—¡Chaeyoung, ya llegué!.

El grito de MinHo fue lo suficientemente elevado para que más de una persona se enterara de su llegada. Corrió hasta llegar hacía su pequeña, quien, estaba en silla de ruedas lista para ingresar a la sala de parto. Chaeyoung empezó con contracciones en la mañana, supo que rompió bolsa cuando vió algo de liquido caer sobre sus piernas en plena cocina.

DaHyun en ese momento, había ido de visita y suerte que estuvo allí para ayudarla. En medio del camino, llamó a MinHo el cual se encontraba en plena reunión con algunos ejecutivos, debatiendo el nuevo platillo que seria lanzado en los meses próximos. Afortunadamente, su padre continuó y dejó que su hijo se fuera casi que chocando con sus demás compañeros.

El rostro sudado de la menor transmitía dolor pero a su vez, ansiedad. JeongIn estaba a punto de nacer.

MinHo sostuvo su mano fuertemente mientras era llevada a la sala de parto, a él le otorgaron un camisolín, botas, gorro y barbijo por temas de higiene. Trató de apresurarse en colocarselo todo correctamente. Regresando junto a Chaeyoung, la miró y susurró un:—Aquí estoy, bebé.

Fuera de la sala, amigos y familia de la pareja llegaron tan pronto como les fue anunciada la noticia.

Chan, Mina, MinJeong, Felix e incluso Jennie aguardaban emocionados por la venida del pequeño JeongIn al mundo. Yoongi tardó un par de minutos más en unirse a la espera, rezando que MinHo y Chaeyoung estuvieran bien.

—Muy bien, cuando yo le diga que puje, usted lo hará. Mantenga la calma y respire tranquilamente.—indicó BaekHyun.

Chaeyoung asintió, intentando seguir las instrucciones de su obstetra. Apretó la mano de MinHo fuertemente y empezó a pujar un par de veces, BaekHyun volvió a indicarle el mismo proceso. De verdad que intentaba hacerle caso pero los fuertes dolores no le ayudaban en nada.

—Vamos amor, tú puedes. Eres una chica fuerte.—alentó MinHo viendo el contrariado rostro de Chaeyoung.

Pujó lo más que pudo, era su tercer intento. Ni siquiera era consciente de cuánto llevaban ahí dentro, sólo quería que su bebé naciera bien.

—Ya veo su cabecita, vamos, ya falta poco.—sonrió BaekHyun.

Chaeyoung ya sentía que no le quedaban fuerzas, sin embargo, hizo un último esfuerzo y en lo que pujó, BaekHyun logró extraer el cuerpo completo del bebé, quien, se largó a llorar. Cortó el cordón umbilical, limpiando a JeongIn y colocandolo en una manta, le hizo entrega de este a MinHo.

Unas lágrimas brotaron de sus ojos ante el bebé chillón que pareció sentirlo. JeongIn dejó de llorar en ese momento, MinHo vió a una Chaeyoung sumamente agotada pero luchando por mantenerse despierta, entendiendo su mirada, con sumo cuidado, dejó que lo tomara en sus brazos.

—Es un niño muy hermoso.

—Igual a su padre, sin duda.—sonríe besando la visible mata de cabello azabache.

Por pedido del médico, MinHo tuvo que salir de la sala de parto ya que debían limpiar a Chaeyoung y a su bebé. Una sonrisa amplia surcaba sus labios, sacándose el equipo médico otorgado, abrió las puertas de madera y vió a todos esperándolo con las buenas nuevas.

—¿Y bien, hijo?.—preguntó Yoongi.

—JeongIn nació sano y Chaeyoung se encuentra bien, finalmente soy padre...—sus lágrimas volvieron a brotar, su papá lo abrazó fuertemente mientras le daba sus felicitaciones.

—Y serás un padre asombroso.—susurra orgulloso.

El resto aguardó unos minutos. Era un momento de padre e hijo, Jennie observaba con amor tal escena y un tanto tímida.

MinHo notó eso, mirándola, fue hasta ella y la envolvió en sus brazos, como un hijo abraza a su madre.

—Gracias por llegar a nuestras vidas y hacer feliz a papá, te quiero mucho, mamá.

Jennie quedó asombrada de sólo oír esa palabra salir de la boca del azabache.

—¿Me llamaste mamá?.

MinHo asiente sonriendole.

—Disculpa si tardé en hacerlo.

—En absoluto, no sé que decir... ¡Estoy muy feliz de que me llames así!.

—Pues acostumbrate porque la escucharás seguido de ahora en adelante.

—¡Dalo por hecho, hijo!.

Yoongi sonríe de lado, Jennie dejó que MinHo saludara a sus demás amigos. Pronto llevaron a Chaeyoung a una habitación.

JeongIn había sido llevado a la sala de recién nacidos ya que debían chequear que todo estuviera bien y ya después estaría junto a sus padres.

Había sido el día más feliz para todos en sí, sobretodo para MinHo.

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Chaeyoung despertó al cabo de una hora y media, pues, el estar casi tres horas pujando causó que se durmiera debido a las energías perdidas. Sus ojitos fueron abriéndose por medio la luz que irrumpia en aquella habitación. Oyó voces cercanas, su visión terminó de aclararse cuando halló a MinHo meciendo la cuna del bebé y a la vez que le cantaba suavemente.

La rubia sonrió enternecida, la voz del mayor era realmente hermosa.

—Querida, despertaste.—Jennie ingresó junto a MinJeong, Mina y DaHyun.

MinHo dejó de cantar y miró a Chaeyoung con devoción. Entonces, acercándose a la cuna, cargó delicadamente a JeongIn mientras le seguía tarareando hasta dejarlo en brazos de su menor.

—Mira Innie, mamá despertó—menciona logrando que el bebé soltara una risita baja—. Ella es una chica valiente, ¿verdad, bebé?.—JeongIn barboteó y extendió sus bracitos hacía el rostro de Chaeyoung, apretando ligeramente las mejillas de esta.

—¿Eso es un si?—JeongIn volvió a apretar sus mejillas, soltando una risita nuevamente que sólo generó ternura en los presentes—. Papi y mami te cuidarán muy bien. Te daremos el amor y respeto que mereces.

Chan, Felix y Yoongi trajeron unos cuántos obsequios para el bebé. Jennie en ese momento, aprovechó para ir en busca de HyunJin. Ahora que lo tenía en brazos, le presentó a su sobrino recién nacido. Por supuesto, el menor no entendía mucho acerca de lo que estaba pasando allí pero por medio de una sonrisa, comprendió que otro integrante nuevo se unió a la familia.

—Lamento la interrupción—una enfermera ingresó con un cuadernillo en mano—. Sólo pasaba a certificar el nombre del recién nacido. ¿Ya decidieron cómo se llamará?.

—JeongIn, Lee JeongIn.—confirmó MinHo.

—Muy bien, entonces, bienvenido joven Lee JeongIn.—sonrió. Procedió a marcharse, dejando a la familia y amigos disfrutar la hermosa bendición enviada desde el cielo.

JeongIn pasó de estar en brazos de su mamá a estar en brazos de su abuelo, sus tíos de corazón y finalmente su abuela. HyunJin quiso chillar porque no quería que nadie tocara a su mami Jen. Yoongi tuvo que sobornarlo con un juguito de fresas.

—Es idéntico a tí, hijo.—admitió Jennie.

—Lo es, realmente sí.—asegura Chaeyoung.

MinHo intentó negarse pero todos confirmaron que JeongIn era y sería una réplica de él al crecer.

—A lo mejor su segundo bebé sea una réplica de Chae-ssi.—dijo sin pensarlo.

Viéndose entre ellos, Jennie supo que no debió mencionarlo. Entregandole a Innie de nuevo, sugirió darles espacio a ambos padres primerizos.

Chaeyoung meció al bebé a su vez que le daba de comer. MinHo por su parte, buscó una silla y se colocó a un lado de la camilla. Permanecía en silencio, armandose de valor y decir lo que debió aclarar hace unas semanas atrás.

—¿Todo bien?.

—No, en realidad debo confesarte algo que llevo guardado aquí dentro.—alude tocando su pecho.

Por su expresión nerviosa, Chaeyoung creyó que tal vez debía dejarlo seguir. Su corazoncito se agitó en el instante que MinHo sustentó una de sus manos y la elevó, permitiéndose acariciarla con suavidad pura.

—Bien...—murmura igual de inquieta.

MinHo soltó un largo suspiro y sacó de su bolsillo, un estuche de terciopelo blanco. Sin soltar la mano de Chaeyoung, abrió este con la otra, dejando ver un anillo plateado con pequeños diamantes incrustados.

—Son Chaeyoung, he estado considerando el hecho de que quizá mis palabras no sean las suficientes para declararte lo mucho que me gustas—sonríe—. Contigo en estos meses, aprendí el significado de lo que era perder, desear, recuperar y enamorar. Tú me volviste un chico diferente, un chico que ahora sólo tiene ojos para una sola mujer, un chico que sólo le importa el bienestar de los que quiere. Por eso, quiero que me respondas sinceramente la siguiente pregunta...—comenta nervioso—. ¿Quieres casarte conmigo?.

—MinHo...

—¿Aceptas?.

Chaeyoung no podía explicar la emoción que sentía en esos momentos. Tampoco podía arrojarse a sus brazos debido a su bebé. Sus lágrimas de felicidad y asentimiento de cabeza, permitieron a MinHo volver a respirar con normalidad.

—¿Es un sí?.

—Mil veces sí, claro que sí.

Nueva actualización<3

Perdón por tardar meses en actualizarrrrr 😭😭😭

Aclararles que el siguiente capítulo es el final<3

Espero también les haya gustado mucho este<3