George me deja en la puerta de la oficinas de Red Bull en Mónaco para mi reunión con Christian.

Respiro hondo antes de tocar la puerta y exhalo cuando me indique que pase.

Él me recibe con una sonrisa y me ofrece un café que rechazo. Creo que si tomo cafeína en este momento podría explotar.

-Te cité aquí para hablar de ciertas cosas- me dice cerrando la carpeta en la que estaba escribiendo.

-Sé porqué estoy aquí- lo interrumpo.

-¿Ah si?- pregunta con gracia. Dios va a disfrutar despedirme.

-Sí... lo de George, las fotos, la camiseta... Perdón, en serio. No creí que nadie nos sacaría fotos y-y no quería causar problemas, no quiero hacer enojar a nadie, nunca fue la intención- me defiendo antes de que siquiera pueda atacar.

-No estoy enojado, Daisy- responde riendo, tiene el ceño fruncido y la cabeza ladeada a un costado. Me río forzosamente para seguir la corriente- Ya me encargué de que eliminen todo y que se baje el video cada vez que se vuelva a publicar. No debes preocuparte por eso.

-Pero... las scuderias...- trato de formar una simple oración pero estoy confundida. Si no estoy aquí para hablar de eso, ¿entonces para qué?

-Tu contrato nunca aclaraba nada sobre relaciones personales y, además, eres una mujer adulta- aclara como si fuera necesario- Nadie debe decirte de quién enamorarte. Lo que sí, la próxima vez que necesites ropa, pide mi tarjeta de crédito y yo la compro pero si sigues usando camisetas de Williams vas a enfriarte- se burla y no puedo evitar reírme.

George me mata si sabe que me estoy burlando de su equipo.

-Si no estoy aquí para que me despidas, ¿por qué la urgencia?

-Estaba pensando en no renovar tu contrato- suelta antes de beber un sorbo de su café.

-¿Qué?

-Si, eso. No creo que renueve tu contrato- dice como si estuviésemos hablando del clima.

-Pero... ¿hice algo mal? Yo puedo mejorar, en serio puedo hacerlo- intento hacer que entre en razón. Si bien no quiero seguir aquí realmente me mataría saber que estoy haciendo mal mi trabajo.

-No creo que puedas, de hecho. Creo que eres la mejor versión de ti misma y por eso no voy a renovartelo.

-No...Christian, no entiendo.

-Sé que no quieres estar aquí, te escuché el otro día discutiendo con tu hermano y luego vino preocupado a pedirme un consejo- me mira comprensivo- Solo estoy dándote un boleto de salida.

-Yo no quise...

-¿Decir que querías irte? ¿Que te obligaron a estar aquí?- pregunta terminando la oración por mi- Daisy, tienes tanto derecho a cumplir tu sueño como Max de cumplir el suyo y si tu padre o hermano no pueden entenderlo, mandalos a la mierda. Con todo el cariño y respeto que te tengo a tu hermano- aclara.

Me quedo sin palabras ante lo que me dice, esto me tomó por completa sorpresa.

-Tu contrato termina este año- asiento- Sabes que era provisorio así que tu eliges.

-¿Elegir...?

-Tu futuro, Daisy. A pesar de lo que te han dicho, tu futuro es brillante y tengo un contacto en La Academia que me dijo que estaban interesados en ti- ¿un contacto?- Es hora de que seas tu prioridad.

Escucho con detenimiento cada palabra de sale de la boca de Horner.

-Solo te digo que no cometas ningún error, ¿me oyes? No hagas nada que luego puedas lamentar solo porque pienses que es lo correcto o lo que te corresponde.- me sonríe casi de manera paternal.

Salgo de la oficina y disfruto el aire fresco que entra a mis pulmones.
Nunca tuve la oportunidad de tomar una decisión tan grande en mi vida, nunca me dejaron y, ahora que puedo, no sé qué hacer.

¿Arruino lo poco que me queda con mi hermano y lo que podría ser con George o sigo mi sueño?

-¿Entonces?- una voz detrás mío pregunta.

George está apoyado en su auto esperándome con una sonrisa y los brazos abiertos.
Me refugio en su pecho y respiro a la par de él.

Unirme a La Academia implica no ver a George durante toda la temporada. ¿Cómo puede uno llevar una relación de esa manera?

holaaaa
cómo andan??? yo estoy muy manija.
Publico los nuevos fanfics (espero los disfruten mucho) y TAYLOR ANUNCIA FECHA DE ARGENTINA
que felicidad