Escuché el ruido de un vidrio rompiéndose en el apartamento sobre el mío, al principio pensé que estaba soñando... pero, entonces escuché el ruido de una niña que parecía estar llorando.

     Ahora estoy muy preocupado cómo para volver a dormirme.

     Me levanté de un salto y salí corriendo a la puerta de mi apartamento, abrí y me acerqué al elevador que oí que habían pedido.

     Piso cinco.

     Caminé suavemente a mi habitación, aunque con algo de apuro, tenía miedo que la persona que iba en el asensor saliera de él y viniera a buscarme por chismoso.

     ーBuenos días, querido vecino ーdijo Ssoso desde el umbral de su puerta, haciéndome dar el susto de mi vida, volteé a mirarlo.

     ーB-Buenos días ーmurmuré, con los pies casi cruzados y la mano derecha sobre mi pecho.

     Mientras él me miraba con una sonrisa leve, casi falsa, yo volteé sobre mis pies; quedando frente a él, pero mirando la puerta del asensor.

    Oí cómo se abrían las puertas en el medio del silencio y se cerraban al mismo tiempo que la puerta principal se abría y se cerraba con un suave golpe.

     ーAyer te ví llegar del súpermercado ーdijo, sin quitar sus ojos de mi, cuando lo miré, nuestros ojos se chocaron con algo de tensiónー... con la vecina de arriba ーprosiguió, sus ojos rasgados y su rostro serio me daban la leve impresión de que se veía enfadado conmigoー. Su nombre es Pucca, ¿verdad?; está casada.

     ーSí, lo sé ーespecifiqué, antes de que pudiera decir algo más.

     ーOí que tu puerta se abría y me preocupé ーanunció, con la mano aún en el pomo de su puertaー. Te ví caminar hasta el asensor, pero no pude decirte nada hasta que vi que regresabas.

     ーDiscúlpame, te asusté sin motivos ーhice una corta reverencia con la cabeza, acercándome un poco más a la puerta de su apartamentoー. ¿También escuchaste el ruido de arriba?

     ーNo sólo es hoy ーme confesóー; te vas antes de que las peleas empiecen, y regresas en la noche, cuando acaba la segunda o quinta pelea del día ーme explicóー. A veces pienso que ellos saben cuando llegas, por que cuando subes por el asensor, ellos se detienen y nada se oye hasta la madrugada siguiente.

    ー¿Nadie hace nada al respecto? ーpregunté, un poco indignado y preocupado.

     ーSus vecinos están acostumbrados por otro tipo de parejas que se encontraban en las mismas condiciones ーexplicóー, intenté yo, algunas veces, pero nadie me escucha y ella tampoco hace nada al respecto.

     ーEntiendo, no te preocupes; iré a ver si puedo hacer algo yo ーdije, casi en un susurro.

     Bajé la mirada hasta mis pies, y luego caminé hacia la puerta de mi apartamento. Estoy a punto de hacer algo de lo que posiblemente me arrepienta después... tomé el pomo de mi puerta, dispuesto a pasar, y entonces me detuve.

     ーA veces, pienso que eres un ángel recién llegado del cielo ーsusurró, lo suficientemente audible para los dos. Escuché cómo su puerta se cerraba y luego me adentré y cerré la mía.

     ーSi soy un ángel ーme dije, mirándome en el espejo que había puesto en el pasilloー, entonces tendré que ganarme mis propias alas.