— Ho-hola Woonie...

San y Wooyoung tenían recién un mes de novios, San aún era bastante tímido en ese sentido, a pesar de que llevaban un buen tiempo hablando y sabiendo de sus sentimientos, el empezar una relación era diferente y sentía que tenía una responsabilidad más grande, además, él, como buen chico cursi que era, disfrutaba de hacerle regalitos de vez en cuando a su ahora novio, ésta era una de esas veces, San estuvo pensando muchísimo en qué le podría cocinar a Wooyoung para regalarle en su cita de ese día, y se decidió por darle galletitas de avena y coco, para él, eran de las cosas más deliciosas de éste mundo, como los besitos de Wooyoung.

— Hola duraznito, ¿cómo estás?, ¿cómo te fue en el último exámen?

— Me fue muy bien, de hecho ya aprobé esa materia, solo falta la muestra de la clase de música y cerramos ciclo lectivo

— Tan inteligente mi terroncito, ya vas a terminar la escuela

— Estoy asustado Woonie, no sé qué hacer después de terminar, si estudiar algo...no lo sé, tampoco me gusta hablar de eso porque me meto mucha presión

— Entonces evitemos el tema, ¿sí?, hablemos de otra cosa -Wooyoung tomó delicadamente la pequeña cintura de San y lo acercó con cuidado para poder darle un dulce beso en los labios.

Se dieron suaves e inocentes besitos durante un rato hasta que San recordó que tenía un regalo para su Woonie.

— Oh, te traje algo

— ¿Ah sí?, ¿qué es, cielito?

— Bueno...yo quería cocinarte algo y no sabía qué porque ya te regalé casi todo lo que sé hacer mejor, así que busqué una receta de unas galletas que una vez papá me hizo probar y te traje de esas, son galletas de avena y coco, realmente espero que te gusten

— Vamos a ver, bebé

Wooyoung tomó la bonita cajita entre sus manos, la abrió y de ella sacó una galleta, al probarla sus ojos llegaron a brillar y su sonrisa se agrandó.

— Ésto está delicioso, algodoncito, muchas gracias

San recibió muchos besitos después de eso.

— ¿Quieres hacer pijamada en casita hoy?, te dejo dormir en la cama y yo duermo en el piso

— Uhm...bien, pero solo si me dejas mirar La bella durmiente.

— Pero San, esa película es aburrida

— Ésto no puede continuar, terminamos

— Eres tan trágico, San

— Y tú tan aburrido, Wooyoung.

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— ¿Sabías que Maléfica es la verdadera protagonista de ésta película?

— ¿Y por qué se llama "La bella durmiente" y no "Maléfica"?

— Ay no sé, deja que le pregunte al que hizo la película -San habló con notable sarcasmo- WooWoo bobo

— ¿Quieres licuado?, ¿Hacemos licuados?

— Bien, pero espero que tengas perfume para el baño porque después de un buen licuado yo...

— Ay San no seas desagradable

— Estoy hablando de cosas naturales, ¿tú no defecas?

— Sanie, aún no estamos en esa etapa de la relación

— Ay, tienes razón, perdón, no voy a defecar hasta por lo menos habernos besado con lengua

— ¡Sanie!

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Esa noche, San le permitió a Wooyoung dormir en la misma cama que él, pusieron una almohada entre ambos cuerpos y después de un par de películas, se decidieron por dormir.

San comenzó a sentir mucha hambre y decidió levantarse a buscar algo, no quería darse la libertad de revisar mucho la casa de su novio e intentó no hacerlo, por suerte encontró las galletitas que le regaló a Wooyoung y comió un par, acompañadas de un vaso de leche tibia.

Después de esa cena tan rara, volvió a la habitación, antes de dormir, besó la frente de su chico.

— Sueña muy bonito, Woonie bú.

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