« DISCULPAME »

De alguna manera sabía que el ambiente para Harry y Paige se les habría hecho confuso, desde que Hasley Black se fue de la cocina.

Harry se sentó al frente de Ron, el Potter se aseguró que la Parkinson estaba ayudando a la señora Molly con la cena y se inclino un poco hacia los pelirrojos.

— ¿Qué paso con tu madre? Ni siquiera Sirius actuo asi. — Pregunto mirando a la Black.

— No es sobre ti, te lo aseguro. — Hablo la Black, luego soltó un suspiro. — ¿Es deliciosa la comida de la señora Weasley?

La pregunta de Ada dejo confundidos a los Gryffindor, de inmediato las bandejas volaron directo a la mesa, al igual que su madre entro a la cocina acompañada de su padre.

Ada le dio una sonrisa dando entender que estaba todo bien.

Ron estaba listo para comer cuando un tenedor se cruzo en su camino hacia su pedazo de pollo.

—. ¿Qué?

— Yo quiero eso. — Dijo Ada agarrando la pierna de pollo y poniendo en su plato.

— Yo lo iba a coger primero. — Se quejo el Weasley. — Eso es mio, Ada.

— No. Yo lo quiero.

Los gemelos soltaron una risa al ver como el Weasley se quejaba como un niño pequeño.

En realidad a Ada no le gustaba esa presa pero por lo que había observado al sexto Weasley sabia que esa era su parte favorita.

La cena ya estaba por acabar y Ada ni siquiera habia tocado la presa en su plato, suspiro y le entrego la parte de su comida al Weasley, este le frunció el ceño.

Al terminar de comer, Hasley levanto su varita para que todos los platos desaparecieran y quedara limpio la mesa.

— Yo creo que ya es momento que vayan a la cama — Demando Molly.

Ada puso una mano en su pecho ofendida, ella nunca recibía ordenes de nadie y peor en una casa que llevaba su apellido.

— No, todavía no, Molly.—Dijo Sirius para después voltear a ver a Harry— Sabes, estoy sorprendido contigo. Creí que lo primero que harías sería preguntar por Voldemort.

Ada junto los codos en la mesa y poniendo su cabeza en sus manos, atenta. Conocia a su padre y sabía que era una vieja chismosa, su mamá Lila decía que ella también pero ella lo llamaba recolectar información.

— ¡Y lo hice! Le pregunté a Mione y Ron, pero me dijeron que no me podían decir nada. Porque no sabían nada y porque no nos aceptan en la orden.

Hasley miro a la otra pelirroja Black, ella asintió confirmando lo que dijo Harry.

— Y ellos tienen toda la razón.—Dijo Molly—Aún son jóvenes.

— ¿Y desde cuando se tiene que estar en la Orden para hacer preguntas?—Dijo Sirius—Harry estuvo atrapado en esa casa...¡Tiene derecho a saber lo que está pasando!

— ¡Un momento! —Dijo uno de los gemelos, George.

— ¿Como es que Harry tiene la posibilidad de que sus preguntas sean contestadas? —Dijo el otro gemelo, Fred

— ¡Hemos intentado obtener información y ustedes no nos han dicho nada! —Dijo George.

Ada si sabía pero ella tampoco podia decir nada a menos que sus padres hablaran primero.

— “Tu eres demasiado joven“ “Tu no estás en la orden” —Decía Fred—Harry aún ni siquiera tiene edad.

— No es nuestra culpa que no les hayan querido decir nada.—Dijo Hasley—Esa es decisión de sus padres. Harry y Paige por otra parte...

— ¡No te corresponde decidir que es bueno para Harry!—Dijo Molly—¿Han olvidado lo que Dumbledore dijo, acaso?

Ada abrió los ojos al escuchar como la señora Weasley interrumpia a su madre, ella recordaba que su madre una vez fue a defenderla y un profesor la interrumpio, dedde ahi nunca supo nada de aquel profesor. Ahora se sentía ofendida, quien se creía la señora Weasley para interrumpir a su madre.

— ¿Que parte? — Dijo Sirius.

— La parte de no decirle a los jóvenes más de lo que necesitan saber.—Dijo Molly

Sirius miro discretamente a su hija, ella era la unica de los adolescentes que sabía en aquella mesa. Ella miro hacia abajo para no ser tan evidente como su padre, vio sus anillos como los más interesante pero atenta a la conversación.

—No tenemos la intención de decir más de lo que necesitan saber, Molly—Habló Hasley con neutra —Pero creo que Harry al ser quien vio a Voldemort regresar y Paige quien...perdió a su novio. Tienen derecho.

—No son miembros de la orden del fénix.—Dijo Molly—Harry tiene quince años, y por lo que se, la señorita Parkinson tampoco es mayor de edad.

—Y Harry a tenido más enfrentamientos como algunos de la orden—Dijo Sirius—O tal vez más que otros.

—Y nadie pone en duda lo que ha hecho.—Dijo Molly—Pero aún son unos niños.

—¡El no es un niño!—Dijo Sirius

—¡Tampoco es un adulto!—Dijo Molly—Pero Harry no es James.—Molly vio a Sirius—O Lily—Ahora llevó su vista a Hasley—Y la señorita Parkinson no es su padre.

Ahora era Ada quien se quería levantar de su sitio ¿como le ocurre decir esas estupideces? ¿Quien se creia?

La respiración de la Black se volvia pesada, no sabía cuanto duraría antes que exploté ella, no importaba si todos veían quien era en realidad.

—Sabemos perfectamente quienes son Molly, gracias.—Dijo Hasley enfadada. Le dio una mirada a su hija para que se calmara, pues sus ojos estaban cambiando a un verde oscuro.

—No estoy muy segura de que lo sepan.—Dijo Molly.

Ada se levantó de golpe, todos la miraron.

— Me canse de escucharlos. — Dijo mintiendo, pero tenia que acabar con la conversación. — Ire a golpear un árbol.

Ada salio molesta del comedor.

Ron se levantó también de su sitio. — Y yo ire a evitar que muera un árbol.

Ada salio directo al patio, respiro hondo pero aún asi sabía que era poco probable que se calamar, necesitaba golpear algo o alguien.

— ¿Qué paso alla adentro?

— Lárgate Ronald. — Dijo la pelirroja sin verlo.

La Black-Evans palmeo sus bolsillo de su falda intentado buscar algún cigarrillo o algo más para calmarse.

— Ada tus ojos se volvían verdes y..

— ¡Callate la asquerosa puta boca Ronald Weasley! — Grito la Black volteando al ver al Weasley que en su mano traía los cigarrillo. — No sabes otra cosa más que hablar estupideces.

Ella los arrebato de su mano y camino lo más lejos del Weasley. Se sentó en un columpio que era sostenido por un árbol.

Prendió el cigarrillo con su varita y lo expulsó. Quizás eso le bajaría el enojo sin necesidad de lastimarse.

Ada recordaba que cuando no llevaba la pulsera, ella se volvia agresiva, y si se encontraba sola se terminaba haciendo daño a ella misma, hasta en su tercer año fue cuando observaba como Roksana y Viktor fumaban y parecían relajados, ella le robo uno a Roksana y lo probó, al inicio no le gustaba pero luego con la pulsera puesta ella no podía bajar su enojo a menos que sea un pequeña pelea. Recorrió al cigarrillo, sin que sus padres o tios se enteraran.

Odiaba ser una Chudovishte, solo pedía ser una Galkin normal, ella no entendía como llego a ser una casi completa, si su madre solo fue la mitad y era hija de muggles.

— Eso podría matarte. — Hablo alguien sentándose en el otro columpio.

— No es tu incumbencia, Corvus.

Corvus sonrió preparado para hacer un trato pero Ada lo calló.

— No intentes hacer un trato conmigo ahora Corvus, no soy ahora mismo la Phoenix que tu conoces. — Hablo Ada de forma seca y le dio una calada al cigarrillo.

Corvus suspiro y se empujó solo en el columpio.

— Escuche todo, la señora Weasley no sabe lo que dijo, si no hubiera estado sus hijos presente o el tio Moony, apostaría que tia Lila le hubiera hecho gritar y hubiera quedado pelona.

Ada solto una risa y asintió.

— No estes de chismoso, Corvus.

El Black se detuvo y frunció el ceño.

— No es ser chismoso, es recolectar información, me puede servir en un futuro. Tu me enseñaste eso.

Ada nego divertida y tiro el cigarrillo al suelo para luego pisarlo. De alguna manera ese pequeño castaño Black siempre le sacaba una sonrisa.

— Aprendes de la mejor.

Ada copio la acción de su primo y también se columpio y ambos terminaron haciendo una competencia de quien llega más alto.

— Deberíamos entrar ya, seguro todos estarán durmiendo.

— Me debes unos chocolate.

Ada chasqueo los dedos.

— Estan en la refrigeradora, los puse ahí pequeño. — La pelirroja revolvió el cabello del Black y esto se quejo.

Al entrar a la cocina no havia nadie, Ada vio el reloj, ya eran pasada de las 10.

— Deberías disculparte con tu novio pelirrojo. Ese insulto hasta a la abuela Walburga se hubiera puesto a llorar. — Hablo Corvus arrastrando una banca.

— No es mi novio. Tampoco me disculpare.

Algun dia mataría a Corvus, ese niño lograba meterse a su cabeza. Se levanto de su cama, no podía dormir asi, sabía que debía disculparse con el Weasley. 

Salio de su habitación dispuesta a ir al cuarto de los chicos y sacar a Ron para hablar, pero en el camino vio un cabello castaño y una pequeña pancita de embarazada.

—¿Paige?

—Ada, ¿te puedo hacer una pregunta?.

—Claro, ¿qué pasa?—Dijo Ada

— ¿Vive o un niño aquí? ¿O me estoy quedando loca?

Ada se rio.

—No, tranquila. No te estas quedando loca. Y si, si vive un niño aquí.

Paige suspiró al escuchar aquello.

— ¿Tu hermano?

— Mi primo, de hecho. Es hijo de mi tío, el hermano de mi papá. El ahora no está aquí, porque tiene una misión que le dio Dumbledore, según lo que me dijo mi mamá.

— Oh...por un momento creí que de verdad había quedado loca o que me hacía falta dormir.

Ada se rio, Paige se rio con ella segundos después.

—¿Fuiste a la cocina?.—Preguntó Ada, sabía que ese niño no podra dormir más.

—Si.

— Bien, descansa, Paige.

—Descansa, Addie.

Ada sonrió ante aquel apodo, estaba por bajar las escaleras para mandar a dormír a Corvus pero la puerta de la habitación de los chicos se abrió, por ella salio un Ron soñoliento.

El Weasley abrió la boca y trato de dar media vuelta.

— Espera — Hablo Ada en murmuró. — ¿Podemos hablar?

Ron dio media vuelta ignorando a la Black, ella suspiro y camino hasta él quedando delante.

— Quiero hablar.

— Yo no, Ada.

Eso a la Black no le importo y agarro la mano del Weasley llevándola a su habitación. Cerro la puerta y vio al Weasley que se cruzaba de brazos.

— ¿Qué quieres decirme? Que solo hablo estupideces. Ya me lo dejaste en claro hace unas horas.

— Ronny, yo..

— ¿Tu que? Yo solo trataba de ayudarte, me preocupe por ti y tu..

— Disculpame. Perdón.

El Weasley se quedo callado, nunca había oído pedir disculpas a la Black. Y el de ella parecía sincero.

— No debí gritarte pero yo..

— ¿Acabas de disculparte?

— Si. No me hagas repetirlo, los Black no somos muy buenos en pedir disculpas o por.. Ya sabes.

Ada avanzó unos paso quedaron delante de Ron.

— La cajita de cigarrillo se te cayó en el pasillo y fui a dártela. Viktor me dijo que así solías calmarte.

Adz le sonrió con vergüenza.

— Un niño de siete años me calmo, eso es más raro.

— Sería raro que no lo quieras.

— Nunca dije eso.

Ron sonrió, se acerco a la Black quedando a centímetros de su rostro.

— Te queda hermoso la camisa.

Ada bajo su vista y noto que era verdad, solo llevaba una camisa que le había robado a Ron hace unos días, pero nadie se había dado cuenta y abajo solo llevaba un short de pillama.

— A mi todo que queda bien. — Ada miro los ojos azulados del Weasley y sonrió inconsciente. — Ya besame por favor.

El Weasley no dudo ni un segundo en tomarlas de las mejillas y juntar sus labios. Llevaba todo el dia queriendo besarla después que le halla pisado el pie.

Ada agarro los manos del Weasley y las puso en sus glúteos y ella lo atrajo más a ella.

El beso subía de tono por parte del Weasley, el cuerpo de la pelirroja había chocado contra la puerta de ella.

— Quedate...esta noche Ronny. — Habló entre suspiro Ada cuando Ron junto sus frentes.

— No pensaba irme aún, princesa — Hablo Ron con la voz agitada. — ¿Puedo...

Al ver la camisa, que los tres primeros botones estaban abiertos, lo volvia loco.

— Maldita sea Ronny, has lo quieras. — Ada lo volvió a besar y en un salto ella enrollo sus piernas ne la cadera del pelirrojo.

Ron cargo el cuerpo de la Black hasta el escritorio, boto todo de escritorio.

— Ya puse el hechizo silenciador cuando entramos. — Dijo Ada al ver la cara del Weasley, esta solo solto una risa al ver su casa y luego le beso en la punta de su nariz.

— ¿Princesa?

Ada lo miró.

— ¿Si?

— Esto ya no solo nos convierte en amigos que se besan.

— Lo se. Ahora serás mio, mi Ronny. Y de nadie más. ¿Entendiste?

— Entendido, mi princesa.

Ambos volvieron a besarse, la camisa de Ada salió volando por alguna parte de la habitación, la igual que la camiseta de Ron.

Ada gemía en bajo mientras que Ron chupanba y mordía su pezon derecho y con su mano masajeaba el otro.

Esta vez Ada con un roce como ese, si lo estaba disfrutando.

La otra mano de Ron se volo dentro del short notando como la pelirroja ya estaba mojada.

— ¿Sabes com...

— Bill y Charlie me dieron la charla antes de venir. — Ada solto una risa pero luego se reemplazo por un gemido cuando el Weasley introducio dos dedos.

Ahora si gemia alto, incluso mordía el cuello de Ron.

El pelirrojo la cargó sin dejar de chupar sus pezones, dejando caer el cama y quitándole el short.

Ron solo se quedo mirándola.

— ¿Te gusta lo que ves? — Hablo la Black-Evans con una sonrisa coqueta.

Ron la beso para callarla.

— Me gustas tu, princesa.

Esa noche oficialmente Ronny y la princesa formaron una relación, quizás algo rápida pero ellos sintieron como una eternidad, con solo mirarse se entendían, un beso podia volverlos locos, con un roce ellos deseaban estar en cama.

Pero debía ser un secreto... O eso pensaron.

Esto es una noche calurosa. ¿No creen?

Corvus y Adita que lindos mis primitos.

Yo se que Corvus y Ada se aman pero jamas lo dirán.

Ese no fue Ronny, estoy segura. Pero yo también queiro UN Ronny asi.

Ada yo también dejaria mi orgullo del por favor a un lado asi.

Sirius y Héctor van a matar al pobre Ron.

Les debía esto después de meses y les di con todo un tanto... Ya saben.

¿Qué les parecío?

Les leo xoxo

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