—Bien Lena, tu muñeca por suerte solo se dobló, tardará unos días en sanarse, es por eso que no debes quitarte el vendaje y debes tener cuidado con las cosas que haces— dice la enfermera una vez que termina de revisarme. Se levanta de su silla y toma unas pastillas, abre el frasco y me entrega una —Es para el dolor, tómala, yo iré a entregarle el aviso a la profesora de educación física para que sepa que no podrás hacer actividad física por unos días.

Asiento más que feliz, voy a salvarme de hacer ejercicio, creo que debo ir a darle las gracias a MinJoon por empujarme, apesar de que solo me dobló la muñeca me acaba de hacer un gran favor.

—Toma— Jungkook me pasa un vaso con agua para que pueda tomarme la pastilla, me había olvidado de que todavía estaba aquí.

—¿Por qué no te has ido todavía?— me tomo la pastilla y le devuelvo el vaso.

—¿Por qué todo lo tienes que cuestionar?— se cruza de brazos —Tú fuiste la que me dijo que debía cambiar mí forma de ser, que debía demostrarte que no soy tan mierda.

—Si, pero comportandote bien con otros, no conmigo.

—Es que a ti no se te puede satisfacer con nada— niega sonriendo —Eres peor que un caso de matemáticas.

—Si si, lo que digas. Me quiero ir de aquí.

La camilla era bastante grande, aunque ese no era el problema, soy muy baja y por eso me parece que el suelo está demasiado lejos de mis pies. Apoyo la mano sana sobre la camilla y luego soy tan estúpida de apoyar la que tengo vendada, chillo del dolor y casi me caigo, pero Jungkook me toma a tiempo quedando en medio de mis piernas y con su cara solo a centímetros de la mía.

Mis manos las tenía apoyadas sobre sus hombros, donde intentará algo lo iba hacer volar contra la pared; sus ojos escanean todo mí rostro y mis ojos lo miran con desconfianza. Sus labios se estiran dando paso a su estúpida sonrisa arrogante.

—Guau, de cerca eres aún más fea— sonríe y lo empujó muy lejos de mí.

—Ay si, ni que tú estuvieras tan bueno.

—Todas mueren por mí, ratita— dice agrandado.

—No todas, orangután— logro bajarme de la camilla —Yo gracias a dios si tengo buen gusto.

Se ríe pasando su mano por su cabello echándolo para atrás. Se acerca unos centímetros y yo retrocedo;—Si yo quiero puedo tenerte cuando sea.

—Uy si— me burlo poniendo los ojos en blanco —Sueña orangután, es gratis.

—Vas a caer como todas— asegura con mucha confianza en sus palabras.

—Te tienes mucha confianza, pero ¿quien te asegura que el que caiga primero no seas tú?— me cruzo de brazos arqueando una ceja.

¿Yo caer ante él? Si claro, eso solo sucederá cuando del cielo lluevan hamburguesas.

—Simple, porque yo jamás me enamoraría de una rata come libros— se encoge de hombros.

—Cuidado, está rata come libros te puede sorprender— me acerco quedando más cerca de lo que me gustaría estar.

—Vas a ser mía Lena Park— sonríe de lado y da un paso más.

—No, Jungkook, tú vas a ser mío— le guiño y paso por su lado dejándolo con las palabras en la boca.

Una vez más, yo gano.

Salgo al pasillo y camino riendo hacia mí salón, lo que pasó en la enfermería es lo más estúpido que he vivido en mí vida, ¿Jungkook y yo?, ja, si. Somos polos opuestos—si, se el dicho que dice que los opuestos se atraen—pero en mí caso con Jungkook simplemente no aplica.

Él es un popular a quien le importa demasiado el que dirán, si se enteran que tiene algo con una nerd su reputación se irá a la mierda y posiblemente sea el hazme reír de toda la secundaria hasta el día que se gradué, aunque dudo mucho que algún día salga de esta escuela, al paso que va lo bajarán de año.

Pero siguiendo con el tema de Jungkook y yo, lo de la enfermería solo fue un estúpido juego para ver quién tenía más seguridad de si mismo y en eso no hay quien me gane, a mí jamás me tiembla la lengua para responder y eso de "No, Jungkook, tú vas a ser mío" solo fue para seguirle su tonto juego de provocación.

El pobre tarado cree que puede seducirme a mí, por dios, ya he visto a Jeon Jungkook de todas las formas posibles—hasta desnudo—y aún así sigo aquí invicta sin sentir absolutamente nada por él. Es simple, a mí no me ganan por el físico, a mí me ganan siendo intelectuales, cosa que Jungkook jamás será.

Llego al salón de química, le explicó al profesor lo sucedido y me deja pasar. Voy con Irene y me siento a su lado, poco después Jungkook también llega al salón, al ir a su asiento no deja de mirarme y sonreír como el buen arrogante que es.

Esperen...

No me digan que Jungkook se tomó enserio lo de la enfermería, porque no encuentro otra explicación para que me esté sonriendo.

Si es así...

Va ser divertido lograr que el orangután caiga a mis pies, así de paso le doy una buena lección.

—¿Todo bien?— pregunta Irene —¿Por qué Jungkook entro sonriendote?.

—Ya sabes que ese chico no está bien de la cabeza— digo restándole importancia y sacando mis cosas para anotar lo que el profesor escribió en el pizarrón.

—Si, claro, como no, puedes engañar a quien quieras, pero a mí que soy tu mejor amiga, jamás.

Tiene demasiada razón.

—Okey, te lo contaré— me acomodo bien y la miro —Jungkook se puso coqueto conmigo en la enfermería, ya sabes, creyéndose la última calculadora en el planeta entero— ella ríe por esa referencia —El caso es que me aseguro que podía conquistarme, que yo caería ante él, pero yo le dije que las cosas podían ser al revés y quién termine cayendo sería él, pero ante mí. Entonces me dijo que yo sería suya y yo le respondí que no, que él sería mío.

Irene tapa su boca para evitar gritar y llamar la atención de todos. ¿Acaso lo que le conté es motivo de celebración?.

—Lena, lo que me estás contando es demasiado para mí pobre corazón— inhala y exhala para poder hablar —No sé si te diste cuenta de lo que hiciste— no respondí, solo me quedé viéndola —Tú, Lena Park, la rata come libros desafiaste a Jeon Jungkook en su propio juego de seducción.

—¿Y eso que? Mí vida se basa en desafiar a Jungkook en todo, esto no es nada nuevo— arreglo mis lentes.

—Lena, no me estás entendiendo. Esto es otra cosa, te acabas de meter en el campo donde él mejor sabe moverse y dónde tú no entiendes nada, esto no es matemáticas, ni ciencias, ni nada de eso, en la materia seducción Jeon Jungkook tiene el mejor promedio y tú te la llevas a recuperatorio.

—Wow, wow, wow, vamos más despacio— parpadeo un par de veces —¿Que estás queriendo decirme?.

—Que has cometido un error al haber desafiado a Jungkook en algo en lo cual es experto y tú no. Tú crees que solo fueron cruces de palabras como siempre, pero no, Lena, él se tomó muy enserio cada letra que salió de tu boca y acabas de comenzar un juego en donde uno de los dos si o si caerá— me quedo en shock procesando toda su explicación.

—Dios, ¿que hice?— puse ambos brazos sobre mí mesa, apoye mis codos y sostuve mí cabeza con mis manos.

—¿Pero sabes que es lo peor de todo este juego?.

—¿Hay más?.

—Lo peor, es que es un juego peligroso, en donde uno de los dos va a ganar seguro, pero también es seguro que alguien saldrá herido y tengo miedo de que seas tú.

—Eso jamás, yo no me voy a enamorar de ese orangután sin evolución— digo con voz clara y firme.

—Lena, eso dices ahora porque todavía el juego no ha empezado, pero solo espera a que Jungkook comience a actuar. Esto los va a quemar a ambos.

Ay dios de los inteligentes, ¿¡que hice!?.

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Que el juego comience :)

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—Ilyxjk
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