
12
L E N A
⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀
Cuando pasas mucho tiempo con una persona, te das cuenta de lo agradable que es—claro que no se puede decir lo mismo de todos—pero en este caso, pasar tiempo con Tae me hizo ver que es una gran chico, con buenos sentimientos hacia mi hermano.
Ya era de noche y nos habíamos quedado bastante tiempo con Hye en la editorial, así que él se ofreció a traerme hasta mi casa. Aunque sé perfectamente que solo soy su excusa para ver a Jimin.
En todo el camino hablamos de múltiples cosas, no solo de nosotros. Taehyung tiene proyectos con mi hermano, lo cual me hace más que feliz, aunque la parte mala, es que las personas serán sus obstáculos.
Jodida sociedad.
Taehyung se estacionó frente a mi casa, delante nuestra había otro auto estacionado, y lo conocía muy bien, ahora entiendo porque el orangután estuvo mandando tantos mensajes, lo cuales me olvidé de leer.
—Al parecer tienen visitas— mencionó, Tae.
—Es mi novio.
—Oh, por fin conoceré al gran Jeon Jungkook— sonrió.
—Te daré un consejo, evita llamarlo así, porqué o sino se le sube la espuma al cerebro y lo perdemos— bromeé, haciendo reír a Tae —Vamos, quiero ver cuando Jimin se caiga al suelo por verte aquí.
Taehyung bajó riendo junto a mí. Esto va a traer problemas, se que el orangután sacara de contexto el hecho de que venga acompañada por Tae, así que mejor me preparo para sus miles de preguntas, hasta que me dejé hablar.
Al entrar a casa, Tae hizo un chiste malísimo, que al final terminó siendo chistoso; cuando llegamos a la sala, nuestras risas llamaron la atención de todos los presentes. Caras felices, caras sorprendidas y caras de querer hacer correr sangre, eran lo que teníamos frente a nuestros ojos.
—¿¡Tae!?— exclamó, el pitufo. En sus ojos podía ver las ganas de querer salir corriendo.
Mientras que yo tenía una mirada pesada sobre mí.
Tranquilo, orangután.
—Buenas noches— dice Tae, haciendo una reverencia.
—Buenas noches— responde mi padre —¿Quién eres?.
—Es mi amigo de la universidad, papá— se apresuró a decir, Jimin.
—¿Y qué haces tú con él Lena?— indagó, mamá.
—Tae es el hijo de Hye, apareció en la editorial y pues, se ofreció a traerme.
—Muchas gracias muchacho— papá le agradece con gentileza —¿Te quedas a comer con nosotros?.
—Si no es mucha molestia— contestó Tae, rascando algo apenado su nuca.
—Por favor, claro que no. Siéntate— le ofrece, mamá.
Yo dirigí mi mirada al orangután, era el único que se mantenía en silencio, pero era porque de seguro estaba imaginando las mil formas en que quería matar a Taehyung por el solo hecho de estar conmigo.
—Es un gusto conocerte, Jungkook— dice Tae, este le estira su mano al orangután para que la tomara, pero mi tonto y celoso novio, no le correspondió.
—Lo mismo digo— replicó, frío. Tae se puso algo incómodo y optó por sentarse junto a mi hermano que parecía una estatua.
—Bien, yo me iré a cambiar el uniforme— informé, sabiendo que el orangután vendría detrás de mí.
No puedo creer que haya sido tan descortés con Taehyung, ahora resulta que ningún hombre se me puede acercar, solo porque al niño no le gusta.
Por dios, es ridículo.
—¿Por qué llegaste con ese tipo?— cuestionó, cuando entramos a mi habitación —Yo soy tu novio, pudiste llamarme y hubiera ido por ti.
—Hola orangután, también es lindo verte— ironicé.
Ignorando por completo su tonto estado de macho posesivo, me metí a mi armario para sacar algo de ropa. Me cambie rápido, dejándolo a él afuera con su furia estúpida.
¿Por qué le costaba tanto confiar en mí?.
—Te hice una pregunta, Lena— espetó, cuando me vio salir del armario.
—Por dios, orangután. ¿Siempre me harás este tipo de escenas cuándo me veas con otro chico?— discutí, molesta —Es solo un amigo.
—¿Pero cuál era la necesidad de llegar con él? Es un jodido universitario, tú no tendrías porque estar con él— alegó.
—¿Acaso oyes lo que dices?— reproché, disgustada —Ese chico es el hijo de Hye, solo quiso ser amable.
—Si claro, amable— bufó.
Se estaba comportando peor que un niño pequeño.
—Él jamás podría fijarse en mí— aclaré, más tranquila.
—¿Por qué?— cuestionó, con los brazos cruzados.
—Porqué es el novio de mi hermano— expuse.
—Ese tipo es— se quedó callado, procesando lo que le había dicho.
¿Y ahora qué tienes para decir orangután?.
Jungkook se sentó en el borde de mi cama, aún en shock por mi impactante respuesta, le costará a su pequeño cerebro procesar la información, pero lo hará.
—¿Jimin es homosexual?— preguntó, con la voz casi inaudible.
—Así es, Tae es su pareja y más te vale no decir nada frente a mis padres porqué todavía no saben nada y mucho menos hagas un mal comentario hacia ellos, porque juro que te mandaré directo a la mierda y sin escalas— advertí.
—Jamás les diría algo ofensivo, no soy un homofóbico— aseguró y luego suspiró —Perdón por todo este show que acabo de armar.
—A quien deberías pedirle perdón, es a Taehyung y por haberlo tratado tan mal— me crucé de brazos.
—Tienes razón— admitió, bajando la cabeza como un cachorro regañado.
—Pero quitando eso, no entiendo porque aún no confías en mí.
—Confío en ti— aclaró, mirándome.
—Pues no sabes demostrarlo muy bien. Mira como te has puesto por Tae, te pones celoso por cualquier chico que se me acerca y me haces sentir mal, porque siento que crees que soy fácil y que me iré con el primer idiota que pase frente a mí— solté, sintiendo un alivio dentro mío.
—Yo, lo siento, no sabía que te hacía sentir así.
—Jungkook— me senté a su lado y tomé una de sus manos —Yo jamás te cambiaria por ningún otro chico, ni tampoco pienso mirar a otro o te haría algo tan cruel como engañarte con otro.
—Tengo miedo de perderte— musitó, mirando el suelo —Tengo miedo de encuentres un chico más inteligente, uno que esté aquí contigo y no que viaje por todos lados. Uno mucho mejor que yo.
—Orangután, se que siempre estoy haciendo burlas sobre tu inteligencia, pero es que en eso se basa nuestra relación— logré sacarle una sonrisa —Pero eres un chico muy inteligente, eres increíble en todos los aspectos. Además, Hoshi era todo eso, ¿y me quedé con él?— meneo la cabeza —Es porque tú me atrapaste de una forma diferente. Eres algo....especial, comparado a los chicos que conozco.
—¿Qué significa eso?.
—Significa que no pienso dejarte por otro— simplifique, poniendo los ojos en blanco.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro