Hoy, finalmente se presentaba Jisung, en el Castillo Lobuno, harían una gran fiesta en honor a este gran cambio que tendría el menor, todo el Norte estaba emocionado.

Aún siendo el Reino León el líder más importante, Los Lobos eran potencialmente del mismo estatus, tenían acuerdos marítimos con Los Reptiles, los tres ríos más importantes de los Siete Reinos cruzaban su Reino, tenían terrenos de montaña y el lago más grande y hermoso que jamás alguien haya visto.

Y que el pequeño Jisung se presente hoy, era la bomba de muchos, así como en el ritual de Leones, embajadores vendrán a la fiesta.

Si era Alfa como Hyunjin, tendría que tomar el Trono ya que su hermano tenía la opción de entregarle esa herencia si lo deseaba. Si era Beta su Hermano tomaba el trono obligatoriamente.

Y lamentablemente, si era Omega o Gamma, tendría que casarse con otro príncipe, para obtener algún bien comercial o poder.

Si, una porquería ¿no?

Pero Sung agradecía no ser León,ya que no quería ser exiliado como aquel príncipe hace dos años atrás.

-Hyunie Hyung. Exactamente, ¿cómo es mi presentación? -el pelinegro de 19 años volteó a ver al menor arrodillado en su cama, con un rostro asustado, cubriendo su cuerpo con una manta, dejando ver solo su cara.-

-pueees, se supone en unas horas, la Luna brillará en el cielo, tú bailarás ese baile extraño que Papá te enseñó y ahí veremos. Esta es una noche bastante importante, ya que si no eres Alfa, seré coronado como el Próximo Rey. Ya que tengo mayoría de edad.

-Genial!!

-no, no lo es. Yo no quiero ser Rey, Sung. No podré dormir hasta tarde. Estaré trabajando desde el alba hasta la anochecer.

-exageras.-dijo riendo su Padre, Hyunjin rodó los ojos llendo hacia Jisung y quitarle esa manta para tomarlo en brazos y abrazarlo, sentadolo en su regazo-

-lo peor es que si no serás un Alfa tendré que ser Rey.

-¿que seré Hyunie Hyung?

-¡¡no le digas nada!! -le dijo Chan cruzandose de brazos- todos pueden tener suposiciones pero ninguna es acertada hasta que los Dioses te presenten.

-no lucharé como ese príncipe ¿no?

-¡¡¡claro que no!!! -apareció Seungmin, espantado por aquello que escuchó - mi bebé, cada Reino tiene distinta tradición y esos Leones son unos brutos salvajes.

Horas después, el gran salón se encontraba hermosamente decorado de Rosas blancas, los floreros de plata y cristal rodeaban el lugar, las hermosas cortinas hechas del color y tela favorito de Jisung, al igual que toda esa abundante comida. La mayoría de los embajadores felicitaron a Jisung y a los Reyes, entre esos estaban Felix, siendo acompañado de su hombre de compañía, Jungwon.

-El joven príncipe Han, me recuerda a mi pequeño Gin, debe de tener su edad.-comenta Jungwon algo nostágico al ver a Jisung sonreír animadamente a Hyunjin quien hacía comentarios sarcásticos acerca de algunos embajadores-

-¿tu sobrino ya se presentó?

-es probable que no, aún faltan unas semanas.-las luces se apagaron completamente, Felix miró el hermoso ventanal en el alto techo,justo en medio del salón, formando un lobo, dejando ver a la hermosa Luna en todo su esplendor-

De ahí, una luz azul mostró a Jisung en el suelo, quien se comenzó a levantar suave y lentamente con una melodía en piano, Hyunjin al tocar cada tecla de este, miraba con adoración a Jisung moverse con gracia y sutileza.

Felix quedó embobado con aquel chico del piano, sabiendo que era Lobo, esa melodía había logrado entrar en lo profundo de su Tigre, llamando a su Omega.

Jungwon por otro lado, no le quitaba la mirada de encima a Jisung, sus ojos cerrados dejandose llevar, sus piernas y sus pies descalzos, su camisa moviendose con sus movimientos, sus saltos y meneos, hasta que se arrodilló en el suelo de golpe, dejando su cabeza hacia atrás, arqueando la espalda y dejando sus brazos hacia la Luna.

Dando a conocer, que ya estaba listo.

Aquella luz de la luna hizo a todos cerrar los ojos y al abrirlos ven a un hermoso Lobo, su pelaje blanco brillaba tanto que parecía un angel, caminó en círculos mirando a cada uno en el salón hasta detenerse en sus padres, inclinando su cabeza en respeto.

Luego subió su cabeza,mirando directamente a la luna, para luego aullar, erizando los cabellos de todos los presentes, todos los lobos presentes acompañaron su aullido y los restantes aplaudían y gritaban.

¡¡Gamma!! Nuestro Gamma!! Viva el Principe Gamma!! Nuestro Lobo!!

-a ese chico si conoce a Minho, se conocerían muy bien.-comenta Jungwon, al ver al niño volver a su forma humana y abrazar a los Reyes-

-se conocerán. -responde Felix algo sombrío, lo había visto en sus visiones- no se llevarán bien al inicio, pero aún falta mucho para ello.

-¿qué? ¿Cómo sabes?

-ví una Guerra y no es agradable estar en una y ahí se conocerán. El destino y los Dioses lo quisieron así.

.....

Jungwon estaba asombrado, Changbin y Felix estaban celebrando el cumpleaños de Minho en la legión.

Vió al chico de ahora 15 años, reír de las bromas de los soldados de la legión. Ver a estos mismos obsequiarle espadas, oro, plata, armaduras, cuchillas, joyas y demás, hizo sentirlo feliz, primera vez en años que Minho celebraba y se veía feliz en su cumpleaños.

-aún falta nuestro regalo. -comenta Felix y Changbin asiente, todos en aquella gigantesca carpa de la legión quedan el silencio, expectantes- esperen y verán.

Ambos hermanos salen de la carpa y desde afuera se escuchan leves rugidos.

Y al ingresar, ambos llevaban un cachorro de León. Todos completamente mudos miraron a Minho quien da un gran salto y corre hacia ellos.

Dejan al León en el suelo, este mira con algo de temor a todos los presentes pero se detiene en Minho, quien se acercaba con lentitud, sentado en el suelo. Debía de tener 3 meses y ya era como del tamaño de un perro adulto.

Minho se había puesto a llorar cuando el León lo olfateó y le ronroneó, sentandose en su regazo, dejándose abrazar por el chico.

-g-gracias..... -dijo secando sus lagrimas, nadie sabía el porqué se había puesto a llorar el chico pero no preguntaron, vieron con cariño al chico hacerle mimos al pequeño cachorro-

-estaba en la selva, los Salvajes habían estado ahí y mataron a su manada, menos mal este pequeño se escondió.-dice Changbin- tiene tus ojos ambar y supusimos que te gustaría.

-estaban destinados. Él será muy fiel a tí y te tendrá un enorme cariño.-dice Felix - a este pequeño hay que ponerle nombre ¿no?

- Soonie. -Minho omitió el Lee del nombre del león, pero sabía que muy en el fondo, era un Lee como él-

-bueno chicos, ayudemos a llevar todo esto a su cabaña!!

Minho reía, en su forma León jugaba con Soonie, quien ahora luego de un año era un adulto, correteaban y trataban de derribar al otro.

-LEE MINHO Y LEE SOONIE!!! -grita Jungwon desde la cabaña, usando su voz de Alfa, haciendo que ambos leones lo miren, Soonie salta estando sobre Minho, para luego correr hacia Jungwon, Minho lo imitó pero al llegar hasta su tío volvió a su froma humana-

Jungwon suspiró al ver a Minho con rasguñones en los brazos y hombros, estaba despeinado y su ropa rasgada. Además de la tierra en todo su cuerpo.

-¿te duele algo? -Minho negó, restándole importancia a las pequeñas gotas rojas que se escapaban de sus rasguñones- te he dicho muchas veces que no puedes jugar de esa manera con Soonie. Es un animal, no tiene un sentido común como nosotros, si te lastima, él no puede controlarlo.

-lo sé, lo sé, pero no puedo dejarlo solo Tío. -ambos miran al León recostado en el suelo, mirándolos- estamos solos en este lugar y.....

Minho no pudo terminar cuando uno de los soldados de la legión llegó rápidamente con su caballo.

-¡El Norte entró en estado de emergencia! Los salvajes han invadido su extremo entre nuestro Reino, necesitan ayuda ya que ellos planean tomarse el Castillo y el Rey Lobo nos ha mandado una carta. -

-¿¿tenemos que ir ahora?? -El soldado asiente-

-tomen caballos y bolsos, tenemos que irnos ahora.

Jungwon tomó sus bolsos ya equipados en caso de emergencia, subiendose al caballo, a lo lejos, el soldado y él vieron a Minho subirse sobre Soonie e irse sorprendentemente rapido,con tan solo su espada en la espalda.

.....

Toda la legión del frente del ejército Tigre se unió al de Lobos, tardaron una semana en llegar y sabían que hoy mismo en la madrugada atacarían.

Los Reyes y Hyunjin, discutían estrategias de lucha con Changbin, Felix y el soldado más fuerte del ejercito, Taemin. Quien había sido derribado muchas veces por Minho cabe decir.

Jungwon se mantenía en una esquina del salón al margen de la situación, mientras que Minho estaba sentado entre Changbin y Taemin, cruzado de brazos escuchando todo atentamente en silencio, mirando con seriedad la mesa con los mapas y figuras de planeación.

-¡¡Esto no es cualquier falsa alarma, ellos planean tomarse el más importante de los Reinos!! ¿Pueden dejar de gritarse entre sí? -dice Hyunjin harto de ver a su padre Chan y a Changbin gritarse-

-¡¡yo no puedo calmarme con Leones aquí!! -exclama Seungmin, Jungwon rodó los ojos ignorandolo, mientras que Minho solo miraba el mapa y a Felix- además, que hace un niño aquí.

-disculpe el que diga esto, pero tengo 16 años, soy mano derecha de Changbin, parte de la legión.-comenta Minho y Felix ríe-

-y ha derribado incontables veces a Taemin, siendo veterano de guerra. -agrega Felix y Chan mira al muchacho, con intriga- deberíamos escuchar lo que tiene que decir. Minho ha mantenido silencio por mucho ¿no es así Changbin?

-habla chico.-dice Chan y Seungmin mira a su esposo casi indignado-

-intentemos no rodear el castillo con todos los soldados, que los arqueros cuiden de las murallas, que ambos ejercitos unidos nos separemos en cuatro partes. -dijo Minho levantándose apuntando a tres sectores del mapa del Reino Lobo- uno a cada costado, al frente y atrás, dejaremos que los Salvajes luchen con los de los costados para luego dar una señal y atacar con los de las puntas.

-¿así como encerrarlos? -Minho asiente y Hyunjin sonríe abiertamente levantándose- Padres, este niño me cae bien, escuchenlo.

Y así se larga Hyunjin, no sin antes guiñarle el ojo a Felix, cosa que no pasó desapercibido por Jungwon.

Mientras seguían planeando allí adentro, Hyunjin seguía caminando por los pasillos hasta que vió en el jardín, un león, sentado ahí, mirando justo la ventana en donde estaban planeando los ataques.

No era una persona, era un animal, pero.... ¿qué estaba haciendo realmente mirando allí?

-¿qué carajos?

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