Delilah se sentó en medio del gran salón rodeada de todos los demás estudiantes de sexto año para los exámenes. Había respondido todas las preguntas de las que estaba segura y las revisó ocho veces y contó cuántas eran. Si lo dejaba así, no aprobaría y eso parecía estresarla aún más.

Dejó caer su pluma y la frustración hirvió en ella mientras se pasaba las manos por el cabello tirando de los nudos. Sus rodillas rebotaban hacia arriba y hacia abajo y sus manos temblaban mientras su estómago daba vueltas y vueltas.

Sintió que un ataque de pánico florecía y eso la estaba estresando aún más.

James estaba sentado detrás de la chica y había terminado su examen hacía unos minutos. Todos creían que el chico Potter tenía dificultades en la escuela y no le iba tan bien como a los demás, pero era inteligente sin esfuerzo y era uno de los mejores estudiantes de la escuela.

Se inclinó hacia adelante en su silla y alcanzó tomo sus manos sosteniéndola con las suyas. Delilah sintió que una ola de calma la atravesaba, dejó que su respiración se calmara y respiró hondo antes de tomar su pluma y comenzar de nuevo.

Todo el tiempo se aferró a su mano sintiendo el consuelo que necesitaba.

Y cuando terminó, soltó la limpieza de su bolso y recogió la prueba. James sostuvo su mano al frente mientras entregaban su trabajo y luego se fueron del gran salón.

Ella respiró hondo después de irse. "Gracias James".

"En cualquier momento amor, estoy a tu servicio". Él sonrió mirándola a los ojos.

"¿Quieres venir a la biblioteca conmigo?".

James hizo una mueca ante la idea. "Escuelas terminadas, ¿por qué querría hacer eso?".

"¿Confías en mí?".

"Sí, por supuesto."

"Ven a la biblioteca conmigo".

James accedió a regañadientes a seguir a la chica a la biblioteca. Él la siguió a través de los estantes hasta que encontró la sección de romance muggle.

"Éstos son mis tipos de libros favoritos, solía ​​leerlos y pensé que estos libros eran de lo que realmente se trataba el amor, en general, lo necesito y haría cualquier cosa por él. Pero conocerte y conocer tu amor ha cambiado de opinión".

"¿Oh sí?" James sonrió.

"Sí." Delilah sonrió mientras miraba hacia el suelo.

"¿Qué te hizo cambiar de opinión?".

"En los libros, la chica se enamora del chico guapo y siempre termina rogándole que se quede, en los libros, la gente ve que las mujeres son propiedad de los hombres y están destinadas a ser sumisas y amables. Pero contigo siento que puedo ser yo mismo. Siento que no soy de tu propiedad porque somos iguales".

"Lo somos, no quiero poseerte, amor, soy feminista".

La chica le sonrió al chico que finalmente levantó la vista. "Cuando sea mayor quiero tener una familia grande y con familias grandes alguien tiene que quedarse en casa para manejarlo y he estado pensando, desprecio el trabajo y la escuela pero quiero contribuir y hacer algo que amo y encontrar algo que marque todas esas casillas es difícil, pero lo hice".

"Entonces, ¿Qué decidió Delilah Lupin?".

"Quiero ser escritora, una autora de novelas muggles, pero quiero escribir libros donde la chica sea fuerte, poderosa y valiente. Quiero enseñarles a mis hijas que pueden tenerlo todo y que no tienen que hacer lo que dicen los hombres, y yo lo quiero todo contigo.

La sonrisa de James de alguna manera se hizo aún más grande. "Yo también lo quiero todo contigo".

Delilah atrajo al chico en un beso rápido, poniéndose de puntillas y presionando sus suaves labios sobre los de él con las manos en sus hombros para apoyarse. Ella se alejó después de unos segundos sonriendo al chico.

Y la chica dejó escapar la risa más fuerte e incontrolable ante la siguiente declaración del chico.

"La biblioteca es mi nuevo lugar favorito".