—¿Es verdad?

—Hola Jacob, ¿cómo estás?–Le contesto Carlisle al lobo. Rosanna veía todo desde las escaleras con los brazos cruzados. Jacob la notó y de inmediato vio sus ojos.

—¿Y tú quien eres?

—Eres tan dulce amigo.–Dijo sarcástica.

—¿Por qué debería de ser dulce contigo? Estoy sospechando que tú eres la razón por la que un chico de apenas once se transformó esta semana.

—No tiene nada que ver conmigo.–Bajo las escaleras hasta toparse con el. Era más alto, pero ninguno de los dos dudaría en pelear si fuera necesario.

—Jacob. Ella es Rosanna, te pediré por favor que no te le acerques.

—¿Es peligrosa?

—No, solo no te quiero cerca suyo.–Admitió el doctor. El lobo suspiró.

—Escuchen, solo quiero que me digan la verdad...

—Jake, ¿eres tú?–Se escuchó la voz de Bella desde la sala.

—¿Está aquí?–Miro al doctor.

—Llegaron hace dos semanas.–El chico subió sin más. Rosanna sintió sus colmillos afilarse en su boca, pasó su lengua por ellos.–No te agrada, ¿cierto?

—¿A quien podría agradarle?

—Es el mejor amigo de Bella.

—Otra razón más por la que debimos de haber implementado mi plan.

—No íbamos a tirarla por las escaleras para que dejara de estar... ya sabes.

—Hubiera sido mejor.–Carlisle rio al verla tan decidida.

—Vamos, tenemos que ir de nuevo con Bella.–Ella rodó sus ojos y subieron las escaleras detrás del lobo.

Edward estaba en una esquina, sus manos en los bolsillos, Emmett estaba recargado en la pared junto a él, Rosalie se encargaba de cubrir a Bella como una guardaespaldas, en especial después de la sugerencia que había hecho Rosanna. Alice y Jasper estaban solo sin saber muy bien cómo actuar, y Esme estaba cruzada de brazos junto a ellos.

Jacob se quiso acercar a Bella, pero Rosalie se lo prohibió.

—Me alegra que vinieras.–Habló detrás de la rubia.

—Hasta ahí.–Se entrometió Rosalie.

—¿Cuál es tu problema?–Cuestiono Jacob.

—Rose, está bien.–Jacob se acercó y se sentó en la mesa de centro frente a ella.

—Te ves terrible.–Aseguró su mejor amigo.

—Si. Que gusto verte.

—¿Me dirás lo que te está pasando?

—¿Rose, me puedes ayudar?–Se quito la manta de encima, dejando ver su inflado vientre. Rosanna tomó la mano de Carlisle, podrían decirle lo que quisieran, pero ella veía sumamente antinatural que un vampiro hubiera embarazado a una humana. Carlisle apretó su mano, sabiendo lo que pensaba. Jacob se sorprendió al verla, miró después a Edward, se acercó para atacarlo, pero Emmett lo detuvo.

—Tu hiciste esto.

—No sabíamos que era posible.–Intento defenderse.

—¿Qué es?–Jacob miró a Carlisle.

—No estoy seguro. El ultrasonido no penetra el saco embrianoico.

—Yo tampoco puedo verlo.–Informó Alice.—Y ya no veo el futuro de Bella.

—Hemos investigado leyendas, pero no hay mucho que ayude. Solo sabemos que crece muy rápido, y que es muy fuerte.–Añadió Carlisle.

—No sabemos nada en realidad. En todos mis años viva, nunca había visto algo así de peligroso.–Rosanna apretó con más fuerza la mano del rubio, sin importar que pasar con ellos, siempre serían una clase de lugar seguro para el otro.

—¿Por qué no han hecho nada? ¡Sáquenselo de adentro!–Jacob se acercó a gritarles a Rosanna y Carlisle. Ella puso la mano sobre su pecho, evitando que siguiera.–No me toques.

—Y tú no te acerques así.–Murmuro ella con odio y lo empujo ligeramente, lo suficiente para que se alejara tambaleando ligeramente.

—¡Esto no es asunto tuyo, perro!–Rosalie masculló.

—¡Rose!–La regañó Esme.–Estas peleas dañan a Bella.

—El feto es el que daña a Bella.–Aseguró Alice.

—¿Por qué no dices lo que es? Bebe. El es solo un bebé.

—Es posible.–Saltó Jasper a defender an Alice.

—Es un feto en realidad. Y seguirá siendo un feto mientras no sepamos que mierda es.–Rosanna dictó.

—No es por nada, pero llevas aquí menos de un mes, ¿crees que tienes algún poder aquí?–Le dijo Rose.

—Rose.–La llamó Carlisle.–Ya basta. Entendemos tu punto, lo has hecho muy claro. Ahora relájate.

—Haz algo, rápido.–Le pidió Jacob a Carlisle.

—¡No!–Interrumpió Bella.–No es la decisión de ninguno de ustedes.

—Jacob, quiero hablar contigo.–Edward le demandó. Jacob lo siguió sin pensarlo demasiado.

—¿Por qué les resulta tan complicado aceptar que esto es lo que quiero yo? Quiero tener a mi bebé.–Bella insistió.

—Mira...–Rosanna se sentó junto a ella, por un momento se sintió como una verdadera madre, lo cual no estuvo tan mal.–No está mal querer decidir, es tu cuerpo al final de cuentas, pero esta decisión va más allá de ti, más allá de nosotros. ¿Qué piensas que pasará? ¿Estás lista para todo esto? No es sencillo, no sabemos que te pasa y lo más probable es que mueras. Solo di que eso es lo que en realidad quieres y... Carlisle tratará de ayudarte lo más que pueda.

—Es lo único que quiero.–Dijo con seguridad. Rosanna tenía aún más ganas de tirarla de las escaleras, pero ya no podía hacer nada. Era decisión de ella, no importa que tan estúpida le parecía.

—Sabes... yo siempre deseé tener un hijo.

—¿Y que pasó?

—Obviamente nunca pude tenerlo. Soy una vampiro, una vampiro que solo se ha enamorado una vez en su vida, y que si hubiera tenido un hijo, lo más probable es que ya hubiera muerto. La vida para esta especie nunca será fácil, ¿lo entiendes, cierto?

—Lo hago. Puedo hacerlo.

—...Como tú prefieras.–Se levantó del asiento y salió. Carlisle la siguió. Ambos se fueron al techo, donde se sentaron en silencio, solo viendo el bosque.

—¿No te da miedo que tu pantalón se manche? Hace tiempo que nadie ha subido aquí a limpiar.

—No importa, solo necesitaba salir un momento de ese remolino de locura.

—¿Te parece estúpida su decisión?

—Claro que si.

—Nunca me habías dicho que querías hijos.

—Ah, eso es un sueño al que renuncie hace años.

—Sabes que no tenías que hacerlo. Tener hijos naturales no es la única forma, pudimos haber adoptado y transformarlos en cuanto llegara el momento, o solo... para mi cada uno de ellos es como mi hijo... y Esme es como una hermana, pero creo que se entiende.

—No es lo mismo... aunque bueno, sin duda pude haberlo hecho. Recoger personas que me necesitaran... pero nunca más transformaré a nadie. No puedo hacerlo, ya no es parte de mi, nunca lo ha sido.

—Yo... cada vez que lo he hecho ha sido para salvar a alguien, nunca por gusto.

—Lo sé, por eso tienes el alma más pura y hermosa que he conocido. Yo no soy así. Por más que no quiera hacer lo que hago, ser lo que soy, aquí sigo. Al inicio es divertido, pero ser vampiro no es tan bueno como piensan. Como piensa Bella.

—Y más cuando no estás con tu pareja.–Rosanna lo miró y noto el ligero brillo en su piel, estos eran de los pocos días soleados en el pueblo.

—Tu piel...

—Lo sé. La tuya también está brillando.

—Fue difícil estar sin ti. Veo todo esto y me pregunto si algo de esto hubiera pasado si me hubiera quedado.–El examinó su rostro, ambos sabían que esto no hubiera pasado igual si ella se hubiera quedado con el, pero algo de esto, al menos la familia hubiera pasado, los Cullen hubieran pasado, porque ella era su familia.–Y ahora Rose me odia.

—No te odia, ella solo tiene... opiniones fuertes, ella también siempre quiso ser madre, y ahora es algo protectora con Bella y su bebé. Tal vez deberías de hablar con ella.–Rosanna asintió y se levantó.

—Gracias Carlisle.

—Cuando quieras.

Ella bajó el techo de un salto, Carlisle la miró con una sonrisa, ella siempre sería la misma, de cierta forma, siempre sería suya, y el siempre sería de ella. Sin importar que los separara. Había pensando en besarla en ese momento, justo cuando vio su piel brillando bajo la luz del sol, pero supo que no era el momento, aún no lo era.

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