—Felicidades señor Choi— el extraño repitió y Yeonjun le miraba como si fuera una aparición, con los ojos bien abiertos y dando bocanadas de aire intentando hablar de vuelta.

—Soy Yeonjun— fue lo único que salió de su boca cuando extendió su mano hacia el extraño. El más bajo le sonrió con ternura y devolvió el saludo.

—Soy Beomgyu, el dueño del restaurante— "bien hecho Yeonjun, avergonzarte frente al dueño" pensó— Yo mismo me encargué del pastel, espero que lo disfrute—

—La comida estuvo deliciosa y el pastel es perfecto, muchas gracias— apenas pudo concretar aquella oración en su mente y es que lo ojos de Beomgyu estaban haciendo que sus rodillas fallaran.

—No hay nada que agradecer, es parte de mi trabajo— se despidió con un venía y una amable sonrisa, ayudando a los meseros a cortar el pastel dejando a Yeonjun buscando inútilmente algo que decirle, al verlo alejarse tomó  del brazo de Sunghoon y se acercó a susurrarle.

—¿Lo viste? Es perfecto— Sunghoon tenía la mirada fija hacia alguien.

—Oh claro que lo veo— pasó un mano por su cabello sin quitar la vista del mesero con el que estuvo coqueteando desde que cruzaron miradas.

—¡Él no!— lo tomó de la barbilla y la movió hacia Beomgyu— Hablo de él—

—Ah, o sea si está bueno pero... no tanto— Yeonjun no podía creer la mueca en el rostro de su amigo.

—Es guapísimo, sus ojos eran tan brillantes... y su sonrisa— un suspiro salió de sus labios sin aviso.

—Pues ve por él— le empujó levemente cuando el mesero al que le había estado coqueteando, Jake, se le acercaba a su amigo con un plato en la mano.

Yeonjun decidió ignorarlos y caminó hacia el chico que lo había cautivado.

—Hola de nuevo— Beomgyu se dió la vuelta al escuchar su voz, mirándole amablemente—Eh, sólo quería agradecerte de nuevo la comida, fue... deliciosa amh... lo vegetales estaban frescos y...— su concentración comenzaba a desaparecer mientras más tiempo pasaba viendo los brillantes ojos— Tus ojos son tan profundos y cálidos...— "buena esa Yeonjun" se recriminó

Beomgyu sabía que algo no estaba bien desde que escuchó nuevamente la voz del empresario y lo pudo comprobar al darse cuenta como su conversación comenzaba a viejar, no era como si no se sintiera alagado por los cumplidos que salían sin parar de la boca del pelirojo, de hecho tenía que admitir que el chico era bastante bonito, pero difinitivamente no estaba listo para ningún tipo de romance en su vida, así que prefirió deter al hombre frente a él para no darle ningún tipo de ilusión.

—Le agradezco el cumplido, si me permite debo regresar a trabajar— caminó apresuradamente hacia la cocina, ignorando el pequeño "espera" de los labios del contrario, encontrándose con una escalofriante escena—¡Oh por favor!— se cubrió los ojos con la imagen de Heeseung entre las piernas de Jungwon, atacando sus labios sobre le área de trabajo de su novio, aún sellada en su mente.

Jungwon empujó su novio de encima suyo, bajandose con un rápido movimiento de la mesa y se abrochó la filipina, dejando un botón libre provocando que su ropa se viera torcida y desaliñada, Heeseung se acomodó el cabello despeinado por los dedos de su novio.

Beomgyu quitó la mano de sus ojos lentamente y con miedo, una perpetua mueca de asco aún en su rostro mientras veía los otros sonrojados de sus menores. Jungwon intento decir algo pero Beomgyu levantó su dedo índice negando con la cabeza.

—No quiero saber nada, estoy muy harto y cansado, tu cierras Heeseung— el mencionado solo asintió con vergüenza y Beomgyu se dirigió a los casilleros escuchando un poco de la conversación de los novios en celo.

—¡Te dije que esperarás hasta la casa, HeeSeung!—

—Pe...¡Pero pastelito!— fue lo último que alcanzó a escuchar.

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—¡Hola Bang Chan!— Bang Chan casi se tira encima el café que estaba soteniendo al escuchar a su jefe salir de la nada, tomando un suspiro y soteniendo su vaso con ambas manos levantó la mirada a él pelirojo.

—Hola Yeonjun— dijo al mismo tiempo que dejaba su vaso sobre su escritorio— Ya envié el manuscrito a la imprenta como me pediste— Bang Chan sabía que su amigo era un perfeccionista y no se le hizo raro que fuera hasta su lugar para comprobar que había hecho el trabajo.

—Que bien ¿Quieres ir a almorzar?— Yeonjun no pareció prestar atención a lo que el mayor  le dijo y Bang Chan frunció en ceño, mirando el reloj de su computadora.

—Son la diez treinta de la mañana, Jun—

—Lo sé—su superior asintió como si no ubiera dicho la cosa más disparatada del mundo.

—¿Quieres ir a almorzar conmigo a las diez de la mañana?— Yeonjun asintió son percatarse de la situación, Bang Chan comenzaba a entender un poco y le hizo una pregunta solo para segurarse de que sus suposiciones fueran ciertas— ¿A dónde quieres ir?—

—Al restaurante donde celebramos mi cumpleaños, la comida estaba muy buena— "no era lo único que estaba bueno" pensó Chan.

—Ajá, ¿No tiene nada que ver con el chef al que seguiste como perro callejero?— notó las puntas de las orejas de Yeonjun enrojecerse.

—No, o sea...—balbuceó— un poco, algo... Sí— Bang Chan se llevó los dedos a sus sienes, mirando por última vez el ilusionado rostro del pelirojo.

—Llamaré a Sunghoon—

—Iré por el móvil— fue lo último que escucho Bang Chan de su jefe.

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Después de escuchar las mismas quejas que tuve Bang Chan de la boca de Sunghoon, al final terminaron por acompañarle de regreso a ese restaurante, y es que era algo que Yeonjun no podía evitar, por alguna razón tenía la fuerte necesidad de ver nuevamente a  Beomgyu. Y aunque Yeonjun no lo aceptara quería comprobar si su corazón iba a latir tan fuerte como lo hizo el día de su cumpleaños cuando lo viera de nuevo, es por eso que al cruzar las puertas del elegante restaurante sus ojos viajaron inmediatamente a las grande puertas de madera que le separaban del pelinegro.

Se encontraron nuevamente con el host de su cumpleaños, Jay, según recuerda era su nombre, su cabello rubio estaba estilizado hacia arriba y sus ojos rasgados resaltaban más bajo un suave maquillaje.

Yeonjun frunció un poco el ceño cuando notó que lo primero que hizo Jay al verlos fue pasar la mirada de arriba hacia abajo sobre el cuerpo de Sunghoon con aires de superioridad, para después cambiar su semblante a la amabilidad que había mostrado en su fiesta cumpleaños.

—Buenos días, bienvenidos ¿Mesa para tres?— Yeonjun asintió levemente, notando de reojo la mueca en el rostro de Sunghoon.

Jay los guió a su respectiva mesa y llamó  con los dedos a un mesero, quién reconoció que estaba también en su fiesta, Felix se leía en su gafete.

—Buenas días, soy Felix su mesero... ¡Oh!— se interrumpió mientras repartía la carta con la ayuda de Jay— ¿Ustedes son los de la editorial que tuvo la fiesta aquí el sábado verdad?— Felix dijo con toda naturalidad, cambiando un poco el tono formal con el que los había recibido a uno más amigable, como si se te contrata con viejos amigos, a Yeonjun le pareció adorable.

—Si, somos nosotros, él es Choi Yeon Jun, el festejado— Bang Chan lo señaló con la mano, obteniendo la atención del rubio de cabello largo, quién asintió con una sonrisa.

—Claro, los recuerdo—

—Es un gusto verlos de nuevo— Jay dijo con un tono un tanto falso— Disfruten su comida— se retiró con una amable venía. Sunghoon le siguió con la mirada con una no tan placentera mueca.

—¿Es venenoso tu amigo, no Felix?— Sunghoon escupió sin descansar la mirada de la espalda del host.

—Uhm... Es mi primo de hecho— Felix jugó un momento con la pluma en sus mano y Sunghoon abrió la boca para disculparse siendo interrumpido por el mesero— Digamos que a Jeongseong no le gusta que se metan con su...— el mesero miró hacia ambos lados, como cerciorándose de no ser espiado, se inclino hacia los clientes en la mesa y tapó un lado de su boca con el dorso de su mano— Amigo con derecho— todos en la mesa jadearon con sorpresa.

—¡El mesero con el que coquetabas el día de la fiesta de Yeonjun!— Bang Chan chasqueó sus dedos mirando a Sunghoon quien abrió un poco su boca en señal de sorpresa.

—Por eso me miró como esposa que se encuentra con el amante— Sunghoon frunció el celo y cruzo los brazos, dejándose caer contra la silla.

—Pues sí eres algo así— Yeonjun subió los hombros.

—No es mi culpa que Jake me halla pedido un cita a mi y no a él— Sunghoon respondió— Lo siento, Felix— el castaño miró con simpatía al mesero quién negó con la cabeza.

—No se preocupe, yo tampoco apruebo mucho esa relación—

—No me hables de usted, pareces un chico agradable y para serte sincero creo que no vamos a ver muy seguido— Sunghoon dijo, subiendo los codos a la mesa y descansando sus rostro sobre sus manos. Yeonjun lo miró con cautela, pidiendo que por una vez mantuviera la boca cerrada— Emo boy por aquí está enamorado del dueño— Bang Chan señaló a Yeonjun con el dedo con una sonrisa cómplice.

—No lo estoy— se apresuró a decir— Sólo me están molestado Felix,  no le hagas caso— trato de convencer al rubio —La comida de aquí me gusta mucho, es todo—

—No te preocupes Choicito, yo no diré nada— el chiquillo tomo confianza rápidamente, llevando su dedo índice a una sonrisa traviesa, como para demostrarle que era un secreto— ¿Qué quieres que le diga a Gyu que te preparé?— levantó su bloc de notas con el bolígrafo listo para escribir.

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¡Tercer capítulo! Wow... Era casi las una de la mañana cuando terminé de escribí esto y aunque suelo estar despierta hasta mucho más tarde no sé porque tenía mucho sueño, así que no puede publicarlo imediatente. Si hay errores, no se preocupem, pronto los voy a corregir, Cómo sea, aquí está por fin la actualización ¡Espero que les guste!

También.. estoy tratando de pedir un portada para la historia en un bookcover, pero aún no abren tanda :( Por ahora seguimos con la portada provisional, que por cierto Yeonjun se ve muy lindo en esa foto xd... Ahora sí Bye~

—cyeonjxn; 210925💐