JungKook caminaba silenciosamente por los pasillos del castillo tenebroso. Una alfombra roja intenso, mantenía sus pies alejados del frío suelo.

Su bata blanca y larga de seda se arrastraba cada vez que avanzaba.

Agradecía que Agust le había asignado una alcoba individual, donde él podía dormir con comodidad, pero no estaba nada cómodo con saber que sus Hyung's y su alma destinada se encontraban encerrados en el calabozo. Por eso mismo espero a que cayera la mañana para poder ir hasta ellos y comentarles su plan.

Agust, al igual que sus Hyung's, era un vampiro, en realidad toda la aldea lo era y eso ya era ventaja para JungKook, ya que mientras ellos dormían, él estaba despierto. Pero a pesar de eso la luz del sol no se asomaba, como si deseara evitar a toda costa alumbrar aquella aldea llena de maldad y perversión.

No había absolutamente nadie vigilando el castillo, al menos no por dentro. Y JungKook se sentía aliviado por eso, ya que, si un guardia lo atrapaba en pleno acto inmediatamente sería asesinado, por más enamorado que esté Agust de él.

No tenía ni la más remota idea de dónde se podría encontrar el calabozo. Por eso mismo decidió avanzar hacía la parte sur de la mansión, la cual estaba sin guardias ni vampiros. Al llegar a esta, noto un enorme jardín marchito, con rosas negras en lugar de rojas, y el césped en lugar de ser verde era negro y en el fondo de este se ubicaba un pasadizo a lo que parecía un sótano de piedra.

JungKook corrió a toda prisa hacía aquél lugar, no sin antes mirar hacía el cielo nublado y confirmar que no había ningún vampiro revoloteando por encima del castillo.

Una vez que llegó hasta el pazadizo caminó silenciosamente por los pasillos de piedra, al principio era uno, después se formaron tres caminos, de los cuales no sabía a cual entrar.

-¡Maldición!-Surruró por lo bajo, para después avanzar hasta uno de estos.

Caminó, sintiendo el frío suelo en sus pies, al igual que en su cuerpo. Los pasadizos eran de piedra y no estaban iliminados más que por unas antorchas que se encontraban en la entrada y unas ventanas con barrotes.

Paró de caminar cuando divisó unas celdas en ese pasillo, celdas dónde solamente se encontraban esqueletos y telarañas. JungKook se asusto y retrocedió rápidamente, para después salir del pasillo e ingresar a otro.

Esta vez caminaba con aún más lentitud, ya que temía volver a ver huesos en las celdas. Al llegar casi al final del pasillos sólo pudo encontrarse con lo que parecían celdas vacías y oscuras, las cuales solamente eran iluminadas por una ventana con gruesos barrotes.

Retrocedió lentamente, esta vez se sentía triste y desperanzado, ya había visitado dos pasadizos y en ninguno de ellos estaba su familia.

Por un momento pensó en que ¿Qué tal y Agust había roto su promesa y había acabado con ellos?

Las lágrimas no se hicieron esperar y resbalaron inmediatamente por sus mejillas. Pero eso no podía ser por qué a pesar de todo, seguía sintiendo su alma atada a la de Taehyung.

Estaba a escasos centímetros de llegar al final del pasillo cuando escuchó voces en el pasillo izquierdo, aquél que aún le falta a por investigar. Aquello provocó que se detuviera en seco y retrocediera, ya que esas voces se escuchaban demasiado cerca y no eran de alguno de sus amigos.

-Estos idiotas no van a escapar, son demasiado débiles para estás celdas ¿Por qué no vamos por algo para beber?

-Te diría que no si no me hubieses antojado la sangre de un humano.-Después desaparecieron por el oscuro pasillo por dónde JungKook había entrado.

JungKook salió inmediatamente y dobló a la izquierda para poder ingresar al calabozo. !La emoción recorría en sus venas! Aquellos vampiros habían mencionado a varios sujetos en su conversación y por eso mismo estaba seguro de que eran sus amigos y su novio.

Corrió tan rápido como sus pies se lo permitieran, para después llegar al final del calabozo y encontrarlos.

Todos los calabozos que había visitado tenían tres grandes celdas, las cuales eran separadas unas de otras por medio de barrotes y está no era la excepción. Chanyeol se encontraba en una misma celda al igual que Taehyung, por otro lado Jimin y Suga estaban juntos en otra. Suga tenía a Jimin sobre su regazo, abrazándo al menor, quién se mostraba lleno de temor y tristeza. Taehyung estaba desesperado, preocupado, lleno de odio hacía Agust e infinitas emociones dentro de él al no tener a su lado a su amado. Caminaba de un lugar a otro, mientras que Chanyeol se mantenía sentado en el suelo con la mirada gacha, con sus manos al costado de su cabeza, sintiéndose frustrado.

-H-hola, chicos...-Apenas la voz de JungKook hizo eco por el calabozo los tres vampiros y medio en un abrir y cerrar de ojos estaban junto a los barrotes, confirmando que en verdad se tratara de JungKook.

-¡JungKook! ¡Mi amor! ¿Eres tú?

-A-ah sí, soy yo Taehyung.-Acercandose lentamente hacía la celda de Taehyung. Y cuando hizo esto Taehyung inmediatamente tomó sus manos entre las suyas para después llevar sus manos a su rostro y besarlas, siguiendo por dejar un casto beso sobre su regordeta mejilla a pesar de tener como impedimento los barrotes.

-Dime mi amor, ¡¿Estás bien?! ¡¿Te hizo algo ese imbécil?!-Le preguntó inmediatamente al mismo tiempo que lo escaneaba para ver si portaba algún golpe, rasguño o hasta una mordida, pero afortunadamente se encontraba bien.-Y ¿Esa bata?

-Oh, ah...-Rapídamente se cubrió con nerviosismo ya que Taehyung fulminaba su bata con su mirada roja intensa.

-Jungkook ¿Que sucede?-Se dirigió Taehyung a el, con cierto tono de autoridad, exigía saber por qué demonios el vampiro sanguinario y su alma destinada se conocían y peor aún, por qué este lo trataba tan amablemente.

-N-no tengo mucho tiempo Tae... sólo vine a...-Jungkook dirigió su mano hacía el rostro de Taehyung para después acariciar su pálida mejilla con el pulgar de su mano. Mientras Taehyung lo miraba confundido por sus palabras.-Despedirme.

-¡¿Qué?!-Los cuatro restantes gritaron al unísono, haciendo que aquél "Qué" resonara por todo el calabozo.

-¡Ahhhh, chicos!-Jungkook se encargo de callarlos rápidamente.

-¡¿A dónde diablos planeas ir?!-Le preguntó Taehyung, elevando un poco su tono de voz. No planeaba gritarle a su novio, pero estaba desesperado y lleno de temor por su respuesta.

-Y-yo...-Las lágrimas se desbordaron de sus ojos, mientras enterraba con nerviosismo sus dedos en su bata de seda.-Voy a casarme con Agust...-Se hecho a llorar mientras mantenía su cabeza gacha, se sentía como un miserable con tan sólo mirar a los ojos al vampiro que amaba, después de estar prácticamente terminando la relación que ambos tenían.

Nuevamente se escuchó un gritó al unísono, dónde participaron todos a excepción de JungKook y Taehyung, este último se mantenía perplejo, procesando las palabras que JungKook acababa de decir.

-¡¿Qué diablos acabas de decir?! ¡¿Acaso te lavaron el cerebro?! ¿Te gusta? ¿Te casarás por voluntad propia?-Taehyung explotó y no pudo evitar gritarle a JungKook, este con cada palabra sentía su corazón partirse pedazo por pedazo. No le agradaba para nada ver a Taehyung así de alterado, pero lo entendía, esa noticia tampoco era para nada de su agrado.

-¡Taehyung!-Suga se apresuró a gritarle desde la otra celda.-¡Lo estás asustando maldita sea!-Taehyung miró a JungKook, quién tenía sus ojos hinchados por sus lágrimas y sus labios temblando.

-P-por favor Tae, escúchame...-Jungkook trató de con su mano tomar la muñeca de Taehyung para evitar que este se alejara, pero falló debido a los barrotes y Taehyung se alejó hasta quedar lejos de donde estaba JungKook.

-Vete. Alguien te espera.-Fue lo último que dijo, para después darle la espalda e ignorar su presencia.

-¡Kook, tranquilo, nosotros saldremos de aquí y te rescataremos!-Le ánimo Chanyeol, ignorando la actitud de Taehyung, para después mostrarle una media sonrisa a lo que JungKook fue obligado a sonreírle a su Hyung a pesar de era lo menos deseaba.

Cuando estaba por darse la vuelta Suga lo llamó con un "Tch" e inmediatamente avanzó hasta la celda de Jimin y Suga. Y cuando estuvo frente a ambos, lo miró, con ojos tristes y culpables.

-Tranquilo, no es tu culpa. Agust es un miserable y eso yo lo sé de sobra. Sé que el te está obligando a esto con la condición liberarnos. Te diría que no lo hicieras, pero ese será nuestro único boleto para escapar de aquí. Intentará asesinarnos una vez que nos libere, pero no te preocupes, nosotros nos haremos cargo de rescatarte y salir de aquí ¿Bien?-Jungkook había tenido el mismo plan, pero después de la actitud de Taehyung se sentía un traicionero. Miró hacía Taehyung con dolor, dudando si era buena idea llevar acabo el plan, después de todo no quería traicionar a Taehyung. Suga notó la mirada de JungKook y después suspiró.-Por él no te preocupes, sólo es un pobre diablo llenó de celos, pero sabe que tú lo amas y no lo cambiarías por Agust. -Jungkook inmediatamente dirigió su vista a Suga en cuanto lo escuchó hablar, para después asentir.-Bien, confiamos en tí.-Jungkook asintió, limpiando sus lágrimas con su antebrazo, para después avanzar hacía la salida, no sin antes dirigirles una mirada, en especial a Taehyung, quién aún se mantenía dándole la espalda.

JungKook corrió con todas sus fuerzas hasta llegar al jardín. Miró al cielo y se percató que la luna estaba comenzando a salir. Corrio tanto como sus pies le permitieran hasta entrar al castillo. Su habitación estaba algo lejos del jardín, por eso mismo tuvo que correr lo más rápido posible.

Al llegar a la puerta de su habitación soltó un suspiro de alivio. Llevó su mano a la manija con el fin de girarla y abrir la puerta. En cuanto logró abrirla la puerta de a lado se abrió y de esta salió Agust.

-¿Jung?-Lo miró confundido.

-H-hyung...-La voz de JungKook tembló por un momento.-¿Cómo durmió?

-¿Dónde estabas?-Ignoró su pregunta, para después avanzar unos centímetros hasta el con sus brazos cruzados y su mirada tenebrosa.

JungKook lo observó con más detalle y se dio cuenta que era infinitamente parecido a Suga, solamente que su cabello era negro y sus orbes no solamente eran rojos, sino que también había una combinación de negro.

-F-fui a dar un paseo por el castillo.-Le sonrió nerviosamente.-Recuerde que soy humano, Hyung, no puedo dormir todo el día, ni estar despierto toda la noche.

-¡Oh! Es cierto, yo...Lo lamento.-Se disculpó por haber desconfiado de su prometido.-Debí quedarme despierto contigo.

-No se preocupe, Hyung. Estuve muy interesado en su castillo, es realmente hermoso.

-¿Esta porquería? Mmm, he tenido mejores castillos.-Después de esto comenzó acercarse a JungKook, hasta el punto que sus manos fueron a parar a su cintura, poniendo nervioso y temeroso a JungKook.-Estuve pensando que el horario de nuestras vidas es muy diferente, por eso mismo sería mejor convertirte en un vampiro...-Al decir esto inmediatamente cambió su posición, poniéndose detrás de él, para después recorrer su cuello blanquecino con su nariz pálida y perfecta, causando escalofríos en JungKook.-

-H-hyung...

-Así ya no tendríamos que preocuparnos por los horarios, ¿No, Cariño?

-A-ah si, si...-Se alejó lentamente, hasta quedar frente a él.

-Bien, entonces... mañana mismo te morderé. Será mejor que por hoy descanses lo más posible.-Diciendo esto mientras se inclinaba y dejaba un casto beso en los labios de JungKook, el cual tuvo que responder.

-Buenas noches, Hyung...-Ingresando a la habitación, para después cerrarla.

-Buenas noches, JungKook.-Escuchó a sus espaldas, pero no le importó, lo único que quería era mantenerse encerrado en esas cuatro paredes sin ver a nadie más que a su Taehyung.

-P-perdoname Tae...-Dijo en medio de sollozos, mientras se cubria todo con las sabanas blancas, deseando que nadie lo pudiese escuchar llorar por el amor de su vida.