
« 1O."
L. HeeSeung.
- Si hablo de mis primeras veces, no pensaba en algo necesariamente sexual, sino, por ejemplo, la primera vez que se me cayó un diente, o cuando papá me explicó cómo debía ir al baño cuando era niño, cosas de ese estilo.
Pero si hablo de primeras veces sexuales me es incómodo, ¿por qué? simple, tenía a mi mimado esposo frente a mi esperando una respuesta que le satisficiera para no matarme.
Jake no es alguien que se lleve con rodeos, así que mientras almorzábamos en un pequeño restaurante y de la nada solo su pregunta "¿con quién y cómo fue tu primera vez?" yo sabía que no se refiere a algo tierno, era obvio que quería saber otra cosa. Casi me atraganto con mi fruta, solo me miro con esa cara de asesino que luego se cargaba.
─ ¿para qué quieres saber eso? ─ pregunte.
─ pues es obvio, si tu primera vez fue tan increíble que no quieres hacerlo con nadie más, obviamente necesitas terapia.
─ ¿yo necesitar terapia? creo que no te conoces bien Shim ─ me picó con su tenedor por debajo de la mesa ─ ¿por qué quieres saber de manera tan repentina?
─ somos esposos, debería saberlo, también te diré como fue la mía si quieres ─ yo no quería saber eso, era su problema ¿no? al final del camino había terminado conmigo, el pasado no me era importante, solo nuestro futuro.
─ pues en realidad yo... ─ si era complemente sincero, no lo recordaba. mi juventud fue muy seria y aburrida, mis padres hasta me decían que viviera un poco, pero no, yo con anteojos y siendo un ratón de biblioteca siempre estaba encerrado. pero eso no significaba que no tuviera amigos, y en esos casos mis amigos eran un desastre.
Una noche cuando teníamos diecisiete dijeron que iba a haber una fiesta con algunos chicos de otras escuelas, literalmente me habían secuestrado para ir, estábamos a un año de irnos a la universidad y quieren tener buenos recuerdos conmigo también.
Bueno, el punto es que terminamos en alguna mansión pues éramos puros herederos, la fiesta estaba en su mejor punto de la noche y había un montón de gente dentro y fuera haciendo todo tipo de cosas. Al principio planeaba quedarme en una esquina de la casa esperando que acabará eso rápido, pero entonces un hermoso trasero estaba moviéndose frente a mí.
En algún punto de la noche me había quedado solo con ya un grado alto de alcohol en la sangre, yo estaba todo mareado y con náuseas cuando un chico estaba bailando frente mío con tanta sensualidad que casi se me salía la saliva de la boca. Estaba mejor que muchas chicas de ahí y yo no podía dejarlo de ver, estaba tan ebrio como yo, eso era seguro, pues, aunque estaba bailando muy bien, se notaba ido.
Cuando noto mi mirada sobre el parecía provocar a propósito, no recuerdo el resto, pues de ratón de biblioteca pase a borracho extremista. Mi visión borrosa y ya no tener como tres de mis cinco sentidos no era bueno, cerraba mis ojos y los abría y era como si estuviera viendo solo imágenes pasar frente a mí.
Primero ese chico con rostro desconocido me llevaba al segundo piso de la casa, después estaba besándome como un salvaje, luego la siguiente imagen era que estábamos teniendo sexo, en realidad ahí fue cuando colapso mi cabeza porque yo no quería que así pasara mi primera vez, pero vaya que se sentía bien, mi olfato y tacto estaban a flor de piel, y ese chico estaba tan inexperto como yo. Tuvimos una buena noche por supuesto, pero nunca supe su nombre o quien era.
Al día siguiente de la fiesta desperté en una cama matrimonial, la cabeza parecía quererme explorar y cuando giré, ese chico con el que había pasado la noche estaba ahí durmiendo y dando me la espalda, como un cobarde le deje una nota disculpándome por irme y diciéndole que me gustaría conocerlo para compensarlo, concluí diciendo que había sido una buena noche.
Nunca lo volví a ver...
─ HeeSeung te estoy esperando ─ la única manera de salir de eso era diciéndole la verdad a Jake.
─ amor, la verdad es que yo no tuve una primera vez convencional, era un mocoso de diecisiete años, fui a una fiesta y perdí la virginidad con un tipo que jamás volví a ver, le deje una nota, pero nunca me contacto de alguna forma ─ a ese punto el rostro de JaeYoon parecía que querer explotar de felicidad, con cada palabra que decía, habría más y más la boca como si le estuviera diciendo la receta para no quemar su comida. el secreto es no estar mirando tu celular mientras lo haces.
─ espera, espera... ¿en una fiesta? ¿dejaste una nota?
─ sí, sé que es inmaduro y tan cliché, pero fue así, nunca hable de esto con nadie, creo que fue muy malo de mi parte ─ pero Jake no pensó igual porque de inmediato se levantó de su asiento dándome tremendo beso francés que tuve que detenerlo porque la gente comenzaba a vernos raro.
─ no puedo creerlo, eras tú, tú todo este tiempo ─ me tomo del rostro y no dejaba de darme pequeños besos por todo el rostro como si fuera mi madre y yo un niño pequeño ─ Seunggie, eras tú.
─ ¿de qué hablas?
─ cuando hice una fiesta en mi casa invite a varios amigos, esos amigos resultaron llevar a un pequeño nerd, al principio me diste lo mismo, pero luego vi que no eran tan feo, pero me daba bastante vergüenza hablarte pues te veías tan serio, tan misterioso, al final Jay propuso que con unos tragos de más mi pena iba a irse, entonces estaba tan ebrio que tuve tanta confianza, aunque bueno tú también estabas ebrio ─ mi cabeza parecía tener flashbacks de ese día y el rostro tan cerca de mi Jakey, como si estuviera recordando poco a poco, hasta que de momento, ese rostro que me sonreía en la oscuridad con malicia y lleno de seducción se convertía en esa adorable sonrisa que estaba frente mío.
Eso no podía ser cierto.
─ Jakey, ¿eras tú el dueño de esa casa? ─ él asintió, para después volver a su lugar buscando algo en su teléfono.
─ era cumpleaños de Nini y yo ofrecí esa casa para la fiesta, dejaste una nota diciendo que te perdona por haberte ido tan de momento, y yo... yo... oh HeeSeung, estamos tan destinados ─ JaeYoon parecía querer morir de felicidad y con nuestras historias con tantas coincidencias una parte de mí también quería hacerlo.
Después de esta noche si había tenido otras noches con otras personas, pero nunca sentí un choque eléctrico de nuevo. Incluso las siguientes veces estuve sobrio y ni así. Jake tenía ese "no sé qué" que me volvía loco.
Fue cuando aun hiperventilando lo tome de la mano para salir de ahí y empezar a caminar hacia fuera no sin antes dejar dinero en la mesa, tal vez hasta de más.
─ ¿qué haces? aun no terminaba mi bubble tea ─ pronto iba a saberlo.
Sh. JaeYoon.
Si hablo de primeras veces solo puedo pensar en cosas sexuales, ¿por qué? porque a nadie le importa saber cómo se me cayó un diente o como aprendí ir al baño sin atorarse en la taza, no, no, hablemos de "zetzo" o sexo, como sea.
El descubrir que mi esposito bonito había sido ese nerd que me estreno fue muy bueno para mí. Ya podía decir que mi primera vez si fue con mi esposo, así bien fino.
Y es que después de esa noche la mitad de mis recuerdos estaban borrosos, en cualquier caso ¿qué más daba? viva las primeras voces.
Estaba con mi ataque de sentimientos cuando HeeSeunggie me tomo de la mano y salimos del restaurante donde estábamos almorzando, ni siquiera pude terminar con mi bubble tea. Me subió al auto sin decirme nada y yo solo aguardaba en silencio mientras él parecía manejarse solo. Esa faceta en su cara era nueva para mí, incluso cuando ya estábamos a muy poco de cumplir un año de casados.
─ ¿ahora a ti que te pico? ─ bien dicen que nunca terminas de conocer con quien duermes.
─ vamos a casa.
─ cómo te gusta a ti arruinar los momentos de verás, yo aún quiero comer ─ iba a bajarme de auto cuando Hee me hizo gritar y besarlo y vaya que lo hizo como me gustaba, rudo y sin titubeos.
Me quedé completamente tranquilo con eso, cuando se separó de mi boca, suspiré.
─ Puedes comerte otra cosa llegando a casa ─ pinche HeeSeung si en la casa no había nada, por eso habíamos salido a... oh, que sucio.
Asentí sin mucha idea de que estaba pasando en estos momentos, fue como estar ebrio de nuevo, y joder, a mí me encantaba embriagarme de Lee HeeSeung.
El camino fue complemente silencioso, yo intentaba arreglar mi cabello, pero estaba tan nervioso y feliz que apenas y podía mantenerme quieto. HeeSeung parecía pensar en sus propias cosas, porque una vez que llegamos a nuestra casa, dejo el auto estacionado y me fue a abrir la puerta, vivimos en un departamento como en el quinto piso, entramos al edificio sin decirnos a una sola palabra, pero con nuestras manos bien sujetas una de la otra, me empujo dentro del ascensor y como si fuéramos protagonistas de cincuenta sombras de grey, me acorraló contra una pared para empezar a bésame y demostrarle que de castro solo tenía la cara.
Hacía mucho que yo no tenía nada de acción, estaba tan oxidado en eso que cuando yo sabía que no había marcha atrás, no sabía muy bien que hacer, me sentí virgen de nuevo, imaginen eso. Afortunadamente nadie nos vio ni siquiera cuando entramos a nuestro departamento, Binnie cerró la puerta detrás suya y fue directamente contra mí, me tomo de ambas piernas y me levanto sin mucho cuidado. Quede aferrado a su cadera, no dejaba de mirarme como yo miraba a mi abandonado bubble tea unos momentos antes.
─ así que siempre estuviste frente mío ─ me dijo, yo me sentía desfallecer por su hermosa voz ronca, profunda y porque me estaba tocando el trasero ¡qué atrevido! ─ eras mi secreto.
secreto.
─ nunca le conté a nadie que te conocí ─ era como una tortura placentera, no dejaba de manosearme, pero tampoco iba más allá de eso y me estaba poniendo ansioso ─ es una gran fortuna que fueras tú.
─ abusaste de un pequeñín ─ enrede mis brazos detrás de su cabeza para acercar nuestros rostros. él era tan atractivo que me hacía enojar, se hacía desear pues.
─ me haré responsable ─ en ese punto me esforcé como no tienen idea para no meter la pata y arruinarlo, Hee me había subido a la barra de la cocina para besarme y tocarme donde quisiera.
Me dieron ganas de estornudar, pero me contuve, quise decir una estupidez, pero me aguanté.
Todo de eso un poco ya saben, cosas típicas de mí. HeeSeung estaba disfrutando de mi como quería, yo solo suspiraba porque sabía exactamente donde tocar, donde morder y donde lamer. Me deje hacer todo lo que quisiera porque yo sabía que nunca me iba a hacer daño, nunca iba a lastimarme.
Fue cuando se alejó un poco para empezar a quitarse la ropa, supuse que debía hacer lo mismo. Tome el borde de mi camisa y la saque sobre mi cabeza, mi esposo tampoco estaba usando entonces su camisa, así que me volvió a tomar de las piernas para llevarme a otro sitio.
♡❜
El pecho de HeeSeung y el mío estaban rozando, podía sentir levemente muy pero muy levemente sus latidos, estaba tan acelerado, me sentí complemente feliz en ese momento porque fuera o quien quisiera contra decirlo, Seunggie estaba muy feliz y excitado por tenerme. que una persona sienta todo eso por ti, es la sensación más bonita del mundo.
Yo nunca había conocido a nadie que tuviera miedo a perderme o a hacerme daño, incluso entre mi familia a veces éramos unos desgraciados unos con los otros, pero el estar bajo el toque de alguien que te desea y quiere es como estar en el paraíso.
─ ¿me permitirías ir más allá? ─ acorralado entre sus brazos y en la cama donde ya habíamos dormido tantas noches, ¿se atrevía a preguntar eso?
─ puedes ir tan lejos como tú quieras ─ esa era mi conclusión.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro