Hoshi era la mejor compañía del mundo.

Desde que Irene le tiene que dar clases al tonto amigo del orangután, mi amiga tiene muy poco tiempo para que estemos juntas, Junhui se llevó hasta el recreo literalmente por eso el trabajo de ella es mucho más pesado de lo que fue el mío con Jungkook, cinco materias no son nada, ¿pero nueve?, eso ya es otro tema.

Por eso Hoshi ha sido mi acompañante en los momentos en los que ella se tiene que ir a reunir con él en la biblioteca. Y a decir verdad Hoshi es un gran acompañante, puedes hablar de un sin fin de cosas o de lo mismo de siempre y no te aburres, agreguemos también su interminable lista de chistes malos que al final te dan risa por lo pésimo que suenan.

—Oye, el viernes es tu cumpleaños. ¿Que harás?— Hoshi deja de comer y piensa.

—Pues...lo mismo de cada año, ya sabes, mi mamá abriendo el álbum de los recuerdos, mostrándoles a todos mis fotos de bebe, contando todas mis tragedias de niño, tú y Irene burlándose de mis fotos, mi abuela llorando porque cumplo otro año más, todos comiendo la torta de chocolate que mi otra abuela trae— se encoge de hombros —Ya sabes, lo de todos los años.

—Sin mencionar las memorables peleas de tus abuelas paterna y materna por quién te quiere más o por quien es tu preferida— ambos reímos.

Los cumpleaños de Hoshi siempre han sido icónicos a pesar de no tener muchos invitados. Él es muy tímido y ni siquiera se cómo en primer año se atrevió a socializar conmigo e Irene.

Seguimos nuestra charla sobre a dónde iríamos luego a festejar su cumpleaños, claro, luego de estar con su familia, cosa que se volvió como una tradición todos los años.

—¿Este año vendrá alguien más?— él suspira y menea su cabeza.

—Este año tampoco he podido hacer nuevos amigos.

—Oye, no te preocupes— pongo una mano en su hombro —No necesitas más amigos, ¿o es que Irene y yo no somos suficientes?.

—No, no, claro que sí— responde rápidamente sacándome una sonrisa. Hoshi es demasiado tierno —A mi me basta y me sobra con tenerte a ti.

—Y a Irene— agrego, porque me incomodan sus indirectas muy directas.

—Contigo me basta y me sobra— repite de nuevo. Me quedo quieta cuando veo como su mano temblorosa sube hasta quedar en mi mejilla, el pobre parecía un cachorro asustado y lo entiendo, nunca ha tenido contacto con otras chicas aparte de mi y Irene —Eres demasiado hermosa, Lena.

—No exageres, Hoshi— desvió mi mirada porque la suya me hace ponerme nerviosa —Soy una chica normal como cualquier otra.

—Para mi eres única— sonríe muy seguro de sus palabras —Podrán existir muchas mujeres en este mundo y aunque sean las reinas de la belleza, tú para mí seguirás siendo el más bello angel que ha pisado la tierra.

Sus palabras me generan algo raro en el estómago y me dejan recalculando toda mi existencia, de tantas cosas que Hoshi me ha dicho, esta ha sido la que más impacto me ha causado. Yo ya sabía que él sentía cosas por mi, pero jamás que fueran tan fuertes como para que dejara de ser un chico tímido y se atreviera a mirarme a la cara directo y decirlo todo como si nada.

Estaba tan concentrada sacando teorías del asunto que jamás me di cuenta de la cercanía de Hoshi con mi rostro, literalmente ya tenía lo ojos cerrados y a paso de caracol se iba cada vez acercando más. Ya podía sentir su respiración cerca de mis labios y justo cuando inconscientemente cierro mis ojos para ver qué sucedía, pum, un golpe en la mesa lo hace dar un brinco hacia atrás.

Sentía mis mejillas ardiendo hasta no poder más y como se me había acelerado la respiración. Acomodé bien mis lentes y mire que había sido ese ruido. Esto es más que genial.

Jungkook había golpeado la mesa con sus manos, estaba apoyado mirándonos a ambos con evidente enojo, pero para mí, evidente celos.

—¿Necesitas algo?— le pregunto totalmente tranquila.

—Hablar contigo, ahora— responde como si me estuviera dando una orden. Luego mira a Hoshi intimidando al pobre al punto de hacerlo agachar la cabeza —Pero solos tú y yo.

—¿No ves que estoy con mi amigo?— levanto una ceja y él hace ese gesto que me da calor, chocar su lengua contra su mejilla —¿Acaso a ti no te educaron?.

—No estoy de humor para tus tonterías, Lena.

Está muy enojado, el noventa y nueve por ciento del día me llama ratita, así que, que me llame Lena es señal de peligro.

—Lena habla con él, yo puedo esperar— el pobre Hoshi estaba tan intimidado que ni siquiera a mi podía mirarme.

—No— digo firme y miro a Jungkook con su cara de perro rabioso —Él debe aprender a tener modales y saber que si una persona está ocupada hablando con otra no las puede interrumpir.

—¿Hablando?— ríe irónico y repite el gesto que me descompone —Desde la puerta de la cafetería parecía que se iban a besar.

—¿Y acaso eso te incumbe? Con más razón eres un irrespetuoso porque interrumpiste un momento privado— noto como tensa todo su cuerpo y eso me daba motivo suficiente para proseguir con mis provocaciones —¿Acaso a ti te gustaría que uno de nosotros fuera y te interrumpiera un momento así con tu pareja o cualquiera de todas las chicas con las que te acuestas?

—No me jodas, Lena— su mirada se oscurece y se vuelve sombría —Ven conmigo y hablemos o ahora mismo te subo a mis hombros y te saco de aquí sin importarme lo que los demás puedan llegar a pensar.

Sonrió de lado, me levanto y pongo las dos manos sobre la mesa para acercarme a él y quedar cara a cara;—Vamos orangután, gánate tu banana.

Y esas simples cinco palabras lo hicieron enloquecer. Le dió un golpe con su puño a la mesa y rodeándola se acerca hasta donde estoy, me quedo boquiabierta porque enserio hará lo que dijo.

—Ni siquiera lo pienses, Jungkook— le advierto señalandolo con mi dedo índice.

—Demasiado tarde, ratita.

Me jala del brazo y en un dos por tres estoy en sus hombros como si fuera un costal de papas, noto como Hoshi se levanta quizás para intentar detener a Jungkook, pero es obvio que lo intimida así que opta por quedarse dónde está. El orangután comienza a caminar hasta la salida de la cafetería conmigo en sus hombros como si fuera cosa de todos los días.

Los demás alumnos murmuran cosas entre ellos sorprendidos por lo que veían, esto solo hará que comiencen los chismes sobre un supuesto romance entre él y yo, ahora me van a ver cómo una más de la gran lista de Jeon Jungkook.

¡Puto orangután!.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀

𝑬𝒕𝒆𝒓𝒏𝒊𝒕𝒆𝒍𝒚