Tomando todo su autocontrol Taehyung se alejó del cuerpo de Yoongi, le sostuvo la mirada unos segundos antes de comenzar a hablar.

—Soy Kim Taehyung, el segundo hijo de Kim Taejoon, el jefe de la Amheukka. Con la muerte de mi padre mi hermano Namjoon se convirtió en su sucesor y yo pasé a ser el subjefe, pero ese es un puesto que nunca me ha interesado, la muerte de mis padres fue violenta, y mi hermano y yo la presenciamos. Renunciar a la mafia es imposible, sobretodo si es por herencia, pero sí marque una distancia, que me permitiera llevar una vida más tranquila.

Yoongi lo escuchaba atentamente, no queriendo perderse ningún detalle, y conocer mucho más de el hombre que tanto lo fascinaba. Con cada palabra que le iba diciendo Taehyung, Yoongi más se daba cuenta que las diferencias entre ambos eran abismales, pero también sabía que la obsesión que sentía por él no hacía más que crecer y le sería casi imposible alejarse de él.

—Hace un año cuando entraste al salón chocando conmigo, algo pasó, algo que nunca había sentido, despertaste en mí la necesidad de saber todo de tí, pero también por tenerte para mí, sería ridículo que dijera que fue amor a primera vista, pero si fue una obsesión a primera vista. Esa misma tarde mientras daba clase mi programa de reconocimiento me dió toda la información que podía obtener en línea sobre tí, y creeme que no fue poca, entre toda esa información descubrí de quién eras hijo, y encontré una justificación para vigilarte.

—¿Que tiene que ver mi padre con eso? —pregunto interrumpiéndolo.

—Como te dije nuestros padres fueron asesinados, y todo indica que sus dos mejores amigos lo traicionaron, uno de ellos era tu padre y el otro es Kang Yu Wei, el actual jefe de la tríada, el mismo al que tú padrastro pensaba entregarte.

Yoongi negó con la cabeza.

—No, mi padre era un hombre leal, justo y apegado a sus principios, él no sería capaz de traicionar a nadie, menos si dices que eran amigos.

—Nunca hemos podido confirmar nada, pero eso no importa ya, lo que en verdad importa aquí es que la obsesión que tengo por tí, escaló a niveles que ni yo mismo imaginé. Cuando supe que estabas encerrado y próximo a ser entregado a Kang enloquecí. Tu eres mío gatito —sentenció y un estremecimiento recorrió a Yoongi por completo.

Poco le importó a Yoongi cómo supo que lo venderían, aunque se hacía una idea y que más daba si Taehyung lo mantenía cautivo de por vida, como venganza contra su padre, mientras estuviera junto a él, lo aceptaría gustoso. Y sí, él sabía que pensar de esa forma era algo estúpido, y un poco enfermizo por su parte, pero no pensaba desaprovechar la oportunidad de entregarse a Kim Taehyung, su profesor, su mafioso, su obsesión.

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Taehyung iba a continuar hablando pero la mano de Yoongi sobre su boca lo detuvo.

—Ya no quiero que digas nada más, no lo necesito, lo que quiero en este momento es que me demuestres que es todo lo que quieres hacerme, porque yo también te mostraré todo lo que yo deseo hacer contigo —le dijo antes de sustituir la mano que tapaba su boca con sus labios. 

Un gruñido de satisfacción vibró en la garganta de Taehyung, Yoongi sabía mucho mejor de lo que había imaginado, hábilmente lo tomó por la, cintura y lo cargo poniéndolo a horcajadas sobre sus piernas, y de inmediato lo sintió moverse frotando su trasero en su ya dura erección. 

—Espero que estés seguro de esto gatito, porque una vez que comience no pienso parar, y serás mío para siempre —le aclaro cuando rompió el beso. 

—Estoy seguro profesor Kim, quiero que seas mi dueño, soy todo tuyo —contestó Yoongi con firmeza y esa era la luz verde que Taehyung necesitaba. 

Sosteniéndolo por la cintura lo giró para acomodarlo sobre el colchón, antes de comenzar a besar y acariciar su abdomen, mientras comenzaba a retirar las prendas que lo cubrían, mientras su polla se endurecía cada vez más con los suaves jadeos y gemidos de Yoongi, y pensó que no se había equivocado al llamarlo gatito, pues parecía que ronroneaba bajo su toque.

Yoongi había tenido un par de experiencias sexuales antes, pero nunca se había sentido derretirse con besos y caricias sobre su cuerpo. Taehyung parecía dispuesto a recorrer con sus labios cada rincón de su cuerpo y eso solo hacía aumentar cada vez más su lujuria y deseo. Sentía su piel arder por cada lugar que su boca tocaba, mientras sus manos  parecían dejar un rastro de fuego a su paso.

Pronto se encontró completamente desnudo, se deleitó la vista cuando Taehyung se levantó y comenzó a desnudarse, su abdomen delgado pero perfectamente marcado, sus estrechas caderas que apuntaban hacia su gruesa polla que se erguía completamente dura, y goteante, paso la lengua entre sus labios, con el deseo brillando en sus ojos, quería probarlo, sentir la roja cabeza golpear en su garganta ahogándolo.

—¿Te gusta lo que ves gatito? —le preguntó el mayor, al ver sus ojos fijos sobre su núcleo, que había comenzado a acariciar para su disfrute.

—Sí, quiero probarlo, ¿me dejarías hacerlo? —le pregunto de forma sumisa y eso lo calentó aún más.

—Solo si eres un buen niño y te portas bien —respondió antes de sonreír al ver a Yoongi asentir con vehemencia.

—Lo seré.

—Muy bien, entonces volteaté y ponte a gatas, quiero que me muestres ese precioso culito que tienes, y que voy a devorar.

Yoongi obedeció de inmediato, apoyándose sobre sus rodillas se inclinó hacia el frente pegando por completo su abdomen a la cama y sosteniéndose sobre sus codos levantó las caderas hacia arriba y atrás, dejando a la vista sus redondeadas nalgas abiertas mostrando su rosada entrada

—Tan obediente —murmuró Taehyung antes de dejarse caer en medio de sus piernas.

Acarició la tersa piel, antes de dejar caer su mano sobre esta, tiñendola de rojo al instante, un pequeño grito de dolor escapó de sus labios, seguido de uno más fuerte cuando sintió la tibia lengua de su profesor, recorrer su raja, desde la base de sus bolas hasta el inicio de su trasero. Antes de enterrar sus cara en medio y comenzar a estimularlo.

Yoongi se sentía sobre estimulado, la lengua lamía alrededor de su entrada, antes de empujar un poco sobre su agujero hasta que consiguió insertarla, mientras con una mano se encargaba de acariciar su polla y la otra acariciaba su nalgas y parte de su espalda. Las sensaciones que lo embargaban en ese momento lo tenían delirando, mientras sus caderas se empujaban cada vez más hacia atrás, buscando más de aquel placer.

Pronto junto a la lengua se unió un dedo para comenzar a prepararlo, y casi se corre cuando la falange dió directo en su punto dulce.

—Ohh.. Taehyung me voy a correr… ahg… —anunció entre gemidos cuando ya tenía tres dedos entrando y saliendo con rapidez de su estrecho canal.

—Hazlo bebé, correte para mí —le pidió Taehyung antes de llevar la punta de su polla hacia atrás y meterla en su boca sin dejar de mover sus dedos.

El espeso líquido no tardó en llamar su boca, mientras Yoongi se deshacía en gemidos por el orgasmo, sus brazos le fallaron y se desplomó por completo sobre la cama, nunca antes se había corrido tan fuerte con solo un rimming.

—Esto aún no termina gatito —anunció Taehyung una vez que liberó su miembro ahora flácido.

Lo ayudó a incorporarse y recargó su espalda sobre su pecho, permaneciendo los dos hincados, pronto Yoongi sintió gruesa cabeza de su polla en su entrada y se arqueo hacia atrás apoyando su cabeza sobre el hombro del mayor cuando esté empujó sus caderas con fuerza, enterrandosé de golpe y por completó en su canal.

—Tan jodidamente perfecto, me tomas tan bien gatito, que dan ganas de quedarme así para siempre —dijo Taehyung antes de tomar su barbilla y ladrar su rostro para besarlo antes de comenzar a mover sus caderas con suavidad.

Pronto las estocadas se hicieron más rápidas, los gemidos de ambos y el choque se sus pieles sudorosas era lo único que se escuchaba, y el mayor agradeció que la habitación de su hermano estuviera en otra ala completa alejada de su habitación y no pudiera escuchar los dulces gemidos de su gatito. Cuando sintió su miembro pulsar anunciando su liberación, disminuyó el ritmo hasta casi detenerse, no quería correrse aún.

Volviendo a recostar a Yoongi, lo acomodó de costado y él se puso detrás suyo, tomó la pierna que quedaba hacia arriba y la levantó apoyándola sobre su brazo antes de volver a penetrarlo consiguiendo mayor profundidad.

—Ahh… dios así… me llenas tan bien… me encanta tu polla… Uhmm —gimió Yoongi, mientras pasaba su mano libre hacia atrás para sostenerse de su nuca, cerrando sus dedos en su cabello y tirando de él sin mucha fuerza.

Un nuevo orgasmo comenzó a formarse en el vientre del menor, y Taehyung se dió cuenta por la forma en que comenzaba a estrangular su polla, y aumentó la velocidad de sus embates.

—Vamos gatito correte junto conmigo —lo ánimo mientras tomaba su polla y comenzaba a sacudirla al mismo ritmo de sus penetraciones.

—Ahhh… Tae… dios… ahhh

Escuchar a Yoongi gemir su nombre mientras se corría fue su límite y con una última embestida, se corrió con fuerza derramando su semen en el caliente canal. Con cuidado bajo la pierna del menor después de darle un delicado beso en la pantorrilla, y permitir que se acomodará en una mejor posición, cuando sacó su polla de su agujero y se sintió complacido al ver su semilla comenzar a escurrir de su agujero.

Una vez que sus respiraciones volvieron a la normalidad, atrajo el cuerpo de Yoongi hacia él y lo rodeó con sus brazos.

—Ya no hay vuelta atrás gatito, ya soy tu dueño —sentenció y por toda respuesta Yoongi frotó su rostro en su pecho antes de darle un tierno beso en la misma zona.

El resto de la noche transcurrió entre pláticas y más encuentros incapaces de dejar de disfrutar del contrario.

Y mientras ellos se ahogaban en la pasión y la lujuria, en el puerto de Qingdao, en la costa este de China, Kang Yu Wei atravesaba la garganta de Li Yi con su afilado cuchillo por haber perdido a Min Yoongi y en manos de sus peores enemigos, declarando la guerra hasta recuperarlo.

—Hace doce años cometí el error de dejarlos con vida, pero no cometeré el mismo error dos veces —gruñó, mientras pateaba el cuerpo sin vida del padrastro de Yoongi, y caminar hacia su auto, sin prestar atención a quien escuchó sus palabras.

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sᴇ ᴠɪᴇɴᴇ ʟᴀ ɢᴜᴇʀʀᴀ, ᴄᴜᴀɴᴅᴏ ʟᴇs ᴅɪᴊᴇ ǫᴜᴇ ᴇsᴛᴀ ʜɪsᴛᴏʀɪᴀ ɪʙᴀ ᴀ sᴇʀ ᴍᴀ́s ᴛʀᴀɴǫᴜɪʟᴀ ǫᴜᴇ ʟᴀ ᴅᴇ ᴋɪʟʟᴇʀ ɴᴏ ᴍᴇɴᴛɪ́, ɴᴏ ʜᴀʏ ᴛᴀɴᴛᴏ sᴍᴜᴛ ᴘᴇʀᴏ ᴄʀᴇᴏ ǫᴜᴇ ᴍᴇ ǫᴜᴇᴅᴏ ʙᴀsᴛᴀɴᴛᴇ ᴅᴇsᴄᴇɴᴛᴇ.

ᴇsᴘᴇʀᴏ ǫᴜᴇ ʟᴇs ʜᴀʏᴀ ɢᴜsᴛᴀᴅᴏ ᴇʟ ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ.

ɴᴏs ʟᴇᴇᴍᴏs ʙᴇʟʟᴇᴢᴀs...
            ʙᴇsɪᴛᴏs 😘😘😘