—Hoseok, me dirás ya mismo quien te hizo esto.

—No —se negó el aludido al instante.

—Hoseok —alargó Yoongi. Era una advertencia.

¿Qué le podía decir?

Si Hoseok le decía la verdad, temía que Yoongi fuera, salga de la escuela, cruce el mural y vaya directo a la guarida, busque a Taemi y la mate.

O que sea Yoongi el herido o muerto. Eso no podía permitirlo.

—¿Fue Taemi? —dijo Hyunjin.

«¡Mierda! Que alguien callé a mi primo, por favor... ¡Deberé enseñarle a mi querido Hyunjin a no ser tan bocón!»

—¡¡¡Hoseok!!! —exclamó muy fuerte el lobo, tanto que asustó al aludido.

—Ok, ok. Te lo diré, pero promete que no te enojaras ni cometerás ninguna imprudencia —advirtió. Yoongi asintió sin dudar—. Ok, sí, fue Taemi, pero fue todo muy rápido. Yo estaba ahorcando a Bae y-

—¿Bae? —interrumpió Yoongi—. ¿El vampiro?

Claro que el lobo identifica a la mayoría de los vampiros. Él vivía en el bosque.

—Sí, él... Y, bueno. Taemi apareció para defenderlo y comenzamos a discutir y ella me tomó de la muñeca, entonces Taehyung se metió diciendo que me soltara, entonces ella apretó más fuerte, y entonces comenzaron a discutir entre ellos y ella se distrajo cuando tomó a Taehyung del cuello, pero yo la amenace, pero luego Taehyung se volvió a meter e intento matarla, pero al final ella se fue con Bae —dijo Hoseok, tan rápido y sin respirar, que parecía estar rapeando.

—Entendí la mitad —murmuró Hyunjin, frunciendo las ceñas en confusión.

—Tú nunca entiendes nada —regañó Yoongi rodando los ojos, estresado, para luego volver su mirada en Hoseok—. Te prometí no hacer ninguna locura, pero... Esa niña las pagará, te lo advierto —amenazó—. Y agradece de que Taehyung está cumpliendo con su misión y te ayudo.

—¿Estás muy enojado? —preguntó el apodado Hobi, ante la seriedad del lobo.

—No, solo que no me agrada que te empeñes en ponerte en peligro.

—Yo no-

—Ya, Hoseok, mejor ve a dormir. Mañana hablamos.

Y si poder decir algo más, Yoongi se dio la vuelta y se alejó a pasos rápidos. Miró a su lado, bancando a su primo, pero este ya no estaba ahí. Quedó solo en medio del pasillo y sin respuestas.

Suspiró antes de comenzar a caminar lentamente hacia su habitación. Esperando que cuando abriera la puerta, Taehyung estuviera ahí, mirándolo con esos ojos que lo hipnotizan y confunde.

Pero no fue así. Él no estaba.

Ya se había acostumbrado a su presencia, al menos lo suficiente como para extrañar no tenerlo cerca.

Se rio de sí mismo. Tanto que lo echaba y ahora estaba extrañándolo.

«Creo que estoy queriéndolo, ahora que mis sentimientos por Taemi cambiaron y solo siento decepción hacia ella, puedo ver los lindos y buenos sentimientos y actos de los demás...»

Y tal vez Hoseok tenía razón. En otro momento, si Yoongi le hubiera hablado como lo hizo, se hubiera enojado, bufando porque no le hubiera importado lo que hubiera dicho. Lo hubiera tomado como un intento de manipulación. Pero Hoseok entendía que Yoongi solo quiere cuidarlo, como un buen hermano mayor, como Chan haría en su lugar.

Se alistó para dormir y se acostó en su vacía y fría cama.

Muy fría cama en realidad.

Esa noche, más que fresca, se había vuelto helada. Se tapó con sus sabanas, también congeladas, y se movió esta quedar sobre su costado, acurrucándose en pose fetal. Su cuerpo había comenzado a tiritar del frío que escalaba hasta sus huesos.

Todo era gélido.

Hasta que lo sintió.

Sintió su cuerpo tibio acostarse lentamente junto al suyo. Ya sabia que era él, su perfume lo delataba.

—Taehyung —susurró sin darse vuelta para encararlo.

—Si quieres, me voy —murmuró temeroso.

—No —respondió rápidamente. Hoseok movió su brazo hacia atrás, tratando de detenerlo, y tocó su brazo caliente. Lo sujetó sin dudar y lo atrajo a su cuerpo, haciendo que el menor lo abrazara—. Quiero que te quedes —murmuró, y al instante pudo sentir a Taehyung sonreír.

Y como no, si al sonreír sus labios rozaron con el lóbulo de su oreja.

Taehyung se acomodó para que ambos estuvieran cómodos. Abrazó a Hoseok fuertemente y lo pegó a su cuerpo, que se encontraba tibio.

Hoseok suspiró, el menor no traía camisa.

—Estás helado —susurró rozando sus labios nuevamente con su lóbulo y eso le provocaba a Hoseok cosquilleos en todo su cuerpo.

El mayor solo asintió despacio. El perfume y el calor corporal de Taehyung lo adormecía.

Y, sin darse cuenta, se quedó dormido profundamente entre los brazos de su primer amor, teniendo un sueño hermoso donde el chico de frondosas pestañas era el protagonista.

- ˏˋ ❤️ ˎˊ-

tengo tarea, pero aquí me tienen

gracias por leer~

~OurTheStars~