Me voy a ir- la miré a DaHyun- no te rindas con Shu todavía. Yo me voy, pero puedes conquistarle. Eres bonita y fuerte, él lo verá. Y si no, puedes venirte conmigo ahora.

DaHyun se lo pensó y enseguida me miró negando con la cabeza.

-Gracias por la oferta, pero creo que aceptaré me quedaré- Sonreí.- Me has dicho que soy bonita, eso es suficiente, hacía tiempo que nadie me llamaba así.

En sus ojos podía ver reflejadas la angustia y la tristeza que sentía. Esta chica había pasado por cosas verdaderamente malas y para su mala suerte, había acabado aquí.

- Reiji es un cobarde- dije- Pero tu no, sigue adelante. Iré a reencontrarme con una amiga mía, te esperaré.

-Buena suerte- me dijo y yo sonreí y asentí.

Tumbada en la cama que compartía con Reiji me di cuenta de todo lo que había pasado, él me había echo daño de muchas maneras posibles, y huyó cuando no pudo convertirme por vergüenza a no cumplir su promesa.

Pero no me importaba, iba a salir de esta mansión, iba a volver a encontrarme con Gin, iba a escapar y a ser feliz tal y como merecía.

Ya nadie podía pararme.

Reiji, te dejo mi cuaderno solo para que sepas todo lo que he sentido respecto a ti.

Adiós.