La vida puede ser una simple mierda. Todo tan bonito termina en una atrocidad que parte mi corazón en dos mitades, no para ponerlo más dramático, en millones de trocitos. Si, la chica tiene novio, es todo un encanto y me sabe a mierda si lo es o no. Como soy su primer visitante no me voy y veo la escena empalagosamente romántica de ambos, que lindo es todo mientras se besan, mientras su maldita lengua pasa por sus labios.

Mientras acaricia su mentón, le dice lo mucho que la ama y yo como un guevon en pleno acto. Solo se me ocurre a mi estar viendo eso. Mi señor se burla de mí cuando hace su acto de presencia, no deja de reírse de mis expresiones y se retira diciéndome que debo estar cerca de ella el máximo tiempo posible.

A la mierda todo. A la mierda su novio, a la mierda su familia, a la mierda quien sea. Estoy muy molesto. Me costó un mundo venir a esta mierda y entonces tengo que calarme su espantoso acto. El novio luego de quinientas horas, nos deja en paz y mi humor pasa a ser interesante. La hago reír y no llorar, la acompaño al baño tapándome los ojos y la ayudó a colocarse en la cama sin que le duela nada. Eso hace un caballero, no como el imbécil que se cree gran cosa por estar con ella. Ni un puto dulce le trajo, y eso envenena mi mente.

Como yo SI soy un caballero, le traje su dulce favorito de frambuesa. Agradece mi gesto y sonríe. Eso es lo único que hace y al otro pendejo lo besa y me molesta.

¿Qué carajo tiene ese tipo que no tenga yo? También soy especial, un poco tosco, utilizo mucho el sarcasmo en todo momento, soy sincero y también medio romántico aunque mi personalidad demuestre todo lo contrario; soy frío y calculador por el mismo tema de no enamorarme, pero ya no puedo resistir más. Amo a esta chica, como el mundo ama el fútbol; no es buen ejemplo.

Puedo ser pesimista la mayor parte del tiempo. Mi madre me lo dice constantemente. «Alexis, deja de ser así. Agradece que Dios te dio la vida » si claro, ya se lo hice. Todo el tiempo. A nadie le interesa, porque yo sufro, muero por dentro y todo es una porquería.

El mundo es un desastre y eso refleja que mi comportamiento es igual a como gira el mundo. Si la gente no dañará a otros por poder, seríamos completamente felices; sin embargo es una paja mental. La sociedad está discriminando a quienes nos enamoramos porque nos da la puta gana, pero quien tenga más dinero que otro, ese si puede salir con quien quiera por dinero no amor.

Los días siguientes son patéticos. No puedo concentrarme en clases sin desviar la mirada a la pareja feliz dándose besos y abrazos. Hago ejercicios, salgo en las noches a embriagarme con mis amigos, estudio, hago tareas y duermo muy poco. Sin embargo sacó buenas notas y los profesores siguen estando orgullosos de mí.

Me sabe a mierda, no deseo nada, no me interesa nada, más que estar con ella y acariciarla a cada segundo. Tenerla para mí, solo para mí. Que nadie me la toque, ni la destruya. Solamente deseo estar con ella, sentirme importante en su vida. Maldita sea todo el mundo. Es tan horrible sentirse así, pensar que ella solo me quiere como amigo. ¿Qué carajo me interesa ser su mejor amigo si no puedo besarla cuando lo desee? Esto es una desgracia total.

Mi vida es una desgracia infinita. Voy al cine solo para desahogar mi furia interior. Tanta mala suerte tengo que se va la luz. Maldición. El tipo del cine nos entrega una recompensa por eso y me voy a casa de nuevo. Así pasan los días, y sigo devastado, sin concentrarme, sin dejar de verla sonriendo con ese bastardo.

Llego a mi casa a dormir, ni salgo a beber con mi gente y parezco ya ermitaño. No salgo de casa, al menos para ir específicamente al colegio. No saludo a nadie, hago los exámenes en silencio, me importa una mierda las preguntas. Como chocolate, helado, y toda la mierda de basura que existe en el puto mundo. La visito de vez en cuando a su casa, ella me pregunta que me sucede y no le respondo. Está preocupada por mi o finge estarlo. Por supuesto a su novio hay que calárselo siempre y nunca puedo preguntarle qué demonios tiene.

El día lleva al fin, su novio no está presente y ella anda demasiado triste. Me cuenta todo lo que hace con él, su vida social y familiar. Al parecer su madre se ocupa de ella, mientras su papá trabaja arduo en una fábrica de zapatos. Tiene amigos, pero todos le dejaron de hablar. Ha fumado de toda mierda y vive drogándose a diario. Por eso tiene el problema, y ha dejado de hacerlo para que no siga afectando su vida.

Ella se abre ante mi tan fácilmente y llora en mi hombro. Bueno algo es algo. — ¿Cómo te llamas? —mi pregunta sale sin yo planearla. Ella sonríe de nuevo y me besa en la mejilla. —Amara. Gracias por estar conmigo en tiempos difíciles —me agradece y nos quedamos viendo una película.