo que no está en deuda con la luna, un vampiro que no arde con el sol. Un verdadero híbrido—dijo, haciendo que la de cabello rojo de antes temblara de miedo.

De repente, un grito de asombro llamó la atención de todos mientras cada uno de sus ojos se dirigía a la fuente del sonido. Ray se sentó, luchando por respirar.

—¿Qué me está pasando?—jadeó, arañándose el cuello.

Klaus miró hacia Stefan, haciéndole señas para que hablara, el Salvatore le 
ofreció una amarga sonrisa antes de 
ponerse de pie y dirigirse a la multitud de lobos.

—¿Alguno de ustedes es humano? Su amigo necesita sangre humana para completar su transición a vampiro— preguntó mientras el grupo se sentaba en silencio.

—Negándose a responder, o hace falta mucho.—Klaus habló, molesto por su silencio, —Sólo un sorbo ¿Alguien? ¿Un novio, una novia, que se ha unido a nosotros? —El grupo se sentó en silencio una vez más, sin querer darle al híbrido lo que quería.

—Si no la tiene, morirá—declaró Stefan exasperado cuando su paciencia comenzó a agotarse.

—¿Que pasa con ella?—Un hombre rubio habló, con una pequeña mirada en su rostro mientras miraba a Mia. 

Mia estaba dispuesta a pararse para darle su sangre a Ray cuando Stefan la detuvo y la regreso a sentar. 

—Sí alguno de ustedes le hace daño, no dudaré en arrancarles el corazón de su cuerpo. ¿Entienden?—el híbrido se agitó, mirando directamente al hombre rubio delante de él.

Klaus le dio una pequeña sonría a Mia que ella contestó con el pulgar arriba, antes de dirigirse hacia el grupo que estaba delante de él.

—Espera un momento—dijo mientras sus ojos se filtraban a través de los lobos.—Tú —dijo el híbrido mientras sus ojos se detenían frente a un humano.

Moviéndose rápidamente hacia él, el original agarró el brazo del humano, mordiéndolo antes de arrojarlo al suelo junto a Stefan, quien lo inmovilizó.

—Si tú no lo bebes Ray, lo haré yo—gruñó el Salvatore al hombre lobo que estaba a su lado, con las venas sobresaliendo de sus ojos,—El problema es que no sé cómo parar.

—¡No!—gritó la pelirroja, intentando correr hacia delante para salvar a su 
novio, sólo para ser agarrada por el cuello por Klaus.

—Es el nuevo orden, cariño,— el híbrido le dijo a la chica—O te unes a nosotros, o mueres.—La chica le frunció el ceño, una mirada fija en sus ojos. 

—Prefiero morir que ser un vampiro— escupió causando que Mia asintiera estando de acuerdo con su actitud.

—Elección equivocada—murmuró el original cuando su cara cambió.

Mordiendo su muñeca, Klaus obligó a la chica a beber su sangre antes de romperle el cuello, y la pelirroja cayó en sus brazos.

—Me lo agradecerá más tarde—se rió, dejándola caer al suelo y pasando por encima de su cuerpo.

Al volverse a enfrentar al grupo de lobos de nuevo, con los ojos todavia dorados y la cara pálida mientras se lamia la sangre que le quedaba en los dedos. 

Mia se le quedó viendo más de lo que debía en una especie de transe por sus acciones, sin darse cuenta su cara de estaba poniendo caliente. 

Klaus estaba sonriendo al ver la reacción de Mia. 

—Bien, ¿quién es el siguiente? 

❍❍❍

Mia miró al grupo de hombres lobo 
desde su asiento en el tronco. Estaban todos muertos, tenían la sangre de Klaus en su sistema. 

—Ahí—dijo Klaus mientras sacaba su muñeca ya curada de la boca del humano.—Como nuevo. Ahora relájate, ¿de acuerdo, amigo? Te necesitaremos cuando el resto de ellos se despierte.— dijo antes de levantarse y caminar hacia Ray y Mia. 

—Están muertos—Ray exhaló mientras su cuerpo temblaba,—Están todos muertos—murmuró tristemente, causando que Mia se acercara a él. 

—Ya, ya, ya. —le dio unas palmaditas en la espalda. El hombre lloro sintiendose consolado. 

—Ah, ha pasado por su transición. Debería sentirse mejor pronto—dijo el híbrido mientras examinaba al hombre lobo no muerto que estaba sentado demasiado cerca de Mia para su gusto.

—¿Así que este es tu plan macabro? ¿Construir un ejército de perros?—Mia cuestionó. 

—No, no esclavos—negó Klaus, una sutil mirada en sus ojos mientras miraba a la chica,—Soldados, camaradas.—Stefan lo miró confundido, escuchando la conversación.

—¿Para qué guerra, podría preguntar?—cuestionó el vampiro mientras se apoyaba en el árbol junto a Mia.

—Oh, no te armas después de una guerra aclarada, Stefan—el híbrido comenzó con una sonrisa divertida,—Construyes tu ejército tan grande que nadie se atreve a pelear—terminó, una confiada sonrisa en su hermoso rostro. 

—¿Qué te hace estar tan seguro de que serán tan leales? Eres un idiota—recalcó la chica.

El híbrido se volvió hacia ella, con una sonrisa divertida. aún pegada a su cara.

—Bueno amor, no es difícil ser leal cuando estás en el equipo ganador. Eso es algo que ambos deben aprender cuando les quite de encima esas horribles astillas depresivas—dijo mientras señalaba entre Stefan y Mia. 

Mia le levantó su dedo de en medio antes de dirigir su mirada hacia el híbrido recién convertido que estaba a su lado, viendo cómo le salía sangre de los ojos.

—¿Ray?—murmuró ella confundida, mientras con un palo lo tocaba para saber si seguía vivo. —Dame una señal si estas bien—le dijo pero el hombre no se movió. —Bien, mejor dame una señal si estas vivo.—cambio lo que dijo. 

Entonces el hombre levantó su dedo pulgar con pocas fuerzas. Mia asintió estando conforme. 

—¿Por eso me mantienes cerca? ¿Para presenciar mi ajuste de actitud?— Preguntó Stefan, riéndose amargamente mientras miraba al original que se sentó al otro lado de Ray. 

—Sabrás por qué te mantengo cerca 
cuando decida que quiero que lo sepas—murmuró el híbrido mientras agarraba la cara de Ray, obligando al lobo a mirarlo.—Algo esta mal—dijo mientras soltaba la cara del lobo, parado en el tronco y poniendo sus manos en su cadera, desconcertado.

—Eso no debería estar pasando, ¿verdad?—Stefan preguntó mientras se acercaba a mirar más de cerca, un pequeño gruñido emitiendo al ver la 
sangre.

—No eres tan listo como creía. —Mia negó. 

—Dijiste que se iba a sentir mejor—gimoteó Ray mientras empezaba a mecerse ligeramente en el tronco,—¿Por que no se siente mejor?—preguntó mientras miraba a Klaus, la sangre seguia corriendo de sus ojos de chorro de sangre.

Stefan resopló ligeramente.—Alguna raza maestra—murmuró en voz baja con las cejas levantadas.

—Pierde la actitud—El rubio original 
escupió mientras miraba duramente 
al vampiro Salvatore.

Otro jadeo sono cerca de la fogata cuando la mujer pelirroja se despertó, mirando alrededor del campamento se sobresaltó.

—Derek, ven a alimentar a tu novia—llamó Klaus, el obligado humano corrió hacia la chica en el suelo, incapaz de desobedecer.

Justo cuando Derek extendió su brazo, un rugido vicioso emitió desde la garganta de Ray haciendo que la cabeza de Mia se dirigiera hacia él.  Antes de que ella tuviera la oportunidad de moverse, Ray se acercó a ella, empujándola hacia atrás del tronco. 

Mia reaccionó rápido y tomó la rama del árbol y le empezó a dar de golpes a Ray. 

—¡Perro malo! —le dio un golpe en la cabeza haciendo que Ray gimiera de dolor. —¡Perro malo! —el híbrido chillo de dolor antes de que se alejara a toda velocidad, saltando sobre unas grandes rocas.

—Ve por él—ordenó Klaus a Stefan con fiereza mientras se dirigía hacia la joven Gilbert, examinandola.

Stefan corrió hacia Mia y la miró para saber si estaba bien. 

—¿Estas bien? ¿Te lastimó? —le empezó a tocar el rostro. Causando que Klaus resoplara ligeramente. 

—Estoy bien, ve por Ray. —le dijo. 

Stefan se veía indeciso por dejarla sola pero Mia le dio un asentimiento haciéndole saber que está bien, con un suspiro Stefan en cuestión de segundos se fue a toda velocidad tras el híbrido.

—¿Estás bien?—preguntó el original, la preocupación se mezcló con su tono mientras veía a la chica. 

Alejando su mano de la parte posterior de su cabeza, Mia notó que la sangre cubría su mano causando que mirara al híbrido preocupado.

Klaus le sonrió antes de morderse la 
muñeca y ofrecérsela la joven bruja. 

La puso en su boca y tomó un poco hasta que se curó su cabeza. 

❍❍❍

—¿A dónde se fue?—exigió el híbrido 
mientras él y Mia encontraban a 
Stefan en la cima de un acantilado, 
sin ningún Ray a la vista.

—ÉL… se escapó. Olvídalo, vámonos—dijo el Salvatore mientras pasaba a su 
lado, tomando la mano des chica. 

—Una mordedura fatal de hombre lobo—Klaus sonrió mientras agarraba el brazo de Stefan mientras. 
trataba de pasar. 

—Sí, voy a necesitar tu sangre para 
curarme—dijo el vampiro más joven, 
sonriendo a la chica cuando notó su mirada asegurándose de que él estaría bien.

Al notar que los dos amigos se miraban el uno al otro, Klaus no pudo contener rodar los ojos mientras se volvía hacia el vampiro Salvatore con la mandíbula apretada.

—Bueno, te diré qué. Encuentra a Ray, 
entonces te curaré—dijo con una divertida sonrisa en su cara, haciendo que Mia se burlar en silencio. 

Klaus no sabía que Mia podia curar las mordeduras de hombre lobo por lo que no podía curar a Stefan sin que el se diera cuenta. 

Ignorándola, Klaus se volvió y caminó de vuelta hacia el campamento. 

—Vamos, vayamos a buscar a ese perro fugitivo—murmuró mientras pasaba junto a él, en la dirección opuesta a Klaus. 

Stefan sabía que si le decía que no iría ella no le haría caso. Por lo que tomo su mano entrelazandola y tomaron camino. 

Mientras los dos caminaban, notaron que Ray estaba a punto de atacar a alguien, pero antes de que pudiera hacerlo, Stefan se precipitó hacia él, arrancándole el corazón del pecho.

—Hola Damon—Mia lo saludo con la mano. 

Damon le sonrió antes de ir por ella y abrazarla. 

—Qué casualidad encontrarte aquí—sonrió haciendo que Stefan lo mirara fijamente.

—¿Qué parte de 'no nos sigas más' se perdió en la traducción, Damon? —preguntó el joven Salvatore a su hermano mientras lo miraba con frustración.

—Puede que quieras hablarlo con tu 
novia. Si no quieres que te persiga, yo 
dejaría de hacer llamadas nocturnas—respondió Damon, con una sonrisa sarcástica en la cara.—Además no dejaremos a Mia nunca. 

—Yo no la llamé—Stefan murmuró mientras miraba hacia el suelo.

—Mentiroso. —susurro Mia.

Quien por cierto seguía abrazada de Damon.

—Ella tiene que hacerlo. Porque nunca voy a volver—respondió Stefan antes de agacharse a recoger el cadáver de Ray,— ¿Por qué no la llevas a casa? A ver si puedes mantenerla allí esta vez—dijo bruscamente mientras agarraba el brazo de Mia, tirando de ella con suavidad.

Girando la cabeza para mirar por encima del hombro, Mia se despidió con una mano de Damon quien le mando un beso, mientras ella rodaba los ojos. 

❍❍❍

Después de regresar al campamento, 
Mia y Stefan encontraron a todos los 
miembros de la manada muertos en el suelo con Klaus sentado en un tronco, una botella de cerveza en la mano y un ceño triste grabado en su cara.

—Se volvieron furiosos—dijo el híbrido mientras Stefan dejaba caer el cuerpo de Ray al suelo. —A algunos los maté, los otros simplemente se desangraron—habló en voz baja con una mirada distante en sus ojos. El híbrido se puso de pie, caminando más cerca de los dos adolescentes lentamente,—Al final, están todos muertos.

Mia dio un paso atrás cuando Klaus gritó y lanzó la botella de cerveza a un árbol cercano. 

—Hice todo lo que me dijeron continuó gritando con rabia,— Debería ser capaz de convertirlos—dijo oscuramente mientras miraba al lobo y al vampiro.—Rompi la maldición. Maté a un hombre lobo. Maté a un vampiro. Maté a la doble—murmuró causando que Stefan mirara al híbrido con los ojos abiertos, con pánico en sus cara cuando comenzó a darse cuenta de por qué el original no podía crear más híbridos.

Elena no estaba muerta.

—Te ves como el infierno—comentó Klaus a Stefan. 

—La última vez que lo comprobé, me estaba muriendo.—comentó Stefan,—Y no quieres curarme—dijo mientras extendía su brazo, la mordedura de hombre lobo se veía infinitamente peor. 

La mirada del híbrido se dirigió hacia Ray. 

—Tuve que sacarlo. No tuve elección—explicó el vampiro de ojos verdes,—Te fallé. Lo siento—insistió mientras 
Klaus sacudía la cabeza. 

—Debería haber funcionado—dijo 
abatido mientras se agachaba para 
recoger una botella de cerveza vacía, 
mordiéndose la muñeca el híbrido dejó que su sangre goteara en la botella antes de entregársela a Stefan.

—Hasta el fondo, nos vamos—declaró Klaus mientras se dirigía a Mia y le extendía su mano. 

Ella lo miró y tomó su mano mientras entrelazaban sus dedos. Klaus al sentir su tacto se calmo un poco por lo que le sonrió mientras avanzaban. 

Stefan detrás de ellos rodo los ojos mientras se burlaba juntando sus manos.

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