Ellos la hacen brillar

Amadeo estaba sentado en la sala con Jane, la vampiro estaba más tensa de lo normal, no le gustaba estar cerca de Rosalie Hale. Así que al híbrido no le queda de otra que estar pegado a su novia para evitar que mate a la otra rubia.

En la noche fue cuándo durmieron por primera vez con Nessie, después de días sin dormir juntos Alessia y Amadeo. Pero poder dormir enredados entre los tres fue de las mejores sensaciones para ellos.

A la sala entró Alessia con Renéesme, habían salido un rato a hablar como hermanas, a contarse todo sobre sus vidas, juntas fueron directo a la cocina a pedido de la castaña que se sentía extremadamente rara.

- Tía Cissy ¿Hay helado de chocolate? - Preguntó algo estresada

- No, cariño, sólo pastel de vainilla ¿Por qué? - Preguntó sacando un pastel

- Ahgg - Se quejó caminando al sofá, para tirarse sobre Amadeo quien soltó una risa, Nessie se sentó en el otro sofá empezando a leer un libro

- ¿Qué te sucede? - Preguntó el híbrido corriendo a su hermana a un lado

- Quiero helado de chocolate - Se quejó acostandose sobre el respaldo del sofá

- Estábamos por salir - Avisó Carlise un poco nervioso - ¿Quieres que te compremos helado?

La híbrida lo miró con desconfianza al igual que todos los presentes. Las cosas no bajaron siquiera un nivel de densidad, estaban tensos todo el tiempo a todas horas cada vez que compartían espacio en una misma habitación.

- Si, gracias - Murmuró sentándose sobre el regazo de su trilliza empezando a leer con ella

- Bien, venimos en una hora - Se alejó con Rosalie, Emmett y Esme

Asintieron sin darle más vueltas, dejando en la sala a los trillizos con una Jane un poco más relajada al ver a la rubia Hale irse del terreno. Demetri estaba con Alec dando vueltas por el perímetro, mientras el resto estaba cazando a excepción de Garrett y Carmen.

- ¡Cachorros!

Amadeo y Alessia se dieron una mirada antes de salir corriendo a la ventana para saltar afuera de la casa. Huyendo de su papá Garrett que estaba entrando a la sala con una respiración pesada, una toalla al rededor del cabello y una bata tapando su torso.

- ¿Qué hicieron ahora? - Preguntó la mayor riendo

- Tengo - Chilló en un hilo de voz, carraspeó tratando de recuperar su voz grave para mirar de mala manera a la mujer que aguantaba la risa - Tengo bello violeta

- ¿Otra vez? - Nessie se levantó emocionada a ver el cabello, pero al ver que debajo de la toalla estaba su cabello natural frunció el ceño - Esta normal

- No ese bello - Se abrió la bata mostrando su pecho con bellos de color violeta

Desde dentro de la casa escucharon las carcajadas de los híbridos que estaban escondidos en algún lugar de la casa. Extrañaban a sus cachorros, al igual que sus bromas.

- ¡Dijiste que no tocaremos tú cabello! - Se defendió Amadeo

- ¡Así que como vampiro macho pecho peludo lo hicimos allí! - Siguió Alessia

- Hijos de...

- ¡Lenguaje!

Alice estaba sentada sobre la copa de un árbol viendo como Tanya Denali estaba enseñándole a Renéesme tácticas de pelea. Había visto el futuro de cada uno de los presentes, en todas las posibilidades de futuros, Nessie se iba a Volterra si o si, Edward se esmeraba como nunca en conseguir su perdón, Rosalie y Jasper recuperaba su brillo.

Pero no podía ver el futuro de Amadeo y Alessia.

Con ellos sólo eran fragmentos borrosos, la única manera de verlos correctamente era en pequeñas partes del futuro de Nessie, Jane o Demetri. Eso la ponía nerviosa, la hacía sentir inútil ante su don.

- Eso no tiene porque ser malo

Se giró para ver a su hermano de cabello cobrizo. Edward debía haber ido a hacer las compras para los híbridos pero los pensamientos de su hermana lo frenaron.

- Son buenos chicos, sufrieron demasiado - Tomó asiento a su lado - Tienen carácter, son intimidante - Admitió soltando una corta risa - Pero a pesar de eso hacen reír a Nessie

Giraron su mirada a la recién nombrada, viendo como intentaba golpear a la chica Denali pero la esquivaba con facilidad, aún así se reía de sus fracasos para levantarse y seguir peleando.

- Ellos la hacen brillar - Admitió por más que le doliera

- Son un rompecabezas, se complementan entre si - Abrazo a su hermana por sus hombros - No podemos seguir quitándole felicidad, sólo nos queda aceptar y seguir

- Eso sonó muy Carlise - Bromeó quitando un poco de intensidad

- Es algo que desbloqueas al ser padre - Sonrió viendo como Alessia se acercaba a derribar a Tanya para darle ventaja a Nessie

- Les debo una disculpa - Se giró a su hermano

- Todos en realidad - Asintió

Ambos vieron la escena una vez más. Tanya estaba en el suelo con una sonrisa mientras las híbridas chocaban los cinco mientras reían hasta que al final se tiraron a los lados de la rubia para ver el cielo nublado.

Alessia entró a su habitación en busca de su hermano, encontrándolo boca abajo, parecía que estaba pensando en algo ya que no se dió cuenta de su presencia. Aprovechó eso para tirarse sobre el escuchando como se quejaba pero antes de que la voltee, una tercera persona se tiró sobre ellos haciendo los quejarse doble.

- Me aplastan - Se quejó el híbrido a pesar de no sentir gran peso

- Me siento un sándwich - Se quejó al estar entre medio de sus hermanos

- ¿Eso me convierte en pan? - Preguntó divertida Nessie

- Ahora tengo hambre - Se quejó el híbrido al escuchar comida

Las chicas soltaron unas risas para acostarse a los lados, cada uno se movió para quedar acostados boca arriba, sonriendo como imbéciles al estar alegres de poder estar juntos.

- ¿Creen que Sulpicia o Athenodora me acepten?

Sus hermanos fruncieron el ceño al instante, no podían siquiera pensar que estaba preguntando eso en serio, incluso les ofendía la pregunta.

- Claro que sí - Respondieron al unísono - Te amaran - Agregó la híbrida

- Son unas increíbles mujeres que aman con todo el corazón, conocerte les dará una gran emoción - Siguió el castaño - Podríamos cocinar los cinco juntos

- O ir a la biblioteca - Siguió pero abrió los ojos como platos al darse cuenta de ese pequeño detalle - ¡Eres una nueva compañera de la biblioteca!

- ¿Biblioteca? - Preguntó confusa pero con cierta emoción

- Es nuestro lugar - Respondió con una sonrisa - El único que puede entrar cuando se le de la gana es Alec, mi mejor amigo

Amadeo pudo ver como en los ojos de su pequeña hermana se iluminaba un pequeño destello al escuchar el nombre del vampiro que es mejor amigo de Alessia. Frunció el ceño sin poder evitarlo. No le gustaba esa emoción de su hermana por su cuñado.

- ¿Alec? - Cuestionó tratando de fingir desinterés

Pero sabía perfectamente quien era el castaño, ese vampiro de ojos rojos que se mostraba serio en todo momento, que sólo hablaba para decir comentarios insistiendo en matar a todo el mundo para solucionar más fácil los problemas. Le causaba gracia eso, parecía un pequeño niño sádico. Aún así escucharlo jugar o murmurar groserías en voz baja mientras fruncia el ceño seguía siendo una pequeña ternura para ella.

- Si, el enano intimidante, mi mejor amigo - Respondió sin darle importancia

- No es enano, es un poco más alto que yo - Lo defendió

- Tú eres enana - Se burló Amadeo

Pero antes de que pudiese defenderse ante el insulto de su baja estatura, sintieron los pasos de un Cullen acercándose, para que segundos después se escuche la puerta siendo tocada. Asintieron para que pase el desconocido, viendo como la vidente del clan se asomaba.

- Venía a traer el helado - Entró un poco dudosa mostrando el pote de chocolate que logró que los ojos de Alessia se tornen carmesí, como si la comida de una hora atrás no la hubiera llenado para nada - Ten

A velocidad híbrida, Alessia ya tenía el pote en manos empezando a comer con gran velocidad. Soltó un gemido al sentir el frío sabor de ese postre que se le antojó de gran manera.

- Vaya, Alex - Murmuró su hermano sorprendido - Si que tenías antojo de helado

- ¿Qué? Tengo hambre - Se encogió de hombros

- Come más despacio - Pidió Nessie

Ella asintió volviendo a sentarse en medio de sus hermanos, disfrutando de cada cucharada de la delicia que estaba cenando.

- Venía a hablar también - Levantaron la mirada para ver como la vampiro jugaba con sus manos

- ¿Sobre qué? - Cuestionó Amadeo

- Quería darles mis disculpas - Los miro fijamente demostrando su culpa - Yo fui inmadura, estaba asustada, y no pensé en ustedes o Jasper

Nessie asintió, ella estuvo con Alice, no era una mala chica, era energética, alegre, casi siempre tenía emociones felices, pero ella en el embarazo de su madre supo que estaba de acuerdo en que los aborten, así que entendió su miedo a la nueva raza que eran. Pero los híbridos no estaban del todo convencidos.

- No tuve una visión que me avise todo el desastre que sucedería, eso me asustó, fui igual que Bella, me merezco su odio - Siguió al ver su silencio - Pero espero algún día me perdonen

La vampiro salió de la habitación dejando a los hermanos en un silencio un poco incómodo, Amadeo hizo el amague de comer del helado de su hermana recibiendo un manotazo de su parte.

- Mío - Apartó el pote lejos de su hermano

- Se supone que tú eres la dormilona, yo soy quien come - Dijo indignado

- ¿No escucharon las disculpas de Alice? - Cuestionó la tercera con una sonrisa divertida

- Estamos acostumbrados a las disculpas - Se encogió de hombros - Ahora comparte helado

- Primero, pensaremos en esas disculpas, segundo - Se giró a su hermano - No, déjame mi helado a mi

Los hermanos empezaron a pelear por quien comería el helado, pero la castaña estaba negada a compartir de su delicia con su hermano. Sin notar que Nessie aprovechó su pelea para comer el helado con sigilo.

Jacob estuvo pensando mucho tiempo sobre su charla con el hermano de su antigua pareja, había estado analizando cada una de las cosas que habían sucedido hasta ese entonces, desde la vez que se enamoró de Isabella hasta cuando se imprimó de Renéesme.

Se dió cuenta de demasiadas cosas, como que el amor a la chica Swan fue sólo una obsesión de un crush de niños, y en Nessie confundió la imprimacion con el rencor al enamoramiento en su madre. Tal vez no estaba destinado a las chicas Swan.

La híbrida era su mejor amiga, a quien le contaba todo, más que pareja eran amigos, eso siempre estuvo presente. Nunca tuvieron interés en dar otro paso en su relación porque no lo veían necesario. Tal vez esa fue una de las señales.

- ¿A donde vas? - Se giró para ver a la matriarca Cullen

- Mi manada me espera en Forks - Se giró para cerrar su maleta

- ¿Y Nessie? - Preguntó confusa ante las acciones que estaba tomando el chico que ya consideraba un hijo

- ¿Qué conmigo? - La castaña entró a la habitación viendo la escena

El metamorfo tenía dos maletas, las mismas que habían traído por sus vacaciones que fracasaron rotundamente. Estaba vestido con un pasaporte en mano. Se estaba yendo. El chico le pidió a la matriarca que salga, lo que asintió dejando a los jóvenes solos.

- Nessie. Lamento esto, lamento todo, te debo mil disculpas, pero espero me perdones, aún así me iré, volveré a donde pertenezco. Vuelvo a Forks - Se acercó a ella para tomar sus manos

- ¿Y la imprimacion? - Cuestionó confusa

- Te visitaré a Volterra cada fin de semana - Resolvió el problema con una sonrisa triste - Podremos contarnos todo lo que nos perdimos, tú estarás con tus hermanos, yo con mi manada

- ¿Seguro? - Sonrió un poco

- Seguro, podremos pelear o odiarnos pero siempre volveremos, somos mejores amigos, eso nunca cambiará - Besó su frente

- Gracias, Jake - Sonrió sintiendo calma en su pecho - Lamentó haberte dicho esas cosas

- Me han dicho cosas peores - Se giró a tomar su maleta - Como caniche - Gruñó con desagrado haciéndole soltar una risa

- Te queda mejor chihuahua - Bromeó

Soltó una risa volviendo a abrazar a su mejor amiga. Al menos estarían bien, eso era lo importante. Y esa sería una promesa que no romperían. Se verían cada fin de semana y nunca.mas se volverían a mentir.