Soobin es un joven estudiante de primer año de enfermería. No tenía sueños, o si quiera alguna visión de su futuro; escogió esa carrera solo para salir del bucle familiar. Los Choi eran una familia corrupta, su padre, un estafador de primera, un hombre avaro y burlón. Su madre, que a pesar de ser cariñosa y cuidadosa cuando se trataba de su hijo, era despiadada con cualquier otro que interfiriera en su camino. Y su hermano, Beomgyu, un chiquillo de apariencia inocente que se escabullía en las noches para hacer quién sabe qué. Soobin sospechaba que Beomgyu podría estar involucrado en asuntos ilícitos, mas no indagaba en ellos, porque sabía que su hermano nunca lo confesaría. Soobin quería hacer la diferencia, y convertirse en alguien del que pudiera alardear.

Hasta que, Choi Yeonjun, un ratero de sonrisa seductora, comienza a aparecer constantemente de forma inadvertida en su vida, llevándolo a tomar el camino incorrecto. Aunque al principio se negó, al final, terminó por caer en la tentación, y seguir a Yeonjun a donde quiera que fuera, olvidándose por completo de sus antiguos planes.