[TH]

"Hoy escucho ese sonido otra vez. Vuelve a sonar, de vuelta ese sonido"

Recuerdo mi escrito mientras mi cuerpo cae al piso y de mi boca sale un quejido de dolor. Degusto el sabor a sangre, mi labio inferior está partido y una brecha en mi ceja derecha también destila sangre.

Sangre que corre hasta mi mejilla y ahí seguro se seca, siempre pasa. Todos los días es igual. Llevamos minutos u horas así. Él golpeándome y yo evitando o tratando de evitar sus golpes.

Padre está enojado, solo porque no pude llegar a tiempo para hacer la cena. Solo por demorarme 10 minutos. Si tan solo yo no hubiera ido a la biblioteca esto no estaría pasando y todo estaría en orden. Y yo en mi cuarto.

¡Estúpido!

¡Imbécil!

¡Tonto!

Le doy la razón a ese que dice llamarse padre, porque la tiene. Soy un estúpido por estar aún aquí aguantándolo, un imbécil por no hacerle frente y un tonto por aguantar sus golpes.

No hice nada malo para merecer esto.

Mi mirada se mantiene fija en un punto, mientras ese hombre me pega patadas, llenas de furia, desde hace tiempo dejé de resistirme a sus golpes, me siento débil, creo que me desmayaré debido al dolor.

¿O es que acaso voy a morir ya?

Es imposible impedir la muerte, sería peor. Golpeó mi estómago y el aire abandonó mi cuerpo por unos segundos que me parecieron una eternidad.

Oí una botella romperse y el cuerpo de mi padre cayó en el suelo inconsciente. Levanté mi mirada, cuando recuperé el aire.

No morí.

Melón, siento olor a melón.

—Ya pasó—habló un chico que miraba mi cuerpo desde arriba, yo lo miré desde abajo donde mi cuerpo aún se recuperaba de los golpes.

Me quejé de dolor y  se agachó frente a mí. Su pelo es lacio y de color azabache.

Melón.

Es él quien tiene ese olor.

—Vamos—dijo y extendió una de sus manos hacia mí.

Cerré mis ojos un momento para olvidar los golpes y que dolieran menos cuando intentaba sentarme. Agarré su mano y con dificultad me levanté.

El tacto fue cálido, y me sentí seguro a su lado.

— ¿Quién...? ¿Quién eres...?.—pregunté aún anonadado.—¿Co.. ¿Cómo..llega..llegaste aquí?

— Soy Jeon Jungkook—contestó—Ahora salgamos de aquí después, cuando te cure todas esas heridas que este ogro te hizo sin razón, te hablaré más de mí. Por el momento nos largaremos a mi casa—sujetó mi mano y me guió fuera del lugar.