❝Sabes que no me importa ni mierda lo que tú esperes, que te quede claro que no tienes voto aquí, no eres nada. ❞

D E E P W E B.

...

―¿No lo hiciste verdad?.

Jisung no puede evitar tragar saliva cuando escucha la pregunta con atención, una gota de frío sudor cae de su rostro deslizándose hasta caer en el suelo.

Soobin lo sabe, claro que lo hace.

―Yo... Soo, lo siento ― Es todo lo que puede soltar el rubio mientras siente la devastadora mirada del mercenario puesta sobre él, le perpetua de una manera tan intimidante ―No me atreví, no podía.

―Debí suponerlo, eres un maldito hijo de perra cobarde ― Le suelta con veneno, Soobin no puede evitarlo pues los celos lo ciegan y la imagen de Taehyun tomándole las manos a Kai se reproduce en su mente de manera tortuosa.

―Tienes que entenderme, yo jamás he lastimado a alguien.

Soobin se ríe, una carcajada muy irónica que ocasiona que el rubio se desespere.

―¿Piensas que voy a creerte?, ¿Me estás diciendo que estuviste en la maldita red oscura sin hacerle daño a nadie?, no me jodas, hasta tu amigo Bogum era un puto asesino.

―¡Es la verdad, Soo!, jamás he lastimado a alguien o acosado, nunca ― La sinceridad en los ojos de Jisung permiten que el azabache considere las palabras qu está diciendo pero claro, no era Soobin si no la cagaba ―Yo sólo me dedicaba a hackear fondos monetarios, cuentas personales y sé que es un delito pero nunca herí a alguien.

―Menuda mierda lo que sale de tu boca.

―¡No asesiné a Taehyun por que no puedo!, el tiene nuestra edad, dios, no podía hacerlo ― Jisung alzó la voz cada vez más tenso e inseguro de lo que decía, probablemente en cualquier momento terminaría muerto ―Entiéndeme, por favor.

―Cierra la boca ― Ordenó tomándolo del cuello, el rubio puede sentir perfectamente las dos manos hacerle presión en la yugular ―Kai duerme justo ahora y si él despierta tú no vas a vivir para contarlo ― Le amenaza Soobin antes de soltarlo con la misma brusquedad que usó anteriormente.

―Taehyun no hará nada.

―¿Nada, imbécil?, ¿Estás seguro?, estuvo a punto de llevarse a Kai hace dos días, si se lo hubiese llevado, él probablemente hubiera estado muerto a causa de Taehyun en menos de un día. ¡Y estamos en su casa!, ¿Quién nos asegura de que va a vender nuestra ubicación?.

―Taehyun nunca lo dañó ― Respondió sinceramente, a pesar de todo no sabe por que pero cree en las palabras de aquél muchacho ―Y no hará nada de eso, puedo asegurarlo.

―¿Por qué lo defiendes tanto?.

―No lo hago.

―Está vivo aún, ¿Sabes que significa eso para ti, Han? ― Le cuestiona de manera pausada, Jisung traga saliva preparándose para lo que venía.

―No... No lo sé.

―Significa que tú debes de estar muerto, una vida se canjea por otra.

―No estás pensando bien, Soobin. Los celos te están absorbiendo, escucha lo que dices.

―Estoy consciente de lo que digo perfectamente así que no me supliques por tu asquerosa vida ― Suelta de manera tajante, no parece interesarle seguir charlando.

―¿Binnie?, ¿Por qué se escucha tanto ruido?, ¿Están bien?.

Ambos se giran para ver a la misma personificación de un ángel en las escaleras, Kai está bajando los escalones en su pijama gris de cuadros. Talla sus ojitos mientras mira entre confusión a los dos chicos tensos, Soobin muerde su lengua para evitar soltar una grosería.

―¿Todo bien?.

―Todo bien, vuelve a la cama ― Le dice en un tono autoritario, el castaño niega con las cejas fruncidas mientras lo mira.

―Dormí muchas horas, hyung.

―Vuelve ahora.

―¿Jisung? ― El adolescente posó su vista en el chico esperando por una respuesta coherente, el rubio se encogió de hombros sin saber que decir pues está recibiendo una mirada de ira por parte de Sooobin.

―Vuelve a tu habitación, Kai.

El castaño se enfada cuando vuelve a escuchar la voz del mercenario, está hablando con Jisung no con él.

―Estoy hablándole a Jisung, Soobin.

―El idiota no mató a Taehyun ― Le suelta Soobin finalmente mientras se tensa, Kai abre sus ojos con demasiada sorpresa ―Lo dejó escapar.

―¿Lo hiciste?, me alegra que no le hicieras ningún daño, eres realmente bueno.

Jisung suspiró con tristeza, sabe el gran corazón que tiene Huening Kai pero él puede darse cuenta de que eso no será suficiente pues Soobin está más que furioso.

―Estás hablando pura mierda ― Menciona el mercenario ganándose una mirada enfadada de Kai, él la ignora por supuesto ―No hizo lo que le pedí.

―¡Y me alegra que no lo hiciera!.

―¿Y tú que te crees?, ¿Piensas que por el hecho de follar ya tienes derechos de decidir algo aquí?.

Dolor. A pesar de que Kai sabe que está tratando con alguien psicológicamente dañado no puede evitar sentirse tan mal por dentro, le lastima el hecho de ser considerado como una puta cuando un mes atrás era un adolescente normal con un enamoramiento por un chico lindo. Claro, un chico lindo que resultó ser asesino y que lo vendió. Y aunque él mismo se prometió hacerle retorcer a Soobin en sus propias palabras, no puede hacerlo. Quiere creer que aún es bueno, que aún no es una persona aberrante como los que conoció.

―Claro que sé que tú sólo quieres usarme, ¿Qué puedo esperar de un asesino como tú?, ¿O quién te ha dicho que siquiera espero algo de ti? ― Murmura el castaño conectando miradas con Soobin, parecía muy tenso con la mención de sus palabras.

―Sabes que no me importa ni mierda lo que tú esperes, que te quede claro que no tienes voto aquí, no eres nada.

―Soobin, cierra la boca ― Defendió Jisung por primera vez observándolo con enojo, la figura de Kai se escondió detrás de él.

El mercenario apretó sus puños de igual manera, no le gustó para nada la imagen que veían sus ojos y estaba a nada de morirse de celos. Ya entendía todo, entendía el constante apoyo de Jisung a Kqi o por que se aseguraba de defenderlo.

―Te has tardado, Han ― Masculló con una sonrisa de sorna en sus labios mientras se acercaba a paso lento a ambos chicos, el rubio tapó a Kai de la vista del furioso azabache ―Ahora entiendo todo. ¿Qué?, ¿Te gusta la puta también?.

―Vete al infierno, imbécil. ¿Estás escuchando lo que dices?, ¿Hasta dónde vas a llegar con tus estupideces?.

Jisung no estaba dispuesto a escuchar las ofensas hacía Kai y aunque Soobin también era su familia, jamás permitiría que le dañara. No cuando Kai fue el que estuvo ahí y él que le dió consejos.

―El infierno soy yo, jodido traidor ― Respondió acercándose peligrosamente a ambos, por instinto Jisung hizo que el adolescente retrocediera pero desafortunadamente él no pudo por que Soobin lo había empujado al suelo con brusquedad.

―C-Cálmate, ¿De acuerdo?.

―Ni una mierda.

―¡Ya basta, Soobin! ― Le gritó Kai alterado cuando notó al azabache poner sus manos alrededor del cuello de Jisung.

El mencionado hizo caso omiso ignorando sus palabras, su mirada estaba sedienta por dejar sin aire al cuerpo debajo suyo. Sus manos comenzaban a ejercer presión sobre la yugular de Jisung quien se removía con todas sus fuerzas, en cualquier momento le quebraría la tráquea.

―¿Te gusta? ― Cuestionó apretando más fuerte sobre su cuello, el rubio comenzaba a patalear con más fuerzas intentando liberarse del tosco agarre ―¡Responde!, ¿Te gusta mi puta, eh?, todo este tiempo viéndome la cara de imbécil.

―N-No... Es así ― Logró formular entre desesperantes jadeos, Soobin soltó una irónica carcajada por su básica respuesta.

―¡Te dije que basta!.

Kai intervino colgándose de su espalda para separarlo a como fuera lugar del otro adolescente, era algo suicida comparando que ambos eran unos críos apenas y Soobin les doblaba probablemente en fuerza.

―Carajo, suéltame, Kai ― Respondió con enojo quitándolo con facilidad, el castaño quiso volver a golpearlo pero Soobin lo detuvo.

―Soobin... ¿Qué haces?, ¡Mierda, no te atrevas a ponerle una mano encima!.

Y la habitación quedó en silencio después de oír aquél estremecedor ruido, Kai se llevó la mano a su mejilla tocándola entre lágrimas.

Jisung se levantó con dificultad del suelo después de casi quedarse sin oxígeno y empujo con coraje el cuerpo de Soobin sin importarle ser asesinado.

―Nos vamos ― Fue lo único que pudo formular Jisung antes de ir con rapidez al escritorio que estaba a unos cuantos metros, tomó la arma que anteriormente portaba para amenazar a Taehyun y la cargó consigo ―Ven, vamos a irnos de aquí ahora.

Kai cruzó miradas con el mercenario, parecía arrepentido. Sólo parecía.

―Vámonos, Kai.

El rubio tomó su mano comenzando a caminar hacia la puerta, en cuanto Soobin volvió en sí se colocó de pie con brusquedad.

―¡¿A dónde crees que te lo llevas, Han?!.

―Un paso, un sólo paso más y te voy a disparar.

―No puedes llevártelo ― Negó dando un paso hacia a ellos, Jisung jaló del gatillo pero la bala aterrizó cerca de sus pies, lo suficiente para que supiera que en verdad iba a dispararle ―¡Es mío, Han! Mío.

―Estás enfermo, no es tuyo. Él no es algo que puedas poseer ― El rubio tenía el arma en sus manos con seguridad sumamente atento a cualquier movimiento por parte del mercenario ―Kai, sal de la casa.

El castaño dudó en hacerle caso, mantenía sus ojos posados en Soobin y viceversa.

―Kai, sal de la casa, por favor.

―Yo... Sí ― Murmuró dándose la vuelta para salir por la puerta pero los gritos de Soobin lo hicieron detenerse abruptamente.

―¡Kai! ¡Kai Kamal Huening!.

Y lo que dijo después le dolió terriblemente.

―¡Joder, te quiero!, ¡Lo hago!.

¿Quién es él que realmente estaba mal entre ambos?.