♡◖ ! 3O % ejecución ‹ ˖ぅ
Jisung se sentía estúpido y verdaderamente inútil. Había arrastrado a Tutsi hasta allí, sin ningún tipo de plan. ¿Qué esperaba, que la celda de Minho tuviera la puerta abierta de par en par? ¿Que no hubieran hombres montando guardia? Era un iluso. La mujer a su lado gruñía, mostrando el primer signo de su escasa humanidad.
━ Parece que Yahto y Nashua han encontrado algo muy interesante merodeando por el bosque.
Jisung frunció el ceño, aquel hombre era desagradable. Lo miraba divertido, con burla, como si el que él estuviera allí le pareciera lo más conveniente del mundo.
El imponente licántropo encabezaba un serio grupo de cuatro personas que no parecían estar disfrutando tanto de su situación como él. Se encontraban frente a la vieja cabaña del consejo, arrodillados sobre la húmeda hierba mientras sus dos captores sostenían sus hombros con fuerza.
━ Si no me equivoco, esta es la vieja Tutsi, ¿no es así? ¿Acaso nunca aprendes? La última vez tuviste suerte de la piedad del alfa, pero parece que las malas hierbas hay que arrancarlas de raíz. El nuevo alfa no tendrá tanta clemencia.
La mujer gruñó.
━ Debo suponer que tú eres el nuevo alfa, ¿no? ━ Habló con amargura.
Koda volvió a sonreír con autosuficiencia.
━ Soy el más indicado para el puesto, dada la situación.
━ Le advertí a Minho que eras una sabandija ambiciosa, pero nunca me imaginé que llegarías a estos límites.
El hombre rió sarcásticamente.
━ ¿Límites? Lee Minho es un traidor.
━ Lee Minho ha encontrado a su pareja predestinada.
━ ¡Es un humano! No hay manera de que sean verdaderamente una pareja unida por las estrellas. ━ Habló Yoome por primera vez.
Kato asintió satisfecho por el apoyo de la mujer.
Jisung miraba el intercambio con frustración, aquellos desconocidos estaban hablando de él como si no estuviera presente, juzgando su vida como si fuera demasiado insignificante para formar parte de la conversación.
━ Mi padre era un lobo. ━ Espetó.
Todos quedaron en silencio y le prestaron atención por primera vez, como si estuvieran sorprendidos de que pudiera hablar.
━ ¿Cómo dices, muchacho? ━ Preguntó la mujer loba.
━ No soy completamente humano, mi padre era uno de los suyos.
El rostro de Koda palideció y Tutsi lo miró sorprendido, al igual que el resto de miembros del consejo.
━ ¡Eso lo cambia todo! Minho no es un traidor, porque el chico no es completamente humano. No le ha desvelado nuestra existencia al enemigo, porque él ya sabía de nosotros.━ Habló la anciana.
Kota, Yoome y Lonan se miraron entre ellos, sopesando las palabras de la mujer. Un brillo de esperanza se encendió en los ojos de Jisung. Koda se encargó de apagarlo.
━ ¡Eso no cambia nada! ━ Exclamó el lobo. ━ El padre de este chico era otro traidor, él no es uno de los nuestros. El delito es el mismo.
Jisung se revolvió y su agarre se intensificó.
━ ¿¡Qué tan malo es lo que Minho ha hecho!? ¡Me ha marcado, ¿y qué?! Él me ama, y yo lo amo, ¿qué hay de malo en...
━ ¡Basta!
El rugido de Koda interrumpió el desesperado discurso de Jisung.
━ La ejecución se adelantará. Llamen a la manada y traigan a los condenados.
Yoome y Kato parecieron dudar un instante, antes de actuar. La mujer dio un paso atrás, antes de alzar la cabeza y emitir un aullido tan fuerte que heló la sangre del humano. Después, ambos se marcharon.
La palabra ejecución se clavaba en la cabeza de Jisung como un puñal al rojo vivo. Estaba aturdido, dejándose llevar. Apenas sintió como el hombre que lo retenía lo arrastró hasta el centro del claro, a un espacio libre de cabañas, donde los restos de una fogata permanecían esparcidos sobre la hierba. Dos robustos postes de madera se alzaban imponentes frente a ellos. Tutsi retuvo el aliento.
━ ¿Qué es eso?
━ Ahí amarran a los condenados.
Jisung sentía sus ojos inundarse, todo le daba vueltas y el pulso le iba a mil. Se sentía desesperado, impotente en medio de un ataque de pánico. Apenas se dio cuenta cuando el resto de miembros de la manada se fue acercando al lugar, mirándose entre ellos y murmurando, sin comprender la situación. Solo reaccionó, cuando una voz familiar gritó su nombre.
Minho ya no se sentía débil, y eso no era buena señal. Tenía la vana esperanza de que solo fuera un reflejo de su subconsciente que le quería hacer creer que estaba con él en sus últimos momentos de vida pero, cuando Yoome y Kato los arrastraron hasta los postes de sacrificio, lo vio ahí, arrodillado en el suelo, tan hermoso como siempre y con un sufrimiento inmensurable reflejado en su dulce rostro. Y a su lado, la mujer a la que consideraba su única familia con vida, ambos dolorosamente sujetos. Su corazón se detuvo y sus piernas flaquearon. Cuando los cristalinos ojos marrones le miraron, sintió que podría acabar con su propia manada para mantenerlo a salvo si era necesario. La furia lo invadió, mientras el que antes había sido un leal miembro de su consejo lo arrastraba hacia una injusta condena.
━ Minho...
La voz de Jisung estaba tan rota que sintió cómo cortaba el último retal de su alma.
━ ¿¡Qué hace él aquí!? ━ Bramó con tanta furia que toda la manada se sumió en silencio.
Él seguía siendo el alfa, y lo sería hasta que su sangre tiñera de rojo la hierba.
Koda dio un paso al frente, observando a los condenados con desprecio y luego se dirigió hacia los confusos aldeanos.
━ Este de aquí, es el pequeño humano por el que nuestro alfa nos ha traicionado a todos. Este insignificante...ser, ha roto nuestra manada. Lo hemos encontrado merodeando por nuestras tierras, junto a esta vieja exiliada. ¡Deberían ser condenados también!
Algunos hombres vitorearon a Koda, mientras otros parecían dudar.
━ La ley de la manada es firme, hermano. No podemos actuar sobre los humanos.
La voz de Kato parecía incluso más solemne que de costumbre. A Koda no le gustó demasiado que su hermano le contradijera, aunque sabía que tenía razón.
━ Es cierto, aunque no dice nada de que no pueda presenciar una ejecución. Eso será suficiente castigo. ━ Habló con cruel regocijo.
Jisung lloraba, no sabía en qué momento las lágrimas habían comenzado a rodar por su rostro, pero ya no había manera de detenerlas. No podía apartar la mirada de los ojos obsidiana de Minho, tan intensos, tan rotos, tan dolorosos.
━ Amarralos.
Kato y Yoome dirigieron a los condenados al poste, y ataron sus manos con gruesas sogas rodeando la madera.
La felicidad era patente en Koda.
━ Hwang Hyunjin.
Habló, acercándose lentamente al chico.
━ Tu delito es menor, puedes salvar tu vida si rompes tu lazo con Minho y declaras tu lealtad al nuevo alfa.
Hyunjin frunció el ceño, Koda estaba actuando justo como había dicho Minho. Por un momento, miró a su amigo. Nunca había visto algo parecido a una lágrima en los ojos del alfa pero, en ese momento, parecía que hubieran abierto un grifo. Había tanto dolor, tanto sufrimiento y tanto amor incondicional en el rostro de una persona que solo quería amar, que Hyunjin sabía que no quería vivir más en un mundo en el que la gente pudiera juzgar hasta los sentimientos más puros. Por último, miró a sus padres. Su madre lloraba, aferrada al ancho pecho de su padre y él...él lo miraba firme, recto, esperando a que tomara una decisión.
Lo tenía claro.
Escupió, escupió todo el odio y todo el desprecio que sentía por el alfa que estaba destruyendo la vida de Minho, la de Jisung, la de Tutsi y hasta la de sus padres. Sus sentimientos impactaron en la cara del alfa y Hyunjin sonrió, entre divertido y satisfecho. No fue elegante, pero fue efectivo y jodidamente satisfactorio.
Koda se apartó y se limpió con asco. Después, impactó el puño en su estómago.
Hyunjin se dobló y gimió con dolor .
━ Has tomado una decisión.
Koda se acercó a Minho, mirándolo con superioridad. Por primera vez, los ojos del alfa se apartaron de su pareja.
━ Lee Minho, estás siendo condenado por alta traición al enlazarte con un humano. ¿Quieres negarlo?
━ No.
Y Minho volvió a mirar a Jisung, sin prestarle atención al hombre que le había condenado a muerte, como si no hubiera nada más importante que el humano que le había robado el alma. Sabía que no le harían nada, pero nada dolía más que saber que nunca podría volver a hablar con él, a besarle, a rodearle con sus brazos, a escuchar su dulce voz. Eso dolía más que la hoja del cuchillo que estaba empuñando Koda.
━ No hay retracciones.
La manada se sumió en un sordo silencio mientras Koda se acercaba a Minho sosteniendo una navaja de empuñadura labrada.
━ Lee Minho, tu familia ha estado en el poder durante más de un siglo, has acabado con el legado de tus antepasados y ni siquiera muestras arrepentimiento. Hoy, serás ejecutado por traicionar la lealtad de la manada.
Y no había rastro de tristeza en la voz de Koda. Lentamente, llevó la afilada hoja de la navaja al pálido cuello de Minho.
Jisung lo miraba todo, sollozando, con el corazón atascado en su garganta. Iba a morir, Minho iba a morir delante de sus ojos y él no podía hacer nada. Se revolvió en su agarre, intentando escapar. Las manos de su captor lo sostenían con tanta fuerza que sentía su piel amoratarse, pero no le importaba, nada le importaba aparte de Minho y el metal contra su nívea piel. La ira y la desesperación crecían en el interior del humano.
"Jisung"
Aquella voz profunda resonó en el interior de su cabeza.
"Cachorro, siéntelo"
Jisung jadeó, su cabeza dolía con intensidad. Nunca había sentido nada igual.
"Está en tu sangre, tu esencia...déjalo salir."
Gritó, llamando la atención de todos a su alrededor. La hoja de la navaja se hundió ligeramente en la piel de Minho, arrancando un fino hilo de sangre que manchó su piel.
"Sálvalo, salva a tu alfa, pequeño omega."
Y Jisung, ya no era Jisung.
Entre un grito de agónico dolor, el cuerpo de Jisung se retorció entre los brazos de su captor, hileras de niebla emergiendo de su cuerpo. Y, antes de que alguien pudiera analizar qué estaba ocurriendo, un descomunal lobo negro apareció en el lugar del chico.
El cuchillo cayó de la mano de Koda, mientras todo el mundo observaba asombrado al imponente animal. Su lomo subía y bajaba rápidamente, jadeante.
"Jisung..."
Minho usó su conexión para hablar con la bestia. Dos profundos ojos ámbar se clavaron en los suyos, y su corazón volvió a latir. Sonrió, porque no pudo evitarlo. Sonrió ignorando sus manos atadas y su próxima muerte. El lobo se acercó a él, caminando lentamente, como si no estuviera muy seguro de cómo avanzar.
Koda dio un vacilante paso hacia atrás, y el animal siguió avanzando hacia Minho. Era lo suficientemente alto como para que su hocico quedara a la altura de la frente de Minho, bajó la cabeza, y acarició el rostro del chico con el suyo.
━ Eres toda una caja de sorpresas, amor mío.
Minho sonrió, sintiéndose inmediatamente relajado con el roce de su compañero.
━ ¡El chico es un lobo!
━ ¡Es uno de los nuestros!
━ Esto significa que no hay delito, ¿verdad?
Koda miró a Yoome, a su hermano y a todos los aldeanos que sonreían aparentemente aliviados.
━ ¡El chico es medio humano! ━ Gritó desesperado.
Todo su plan se desmoronaba ante sus ojos y ante los ojos de todos los miembros de la manada, que parecían entusiasmados con la reincorporación de Minho como alfa. Y el pequeño bastardo que impedía que ocupara su lugar como líder, sonreía satisfecho, frotándose contra el que parecía ser su pareja predestinada. Demasiado injusto.
Toda la tensión desapareció del ambiente, la manada sonreía aliviada, Hyunjin gritó de felicidad.
Koda lo miraba todo desesperado, sintiendo la furia crecer en su interior. Entonces, se transformó y cargó contra el lobo negro.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro