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*ੈ✩𝐂𝐡𝐚𝐫𝐩𝐞𝐫 07²⋆ ☄.

-ˋˏ Overhaul y Despedidaˎˊ-


↪ La noche se cernía sobre la desolada bodega, un coliseo de sombras donde la Liga de Villanos había establecido su cuartel temporal. Las pesadas puertas de metal se abrieron de golpe, revelando la figura de Twice. Tras él, bajo la atenta mirada de los presentes, se adentró un hombre. Era joven, de complexión delgada y una aura de sofisticación que chocaba con la rudeza del lugar. Su cabello castaño rojizo, corto y algo desordenado, y sus ojos dorados, fríos y serenos, contrastaban con la máscara que cubría su rostro, una macabra reminiscencia a un médico de la peste. Kai Chisaki, u Overhaul, como era conocido en el inframundo, se detuvo a una distancia prudencial, su mirada recorriendo las caras de los villanos.

—Trajiste un pez bastante gordo, Twice—Dijo Tomura Shigaraki, su voz ronca resonando en la oscuridad, mientras fijaba su mirada en Overhaul.

—¿Pez gordo? Eso sí que es irónico, Liga de villanos—Replicó Overhaul, su tono despectivo resonando en el ambiente.

—¿Acaso él es famoso?—Preguntó Magne mirando a Shigaraki.

—El maestro me mostró su foto una vez. Es como un Yakuza—Respondió Shigaraki sin apartar su vista del recién llegado—Conozcan al joven líder del Shie Hassaikai.

—¿Él es el segundo al mando de toda esa mafia? ¿Estás seguro? ¡Nunca lo había visto antes!—Exclamó Magne en un tono emocionado—Esto se torna tóxico. ¡Qué emocionante!

Toga se recostó contra la enorme caja de metal, sus ojos fijos en el techo. Mr. Compress, sentado en la parte superior de la caja, la miraba con una expresión pensativa.

—¿La mafia? ¿En qué se diferencian ellos de nosotros?—Preguntó Toga, su voz llena de curiosidad.

—Bueno, déjame explicarte. En el pasado, existían muchos grupos de individuos malvados que dominaban las calles. Sin embargo, con la aparición de los héroes, estos grupos comenzaron a desintegrarse. Y cuando All Might llegó al poder, su era llegó a su fin—Explicó Mr. Compress para luego volver su mirada a Overhaul—Los supervivientes acabaron en otros grupos de villanos ya establecidos. Eran como reservas y se ganaban la vida bajo la vigilancia de la policía. Honestamente, son como una especie en peligro de extinción.

Overhaul, que hasta entonces había permanecido en silencio, intervino con voz baja:

—Peligro de extinción, no se equivoca.

—¿Qué hace aquí un Yakuza a punto de extinguirse? ¿También se emocionó por el retiro de All Might?—Cuestiono Mr. Compress.

—No, no es por lo de All Might, sino por la pérdida de All for one. El emperador de la oscuridad que gobernó el inframundo—Respondió Overhaul, provocando que el cuerpo de Shigaraki se tensara—Los de mi generación lo trataban como una leyenda, pero los mayores tenían sus razones para temerle. Incluso después de su supuesta muerte, pero esta vez apareció en personas. All Might se retiró y encerraron a All for one en la prisión Tártaro. Tanto héroes como villanos carecen de un líder. ¿Quién será el próximo en ocupar el puesto?

Shigaraki, quien hasta ese momento se había mantenido apoyado contra la fría pared, se despegó lentamente, sus ojos fijos en Overhaul. Su mirada era una mezcla de seriedad y molestia.

—¿Sabes quién es mi maestro y, aun así, te lo preguntas? ¿Me estás desafiando?—Espetó Shigaraki, deteniendo su caminar—El líder soy yo. Justo ahora estoy armando mi tropa. Pronto seremos muchos, y cuando lo tenga a él a mi lado, aplastaré a la sociedad de héroes.

Toga, con su entusiasmo característico, exclamó:

—¡Ooh, Tomura, me encanta ese plan! ¡Una vez que tengamos a Kayden, todo será perfecto!

—¿Kayden? ¿Quién es él?—Preguntó Overhaul, confundido.

—Alguien que no querrás que se cruce en tu camino—Respondió Mr. Compress con una sonrisa enigmática bajo su máscara.

Overhaul guardó silencio, su mirada fija en el suelo, rumiando las implicaciones de esta nueva figura. ¿Quién era este Kayden que parecía ser tan importante para la Liga de Villanos? Y, más importante aún, ¿por qué lo era? Volvió su mirada hacia Shigaraki y, con una voz fría y calculadora, dijo:

—Veo que ya tienes un plan.

—¿Un plan? Creo que aún no entiendes—Dijo Shigaraki su voz era seria, pero cargada de una amenaza latente—¿Viniste a unírtenos o no?

—Un objetivo sin un plan es solo un delirio. ¿Cómo esperas que reaccionara ante algo así?—Overhaul se acercó unos pasos, su figura imponente llenando el espacio—¿Qué harás con esas tropas? ¿Cómo piensas manejarlas? ¿Qué tipo de organización quieres crear?—Su voz resonó en la habitación, cada palabra como un golpe certero—Perdiste a villanos que eran piezas de calidad, ¿no sabías usarlos? No eres capaz de manejar a diez desquiciados. ¿Y quieres reunir a un ejército?

Un silencio tenso se apoderó de la habitación. Los demás miembros de la Liga intercambiaban miradas serias. Overhaul continuó su diatriba, su voz cada vez más intensa:

—¿Qué harás con un poder que no puedes controlar? Necesitas un plan para cumplir con tu objetivo. No vine a este lugar porque quisiera unirme. Yo sí tengo un plan

—Twice, no traigas a alguien sin antes saber sus intenciones—Lo reprendió Shigaraki, su voz endureciéndose.

Overhaul ignoró la interrupción y continuó:

—Para ejecutar mi plan, necesito dinero. Ya nadie está dispuesto a invertir sus recursos en un Yakuza obsoleto y acabado, pero sería diferente si los tuviera a ustedes y su fama. Sigan mis órdenes. Los manejaré bien y seré su próximo líder.

Aquellas palabras encendieron una mecha en la Liga de Villanos. Magne, impulsado por la ira, intentó neutralizar a Overhaul, pero su ataque terminó en tragedia. Puesto que Overhaul, lo hizo que la parte superior de su cuerpo, explotara en pedazos. El silencio sepulcral que siguió fue ensordecedor. Mr. Compress se lanzó hacia Overhaul con la intención de sellarlo. Shigaraki, aunque furioso, trató de detenerlo, pero el impulso de Compress fue más fuerte. Al intentar tocar a Overhaul, su quirk se desactivó de manera inesperada, dándole al contrario la oportunidad perfecta para eliminar el brazo de Compress.

Shigaraki se abalanzó sobre Overhaul, pero este dio un paso atrás, interponiendo a uno de sus guardias. Con un toque de su dedo, desintegró al hombre.

—Ya entiendo—Murmuró Shigaraki, observando cómo los seguidores de Overhaul irrumpían en la bodega—Si hubieras empezado así, te habríamos entendido.

—Overhaul, eso estuvo muy cerca—Dijo Chronostasis colocándose a la par de Overhaul—Falle uno de mis tiros, pero pudimos actuar de inmediato.

—¿Qué? ¡Imposible! No nos siguió nadie—Exclamó Twice, aún conmocionado por lo ocurrido, sostuvo el cuerpo de Compress.

—Debió haber sido el don de alguien—Menciono Shigaraki.

—Será difícil ser objetivos así—Dijo Overhaul rascándose el brazo sobre su ropa—Bueno, sería estúpido reducir nuestras fuerzas por ahora. Estamos a mano. Es suficiente. Por cierto, ese Kayden, me gustaría conocerlo.

La tensión en la atmósfera era palpable. Los músculos de Shigaraki se tensaron, sus dedos se crisparon alrededor de sus manos desgastadas, mientras observaba a Overhaul con odio. Toga no se quedó atrás. Su cuerpo vibraba de ira, sus ojos brillaban con una intensidad salvaje. Empuñó su navaja con una fuerza que contrastaba con su delicada figura, acercándose a la par de Shigaraki.

—No dejaremos que lo toques con tus asquerosas manos—Espetó Toga, su voz apenas un susurro amenazante.

La navaja brillaba bajo la tenue luz, apuntando directamente hacia Overhaul, quien, imperturbable, devolvió la mirada con una curiosidad que rozaba la burla. Sus ojos recorrieron a Toga y luego a Shigaraki.

—¿Por qué? ¿Acaso es especial para ustedes?—Inquirió—Si lo quieren en este patético intento de plan que tienes, Shigaraki, entonces debo suponer que Kayden tiene algo especial que ofrecer.

—No dejaré que lo tengas—Espetó Shigaraki, su voz profunda y resonante—Él es mío.

Overhaul limitó su mirada a Shigaraki antes de retirarse junto a sus subordinados, dejando tras de sí un rastro de tensión palpable. La Liga de Villanos, sumida en un mar de emociones encontradas, observaba la partida del Yakuza con una mezcla de resentimiento y desconcierto. La pérdida de Magne y la mutilación de Mr. Compress, ambas a manos de Overhaul, habían dejado una profunda sensación de molestia en la organización. Sin embargo, era la atención que ahora el villano dirigía a Kayden lo que más les inquietaba.

Mientras tanto, en un lugar apartado de aquella bodega, Dabi observaba a Kayden con una mirada intensa. El joven, con una sonrisa irónica, extendía sus manos para recibir las flores quemadas que el villano le ofrecía.

—¿No vas a dejar de darme flores, cierto?

—No, hasta que aceptes que tú y yo seríamos perfectos juntos—Respondió Dabi con una sonrisa pícara.

Kayden suspiró dramáticamente, dejando caer una lágrima falsa.

—¿Qué pecado estoy pagando para que me persigan los loquitos?—Murmuró, elevando la mirada hacia el cielo.











↪ Kayden caminaba en silencio por los pasillos de la U.A., perdido en sus pensamientos. Estaba pensando en la clase que había tenido ese mismo día, donde Aizawa había hablado sobre trabajar con héroes profesionales en sus agencias. Los profesores tuvieron una reunión al respecto y decidieron rechazar la idea, a menos que fuera con agencias que tuvieran un buen historial y quisieran reclutarlos. Si mencionaban trabajo, Kayden era el primero en salir corriendo. No le gustaba la responsabilidad de ser un héroe, así que incluso si una agencia con un buen historial quisiera reclutarlo, la rechazaría de inmediato.

Por ahora, quería centrarse en otra cosa, y esa era su quirk. Todavía era débil, y Kayden lo odiaba. Por eso, sugirió una reunión con Nezu y All Might. Cuando llegó a la oficina de Nezu, tocó la puerta y cuando escuchó que podía entrar, abrió la puerta y luego la cerró detrás de él, mirando a los dos mencionados.

—¿Y bien? ¿Por qué quieres hablar con nosotros, hijo?—Preguntó Nezu, apoyando los brazos sobre el escritorio.

—Se trata de mi quirk—Respondió, provocando un silencio—Desde la última vez que lo entrené, no me siento satisfecho. Quiero aumentar mi poder.

—Joven Kayden, el nivel en el que estás es suficiente, no queremos que te lastimes—Dijo All Might en un tono tranquilo pero también serio.

—Este nivel ya no me sirve, ¿de qué sirve usar el 5% de tu poder cuando puedes seguir?—Espetó mirando a All Might—Hasta ahora he tenido que limitarme, y ya estoy cansado de ello.

—Kayden, entiendo que quieras seguir adelante, pero ¿entiendes que puede ser peligroso?—Dijo Nezu con un tono preocupado—Incluso usando solo el 5% de tu poder, estás por encima de todos los de tu clase.

—Fue muy difícil controlar tu poder cuando te entrenaba, y solo logramos obtener el 5%—Dijo All Might mirando cómo Kayden bajaba la mirada—¿Por qué crees que no sería igual de difícil aumentarlo?

—Escucha, hijo, sé que puede ser difícil, pero lo que te estamos diciendo es lo más razonable—Dijo mirando cómo Kayden levantaba la mirada.

—¿Y qué sentido tiene que me estanque cuando quieres que sea el mejor héroe?—Inquirió en un tono serio—No es eso lo que me dijiste, 'te criamos para ser un héroe', pero ahora que quiero mejorar mi poder, me lo impides, qué irónico, papá.

Nezu guardó silencio, sus ojos fijos en All Might, quien lucía igual de preocupado y tenso que él. Era evidente que en algún momento, Kayden querría aumentar su nivel de poder, pero en realidad, no era que Nezu o All Might desearan que el chico no lo hiciera. Temían, más bien, que Kayden perdiera el control de ese poder tan abrumador. Ya había ocurrido una vez, y las consecuencias habían sido devastadoras. No deseaban que se repitiera.

—Voy a encerrarme y no saldré de ese lugar hasta que yo sienta que mi poder ha aumentado—Dijo Kayden, su voz firme y decidida, sorprendiendo a ambos adultos—Lo siento, pero es momento de que yo me convierta en el verdadero dueño de este poder.

Nezu meditó unos segundos antes de responder.

—Bien, si eso es lo que deseas. Te otorgo el permiso. Daré aviso de tu inasistencia.

—Si eso es lo que quieres, no me opondré, pero estaré al pendiente de tu avance—Aceptó All Might mientras asentía lentamente, sus ojos fijos en Kayden mientras este se retiraba—¿Estás seguro de esto, Nezu?

—En realidad, no lo estoy—Admitió con un suspiro—Pero sabíamos que este día llegaría.

All Might guardó silencio, bajando la mirada. Unos recuerdos amargos llegaron a su mente, la batalla contra All For One, sus palabras resonando con una claridad aterradora: "Tú me robaste mi creación perfecta, All Might". Sabía perfectamente a quién se refería. Tal vez, el deseo de Kayden de aumentar su poder era algo positivo, una señal de que estaba tomando las riendas de su destino. Después de todo, incluso usando solo un cinco por ciento de su poder, Kayden era tan poderoso como un héroe profesional. No podía ni imaginar la cantidad de poder que podría desencadenar si llegara a alcanzar el cien porciento.

Kayden caminó de regreso a la residencia. Al entrar, el bullicio de la sala común lo recibió como un eco lejano. Algunos de sus compañeros, relajados y conversando animadamente, apenas levantaron la vista ante su presencia. Con pasos firmes, Kayden se dirigió al ascensor, sus pensamientos divagando. Las puertas se cerraron, aislando el suave tintineo metálico. Al llegar a su piso, se encaminó a su habitación, la llave girando suavemente en la cerradura.

La habitación, una de sus creaciones, ahora con un chasquido, desactivó la alteración, reduciendo el cuarto a su estado original: una cama sencilla, un armario y una pequeña mesa de estudio. Sobre la cama, yacía un bolso, con todo dentro. Se acercó, tomándolo con una de sus manos, soltando un suspiro, salió de la habitación y cerró la puerta con suavidad. Al regresar a la sala común, algunas miradas curiosas se posaron sobre él. Kirishima, al verlo, se levantó de un salto.

—Bro, ¿a dónde vas?—Preguntó, la preocupación evidente en su voz.

—Me voy a ir por un tiempo, pero no te preocupes, voy a volver—Respondió con simpleza—Dile a la rubia que no me extrañe demasiado.

Kirishima asintió, sintiendo un nudo en el estómago. Kayden se despidió con un gesto de la mano hacia sus compañeros y se dirigió hacia la salida, donde Aizawa y All Might lo aguardaban. Una vez fuera, los tres caminaron en silencio, cada uno sumido en sus propios pensamientos. Al llegar a un elegante automóvil negro, All Might subió primero, notando que en el interior, los esperaba Nezu. Kayden, aún fuera del vehículo, dejó caer su bolso al suelo con un ruido sordo. Se acercó a Aizawa, quien lo observaba con una expresión impasible.

—No me vaya a extrañar demasiado—Bromeó Kayden, con una sonrisa pícara.

—Serán días relajados el tiempo que no estés—Respondió Aizawa con su tono calmado, tratando de ocultar su preocupación—Trata de no provocar problemas, ¿entendido?

Kayden, se limitó a sonreír mientras abrazaba a Aizawa.

—Lo que mi amado futuro esposo diga, obedeceré—Declaró en tono burlón, provocando una leve sonrisa en los labios de Aizawa—Volveré pronto, espero que cuando vuelva no esté esa gata rompe hogares coqueteando contigo.

Aizawa, con un ligero rubor en las mejillas, apartó a Kayden con un empujón suave.

—Solo vete, yo no me iré a ningún lado—Replicó, tratando de ocultar su nerviosismo.

Kayden se limitó a sonreír y tomar su bolso. Con un último vistazo a Aizawa, subió al automóvil. El auto arrancó, y Aizawa lo observó alejarse. Una vez solo, se dio media vuelta y se dirigió hacia la residencia, una sensación de vacío instalándose en su pecho. Mientras tanto, dentro del automóvil, Kayden miraba por la ventanilla, los edificios de la ciudad, convirtiéndose rápidamente en una mancha borrosa. Esperando llegar a su destino, donde estaría encerrado sus próximos días.



𝐀𝐔𝐓𝐇𝐎𝐑'𝐒 𝐍𝐎𝐓𝐄/~♡

⇝ Imagines incluidas en la historia credito a sus respectivos autores.

⇝ Lamento posibles fallas autográficas.

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♡*:.。.𝐆𝐑𝐀𝐂𝐈𝐀𝐒 .。.:*♡

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