Taehyun

La semana pasó lenta, demasiado.

Al menos para mí que me mantuve en esa estúpida habitación y salir únicamente para llevar a Kai a la escuela u ir yo a la universidad.

Claro, órdenes de Yeonjun.

Obvio él la pasaba genial con su novio de tres metros haciéndole desayunos riquísimos y caricias todas las mañanas.

Mientras que yo debía bajar mi calentura con lo que sea.

Traté de seguir las indicaciones de Beomgyu y distraerme de eso. Pero tenía demasiada pereza para hacer algo y Yeonjun no me dejaba salir.

Escuché el timbre sonar, desde mi habitación.

— Hola, cariño — Escuché esa voz familiar.

— ¿Qué haces aquí? — Ese era Yeonjun.

Por seguridad mia y de Jungkook decidí bajar. Soobin no tenia que decírmelo.

Tras Jungkook apareció Taehyung.

— Hola, Yeon. No te preocupes por Jungkook, yo lo cuido — Dijo empujando a Jungkook y Yeonjun asintió.

— Tae está arriba. — Dijo mi hermano mientras cerraba la puerta.

Yo me encontraba viendo todo en las escaleras.

— Cuñadito. — Jungkook se dirigió hacia mí con una sonrisa.

Yeonjun ante eso giró los ojos y se dirigió a su habitación.

— Que ridículo eres. — Dijo Taehyung girando los ojos y Jungkook le sacó la lengua.

— ¿A qué vinieron aquí? — Pregunté mientras subía a mi habitación siendo seguido por ellos.

— ¿Qué pregunta es esa? Obvio queríamos saber como se encontraba nuestro lindo amigo. — Afirmó Jungkook con una sonrisa y enarqué una ceja observándola divertido.

Taehyung se sentó en mi cama y dijo; — Te tengo un chisme y quería venir a contarte, Jungkook sabía que vendría y él quería ver a Yeonjun.

— Te entiendo, Jungkook pero a veces es molesto lo caliente que estás por mi hermano.

Jungkook bufó sentándose también en la cama.

— Perdón, tu hermano me tiene mal. — Dijo y soltó un suspiro.

— Oh, créeme no es necesario aclarar eso. — Habló Taehyung entre risas.

Me acerqué a ellos y me senté en mi cama igual.

— Cállate, baboso. De verdad no puedo sacarlo de mi mente.

— Deberías, Yeonjun está con Soobin y no es algo que puedas cambiar. — Dije palmeando su hombro.

— ¿Y Yeonjun no tiene un hermano que se parezca a él? — Preguntó Jungkook con una sonrisa y golpee su nuca.

— Oh, mierda. Cállate. — Dijo Taehyung cubriendo su rostro con ambas manos.

— Hueningkai está disponible. — Dije riendo y Jungkook borró su sonrisa.

— Olvídalo, ese niño me ve y me tira una sarten.

— Basta, vinimos por otra cosa. — Interrumpió Taehyung — Bueno, Tae... tengo unos amigos que conviven mucho con Beomgyu y bla bla. Chan es el esposo de Beomgyu y-

— Eso ya lo sé.

— Cállate y déjame hablar, mierda. — Gruñó y asentí casi riendo - Bueno, Chan es dueño de- Jungkook ¿Cómo se llaman esas cosas donde quieres ir?

— Ehh...

— Bueno, esas fiestas para follar con los desconocidos o con prostitutas y de más. Y mis amigos me contaron que la última vez que Beomgyu fue con Chan tuvieron una pelea. Al parecer ellos se llevan mucho la contraria.

— ¿Y eso en qué me sirve?

— Me dijeron que realmente Beomgyu no ama a Chan, quizás está con él por dinero... podrías.. ya sabes.

— Echárselo en cara y follar con él — Completó Jungkook con una sonrisa.

— Estúpidos... la fiesta es éste sábado y no puedo salir.

— Yo podría distraer a Yeonjun mientras Taehyung te ayuda a salir. — Dijo Jungkook y negué.

— No haré nada, lo juro. Soobin también podría ayudar ¿no?

— No, tú me ayudarás a escapar porque Yeonjun jamás te creería una sola palabra, Taehyung es mejor para distráelo.

—¿Entonces lo haremos? — Dijo Taehyung y asentí lentamente.

•bd•
Omnisciente

El castaño de 23 años siquiera terminó de ducharse y se lanzó a su cama boca abajo.

Había sido un día realmente pesado.

Escuchó la puerta de la habitación abrirse lentamente y luego la risa de su esposo.

— Gyu...

— ¿Mhh?— Respondió el castaño algo adormilado.

— ¿Tienes mucho sueño?

No tardó mucho en sentir unas manos sobre su cuerpo.

— Ujum.

El castaño siquiera hablaba.

Luego sintió unos besos cálidos en sus hombros y la bata ser corrida hacia abajo dejando descubierta su espalda.

Los besos de su esposo llegaron a esa zona, eran húmedos y lentos.

— Chan...

— ¿Cielo?

— Quiero dormir. — Se quejó el menor.

— La última vez dijiste que lo haríamos en casa y al llegar dijiste lo mismo.

— Cariño.. — Beomgyu se volteó hacia su esposo — Yo igual trabajo y estoy cansado, por favor.

— Bien, déjame secarte.

El castaño asintió mientras su esposo secaba su cuerpo y cabello para luego acostarse tras él y abrazarlo, aspirando su dulce olor a frambuesa.

Le gustaba dormir desnudo con su esposo.

Chan besó suavemente la cabeza del menor mientras éste ya se encontraba durmiendo.

Beomgyu siempre pensaba en la otra cara de Chan y esperaba que todo siga como está.

A la mañana siguiente al despertar, Chan no se encontraba en la habitación.

El castaño semidesnudo, con solo una camisa blanca cubriendo su abdomen y muslos, observó a su alrededor acompañado de un bostezo, sus pequeños ojos estaban hinchados y su mirada perdida en la puerta.

Rascó su nuca observando la cama y luego volteó hacia su buró para tomar su teléfono.

Hola, bonito. Conseguí
tu sagrado número
mientras me hablabas
de cosas mentales.

Y Beomgyu supo de inmediato de quien se trataba.

Bonito♡

Mm.. no prestabas atención
a lo que decía, que raro de ti.

unknown

Exacto ;)
¿Tú esposo está contigo?

Bonito♡

No.
¿Por qué te importa?

unknown

¿Te dejó solo?
Que raro de Chan.

Bonito♡

Imbécil.

unknown

Wow, ahora yo lo soy.

Bonito♡

Como siempre.

unknown

Ajá si...
¿Estás libre hoy?

Bonito♡
Es lunes, ¿Tú que crees?

unknown

Creo que estás libre :D

Bonito♡
No, tonto.
¿No tienes que ir
a la universidad?

unknown

Si, pero no quiero.

Bonito♡

Pero debes ir.

unknown

Iré si sales conmigo luego.

Bonito♡

Falta si quieres.
No seré yo el que
no tenga un título.

unknown

Que escándalo haces.
¿Acaso tu marido no te
deja salir?

Bonito♡

Tengo que irme
a desayunar.

unknown

OK, adiós <3

Beomgyu dejó el celular sobre el buró y dejó ir un suspiro cuando notó que estaba sonriendo como idiota.

De alguna manera u otra... Taehyun si sabía como hacer sus mañanas.

Maldito corazón al final del mensaje.

•bd•

Ese día Taehyun tuvo que ir más temprano a la universidad, por lo que Soobin llevó a Kai a la escuela.

— Vuelvo en un momento, cielo. — Dijo Soobin plantando un beso en los labios con una ligera capa de mermelada de su novio.

— Ujum...

Yeonjun le dió otro mordisco a su tostada y chupó sus dedos.

Volteó rápidamente cuando sintió una presencia.

— ¿Y tú por qué no estás en la universidad? — Indagó el pelirosa hacia el alto.

— Entro más tarde porque no estoy en el club de música — Afirmó el pelinegro.

Yeonjun asintió y tomó asiento para disfrutar mejor su desayuno.

— Yeonjun...

El pelirosa levantó su mirada hacia Jungkook.

— ¿Puedo preguntarte algo?

— No voy a besarte. — Afirmó el mayor con la boca algo llena.

— No, no, no es eso.

— Ah... ¿entonces?

— Si Soobin no estuviera...

El mayor giró los ojos y bebió su café después de haber masticado del todo.

— Jungkook...

— ¿Si o no?

— No.

— ¿Por?

— Eres menor que yo, un imbécil, atrevido y poco higiénico. — Afirmó el mayor contando los puntos con sus dedos. — Y muy irresponsable.

— ¿Qué tiene que sea menor? Soy legal.— Afirmó el pelinegro un tanto ¿ofendido quizás? — Soy un imbécil pero... es como jugando contigo ¿entiendes?

— Tu juego ha durado 13 años, Jungkook.

— ¿A caso sabes que me gustas desde los 12 años?

— Siempre lo supe.

— ¿Entonces por qué no me hiciste caso?

Yeonjun bebió otro sorbo de su café y luego miró fijamente al alto.

— Porque no me gustas y porque siempre me gustaron las personas como... Soobin. — Afirmó el mayor con una sonrisa.

— No es justo.

— ¿Quién dijo que todo en la vida debía ser justo? — Dijo por último el pelirosa antes de dirigirse a la cocina y lavar sus cubiertos.

Jungkook bufó y se dejó caer en el sillón.

Más tarde, Beomgyu salió de trabajar más temprano de lo que creía.

Él y su esposo terminaban a la misma hora y tenía dos para él sólo.

Por un momento... pensó en la salida con Taehyun.

— L e dejé muy claro que no lo haría. — Se dijo para sí mismo mientras salía del edificio.

— Hola, bonito.

Beomgyu levantó rápidamente su mirada hacia aquella voz.

— ¿Taehyun?

— No ¿Cómo crees? — Respondió el rubio, divertido.

El castaño giró los ojos y se acercó.

— ¿Y la moto de dónde la sacaste? — Indagó el castaño viendo la motocicleta que acompañaba al rubio.

— ¿Qué interesa?

— ¿La robaste?

— Mierda, no ¿Qué onda contigo, Gyu? — El rubio se había sorprendido ante la pregunta del otro — Es la motocicleta del padre de Taehyung.

— Ah... bueno, nada me sorprende de ti. — El menor sonrió ante eso — ¿Cómo sabías que saldría temprano?

— Eso no es importante, toma. — El rubio le entregó un casco al mayor — Sé que te asusta.

Beomgyu como todo el adulto que era le sacó la lengua al menor como burla y tomó el casco.

— De hecho... tengo auto — Dijo después.

— Me importa una mierda tu jodido auto de millonario, súbete. 

El mayor subió en el asiento trasero luego de colocarse el casco.

— ¿Vas a sujetarte o caerte? — Indagó el rubio cuando no sintió que el mayor se esté sosteniendo de algún lado.

— Agh... — Se quejó el mayor sosteniéndose del rubio.

— Mejor.

— Tonto.

— ¿Prefieres caer?

— Ya arranca esta cosa.

Taehyun encendió la motocicleta y sonrió cuando el agarre del mayor se volvió mas fuerte.

— Ni se te ocurra comportarte como loco en las calles porque me lanzo contigo incluso.

— Bien... — Soltó el menor.

Beomgyu se sintió ridículo, como si estuvieran en una película cliché donde el típico hombre manejaba una motocicleta negra, recogía a su novia tierna que temía a las motocicletas y la llevaba a su casa.

Cuando el rubio comenzó a andar por las calles, el mayor siquiera quería abrir los ojos.

No, no le temía a las motocicletas, ni mucho menos. 

Lo único de lo que temía era del rubio que amaba asustarlo, frenando de golpe, simulando que van a caerse a medio andar u esquivando autos.

— ¿A dónde vamos? — Preguntó el mayor cuando abrió los ojos y no reconoció aquella zona.

— A... un lugar... nostálgico. 

"Mierda ¿Qué planeas?" — Pensó el mayor.

Cuando el rubio se detuvo, Beomgyu se bajó con calma.

— Carajo. — Murmuró al conocer el lugar.

— ¿Vienes?

— Taehyun...

— Vamos. — El rubio tomó la mano del mayor.

Era aquél vacío parque, con un estanque, el agua tan cristalina como siempre y el césped verde como de fantasía.

— ¿Por qué me traes aquí? — Indagó el castaño mientras el menor se sentaba en una banca.

— Te gustaba éste lugar.

— Me gusta...

— ¿Entonces?

Beomgyu no dijo nada.

— Acércate, siéntate conmigo.

El castaño lentamente se acercó tomando asiento.

— Siento que planeas otra cosa.

Taehyun solo sonrió ladino observando a su mayor.

— Si crees que con esto voy a tener sexo contigo-

— Gyu... solo quería despejarte un poco, ya cálmate.

El castaño asintió observando a sus alrededores mientras el rubio lo observaba con atención.

— Sigues siendo bellísimo, lo sabes ¿no?

Beomgyu siquiera lo miró, había sonreído ante el cumplido y trató de no demostrar aquello. 

— Claro que lo sé — Respondió ésta vez observando al rubio.

— Me alegra que lo sepas.

— De todos los lugares a donde pudiste llevarme escogiste el último que tenía en mente.

— ¿Qué tiene éste lugar?

— Recuerdos.... muchos y la mayoría quiero olvidar.

— ¿Por qué olvidar nuestro noviazgo?— Indagó el rubio con burla — Fue algo que pasó y no puedes hacer nada para que no sea así.

— Aún así es... incómodo.

— Dios, Gyu... tómalo como cualquier parque, sé que siempre te relajó estar aquí.

El castaño asintió relajando su cuerpo en la banca.

Y se dió cuenta que no había tenido tanta paz en mucho tiempo.

— Te sirvió ¿No es así? — Indagó el menor con una sonrisa burlesca.

— Cierra la boca.

El rubio rió ligeramente y se detuvo a observar el estanque.

— Gyu...

— Dime. — Respondió el castaño — Que no sea una estupidez.

Y Taehyun calló.

— No puede ser. — Susurró el castaño cubriendo su rostro mientras reía.

— Siento mucho lo que sucedió ese día.

La sonrisa en el rostro de ambos había perecido en anteriores emociones, ahora sus ojos se encontraron con vehemencia. La mirada del rubio no era del todo concreta ¿Expresaba sinceridad? ¿Aflicción? Beomgyu no lo sabía, nunca aprendió a leer los ojos de un deshonesto.

Menos Taehyun. Un hombre cínico, arrogante, egoísta, ignorante, manipulador, impulsivo e sátiro.

— No te preocupes, está en el pasado ¿no? — Dijo Beomgyu con una sonrisa que no era del todo sincera. — Ahora estoy felizmente casado así que no hay nada que lamentar.

"Excepto el lamento hacia mi mismo, por permitirme enamorarme de ti hasta el punto de arruinarme en una noche"

Ese pequeño ambiente nostálgico e incomodo desapareció al momento que empezaron a hablar sobre el pasado en situaciones más distintas.

— No puedo creer que encerraste a Kai en su armario para eso. — Dijo el castaño cubriendo su rostro entre risas.

— Era un chismoso. — Rió levemente el rubio.

La noche había caído, Beomgyu recostado en el pecho del rubio, únicamente para abrigarse del frío.

— ¿Por eso no te dejó salir Yeonjun?

— Ujum.

— Entonces éste cuento era cierto y no me dejaste plantado por alguien. — El rubio asintió lentamente. — ¡Pero no me habías dicho que encerraste a mi Kai en un armario!

— Amas a Kai, no podía decirte eso. — Afirmó el menor.

— ¿Por qué él nunca me lo dijo?

— Porque le compré con peluches y gomitas.

Beomgyu volvió a reír bajando la mirada.

Repentinamente su mirada fue hacia su reloj en la muñeca y casi gimió de terror. Chan ha de haber llegado a casa.

— Mierda, tengo que irme. Ya, ya.

— ¿Qué? Son las 21:00PM — Dijo el rubio confundido.

— Chan sale a las 19:00PM, Taehyun.

Taehyun solo bufó cuando el otro se paró de inmediato caminando hacia la moto del menor.

— No, no... él no debe verme contigo. — Susurró el castaño y suspiró.

— Podría dejarte algo lejos.

"Como cuando nos ocultábamos de tu padre"

— No... tomaré un taxi. — Avisó el mayor — Gracias, Taehyun. Te veo el miércoles, no faltes.

El rubio no alcanzó a decir nada cuando el otro ya se había alejado.

Cuando Beomgyu bajó del taxi, entró lentamente a su departamento.

Las luces estaban prendidas y Chan en el sillón.

— Hola... — Susurró el castaño mientras su esposo mantenía su fría mirada en él.

— ¿Hola? — El hombre se acercó a él — ¿Dónde estabas?

— Tenía...

— ¿Qué? — El pelirrojo indagó con más desesperación.

— Estaba con... Yeonjun.

— ¿Por qué no me lo dijiste?

— Porque... — Chan abrió más sus ojos esperando aquella respuesta — Yo nunca te pregunto a dónde vas.

— No me importa, yo si lo hago. No salgas así sin avisar.

Chan le dió la espalda el castaño acercándose al sillón.

— No tengo jodidos 16 años. — Dijo el menor.

— Me importa una mierda. — El pelirrojo alzó un poco la voz haciendo temblar al otro.

El alto lo notó y dejó ir un suspiro con los ojos cerrados mientras se acercaba a su esposo.

Beomgyu quiso retroceder pero el abrazo repentino del mayor se lo impidió. Chan ocultó su rostro en el cuello del menor mientras tomaba su cintura.

— No hueles a ti. — Susurró el mayor.

— Ya dije que estuve con Yeonjun.

El hombre asintió.

— Lo siento... estoy cansado.

— Lo sé... — Susurró el castaño mientras acariciaba la espalda de su esposo con su diestra y la otra permanecía entre sus rojizos cabellos.

El mayor comenzó a dejar besos húmedos sobre el cuello de su esposo, bajando hacia su clavícula y mordisqueando su piel.

— Chan...

— No me digas que estás cansado. — Dijo el mayor — Te necesito.

Beomgyu no logró hablar cuando su esposo lo cargó hacia el sillón.

— Por favor.

— E-está bien...

Capítulo concluido el domingo 24 de octubre del 2021 a las 01:03 AM