- Podía sentir la presencia de Sesshomaru por lo que abrió la puerta de aquella habitación y se asomó un poco para no llamar la atención , no quería problemas y eso que solo tenía diez minutos contados en aquel imperio medio completo.

- No quería hacerse ilusiones pero , si no mal olfateó ahora , acababa de sentir la presencia de este en la habitación del frente , eso solo significaba que tenía la habitación de su hermanastro delante de la suya , aunque sólo fuera temporalmente. Antes estaba feliz , ahora estaba más que feliz. Con una sonrisa de oreja a oreja volvió a cerrar la puerta.

- La habitación no era de la más lujosa que digamos , literalmente estaba vacía , habían uno que otros muebles de madera y mantas encima de una silla que supuso que utilizaría para improvisarlas en el suelo a la hora de dormir.

- En la habitación del frente se encontraba el Jokai sentado en una silla pensando en las miles de estupideces que estaban rondando en su cabeza , quería dejar de pensar en ellas pero simplemente volvían a rondar en sus pensamientos.

- y si dejaba que todo fuera como el otro quisiera?

- dejaría que todo fuera normal entre ellos y cuando dice normal se refiere a matarse con la mirada pero con un InuYasha que se la pasa mirándolo tímido las 24 horas del día le era imposible. Sinceramente prefería al gruñón , contestón y testarudo de antes , aunque este se le hacía interesante. Muy interesante.

Estar encerrado en una habitación en la que no había casi nada no era para nada agradable , sinceramente prefería el bosque , el aire fresco , la libertad reinaba por todas partes en la que pisabas a las afueras pero aquí , aquí no podía hacer nada. Absolutamente nada y no tenía nada más que hacer que esperar sentado mirando por una ventana que daba hacia unos árboles y unos muros que si no mal calculaba era la parte trasera.

- Señor - llamó la chica que anteriormente le había enseñado su aposento después de haber tocado la puerta con los nudillos de sus manos , no tardó en abrirse la puerta y dejar ver a un InuYasha con la cara somnolienta "lindo" , fue lo único que le vino a la mente de la muchacha , porque sí , al final el semi-jokai decidió dormir ya que era lo único que pudo hacer ahí.

- Y Sesshomaru? - fue la primera qué pregunto qué le hizo abriendo bien los ojos para quitar el sueño.

- El Lord lo espera para comer - avisó con la mirada fija en el suelo como solía hacer ella - Acompañeme por favor - dio media vuelta sin esperar alguna respuesta del contrario y emprendió su camino por el pasillo y como siempre , InuYasha miraba cada detalle aunque fuera de menos importancia.

- Sesshomaru - susurró al verle sentado en la punta de la mesa larga , estaba sentado solo por lo que ese simple susurro hizo que el nombrado alzará la vista hacia él y lo observara sin ninguna expresión en su rostro como era de esperarse.

- siéntate - ordeno y este no tardó en acerlo sin hacerse de rogar , aunque tanteó por unos segundos sin saber si podía sentarse a su lado y al final decidió dejar una silla de por medio

- Gracias - hablo en voz alta esta vez , alzó su rostro y vio a Sesshomaru alzando una ceja haciéndole saber que no entendía su agradecimiento - Gracias por dejarme a su lado - aclaró con una sonrisa

- De nada - su sonrisa pequeña y tímida se hizo lucir hasta que Sesshomaru terminó su frase - Hermanito... - alzó su rostro atónico por lo que acababa de escuchar y su sonrisa se agrandó sintiendo su corazón latir frenéticamente.

Todo estaba yendo como Sesshomaru había pensado , sería fácil , más fácil de lo que había pensado. Quería jugar con fuego , solo que al Lord se le olvidaba algo.

El que juega con fuego , puede quemarse. Y donde hubo fuego , quedan cenizas.