Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo uno. ♡

- Cuando dio un paso dentro de su preparatoria dio unos pequeños brinquitos emocionados acercándose a la pared donde se ponía información importante y dónde había varios folletos para clubs, pero lo que llamo su atención era la forma en que estaba decorada esa parte, tenía corazones rojos y rosados en todas partes y como está decorado acorde a la temática del día de San Valentín.

Alzó su mano colocándola junto a las letras que decían San Valentín viendo cómo era semejante a su tono de esmalte. Baja la mano sonriendo y algo emocionado mientras tomaba con fuerza las correas de su mochila y caminaba por los pasillos hasta llegar a su aula y es que Ni-Ki ama con todo su corazón el día de San Valentín, no solo era porque había amor en el aire sino porque el rosa era su color favorito en todo el mundo y siempre decoraban el lugar con esos colores y ama tantas cosas del día, como las galletas en forma de corazón que vendía en las cafeterías y qué le gustaba hornear, también porque era emocionante ver cómo algunos Alfas se atrevían a cortejar a los Omegas que les interesaba, pero Ni-Ki odiaba que muy pocos Omegas se atrevieran a cortejar a los Alfas.

Eso era algo que se preguntaba a diario y es que casi nunca ha visto a Omegas cortejar a algún Alfa, Ni-Ki desearía que esos pensamientos de que solo los Alfas podían hacer eso se esfumaran y así las Omegas puedan atreverse y hacer algo bonito por los Alfas que le gustaban, aunque estos dos años ha visto un poco más el cambió. El año pasado varios Omegas le pidieron citas a los Alfas, lo cual fue genial de ver, pero triste porque él no se ha atrevido hacerlo él mismo con el Alfa que le gusta.

Ignoro aquellos pensamientos para no sentirse triste por su falta de valentía y retomo el camino mientras sus mejillas poco a poco empezaban adquirir color. Cuando llego en la puerta del aula recorrió la mirada en todo el lugar hasta que pudo ver a su amigo hasta el fondo de la clase, saludo con su mano antes de entrar con un puchero y dejarse caer en la silla al lado de JungWon. El Omega había sido su amigo desde que estaban pequeños y han sido inseparables durante todos estos años y se ha vuelto una parte importante de su vida.

Sonrió cuando el aroma a cítricos entro por sus fosas nasales y alzó la cabeza en busca del Alfa de cabello azabache y ojos tan azules como el mismísimo mar. Deja escapar un bajito ronronea sonrojándose debido a que su amigo estaba al lado, pero no se molestó en comprobar si lo había escuchado y con sutileza, siguió al Alfa con la mirada sonriendo al ver lo bello que lucía SungHoon hoy, muy cómodo y suave, pero fuerte y guapo, el Alfa más guapo de todo el lugar para él.

Ha estado enamorado de aquel Alfa desde que entró a la preparatoria, podría decir que desde que lo vio sentado al fondo el primer día, su Omega salto de felicidad cuando el olor a cítricos llegó hasta su nariz y cuando hablaron un poco por primera vez. Se enamoro por la dulce y atenta persona que era el Alfa, el mejor Alfa de todos y Ni-Ki estaba flechado desde hace un tiempo. Sin embargo, no habla mucho con SungHoon y duda que el azabache se interese alguna vez por él.

Deja escapar un suspiro triste cuando ese pensamiento cruza por su cabeza y regresa su mirada a su amigo para sonríe abiertamente.

— ¡Ya hay decoración del día de San Valentín! ¿No es genial?

JungWon frunce su ceño alzando los hombros sin darle tanta importancia, Ni-Ki rueda los ojos, ¿Qué acaso su amigo no puede sentir la bonita vibra de aquel día? Él amaba el día San Valentín, siempre traía algo rojo o rosa por toda la semana para combinar con la decoración.

— Si tu lo dices — Suelta despacio el Omega.

— ¿No te alegra?

— Siendo sinceros me da igual — Alza los hombros nuevamente — No le veo lo genial, solo hay amor en el aire y rechazos. No es genial.

Riki se lleva la mano al pecho con dolor por las palabras de su amigo y puede entender el punto, porque a veces uno puede sentirse excluido y sentir que no es parte de ese día y más cuando ves al Alfa que quieres saliendo con otra persona y entiende que eso no puede ser divertido, pero cuando hacen esa tradición de entregas de cartas anónimas; JungWon recibe algunas de ellas y Ni-Ki también recibe y se sonroja cuando dicen tantas cosas bonitas que se siente halagado, pero nadie los ha invitado a salir directamente, Ni-Ki agradece eso porque declinaría esas ofertar y le partería el corazón hacer eso porque sabe lo difícil y doloroso que es que alguien te rechace, pero quitando las partes negativas es bonito y emocionante.

Quizás algunas personas tomen un poco de valentía durante todos esos meses y puedan invitar o expresar sus sentimientos a alguien que le interese.

— Eres un aburrido — Riki lo empuja ligeramente.

— No lo soy, no porque no disfrute el día, sino solo me da igual — JungWon explica sonriendo al ver la molestia en la cara del Omega — No todos aman el día de San Valentín y está bien que te guste a ti.

— ¡Claro! Me gusta mucho — Sonríe en grande dejando ver aquellas arruguitas bajo sus ojos — Y más si puedo combinar mi ropa y usar algo rosa toda la semana.

Ya tiene planeado todo. Era divertido porque JungWon y él tenían un día de picnic con galletas decoradas, noches de películas y risas hasta tardé, ese era su plan de San Valentín, solo si no tenían un cita ese día, lo cual casi siempre sucedía y ha sucedido los últimos dos años para la tristeza de Ni-Ki. A pesar de que no vive al máximo ese día porque no tiene una cita; se la pasa bien estando con JungWon y siempre está feliz por las demás Omegas que obtienen una cita.

Solo desearía poder tener el valor de hablar más seguido con SungHoon o tener una oportunidad con él. Está muy enamorado y no sabe qué hacer con todo ese amor en su sistema. Él es un Omega de aroma a manzanilla, cariñoso y atento que siempre tenía que demostrar ese amor con actos.

— Oh hablando de eso — Ni-Ki sonríe emocionado — ¿Quieres ir a mi casa? Podría hornearte galletas o unos pastelitos.

Ante la mención de eso JungWon sonríe asintiendo. Su amigo Omega es el más emocionado cuando lo invita para hornear cosas, él es el que come la mayoría de lo que prepara y Riki está bien con eso, le gusta hornear para las personas que más ama. Durante el día espera con paciencia a que llegue su hora de salida y pueda ir a comer a su casa. Ya ha guardado nuevas recetas de sabores diferentes, decoraciones para galletas y pastelitos; todos de acuerdo con el día de San Valentín.

Sonríe llenándose los pulmones del olor a cítricos cuando pasa cerca de SungHoon y su Omega se inquieta al estar cerquita del Alfa. Cuando llegan a su casa toma del brazo a JungWon llevándolo a la cocina y se pone a hornear galletas de chispas de chocolate.

Ni-Ki se inclina en la isla de la cocina dejando caer varias chispas de chocolate sobre la mezcla de galletas y va dejando caer sobre todas las galletas. Una vez que todas las masitas de galleta tienen chocolate toma la bandeja y lo mete al horno. Aplaude viendo cómo el humo blanco de la harina sale dispersada como aire, posiblemente su cabello este siendo un desastre con harina al igual que lo está su ropa y sus manos.

Hornear es algo que siempre ha amado desde que es pequeño, su madre le ha enseñado a hornear diferentes cosas desde muy pequeño y le fue tomando amor cada día que pasaba, además es algo que lo desestresa cuando tiene un mal día, es algo terapéutico.

Media hora después las galletas lucen crujientes y ricas. Le tiene que dar un manotazo a JungWon para que no coma la primera galleta, no sin antes preparar chocolate caliente y poder sumergirlas. En unos pocos días ya es el día de San Valentín y no puede malditamente esperar a que sea el día, planea hacer pastelitos rojos y decorarlos con pequeños corazones comestibles.

JungWon se acerca a ver lo que está haciendo mientras le sostiene un ricito jalándolo hacia abajo. Ni-Ki se queja pero no se parta.

— Oye, Ni-Ki.

— ¿Si? — Alza la mirada unos segundos esperando que su amigo diga algo.

— Si te gusta hornear, el día de San Valentín y eres un Omega que no le importa lo que digan los demás — JungWon explica rápidamente — ¿Por qué no te atreves a corteja a SungHoon con postres y galletas? Ya sabes, todo lo que te gusta hacer.

Ni-Ki detiene sus movimientos mirando a JungWon. No es una mala idea, ni siquiera es algo que se le haya cruzado por la cabeza, pero tiene miedo que el Alfa rechace sus postres, ¿Pero quién en su sano juicio rechazaría postres gratis? Y no es que sea narcisista pero él hace los mejores postres del mundo.

Además el cree que SungHoon es su Alfa destinado, puede olerlo a kilómetros de distancia y su Omega siempre salta de alegría cada vez que lo ve, hay tantas cosas que le hace sentir SungHoon, de verdad siente que es su Alfa destinado, muchas personas no creen que en eso, pero Ni-Ki si y más cada vez que mira al Alfa de bonitos ojos azul cielo.

Y la simple idea de hornear algo para ese Alfa le hace sentir una presión de calidez en el pecho y la sensación de amor en el aire. Solo es un Omega que ama el día de San Valentín y aquel Alfa de ojos azules. Sonríe cuando la idea de regalarle mañana algunas galletas a SungHoon pasa por su mente. Da unos pequeños brincos con los rizos rebotando en su cabello y una sonrisa de niño pequeño.

Esta es una de las ideas más geniales que ha tenido JungWon en todo este tiempo que han sido amigos. Un plan perfecto, es San Valentín el momento perfecto para cortejar al Alfa con postres y todo era tan sutil, pero a la vez claro que era bueno. Sonríe antes de abrazar al Omega con fuerza. JungWon se queja entre sus brazos, pero aún así lo envuelve. Sonrisas y dulces galletas son lo que le dará a SungHoon mañana y tomara la valentía de hacerlo.

— ¡Gracias, gracias! — Ni-Ki se balancean con los brazos en el cuello de su amigo sonriendo — Aunque debo de admitir que estoy algo asustado, pero eso no me va detener.

Se aleja decidido y JungWon mira algo sorprendido a su amigo. Esa idea fue algo que le pasó por la mente, pero nunca pensó que Ni-Ki realmente lo considerará, cada vez le sorprendía lo decidido y valiente que era el menor.

Casi nadie cortejaba aún Alfa y muchos Omegas prefieren que el Alfa los corteje. Sin embargo, su amigo está sonriendo y tomando un contenedor de plástico colocando unas cuantas galletas, las suficientes como para que SungHoon esté satisfecho, y luego Ni-Ki corre hasta su habitación, cuando vuelve tiene una pequeña nota con una bonita caligrafía y la coloca en la tapa del contenedor y la cierra. El Omega es tan detallista que lo envuelve en una cinta roja y pega un sticker de corazón.

Se encarga de hacer presentable el empaque y las galletas se ven tan ricas ahí, él solo espera que sean lo suficientemente buenas y le gusten a SungHoon. Solo espera poder tener la suerte para hablar un poco más con el Alfa y así saber cuáles son sus postres favoritos y poder hornearlos toda la semana.

Él tiene un plan y no puede esperar a que sea mañana y darle las galletas al Alfa.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro