𝟎𝟐𝟓
꒰꒰ ★ ꒱ ꒱ 𝐄𝐂𝐋𝐈𝐏𝐒𝐄₊˚ˑ༄ؘ
★ ➛𝐋𝐚 𝐡𝐮𝐢𝐝𝐚 del coleccionista llevaba ya cerca de 40 minutos, y era evidente que no se rendiría sin dar pelea. Lo que no esperaban era su último ataque: una esfera de luz compacta que, al impactar contra el suelo, desató una explosión de tal magnitud que los lanzó varios metros por los aires. Aturdidos y con algunas heridas, se levantaron como pudieron.
—Demonios...—Murmuró Hunter, sintiendo el dolor en su cuerpo.
—¿Eda, estás bien?—Preguntó King, preocupado por su hermana.
—Sí, solo un rasguño—Respondió ella, restándole importancia a la situación.
—¿Raine, te encuentras bien?—Inquirió Eris, ayudando al hombre a ponerse de pie.
Con un gesto de dolor, Raine asintió.
—Esto les pasa por desafiar mis decisiones—Dijo el coleccionista con una voz llena de rencor, mientras observaba a sus víctimas con una sonrisa cruel.
El Coleccionista irrumpió ante el grupo, que se reincorporaba adolorido, con el ceño fruncido y una ira palpable.
—¡Entréguenme a King y nadie saldrá herido! Olvidaré incluso el pequeño incidente con la ilusión—Espetó con voz áspera.
Eda, desafiante, replicó:
—Ya le hemos dado nuestra respuesta. King no está a la venta.
El Coleccionista, con una sonrisa escalofriante, respondió:
—En ese caso, me temo que no tengo otra opción que eliminarlos.
Eris, rompiendo el silencio, lo sorprendió con una inesperada pregunta:
—No lo entiendo. ¿Cómo pudo Khaos enamorarse de alguien como tú? Solo traes destrucción y miseria.
El Coleccionista, claramente afectado por la pregunta, tartamudeó:
—¿Cómo sabes de Khaos? ¿Qué dices?
—Respondiendo a tu primera pregunta, eso no te incumbe—Respondió Eris con firmeza—Y en cuanto a la segunda, solo hay que mirarte para saberlo. No hay felicidad en ti, solo caos.
—¡Cállate!—Rugió el Coleccionista—No sabes nada de nuestra historia, de cómo nos enamoramos y casamos. Solo dices tonterías. ¡Y sí, tal vez tengas razón! Pero Khaos me ama por quien soy.
Willow intervino:
—¿Acaso no sabes que existe una historia sobre ustedes dos?
El Coleccionista, con una mirada burlona, respondió:
—¿A qué historia te refieres, niña? No es más que una mentira.
—Pero Khaos no dijo eso—Replicó Gus, antes de ser silenciado por la mano de Eda.
El Coleccionista, con los ojos entrecerrados, los miró con suspicacia.
—Ya veo—Dijo con voz ronca—Ustedes saben dónde está, ¿verdad?
El silencio de todos solo sirvió para confirmar las sospechas del Coleccionista.
—Por supuesto que sí—Respondió Amity con firmeza.
—Escuchen—Intervino El coleccionista—Quédense con King, pero a cambio me dirán dónde está Khaos.
La propuesta les pareció razonable. Eda estaba a punto de revelar la información cuando Eris la interrumpió.
—No te diremos dónde está—Declaró con determinación, a pesar de que todos la miraron con sorpresa. En el fondo, sabían que esto pasaría tarde o temprano.
—Eris, recapacita—Le rogó Luz—Solo tenemos que decirlo y todo esto terminará.
—No quiero...—Su voz sonó temblorosa.
—En cualquier momento, Khaos tendrá que irse—Le recordó Eda.
—Pero...
—Es hora de que lo dejes ir—Insistió Eda.
La tensión era palpable. Eris se resistía con todas sus fuerzas a la partida de Khaos, pero era hora de que enfrentara su pasado y dejara de huir.
—¿Has perdido a alguien, verdad?—Preguntó el Coleccionista con perspicacia.
—Sí...—Susurró Eris.
—Lo noté en tu mirada—Dijo el Coleccionista con una sonrisa siniestra—Los magos y las brujas son fáciles de leer, especialmente cuando han sufrido una pérdida.
El Coleccionista descendió hasta quedar a la altura del grupo, que se mantenía a prudente distancia. Su voz resonó con una fría autoridad:
—Si conocen a Khaos, sabrán que hizo un trato con ustedes, ¿verdad?
—Sí, lo hizo—Respondió Eda con voz tensa.
—Es hora de que cumplan con ese trato—Afirmó el Coleccionista sin inmutarse.
—Eris, él tiene razón—Dijo Willow, tratando de calmar la situación.
—¡No, no quiero!—Exclamó Eris, alejándose del grupo con lágrimas en los ojos.
—¿¡Por qué no quieres!?—Gritó Eda, desesperada por la reacción de la mujer.
—¡Porque volveré a estar sola!—Sollozó Eris, expresando su profundo dolor.
La mujer de cabello azabache se acercó a Eris y la abrazó con fuerza mientras ella lloraba desconsolada en su hombro. El Coleccionista observaba la escena con indiferencia, ajeno a las emociones que inundaban la habitación.
—No saben lo difícil que es pronunciar su nombre y recordar a mi hermanito—Susurró Eris entre sollozos.
—Eris... —Dijo Raine con voz suave, tratando de ofrecerle consuelo.
—Día, tarde, noche... siempre está ahí—Continuó Eris, su voz llena de tristeza—Es tan difícil para mí, Eda.
Eda apretó el abrazo con más fuerza, sintiendo el dolor de Luz como si fuera propio.
—Él está en un subterráneo—Dijo Luz al Coleccionista, con una voz firme a pesar de las lágrimas—Hizo un trato conmigo y yo tengo que cumplir mi parte.
—Pues tendrás que llevarme a él, niña—Respondió el Coleccionista con tono arrogante.
Luz asintió con determinación, dispuesta a hacer lo que fuera necesario para llevar al Coleccionista con Khaos y proteger a sus amigos.
—Eso no será necesario—Dijo una voz profunda y desconocida.
𝐀𝐔𝐓𝐇𝐎𝐑'𝐒 𝐍𝐎𝐓𝐄_____♡
꒰ ★ ꒱Imágenes, incluidos en el capitulo. Credito a sus respectivos autores. Excepto los separadores que son hechos por mi.
꒰ ★ ꒱Lamento posibles fallas autográficas.
꒰ ★ ꒱Si les gusto la historia no olviden votar, seguirme y además si buscan más historia de este genero métanse a mi perfil.
¸.•*'♡ 𝐆𝐑𝐀𝐂𝐈𝐀𝐒♡'*•.¸
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro