El verano había terminado y eran vacaciones, Delilah pasó la mayor parte del tiempo con James, leyendo o pintando. Fue un verano terapéutico muy necesario para la joven y ahora, al volver a la escuela, se sentía libre y tranquila. Se sintió ligera.

James tenía su brazo envuelto alrededor de sus hombros, una evidente sonrisa en su rostro. Delilah tenía la misma sonrisa pero tenía un cigarrillo entre los labios y las gafas de leer se le caían por la nariz.

"Cariño, nos vemos luego". La chica le dio un beso y entró en la habitación sentándose al frente con Lily. James siguió caminando hacia los otros vagones con las otras tres quintas partes de los merodeadores.

"¿Lil's?" La chica cuestionó mientras se sentaba al lado de la  pelirroja. "¿Estás bien?"

"No lo sé, soy lesbiana, Lilah, pero Marlene no me ama. Está saliendo con una chica llamada Dorcas y me siento completamente perdida y sola, estoy debatiendo si debería ser miserable por el resto de mi vida e ir por Diggory".

"Por favor, no hagas eso." Los ojos de la chica de cabello castaño se agrandaron e hizo muchos gestos con las manos. "Te mereces la felicidad, Lils, incluso si no es con Marlene".

"Bien." La chica asintió convenciéndose a sí misma de las palabras de Delilah.

"Lo haces, te mereces toda la felicidad y estoy dispuesta a ayudarte a resolverlo".

"Pero soy demasiado tóxica para ti, ¿recuerdas?".

"Ambas tomamos decisiones tóxicas en esa amistad, pero ambos hemos crecido mucho y cambiado, creo que finalmente es el momento adecuado".

"Oh, gracias a Dios porque sí, amo a Mary y Marlene como amigas, pero eres la única persona con la que puedo hablar de todo".

Las chicas no prestaron atención a esa clase de encantos, se encontraron en constante charla. Delilah agitando su mano hacia Lily diciendo que robaría las notas de James o Remus para ellas.

"Ojalá tuviera lo que tú y James tienen".

Delilah se miró la muñeca donde James había escrito te amo con un marcador que encontró en la mochila de Delilah.

"El amor de todos es diferente y cuando encuentres el tuyo, será increíble, lo prometo".

"Ojalá nunca hubiera salido con James, lo hice por una razón tan estúpida y luego Marls pensó que era heterosexual".

"¿Por qué saliste con James?"

"Estaba celosa, me había acostumbrado tanto a la atención que me brindaba que cuando se fue, no sé, lo extrañé y pensé que eso significaba que me gustaba, pero estar con él nunca se sintió bien para ninguno de los dos. Era tonto".

"Creo que era necesario, sí, no funcionó, pero creo que ustedes dos necesitaban ver a dónde habría ido incluso si no se suponía que fuera para siempre".

"¿Cómo eres tan perspicaz?".

"He estado yendo a terapia durante casi un año, creo, aprendes cosas".

"Eres como mi jodido terapeuta Lupin".

"¿Quieres saltarte el resto del día?".

Los ojos de la pelirroja se abrieron antes de que ella mirara a su izquierda viendo a Marlene besar a la hermosa chica a su lado. La miró y vio lo contrario de sí misma haciéndola sentir aún peor, tenía un hermoso cabello negro rizado, piel oscura que se veía suave y perfecta, sus ojos eran marrones y era más pequeña que Lily con su falda más corta y su camisa blanca mostrando su estómago. Era hermosa y Lily no podía soportarlo.

Ella asintió con la cabeza levantándose y saliendo antes de que terminara la clase.

Corrieron por el pasillo, ignorando a los profesores hasta que entraron a estudios muggles y vieron las miradas incómodas. James tenía una cara divertida cuando su novia irrumpió en la habitación y luego hizo un gesto de vergüenza.

"¡Zoey! Peter te pasará esa mierda luego, tú, Lily y yo nos vamos de aquí".

"¡Estoy en medio de la clase, Lilah!" Zoey gritó de vuelta.

"¡A quién le importa! James tomará mi detención, Peter tomará la tuya y Remus y Sirius harán... piedra, papel o tijera para la de Lily".

"No." Remus puso los ojos en blanco ante las payasadas de su hermana. "Vamos."

"Zoey, trae tu trasero aquí antes de que suba las escaleras y te arrastre".

La rubia suspiró antes de ponerse de pie y salir, Delilah les dio a los chicos un beso al aire y todos gimieron también.

"¿Deberíamos invitar a Sirius, él es básicamente uno de nosotras?" preguntó Lily mientras las dos chicas volvían a ella. Las otras dos se miraron y se encogieron de hombros.

"¡Sirius! ¿Quieres venir?" gritó Delilah. Definitivamente había ganado confianza durante el verano.

El chico saltó aprovechando la oportunidad de salir de la escuela. Corrieron por Hogsmead y usaron polvos Flú para ir al Londres muggle, iban a tener un día de spa muy necesario.