➤ Capítulo 2: Nuestros... ¿Hijos?

20 de diciembre, 2018.

Narrador Omnisciente: 

Una fuerte explosión fue lo que se escuchó en el centro del campo de prácticas, llamando la atención de todos los allí presentes.

-¡Tengan cuidado! -fue el grito de Aizawa-sensei, adelantándose para proteger a sus pequeños retoños.

-¡No se acerquen! -le siguió Vlad King, profesor de la clase 3-B.

Tanto como los alumnos de la clase A, como los de la clase B, detuvieron su entrenamiento de forma repentina e hicieron un círculo alrededor de la cortina de humo que se había formado debido a la explosión. Algunos de ellos tenían activadas sus particularidades, pues no vaya a ser que sea otro ataque de la Liga de los Villanos.

El humo se fue dispersando poco a poco, dejando a la vista a unos cuantos niños de diferentes edades.

-Oye, eso dolió...

-¡Esa es mi pierna! -gritó una chica.

-No me toques, bastardo -gruñó otro.

-Esto me está dando miedo...

-¿Dónde estamos, Midoriya-senpai?

-¿¡Qué diablos hiciste, Baka!?

-T-todos nos están mirando... -fue el susurro de un pequeño rubio, haciendo que los mayores bajaran el volumen de sus gritos y quejas.

-¿Quiénes son ustedes? -preguntó directamente Aizawa-sensei, sin bajar la guardia, pues no podía confiarse de unos niños que habían aparecido de la nada- Y, sobre todo, ¿cómo lograron entrar sin activar las alarmas de seguridad?

-No es muy difícil de saber eso, ya que somos estudiantes de Yuei -dijo una niña acomodándose los lentes de pasta negra, viendo el gran edificio de la UA-. ¿Quién es usted?

-Es Eraserhead... estoy seguro -murmuró uno de los adolescentes, con un pequeño brillo en los ojos-. ¡Nunca creí conocerlo en persona!

La mirada de todos los allí presentes era una de confusión total, nadie entendía por qué esos chicos estaban ahí, y mucho menos ellos mismos.

Sin embargo, esos jóvenes no parecían ser malas personas... Sino todo lo contrario. Algunos se veían amigables e incluso les parecía ver algo familiar en esos chicos.

-¿Quiénes serán esos niños? ¿Tienes alguna idea, Bakugo? -le pregunto Kirishima a su amigo.

Pero éste no le contestó, pues su mirada estaba clavada en cierto niño rubio casi idéntico a él.

Se parece a mí cuando era... No, es imposible, pensó el ojos color rubí, negando con la cabeza al ver su parecido con ese mocoso.

-Él no puede ser Eraserhead, no seas estúpido -Daisuke fue quien tomó la palabra, dándole un golpe al peliverde-. Ya sabes que él está... bueno, ya saben.

-Oigan, chicos -carraspeó una chica de cabello rosado, llamando la atención de sus amigos a la vez que observaba a cierta chica el cual tenía un cierto parecido con ella-. ¿Ella no se parece mucho a mi mamá?

-¿¡Qué dices!? -exclamó Haru volteando a verla, topándose de frente con la chica que parecía tener los ojos de mapache- ¡Esa es mamá...! -dijo en un susurro, volteando su rostro para darle la espalda, estaba confundido y nervioso.

-¡Papá! -la pequeña peliblanca sonrió y fue corriendo directamente hacia cierto joven de cabello bicolor, quién la miraba extrañado.

-¡Yuki! -gritó alarmada la azabache, corriendo detrás de la pequeña para sostenerla antes de que hiciese una locura- No vuelvas a hacer eso -la reprendió y luego volteó su vista hacia los chicos, dándose cuenta de que sus padres también estaban ahí.

-¡O-oiga, Midoriya-san! -habló un castaño.

-¿Qué?/¿Eh? -dos peliverdes voltearon rápidamente hacia él, dejándolo más confundido.

En medio de toda esa gran charla repentina y confusa, los más jóvenes del grupo se pusieron a observar a detalle a los aspirantes a héroes, quienes se parecían mucho a sus padres.

Sí, no cabía duda alguna de que se trataban de sus progenitores. Sin embargo, sus aspectos físicos parecían ser los de unos adolescentes de no más de dieciocho años.

Y los alumnos de ambas clases de héroes también se dieron cuenta de algunos rasgos similares entre las personas de ambos grupos, ¡estaba muy a la vista!

Definitivamente, esta situación era extraña.

-Creo saber qué es lo que está pasando -retomó la palabra un pelinegro y se puso enfrente de todos, observando cuidadosamente a las personas de su entorno-. Verán, todos nosotros estábamos en la casa de nuestros tíos en una especie de reunión familiar y demás. Nosotros nos aburríamos mucho con nuestros padres así que empezamos a husmear entre diversas cajas y demás cosas que habían en el ático de la casa -empezó a explicar, un tanto nervioso al sentir la intensa mirada que le daba su madre-. De repente, Yuki encontró un aparato extraño...

-Pasaron muchas cosas en el medio pero yo pude ver que el que lo tomó entre sus manos fue Ryuu -continuó su hermana-. No sabemos muy bien lo que pasó pero una luz resplandeciente salió de ese aparato, luego de eso aparecimos aquí.

-Observándolos a todos detenidamente, he llegado a la conclusión de que viajamos al pasado -retomó la palabra el chico de antes, sorprendiendo a todos.

-¿Viajar al pasado? ¡Eso es absurdo e imposible! -gritó Monoma.

-No del todo, la verdad... En un mundo con particularidades, todo es posible -la voz de Momo se hizo notar.

-Ahora que lo veo, el que está ahí parece papá -murmuró un joven.

-Y allá está nuestra mamá -sonrió otra.

-Aunque todos son jóvenes, parece que aún no han salido de la UA -opinó la chica de lentes-. Concuerdo con mi hermano, al parecer llegamos a otra época... Además, puedo ver que al campo de prácticas le faltan muchas cosas -mencionó observando el ambiente.

-¡Esto es genial!

-¡Qué cool!

-Por supuesto que no, ¿acaso saben cómo vamos a volver? -Y así empezó un nuevo murmullo de voces entre los más jóvenes, debatiendo qué hacer en un momento como ese.

-¡Silencio! -El regaño de cierto profesor se hizo escuchar entre los demás- ¿Dónde está ese tal aparato del que hablan?

-L-lo trae Ryuu... -habló Akane, llevando a su pequeño hermano hacia el profesor.

-¿Uhm? -el pelinegro dio unos cuantos pasos hacia el frente y tomó la mano del niño entre sus manos, examinando detenidamente aquel objeto- Esto... ______, acércate, por favor.

-¿Eh? -cierta pelinegra de ojos morados se acercó un poco extrañada hacia su sensei, observando detenidamente a la chica que estaba a su lado. Su aspecto... le era muy familiar.

-¿No se te hace conocido? Se parece a la muñequera que utilizas tú para controlar tu quirk.

-Tiene razón, Aizawa-sensei -murmuró _______ tomando la mano del pequeño rubio entre sus manos, comparándola con la que traía en ese momento-. Solo que se ve algo diferente... pero quizás cumplan la misma función.

La chica pasó su mirada hacia el pequeño Ryuu, mirándolo con curiosidad. Ese niño... se parecía mucho a cierto compañero suyo, por lo que sonrió de lado. El pequeño, por su parte, intentaba contenerse de abrazar a su madre, pues su hermana le había advertido con anterioridad de que no dijera nada fuera de lo normal como lo había hecho Yuki hace unos momentos.

-Entonces lo más probable es que sea tuya -resumió su profesor, algo cansado de tener que lidiar con esa situación-. Oigan, ustedes -esta vez se dirigió a los nuevos muchachos, quienes se habían puesto a cuchichear entre ellos-. ¿De dónde dijeron que sacaron este objeto?

-De la casa de nuestra tía, señor -se limitó a decir un joven de cabellos verdes-. Pero no podemos decir nada más, no lo veo correcto ya que no sería bueno alterar este mundo... Eso sería catastrófico. ¿Verdad, Iida-san? -le susurró esto último a un pelinegro para que solo él pudiese escuchar.

-Exactamente, no creo que sea lo apropiado dar mucha información sobre nosotros -comentó a lo que los demás se quejaron.

-Entonces... ¿No podemos saber lo que nos depara el futuro? -se quejó Kaminari, mirando a los chicos.

-Si lo que dicen esos chicos es verdad, no creo que sea lo apropiado -Aizawa soltó un suspiro, analizando a los recién llegados.

El mayor se dedicó a observarlos con más detenimiento y pudo diferenciar algunas de las similitudes entre los chicos nuevos y sus estudiantes, reconociendo incluso alguna que otra actitud reflejada en los menores.

-¡Eso no es justo! Yo quería saber con quién me casaré -se cruzó de brazos-. ¿Acaso será una chica linda...? ¡Espero que sí!

-Dudo que alguien acepte casarse contigo, Kaminari -se rió Jirou del chico eléctrico.

-¡Yo quiero saber si me convertiré en un héroe! -exigió saber Kirishima con una sonrisa.

-¿¡Cuándo me casaré!?

-¿Quién es el nuevo símbolo de la paz luego de la retirada de All Might?

-¿Habrá algún villano con el cual no podamos combatir?

-¿Seré el número uno? ¡Por supuesto que si! ¡SHINEEEE!

Miles y miles de preguntas se hicieron presentes en el aire, queriendo saber qué es lo que pasaría con ellos en el futuro.

-¡Silencio! -sentenció el profesor, intentando contener la calma entre sus alumnos- Este no es un día de campo, ya que ustedes -señaló a los chicos-, deben volver a su tiempo. Por cierto, ¿de qué año dicen que vienen?

-Del 2036, profesor.

-Eso hace dieciocho años en el futuro... -murmuró-, y a juzgar por sus apariencias, muchos de ustedes seguramente son parientes de los aquí presentes -terminó de decir, exaltando a sus retoños.

-¿Eh?

-¡Eso no puede ser!

-¿Nuestros... hijos?

-¡Vaya mierda!

-Interesante...

-Aun así, deben volver a su tiempo -retomó la palabra-, ¿tienen idea de cómo?

Los chicos negaron con la cabeza.

-Esto será más difícil de lo que pensé -susurró cansadamente-. Bien esto es lo que haremos, mientras averiguamos como volverlos a su tiempo, ustedes se quedarán aquí, sin hacer escándalo. ¿Me oyeron? -dijo con voz de ultratumba, a lo que el restó asintió- Perfecto.

-Oye, Aizawa... -Su compañero, Vlad King, llamó su atención- ¿No crees que sería interesante saber nuestro futuro?

-¿Tú también con eso? -hizo un facepalm en su rostro, preguntándose porque él tenía que pasar por una situación así.

Definitivamente voy a acabar muerto luego de todo esto, pensó mamá oruga.

¡Aquí tienen un capítulo nuevo! Un poco exisde y más relleno porque la verdad no sabía qué poner (ayuda) creo que todo va a malir sal ay ;;

Bч: ᥒoᥣxᥒgᥱrhᥙmᥲᥒ 🌺