Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

.。.:*✧55✧*:.。.

—Lena por dios, ¿qué hiciste?— reprochó Irene. Obviamente no le gustó para nada saber la forma en que trate a Jungkook hace solo unos instantes —Todo iba bien, no tenías porque haberlo tratado así, el pobre chico solo quería pasar un poco de tiempo contigo. ¿Es acaso eso un pecado o algo?.

—Sonara raro viniendo de mi, pero Jungkook no merecía que lo trataras de esa forma— agregó Hoshi —Nadie mejor que yo se lo que es querer pasar tiempo con la persona que quieres.

Incómodo.

—Si bien, lo jodí, díganme algo más que no sepa— respondí agobiada.

Me merecía todos los reproches del mundo, me había comportado como una jodida niñata que no sabe ni lo que quiere, trate de la forma más horrible a Jungkook viendo que él solo estaba tratando de ser lindo, pero siempre mi parte anti-romántica tiene que salir para joder todo lo bonito.

Soy pésima en la materia amor, de hecho si fuera una materia de la escuela seguro y la reprobaría. Por eso es que jamás he tenido pareja, nunca ningún chico a parte de Hoshi se había interesado por mi. Me es raro tener a Jungkook cerca mío y que me trate bien, que sea atento y que incluso soporté la escoria que soy.

Él se merece algo mucho mejor que yo, una chica que no sea antipática las veinticuatro horas del día. Aún no entiendo que fue lo que lo enamoró verdaderamente de mí, en lo físico puedo ser buena, pero lo que tiene que ver con la personalidad, soy lo más repugnante que pudiera existir.

Él es puro color, mientras que yo soy gris y negro.

—¿Lo quieres?— preguntó Irene de la nada.

—¿Por qué preguntas eso?— cuestione sin entender a dónde quería llegar.

—Si lo quieres de verdad, ve, búscalo y pídele perdón por tu mal comportamiento— increpó —Si ese corazón negro que tienes siente algo por él, entonces no dejes ir al chico que por fin te movió un poco los sentidos.

—Irene tiene razón, Lena— siguió Hoshi —Jungkook ya hizo demasiado, ya es hora de que tú también hagas algo para demostrarle aunque sea que te interesa.

—¡Es que yo no soy buena con las palabras!— chille, chocando mí frente contra la mesa —Por hablar de más es que estoy en esta situación. Doy asco.

—Asco o no, le gustas a ese chico— alegó Irene —Se cuánto te cuesta demostrar tus sentimientos, pero Jungkook demostró que en verdad te quiere.

Las palabras de Irene y Hoshi daban vueltas en mí cabeza, siempre he tenido coraje para muchas cosas, no podía dejar que está situación me venciera, si, me es casi imposible dejar salir lo que siento, pero tampoco quiero que él se aleje de mí, necesito al orangután.

Soltando un gran suspiro me levante de mí asiento decidida con lo que tenía pensado hacer, Lena Park no va dejarse vencer tan fácil, aunque en serio me estoy muriendo de los nervios porque no se que saldrá de mí boca, lo cual también es peligroso.

Salí de la cafetería en dirección a la cancha donde el equipo de fútbol estaba haciendo su práctica como todos los días, por suerte llegue en el momento en que ya habían terminado. Todos los chicos se estaban yendo a los vestidores, pero aproveche que Jungkook fue el único que se quedó a beber agua para ir corriendo hasta él.

¿Y ahora que hago?.

Sus ojos se fijaron en mí, su pecho subía y bajaba por lo cansado que estaba, su camiseta estaba llena de sudor, al igual que su cabello y demás partes de su cuerpo. Se notaba el disgusto en sus ojos y me quemaba el hecho de que me viera de esa forma, aunque se perfectamente que me lo merezco por el daño que le he ocasionado.

—¿Qué quieres?— inquirió con desagrado.

—Yo...— mordí mí labio inferior al no saber que decir —venía a preguntarte si después de clases quieres ir a dar una vuelta por ahí.

—Tengo cosas que hacer— replicó con desdén. Ni siquiera me miraba —Si me disculpas, tengo que ir bañarme y luego tengo clases a las cuales asistir.

Tomó una botella de agua y una toalla que se encontraban sobré las gradas. Hice lo que primero me ordenó mi cerebro y tome su brazo. Él obviamente no contaba con que haría eso y el desconcierto en sus ojos me lo comprobaba.

—No vine aquí para invitarte a salir— fui sincera —Quería hablar sobre lo que ocurrió hoy, no fue mí intención herirte de ninguna forma.

—Pero lo hiciste— interrumpió —Y si crees que venir aquí y decir eso va a arreglar algo...te equivocaste.

—¿Es enserio?— cuestione incrédula —Estoy tratando de que estemos bien de nuevo y tú me sales con eso. ¿Qué quieres que haga? ¿Qué me arrastre?.

—Yo muchas veces casi hice eso solo por conseguir tu perdón— siseó —Pero no, Lena, no quiero que te arrastres ni nada, solo me cansé de siempre ser débil y perdonar cada uno de tus desplantes, siempre he sido yo quien busca la forma de solucionar las cosas— se encogió de hombros —Quizás solo me cansé de ser yo el único que sentía cosas sinceras y verdaderas.

Sus palabras me habían dejado sin aliento, no me había dado cuenta de lo inhumana que he sido con él, muchas veces trate de demostrarle lo que sentía, pero como soy tan tosca le he demostrado cosas diferentes, entiendo que él no entienda que es lo que siento. Pero en serio lo quiero.

—Si no tienes nada para decir, vete— su forma de hablarme me dolía, su frialdad me la merecía porque yo era así con él.

—Se que soy una mierda, eso lo tengo más que claro— admití —Tú has sido el único chico capaz de hacerme sentir de verdad cosas que nunca había experimentado y va mucho más haya de lo sexual o el deseo. Me importas mucho, no puedo decirte más que eso porque no soy cariñosa— suspiré, apretando mis ojos tomando coraje para poder seguir —Luego de la muerte de mí abuelo aprendí a no querer a nadie, porque cuando te aferras a alguien y se va, sientes un puto dolor en el corazón, te quedas con un jodido vacío que ni en mil años podrías llenar. Él fue al ser humano que más amé y que se haya ido me destruyó y me hizo crear está Lena, la cual no llora y no siente nada, ni siquiera a mí propia familia le puedo decir que los quiero.

Él solo me oía en silencio y en serio lo agradecía, llevo años llevando este peso dentro mío y sacarlo me hace sentirme liberada, con esto no pretendo darle lástima o algo por el estilo, solo quiero que entienda por qué soy lo que soy.

—Siempre estoy desquitandome contigo por cualquier cosa y lo siento en serio— proseguí —No soy y tampoco se si algún día podré ser la chica cariñosa y tierna que pretendes y necesitas que sea, pero solo quiero que sepas que si me importas.

—No necesito que seas tierna ni nada de esas mierdas, solo quiero que dejes de confundirme con tus acciones—  aclaró con la voz más calmada —Hoy me sacaste de clases porque tenías ganas de tener sexo, te portaste linda y de la nada me dijiste que te asfixiaba, ya no entiendo si me quieres o solo me usas a tu conveniencia.

—No digas eso.

—Es lo que tú me das a entender— musitó.

—Si, soy difícil de entender, lo sé y detesto ser así, pero no sé cómo cambiar.

—No necesitas cambiar tu forma de ser, solo dejar que las personas a tu alrededor te demostremos cariño— explicó, mojando sus labios —Yo te quiero, Lena y creo que no hace falta que te lo diga, pero debes soltar la muerte de tu abuelo, se que te dolió, pero es eso lo que no deja avanzar.

—Llevo diez años intentando— murmuré —Pero es que siempre me paro a pensar si vale la pena.

—Lo vale si quieres que tus seres queridos sepan que los quieres y no que los odias por tus actos— replicó cruzando sus brazos.

—¿Ya no quieres seguir con esto?— pregunte algo nerviosa por su respuesta.

—¿Con esto qué?— contestó, arqueando una ceja.

Se que ya no me odia, pero de igual forma quiere torturarme, pero lo dejo solo porque quiero que estemos bien.

—Esto sin título que tenemos.

Dejó nuevamente la botella y la toalla dónde estaban anteriormente. Se acercó a mí y sentí a mí corazón dando brincos de alegría por volver a sentirlo así de cerca; sus manos tomaron mí rostro, añoraba su tacto, tan suave y delicado.

—¿Tú quieres seguir?— inquirió, susurrando cerca de mis labios.

—Si no quisiera no hubiera venido a arreglar las cosas...tonto.

Me pare de puntas para poder estar a su altura y alcanzar sus labios, me encantaba como encajaban de una manera perfecta con los míos, como si hubieran nacido para estar juntos. Ahí estaban de nuevo las mariposas, las cosquillas, los fuegos artificiales y el volcán de nuevo amenazando con hacer erupción. Me sentía rara, pero al mismo tiempo de la mejor forma posible.

—Te quiero ratita irritante— besa mí frente sacándome una sonrisa.

—Y yo a ti orangután estúpido.

Callé sus labios antes de que respondiera a la forma en que lo llame, pero aunque quisiera enojarse, no podría, así nos llevábamos y así nació esto que tenemos, entre insultos y juegos tontos.

¿Quien diría que unos insultos provocarían tantos problemas?.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀

Eternitely

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro