x. Valentine's Day Accident
Ese beso había sido todo.
Después de eso no dejamos de besarnos por un rato. Incluso tuvieron que detenernos.
Pero ahora habíamos vuelto a Hogwarts, y la duda era, ¿que somos ahora? Me planteé esa pregunta cuando me di cuenta que San Valentín estaba por llegar y no tenía idea si sería buena idea darle algo.
Le daría algo. Tal vez unos chocolates y algo para su escoba.
Al menos eso pensaba que sería buena idea hasta que Sirius me dijo que no.
—Dale fotos sexy.
—¿Qué?–Pregunte con duda cuando ambos estábamos juntos en la clase de pociones. James, Remus, Lily y Marlene se habían levantado para tomar los libros y nos dejaron solos, lo cual nunca era bueno.
—Me oíste. Fotos sexy, siempre funcionan.
—Me da algo de asco que me diga esto el novio de mi hermano.–Sirius alzó los hombros.
—Igual funciona.–Hice cara de asco, pero ambos dejamos la conversación cuando los demás volvieron. Sentí la mano de Marlene en mi muslo después de que ella dejara mi libro frente a mi en la mesa.
—¿Está todo bien...?–Ella murmuró en mi oído y sentí mi cuerpo estremeciéndose ante su voz.
—Si, estoy bien. No te preocupes.–Le sonreí y ella asintió, no muy convencida, pero igual lo dejo pasar.
[...]
No podía creer que estaba haciendo esto.
Había comprado ropa interior, sexy obviamente, no saldría con mis calzones de abuelita.
Tenía mi capa encima para que no se viera más de lo que debería, al menos no en este momento.
Afuera del baño me esperaban, Lily, Mary y Sirius. Sirius y Mary habían tenido un ligero argumento después de que el la besara en cuarto año y después saliera del clóset, pero ahora se habían hecho amigos nuevamente.
Salí con temor a regaños, incluso si todos sabían lo que íbamos a hacer, y éramos adultos. O algo así.
—Penny, recuerda que no tienes que hacerlo si no quieres.–Dijo Lily apenas vio mi cara de espanto mientras entraba a la habitación. Estaba segura de que estaba más pálida que la pared de enfrente y que estaba temblando.
—No... en serio quiero hacerlo... quiero darle esto.
—Okay, bien. Quiero que respires conmigo hermosa, ¿okay?–Mary se acercó a mi y tomó mis manos entre las suyas. Intente seguir su ritmo de respiración, poco a poco.–No tienes porque sentirte nerviosa, no nos reiremos de ti ni nada por el estilo. Este es un lugar seguro.–Asentí y trague saliva. Después solté sus manos y me alejé, quitándome la capa. Sentí las miradas sobre mi, solo que no sabía que significaban.
—¿Chicos...?
—Marlene come muy bien.–Se le salió decir a Sirius. Las chicas lo miraron mal, pero después se dieron por vencidas y aceptaron sus palabras.
—Gracias... ¿creo?
—Solo, siéntete cómoda, no tienes que hacer nada que no te guste.–Añadió Lily.
—Claro...–Me senté en el pequeño sillón frente a mi cama y traté de posar sexy, fallando un poco. Ellos me miraron con duda.–Basta, no se como posar.
—Mira, haz algo así.–Sirius se acercó junto a mi y posó dramática, pero sensualmente. Me sentí algo celosa de que a él le saliera tan bien posar para este tipo de cosas. Trate de imitarlo, pero igual no funciono.
Mary se acercó a mi y me acomodó de cierta manera para que fuera lo más parecido posible a cómo Sirius lo había hecho. Lily se acercó rápidamente para que yo no me moviera y tomó una foto con su cámara de Polaroid.
Seguimos así, de repente ya estaba en posiciones más comprometedoras sin ayuda de las asesorías expertas de Sirius en modelaje.
Reía mientras Mary se acercaba a acomodarme el cabello o cuando Lily se tenía que mover de formas curiosas para poder tomar la foto "del ángulo correcto" según ella.
Al final pusieron todas las Polaroid sobre la cama y las vimos los cuatro juntos.
—Wow... me veo bien.–Admití viendo una particular foto donde estaba mirando justo a la cámara.
—Más que bien.–Me elogio Lily.
—Apuesto a que Marlene amara este regalo.–Aseguró Mary.
[...]
Justo el día más romántico del año, Justo este día había tocado un partido de quidditch de Gryffindor. Odiaba a quien fuera que hubiera hecho este calendario de juegos tan estúpido.
Ajuste el micrófono viendo cómo empezaban a calentar ambos equipos, noté la mirada de Marlene, le guiñe un ojo y ella me sonrió.
El juego empezó poco después, intente no decirle demasiados elogios a Marlene, lo cual era gracioso, ya que solo hace pocos meses estaba insultándola en los mismos juegos.
Las nubes empezaron a oscurecerse sobre las personas, estaba a punto de llover, pero sabíamos que el partido no acabaría por unas simples gotas, la lluvia era muy normal durante los partidos, incluso ya tenían unas gafas diseñadas especialmente para eso.
Se hizo una pausa para que los jugadores se pusieran los lentes especiales antes de volver a sus escobas y terminaran empapados, me preocupe un poco al ver las manos de Marlene bajando por la escoba, como intentando mantenerse firme, pero decidí ignorarlo.
Ravenclaw era un buen rival, habían estado practicando mucho para este partido y se notaba. Con Gryffindor a 30 y Ravenclaw a 70, no se podía evitar la comparación.
Pero me preocupe más cuando vi como dos del equipo contrario cerraron a Marlene, la acorralaron para que quedara entre un par de jugadores y la hicieron caer.
El mundo se detuvo. Los gritos de sorpresa no se hicieron esperar. Madame Hooch tuvo que detener el juego porque esa caída no había sido poca cosa.
Sentí mi corazón parar por unos segundos por el miedo. Marlene había sido derribada, había caído desde no se cuantos metros de altura. Mis manos temblaron y dejé caer el micrófono.
Corrí lo más rápido que pude y llegue a ella cuando se la estaban llevando en una camilla hacia la enfermería. La enfermera Pomfrey me miró y me dijo que esperara aquí, que aún tenía trabajo que hacer y que Marlene se recuperaría.
—No. No voy a dejarla sola.–Me planteé con la idea. No podía dejarla así, el solo verla sobre la camilla me hacía tener unas inmensas ganas de llorar. Tomé la mano de la rubia y no sentí el apretón, su mano estaba tan fría como la de un muerto.
Ella asintió y me dejó ir con ella, a pesar de que ambas sabíamos las consecuencias.
[...]
Estuve toda la noche a su lado mientras no despertaba, Madame Pomfrey había hecho de todo para curarla y lo agradecía un montón.
Acaricie su cabello mientras me acurrucaba junto a ella en la cama del ala de enfermería.
Al final McGonnagal no me sancionaría por irme, comprendía la situación, aunque si me advirtió que no podría hacer cosas similares en el futuro.
Al final había atrapado la snitch los de Ravenclaw, por lo que ganaron, pero habían sido sancionados hasta nuevo aviso gracias a lo del accidente.
Marlene empezó a moverse y yo la mire con incredulidad.
—¡¿McKinnon?!–Ella sonrió al escuchar mi voz, más no abrió los ojos.
—Lupin, extrañaba despertar junto a ti...–Bromeó. La abracé con rapidez, sacándole el aire.–Pero tranquila linda, aquí estoy... aquí estoy.–Acaricio mi espalda con cariño y yo escondí mi rostro en su cuello, llorando.
—Arruinaste San Valentín.
—¿Lo hice?–Miro hacia abajo para ver mis ojos.
—Tenía un montón de Polaroids con fotos sexy para ti, ahora no te los daré.
—¡Ay por favor! ¡Dale a la inválida algo dulce!–Rio.
—Bueno... si salimos de aquí alguna vez, te las daré.
—Me parece justo. Además, tu regalo eran unos libros de los que estabas hablando la otra vez, así que ambas tenemos razones para salir de aquí pronto.
—Yo más que tú.–Pelee.
—No, en eso estás muy equivocada, Lupin.
[...]
Madame Pomfrey le dio el visto bueno solo unas horas después, ayude a Marlene a levantarse y a prepararse para salir, la había curado casi por completo, pero aún cojeaba un poco.
Marlene se apoyó contra mi.
—Bien, ahora vámonos porque quiero un par de fotos nuevas para mi colección.
—Tu no tienes una colección.
—Linda, pasaré el resto de mi vida contigo, tendré una colección en algún momento.–Reí y la ayude a salir, pero al abrir la puerta vimos algo inesperado.
Ambas abrimos la boca por la sorpresa, como en uno de esos estúpidos shows.
Pomfrey y McGonnagal.
¡Pomfrey y McGonnagal se estaban besando!
Por Merlin, mi ship se había hecho realidad.
Marlene estaba a punto de hablar, pero cerré la puerta y nos moví para quedar contra la pared.
Nos quedamos en silencio, procesando lo que acabábamos de ver. Nos miramos ambas y empezamos a reírnos.
✶⊶⊷⊶⊷❍⊶⊷⊶⊷✶
Meme del capítulo de hoy:
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